Baradero, Lucas, el Estado y vos

Un tipo común se hace internar en un hospital público. Se escapa, aparece en bolas y a los gritos por la calle, la policía lo caga a patadas. Lo internan de nuevo y muere. Un problema pulmonar, agravado por el uso de drogas. Nadie sabe quién es, y el tipo queda guardado más de un mes en la morgue. Sin identificar, como NN. Esa sigla maldita, como tantos otros, justo este mes. Dos pibes van en moto, en la motito, por un pueblo del interior bonaerense. El control municipal los quiere parar, no llevan casco. La camioneta los persigue, los choca, y los mata. Los vecinos prenden fuego la municipalidad.

Una de las aristas fundamentales para analizar los casos de Lucas Rebolini Manso y de Baradero es el rol del Estado. Una de las aristas menos mencionadas, por cierto. Lucas consumía cocaína, lo que lo convertía en un criminal bajo la vetusta ley de drogas actual, muy a pesar del último fallo de la Corte Suprema al respecto. Ingresó al Hospital Fernández con un «cuadro de exitación general» y escapó a las pocas horas. Lo encontraron desnudo y en la calle, en actitudes que los representantes del Estado (médicos y policía), bien podrían considerar de «insanía», aunque nunca se lo declaró formalmente insano. Y ahí llegamos al primer problema. ¿Qué hace el Estado sobre la locura?

«No somos libres para hacer lo que se nos cante el culo. La sociedad tiene su policia de la poesía. (…) En este mundo no te hagas el loco porque no somos tan libres. Hay una cuestión legal, una red que te caza como un pescado, como una trucha», explicó el actor Alejandro Urdapilleta, que estuvo internado por sus adicciones, a la revista THC. Lucas lo descubrió de la forma más dura. La policía lo cagó a patadas. Como no tenía documentos, nadie sabía quién era. Los médicos se deben haber cagado de risa cuando decía que era el hijo de Antonio Grimau y Leonor Manso. Murió solo e ignorado, si es que en algún momento pudo registrarlo.

El caso de Lucas ilustra cómo opera el Estado con los locos. Una mezcla entre El Proceso Kafkiano y The Prisioner, esa película de 1967 -magistralmente parodiada en Los Simpson- que cuenta sobre una isla a donde llevan a todos quienes saben un secreto trascendental; los prisioneros son mantenidos a raya con diversas drogas, y quienes intentan escapar nunca lo logran. El Estado reprime al loco, porque atenta contra el status quo. El loco, además de peligroso, pone en evidencia que la sociedad es la que conduce irremediablemente a la locura. El loco puede mostrarle al resto, a quienes no son lo suficientemente sensibles ni irracionales, que la sociedad es la que no funciona, no ellos. Y eso es peligroso. Por eso se lo reprime. ¿Está bien? No sé, tal vez. El problema, en definitiva, son los otros representantes del Estado ante el loco. Es la policía que lo golpeó y maltrato, aunque la autopsia diga lo contrario. Ahí está uno de los grandes déficits de casi 30 años de democracia: no lograr una policía que respete los Derechos Humanos. Era (es) una necesidad básica, una bandera formidable para el progresismo, y se la terminó robando Macri y su Metropolitana. ¿Y cómo puede ser que bajo un gobierno que enarbola el derecho a la identidad tengamos más de un mes a un tipo muerto sin saber quién es? No hay explicación que alcance.

El caso de Baradero es distinto. Tenemos por un lado al Estado (inspectores, intendente). Del otro, «la gente». En el medio, una realidad: en las motos, en «la motito» símbolo del crecimiento, viajan dos, tres, y hasta cuatro personas -muchas veces niños apenas- ninguna con casco. Y como dijera un célebre pensador contemporáneo, nadie hace nada. Nada hace la maestra de la primaria que ve llegar a los chicos con guardapolvo pero sin casco. Nada hace la policía, menos en un pueblo chico, donde se conocen todos. Quedaba el control municipal, como última red de contención, para imponer una norma. Pero en lugar de eso, los inspectores se subieron a la camioneta, encerraron a los dos pibes que iban en la moto y se los llevaron puestos.

Podría hacer un ejercicio de sociología berreta para decir que buena parte de la clase media argentina desciende de los italianos y españoles que fueron lo suficientemente anarquistas como para escapar de los Estados europeos de entonces, y que ese rechazo a la autoridad subyace en el inconsciente colectivo. Pero no. Cierto es que «la costumbre corrige las leyes», pero ¿se puede corregir la ley de tránsito cuando ya nos acostumbramos a que 8.000 personas mueran en accidentes todos los años? Tampoco.

Entonces, ¿debe el Estado hacer aplicar su norma? Sí. ¿Justifica eso a los inspectores que atropellaron a dos pibes? De ninguna forma. La reacción de gente tampoco se justifica, pero es entendible. No hablaremos de «infiltrados» ni de doble intencionalidad, porque desbordados hay en todas las manifestaciones más o menos espontáneas. La violencia fue la manifestación de personas que rechazan el control estatal en un aspecto de sus vidas (el tránsito) y adjudican al Estado la muerte de dos personas. Por algo los agredidos fueron todos representantes del Estado: los inspectores de tránsito, la policía, el intendente, la municipalidad incendiada.

El Estado en Argentina es endeble. Es chico para las funciones que se le atribuyen. La burocracia local es incipiente: pocos son los funcionarios que permanecen, muchos son los que cambian cada dos o cuatro años. La democracia argentina es tan directa que pone a los políticos y a los funcionarios en el llano, donde cualquiera les puede pegar un cascotazo o batirles un «¿Y vos quién carajo sos?». Hay que estar dispuestos a esas cosas en tanto no tengamos una burocracia profesional, y los mediadores entre el Estado y «la gente» deben saberlo mejor que nadie. O como dice el Escriba, «Es dura, la política en Argentina, muy dura».

Acerca de Faco

Facundo Falduto nació en Lanús durante la presidencia de Alfonsín. El destino lo llevó de chiquito a otra vida en otro lugar. Es redactor, escribiente, algo parecido a un periodista, y editor de blogs (?). Miente mucho y a veces habla en tercera persona, como ahora.

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65 comentarios en «Baradero, Lucas, el Estado y vos»

  1. Muy bueno el análisis sobre el tratamiento de los locos por parte del Estado, y lo más lindo es que lo hiciste sin recurrir a Foucault (que es casi un lugar común en este tema). La policía de la poesía es histórica, basta recordar a Artaud reventado por el electroshock.

    Con respecto a Baradero, llámenme anarquista, pero yo sí creo que se justifica la reacción de la gente (http://fragmentario.com.ar/en-defensa-del-fuego). Que una dependencia sea estatal no significa que sea legítima y democrática. Ojo, sé que esto puede sonar peligroso en boca de algún esquimal venido del clima destituyente, pero la legitimidad que exijo es bien poquita: por lo menos, que no mate.
    Si se cruza ese límite, no veo por qué no quemar las instituciones responsables (en general son comisarías, en este caso el asesinato fue civil, tal vez por eso el escándalo progre).

    Con respecto al tema del casco, esa es una discusión separada (poner los dos temas en el mismo párrafo, aún con aclaraciones, siempre será sospechoso de atenuante, no lo digo por Faco que es un compa, pero sí por los medios tradicionales).

    1. Porque NO son «las instituciones» las responsables. Es ridículo que un intente sea «culpable» del error (atropello, lo que quieran) de lguno o algunos de sus agentes. Si un empleado tuyo se manda una cagada ¿vos tenés la culpa? ¿Se puede «controlar» cada acción de cada uno, especialmente si son cientos o miles —todos argentinos, i.e. amantes de pasarse toda reglas por el traste, igual que los de la moto—?
      No, NO se justifica quemar edificios (que eran de ellos, ni destituir un intendente que no puede —ni debería, ver al final— tener todo y a todos «controlados» todo el tiempo. Es tan estúpido como andar sin casco o atropellar a los que huyen. «Descabezar» instituciones por acciones de funionarios muy menores es idiota —quizá eran buenos funcionarios, ¿no?
      Tener todo y a todos «controlados» todo el tiempo es un ideal fascista, tan imposible, irracional y autoritario como «la ley de la turba enardecida».

    2. Yo creo que unos chicos de 16 años no deberían andar en moto bajo ningún concepto. Como hacía explicita una famosa publicidad, un vehículo es un arma, y yo no le permitiría la portación de armas a ningún menor. De otro modo, si pueden portar armas o manejar, ningún adulto debería ser responsable de la seguridad de un menor que toma atribuciones de adulto. Si un menor puede manejar también puede salir del colegio en cualquier momento sin permiso de los padres o tutores. Aquí hay una gran contradicción que proviene de la confusión progre-facha de nuestra sociedad, heredera de años de la acción-reacción hacia el autoritarismo.

      1. Este asunto también tiene que ver con la responsabilidad de los padres, que a la hora de las tragedias, siempre intentan sacarse el fardo de encima y colgárselo a algún otro, ya sea Chabán, el Inspector de tránsito, el Intendent, el Profesor, la Maestra, etc, pero nunca asumen su cuota de responsabilidad. Los padres de hoy en día son patéticos. Quieren límites, pero que los límites los pongan otros. Esa falacia facilista a veces se cobra víctimas. Víctimas de los padres además de la sociedad.

      2. Totalmente de acuerdo. En general quieren que los límites los ponga el estado que «para eso pago los impuestos».

        Si del otro lado le sumas la paupérrima preparación de los recursos humanos del estado mas las corruptelas varias, el coctel es explosivo.

  2. Cito:
    «El Estado en Argentina es endeble. Es chico para las funciones que se le atribuyen. La burocracia local es incipiente: pocos son los funcionarios que permanecen, muchos son los que cambian cada dos o cuatro años. La democracia argentina es tan directa que pone a los políticos y a los funcionarios en el llano, donde cualquiera les puede pegar un cascotazo o batirles un “¿Y vos quién carajo sos?”. Hay que estar dispuestos a esas cosas en tanto no tengamos una burocracia profesional, y los mediadores entre el Estado y “la gente” deben saberlo mejor que nadie. O como dice el Escriba, “Es dura, la política en Argentina, muy dura”.»

    Un par de reflexiones con respecto a tu cierre.
    Todo es cierto, muy cierto, pero no pongas a los politicos como victimas, para después atribuirles la responsabilidad, ya que si no mucho no se entiende ¿viste?.
    Aunque si es cierto, que son victimás de su propio juego de poder, y lo que ves como la sufrida exposición del pobre tipo, no es así, es parte del cálculo (no sea inocente).
    De todas formas pienso que das absolutamente en clavo.
    Como verás, en tu anlisis, ves la responsabilidad de la clase politica, que le es imposible ver esa abstracción llamada «estado», como a un sujeto con vida propia y siempre es visto como una cosa a manejar (a cualquier nivel,Prov.,Munic., Nac.). Esa distorsión de puntos de vista, hace por lo general que el funcionario politico, tiende a verlo como cosa aunque más no sea de modo inconsiente o sea lo ve como Propio.
    Ahora esa vision, y la poco profesional estructura y endeblez, si detenés a pensar es absolutamente funcional a la construcción de poder politico.
    Entonces, seriamente pensas, que la clase gobernante va a resignar poder así como así?.

  3. Bueno temas difíciles, por muchas cosas, pero en particular porque hay muertos. eso lo cambia todo. Lo que también queda claro es que las redes sociales de contención son tan débiles como el Estado, lo fue para Lucas y también para los chicos de Baradero, porque no tenían guita para el casco, o porque no se les cantaba las pelotas ponérselo. En 9 de Julio hace casi dos años se mataron 4 pibes, haciendo juegos con sus motos y no había ni un agente del estado cerca. ¿quienes tenían que estar ahí y no estuvieron? Los padres le piden al estado que controle a sus hijos porque ellos no pueden, la cana los caga a palos porque otras mediaciones no conoce. En fin, parece imprescindible discutir sobre las redes sociales e contención, que andan escaseando.
    Salutti

    1. Eso de que no tenían guita para el casco es la justificación más tonta que jamás leí. ¿Tenían guita para la moto pero no para el casco? ¿Tenían guita para el recital de 200 pesos la entrada pero no para el par de libros de historia que le pedían en la escuela? Siempre es un asunto de prioridades, y las prioridades las establece cada familia y los sujetos de esa familia y no el Estado ni los agentes del Estado. El destino lo construye cada familia y cada sujeto de esa familia de manera individual. El Estado lo único que puede hacer es dar un marco de referencia y de contención. Nada más. Pero la construcción de un sujeto social, como todo en la vida, crece de abajo para arriba y no de arriba para abajo, desde el núcleo familiar al núcleo barrial al núcleo ciudadano al núcleo provincial y nacional. Es mentira que los valores tienen que venir dados de arriba hacia abajo. Eso es facilismo puro y en la realidad nunca se da así. Si la sociedad espera que surja un Mahatma Gandhi estamos perdidos. Los Mahatma Gandhi no se dedican a las minucias del día a día. El día a día lo hacen las familias con sus minúsculas decisiones.

  4. (Si podes borrar el comment de arriba, mejor, se me largo sin querer queriendo)

    Coincido totalmente con Martín: yo soy otro de los que apoya la destrucción de la municipalidad. No se destruyo un edificio, sino un símbolo que para la gente, significaba abusos, corrupción y muerte. No creo que la violencia se haya gestado porque la gente rechaza el control estatal, sino por lo que dije antes: los agentes de transito se sarparon (como venían haciendo antes) y esta vez, se les fue la mano.

    1. Si cada uno de los que se sienten víctimas del Estado fuera a aplicar el mismo método de justicia por mano propia a la Casa Rosada habría que cambiarle el nombre por el de Casa Tostada.

  5. Por qué das por sentado que la policia actuo mal en ambos casos? O será que cuando la realidad no se ajusta a tus prejuicios, ajustás la realidad?

    1. Hay testigos que dijeron al tipo que hizo la nota de El Argentino que la policía golpeó a Lucas. Y hay testigos en el caso de Baradero que dicen que los inspectores municipales (que no es lo mismo que la policía) se subieron a la camioneta y se llevaron puestos a los pibes.

  6. «El Estado reprime al loco, porque atenta contra el status quo. El loco, además de peligroso, pone en evidencia que la sociedad es la que conduce irremediablemente a la locura»

    ¿te parece?

  7. Hay que dejar que la gente vaya en moto sin casco. Es su cabeza. Si son menores, es la cabeza de los padres. Si se pasan de velocidad, es otra cosa. Lo mismo, salvo extremos, con la droga.

  8. En ambos casos que citas, ni siquiera se sabe como fueron los hechos.Solo se sabe lo contado por los medios,que como aprendimos aquí son perversos, entonces porque creerles en este caso?

      1. Les estás dando entidad a dichos de gente interesado que ni se ponen de acuerdo entre ellos y que llegaron despues de los acontecimientos .Hay que esperar para saber como fueron los hechos.
        Estas dando por cierta una versión totalmente parcial y antojadiza.
        Es increible pensar que dentro de la municipalidad de Baradero esta el mal absoluto ,y que afuera son todos santos.

  9. Ahí está uno de los grandes déficits de casi 30 años de democracia: no lograr una policía que respete los Derechos Humanos. Era (es) una necesidad básica, una bandera formidable para el progresismo, y se la terminó robando Macri y su Metropolitana. ¿Y cómo puede ser que bajo un gobierno que enarbola el derecho a la identidad tengamos más de un mes a un tipo muerto sin saber quién es? No hay explicación que alcance.
    ¡Chapó! diría un franchute.
    Slds.

    1. «cómo puede ser que bajo un gobierno que enarbola el derecho a la identidad tengamos más de un mes a un tipo muerto sin saber quién es? No hay explicación que alcance»

      me parece un discurso de una cacerolera despues de escuchar 4 horas a rial y a majul.
      la vida y la sociedad son mucho mas complejas.

      1. si escuchás a rial y a majul, yo no me hago cargo de lo que pase con tu salud mental.
        lo cierto es que tener un NN durante un mes ¡es como mucho!
        la vida, la sociedad y la muerte son complejas, de eso no hay duda.

    2. La explicación es un par de padres que les chupa un huevo que le pasó a su hijo durante por lo menos más de dos meses (en realidad dos meses era la cantidad de tiempo que UN AMIGO dijo que lo había visto… los padres no lo veían desde hace más todavía!! tal vez la época de fiestas).
      Tirale la culpa a la cana y Macri, típico Kirchnerista. Háganse cargo, una sociedad del «fasito, está todo bien, la merca para el pueblo». Y q después cuando cae uno durito, es culpa del tipo de la morgue porque no podía sacarle las huellas dactilares (por sus dedos hechos garompa).
      Claro mientras los padres, haciendo su vida de artistas cool y progre, con el hijo falopero bien lejos para no romperles las bolas.

      1. Si bien no es un requisito excluyente, leer y entender el post antes de hacer un comentario es bastante recomendable. No te infartes. Saludos.

  10. Más allá que yo también creo que la policía normalmente actúe violentamente, eso no justifica a tratar toda situación en la que se ven envueltos policías como violencia policial.

    En el caso de Manso, fue llevado no una sino dos veces al hospital. No pisó la comisaría, no judicializaron su consumo de cocaína, sino que se buscó su internación. Se puede discutir si la internación en un hospital era la mejor alternativa, pero viendo el desenlace que tuvo la historia, peor hubiese sido si la policía no respondía o lo llevaban detenido quien sabe porqué razón.

    Creo en la libertad de las personas, tanto para consumir como para correr desnudo por la calle si así les place, pero el hecho de que haya terminado las dos veces internado, habla de que la policía en este caso en particular no lo estaba viendo como a un delincuente, sino con alguien con dificultades.

  11. Leí por ahí en un blog una observación muy interesante con respecto a la reacción popular en Baradero. Los hechos ocurrieron entre las 5am y las 9 am del domingo, horario de salida de los boliches, parece que los «infiltrados» son fervientes partidarios de la JARRA LOCA, sinó fijense luego lo pacífico de la protesta, adolescentes sin futuro ni espectativas, al decir de Manolo, explotó la caldera, ya no contienen más con drogas y alcohol, si quieren salir de allí, tendrán que luchar con la cabecita más fresca y clara.
    Saludos.

  12. Siempre hablando al pedo, total es gratis «y la policía lo caga a patadas».
    Flaco, moderate. Grimau era un falopero que se había pasado mal de rosca, lo internan porque estaba en la calle hecho mierda. El loco se escapa en bolas, y por eso se agarra flor de enfermedad (que ya la tenía obviamente con pulmones quemados). La policía no lo caga a patadas -se hicieron DOS autopsias, uno con un forense contratado por la familia (de esos que te buscan el más mínimo moretoncito para gritar «lesiones gravísimas, vamos a juicio!»), y dieron que al tipo no lo cagó nadie a golpes.
    Así que ahí tenés «al Estado»… cuando en realidad el problema es la familia de Grimau, un pibe que estuvo DOS meses sin contacto con los padres. Que se drogaba mal -pero lejos de la familia, así no jode, viste?
    Que luego un día los viejos se preguntan «en qué andará el falopero del nene?» y no saben siquiera cuando fue la última vez que lo vieron vivo (de allí que dan mal el dato del «NN» y no lo buscan por eso entre los cadáveres más viejos). La familia ni bola, para ellos fue un NN durante meses, hasta que ahora se hacen los compungidos. Hasta eso llega la hipocresía que lo dejan abandonado y ahora quieren encontrar en la cana y el Fernández el chivo expiatorio. Háganse cargo o jódanse.

      1. No respondiste, Faco.
        Además de que afirmaste al pedo que la policía lo cagó a patadas -lo que demuestra muy poco rigor al escribir-, también te equivocas al afirmar que consumir cocaina es un delito. No lo es, y no por el fallo de la Corte.
        Lo que es un delito es tener la droga, pero si aparecés reventado por la droga, pero sólo la tenés adentro del cuerpo, no estás cometiendo un delito.
        No es una pequeñez jurídica, sino la base de tu error, de tu prejuicio. Una vez mas.

      2. La droga está «criminalizada» por suerte, y a pesar de los kirchneristas como Aníbal Fernandez que la quieren ver corriendo gratis por las calles.
        En el caso de los adictos compulsivos, internación directa.
        Nada de charlas con asistente social para que el Estado se lave las manos y no quiera internarlos «porque el adicto dice que se va a portar bien».
        Este muchacho Grimau estaba en las últimas y NADIE se hacía cargo. Si hubiese una política SERIA contra las drogas ya habría estado internado en una comunidad A LA FUERZA, y estaría vivito y coleando… pero claro eso es muy facho; obligarlo a hacer lo que él «un ser libre» no quiere.

    1. grande, pancho. metamos presos a los faloperos, a los que no usan cinturón de seguridad o casco, a los que comen con mucha sal o mucha grasa, a los que fuman (tabaco), a los que beben…

      eso es un estado preocupado por la salud de la gente.

      lo que no sé es cuántos quedan afuera de las rejas.

  13. «El Estado en Argentina es endeble. Es chico para las funciones que se le atribuyen. La burocracia local es incipiente: pocos son los funcionarios que permanecen, muchos son los que cambian cada dos o cuatro años. La democracia argentina es tan directa que pone a los políticos y a los funcionarios en el llano»
    Esto FRUTA es estado puro (o sea, kirchnerismo explícito).
    Primero: el Estado es chico, endeble? perdón pero tenemos un Estado que consume el 36% de los recursos de TODO el PAÍS (a escala PBI). Platita no le falta, y gastan lo mismo que en la época que el Estado era dueño de YPF, Gas, TV, minas, Marina, Aviones, Fábricas militares, Luz, Agua, Correo, Trenes, etc.
    Tenemos un Estado parásito, que no sirve para nada, no tiene empresas -salvo Aerolíneas argentinas, y que gasta y gasta como si estuviésemos en el primer peronismo o en el desarrollismo.
    Segundo: los funcionarios cambian??? estás loco o qué? en el Estado a NADIE lo rajan. Entran de pibes acomodados por un «padrino» y salen recién con la jubilación en mano. Entrar al Estado es un lujo que no se publica en los clasificados de Clarín, el que entra por un familiar labura allí de por vida y no por un par de añitos. El Estado tiene la peor burocracia que hay, por la simple razón que los empleados son «inechables» (en consecuencia laburan como se les canta, lento, sin posibildad de recibir sanción y pidiendo al de al lado que «no labure tanto que nos hace quedar mal al resto, chancho ortiva gorilón»).
    Si vos te referís a otros «funcionarios» que sí rotan cada 4 años, supongo que serán los puestos electivos. Te jode mucho que haya elecciones tan seguido y que haya que cambiar por tanto a concejales, diputados, presidentes y ministros? Si querés reinstauramos la monarquía con la sucesión dinástica kirchner así hacemos estable el Estado. O lo ponemos a Néstor como «presidente por Planta permanente» así es inrajable.
    Tercero: la pelotudez de que los políticos están en el llano no se la cree ni un peronista. Si alguna vez fuiste a un acto con los «jetones» verás que esa gente anda «bien acompañada». Kirchner no es Mujica, sale siempre con su cohorte de gorilones que no te dejan pasar salvo que ÉL quiera. Lo mismo con cualquier «compañero», hasta el más piojoso de los concejales peronistas tienen su dos gordos de custodia. Hasta el progre de Zaffaroni lleva a un comisario al lado, dos gorilitas y un chofer a cada lado que va (y tratan de pasar «desapercibidos» pero es imposible). Todo político con poder en el Estado (no la Ripoll, no Pino Solanas, no la Patricia Bullrich) tiene sus patovas que cuando «baja al llano» les pone bien claro a los «del pueblo» que el señor político es intocable.
    Claro, me podrás decir que si van a una tribuna de fútbol los querrán correr a patadas (obviamente como le pasó a un boludo que creo era Lousteau), o que en una reunión en zona campera los corra media Federación Agraria. Ahí el tema es que lo cuatro o cinco matones que lleva todo polítco de la «realeza estatal» no le alcanzan para parar la horda que se les viene encima de golpe.
    La realidad es que el Estado es monstruosamente GRANDE, derrochador, no produce nada, no genera empleos (como cuando tenía 100.000 empleados de los trenes, otro tanto de YPF, gas y carbón, otro tanto de luz y agua); que los funcionarios estatales están ATORNILLADOS con el culo a la silla, y su puesto es siempre de privilegio; que los funcionarios que rotan cada 4 años se llama «democracia» y si no te gusta colgate un cuadrito de Videla en la pieza, y que los políticos no bajan nunca al llano (salvo en campaña política donde andan en bondi, dan besos a gordas, negros, paralíticos, villeros y linyeras varios con tal de sumar votitos) y que cuando tienen que ir por el llano se rodean de los matones y pesados que les ponga al pueblo distancia de ellos -como hace cualquier estrellita liberal de rock

    1. Pancho: más allá del tema Baradero, sería muy interesante escuchar dos definiciones según tu criterio: 1) tu «estado ideal» y 2) las mejores medidas del gobierno de Mujica, que no dudo sabrás enumerar y comentar…

      1. A Mujica hay que darle tiempo. No pasó un mes de asumido.
        El Estado «ideal» es el viejo Estado nacionalista y con EMPRESAS. No el Estado parasitario «neo-peronista» del postmenemismo, ni el Estado mínimo liberal. Sino un Estado que si te va a sacar un tercio del PBI sea, no para alimentar vagos, sino para dar TRABAJO EN SERIO en empresas como petróleo, gas, carbón, fabricaciones militares, aviones, marina mercante, subtes, trenes, luz, agua, caminos, etc, etc, etc. Un Estado que sólo sirve para dar plancitos «no trabajar» para que los punteros sean pagados para ir a los actos o como mucho te barran una plaza, no sirve para una mierda.
        El ideal kirchnerista es ese, no laburar, vivir del Estado y putear a la clase media que se molesta por los tipos que no laburan y viven del Estado. Si la quieren de arriba por lo menos hagan algo útil como se hacía hace 30 años en la Argentina. Poner sellitos, y llenar papeles por triplicado para la burocracia tampoco es el «ideal» de ningún Estado.
        El «anti-Estado» es precisamente el de la provincia de Buenos Aires, donde todo marcha para la mierda. La pobreza crece, y se necesitan millones de pesos tirados a la basura para que no se retobe la indiada y les muevan los saqueos por hambre. Se matan por planes, que implican plata a cambio de nada (salvo el apoyo al intendente o gobierno de turno). Y la provincia nunca prospera, es más, va cuesta abajo, se llena de indigencia, droga, marginalidad, y subculturas.
        El ideal es cualquier momento de la Argentina previo al Peronismo de los `90. Entonces el Estado servía para algo, daba trabajo, y por más ñoquis que tuviese significaba un orden para la Nación, en vez de un grupo político minoritario que se reparte la torta con los amigos en nombre del dichoso «pueblo».

  14. En el caso de Baradero hay que empezar por escuchar a los vecinos:

    http://www.baraderoteinforma.com.ar/2010/03/21/fuenteovejuna/
    http://www.baraderohoy.com/2010/03/24/furia-dolor-y-dudas-por-giuliana-y-miguel/

    Tus datos están mal y basados en falsos testigos. No hubo persecusión ni encierro sino choque en la intersección. La moto iba a alta velocidad, la camioneta no. Meses antes hubo movilizaciones para hacer cumplir las normas viales a causa de otra muerte por lo que empezó la «tolerancia cero». Lo cual quiere decir que las demandas al Estado cambian histéricamente.No sólo acá, como bien lo muestra la crisis financiera mundial, la mano del Mercado es más rápida que la vista del Estado.
    Al respecto copio y pego parte de un comentario que dejé en Deshonestidad Intelectual:

    «Ahora me gustaría llamar la atención sobre otros dos niveles de análisis posibles:
    1) El nivel sociológico local.
    2) El nivel psicológico cultural contemporáneo.

    En el primero de ellos, las imágenes televisadas, así como las expresiones de los entrevistados sugieren una estado generalizado de frustración de una amplia capa poblacional con esperanzas de ascenso social. En esas esperanzas aparecen dos instrumentos recurrentes: la escuela técnica y el ciclomotor. Los baraderenses parecen sentirse marginados de los súbitos golpes de prosperidad experimentados por localidades vecinas, más ligados que ellos al boom agropecuario. El hecho de que en Baradero predomine el sector fabril (de crecimiento más lento en los últimos años) parece vivirse como una postergación. Lo que me resulta notable y significativo. El ciclomotor es un medio crucial para moverse entre la escuela y el trabajo (no hay transporte público), siendo su posible secuestro vivido como un ataque a sus posibilidades de ascenso personal.

    El segundo nivel es más generalizante y discutible. Pero creo no errar mucho si digo que, desde que el Capitalismo de Posguerra, ligado al Estado de Bienestar, entrara en decadencia mundial a mediados de los setenta, las representaciones políticas han perdido densidad. La revolución tecnológica y la imposición de facilidades a la movilidad de los capitales han transformado a los gobiernos en rehenes de éstos y a los partidos políticos en plataformas retóricas incapaces de asegurar el control de los flujos y de brindar opciones previsibles de futuro a sus votantes.

    En estas condiciones se ha vuelto muy problemática la aceptación confiada de la Ley social por parte de amplias capas, que por lo tanto, cambian histéricamente de demandas según la falla que inevitablemente aparece por un lado u otro de la cada vez más dificil tarea de contención que compete al Estado.

    No es casual que en los agitados años ’30 del siglo XX, tras la debacle financiera de Wall Street y el desborde de las élites políticas por la agitación social (comunismo, fascismo, anomia) ante su incapacidad de dar respuestas estabilizadoras, Sigmund Freud escribiera su agudo análisis del problemático paso de las pulsiones infantiles del Ello a la insatisfactoria aceptación de la Ley del Superyó. El malestar en la Cultura es hoy más que nunca un referente de pistas para entender este difícil presente nuestro.»

    1. En tus links se describe la situación Baradero como dos boluditos que venían al palo en su motito y se morfaron la camioneta que iba a 30km/h (y que ni los venía persiguiendo ni nada, sólo pasaba por ahí).
      Los testigos que citan son un chico lesionado en el choque!! (lo cual lo hace 100% fidedigno, porque si mentía y decía que «Toda la culpa era de la camioneta» le hacía flor de juicio al Estado y se hace millonario). Y luego varias personas que venían circulando detrás de la camioneta.
      Luego del choque, como había una banda de pibes se les vinieron al humo (todos en pedo luego del boliche, es de esperar). Y pasó lo que pasó.
      O sea, que en este caso no es culpa de la «mano dura» sino precisamente del Progresismo de dejar hacer lo que se les cante el culo a todos. Hasta que por eso terminan, unos chocando por andar al palo en pedo. Y los otros quemando todo lo que encuentran a su paso porque es divertido.
      Faco, por supuesto tiene su moralina «anti-yuta» ready. Y está listo a repartir culpas a todos, salvo a los que las merecen (las familias progre que dejan a su hijo drogarse hasta morir, o andar en pedo haciendo carreras en motitos robadas).

      1. Pancho, me parece bien que te hayas tomado el tiempo para leer extensamente los links que traje.
        Ahora me gustaría que leyeras el resto del comentario, como para discutir lo que pasa con el Estado contemporáneo. Tratando de entender (como pedía Spinoza) antes de condenar o de llevar agua para el propio molino.

        Si no partimos de que no se trata simplemente de los pecados de los intelectuales progre o de los clase media-baja irresponsables con sus demandas simultáneas de «libertad» y protección» ni del ordeñe político del Estado, seguiremos despotricando sin entender.
        Se trata (en mi opinión) de que esas demandas contradictorias e histéricas fueron causadas por el debilitamiento del Estado frente al Mercado desde hace 35 años, con la consiguiente incapacidad de controlar sus cambios violentos, generando una psicosis social de inseguridad permanente.

        Desde ya que buena parte de tu descripción del Estado prebendario puede ser cierto. También lo es que el Estado reducido y eficiente de los modernizantes no resultó muy adecuado en situaciones de emergencia, como Katrina o la crisis financiera que le estalló a los Republicanos del Norte y la triste desinteligencia que impidió hacer llegar el aviso de Tsunami a los chilenos tras el terremoto. Habrá que pensar más.

      2. Ahora el liberalismo es culpable de la cultura «fierita»? no me hagas reir!
        Haganse cargo de esa mierda de subcultura del «vale todo, no me discrimines, no seas facho, hago lo que quiero!!» que trajo el peronismo de los ´90 -encumbrado primero en la clase alta que se cagaba en todos y luego llevada a las villas en el «si no tengo lo que tiene el careta voy y lo robo». Ahora cualquier nabo es el más poronga y se cree James Dean en Rebelde sin Causa, o el personaje principal de Okupas (que jugaba a ser chorro y le salía de diez). Luego cuando se dan el tortazo con la vida le tirás la culpa al liberalismo «que debilitó al Estado» y por eso estos tarados hacen cualquiera.
        Te cuento que el Estado NO crea cultura, como mucho provee orden, organización burocrática. La cultura va por andariveles propios y están más influenciados por la izquierda progre grasa que se la da de «popular» que por el cheto liberal proyankee que habla en inglés, vive en Pilar barrio cerrado y tiene nariz respingada.
        La «conurbanización» no es culpa del liberalismo menemista, sino precisamente es culpa de la pata PERONISTA del menemismo. Y a esto lleva cuando se desboca y se justifica, dale que dale, vamo´lo pibe!
        Si nadie puede poner límites porque es de facho (y eso lo repiten en AP a cada rato), luego vienen estos excesos y estas muertes. A comerla, o a cambiar la cosa. Culpar a EEUU, a Adam Smith, o al individualismo anglosajón es típico de «la culpa la tiene el vecino y nunca yo».
        Tal como hacen los garcas de la familia Grimau, o los padres de los pendejos estrolados con la moto.

    2. Comentarios como el tuyo dan gusto, Bob.

      Las versiones que vi yo de los supuestos testigos decían que la camioneta persiguió, encerró y embistió a la moto. Supongo que depende del testimonio en el que confíes, pero gracias por acercar los links. Y muy interesante el resto del análisis.

  15. «Tratando de entender (como pedía Spinoza) antes de condenar o de llevar agua para el propio molino»

    jajaja, es buenisimo cuando en los debates comienza el «name-dropping» innecesario para darle más autoridad a cualquier afirmación pedorra :D

  16. Faco, has tocado un tema muy «sensible» según puedo observar en los «comentarios» extensos, indignados, confundidos y para variar, sin propuestas alternativas, imposible pensar o debatir con esos panchos. El próximo post tituláselo así: Misión Imposible, el tipo se hace un festín!!!
    Saludos.

  17. Mal que le pese al autor del post la evidencia disponible (autopsia por un lado y relato de testigos por el otro) perecen señalar que ni la policía apaleó a Grimau ni el vehículo municipal de Baradero persiguió a los adolescentes. Sí queda en evidencia, en ambos casos la falta de contención familiar.

    Independientemente de ello, los familiares, los medios y la «pueblada» de Baradero intentan responsabilizar al estado. La Justicia,finalmente, deslindará responsabilidades.

    En mi modesta opinión es imperativo que padres y familia asuman su responsabilidad en la formación y educación de los hijos.

    1. Uno de los primeros links del post vincula a una nota que recoge testimonios que aseguran que la policía golpeó y maltrató a Grimau. No sería ilógico que los golpes no aparecieran en la autopsia realizada de inmediato, y que se hayan disipado para la fecha en la que la familia pidió otra autopsia. Pero el foco del post no es si hubo maltrato policial o no, ni si la camioneta municipal atropelló a los pibes o no.

      1. “Uno de los primeros links del post vincula a una nota que recoge testimonios que aseguran que la policía golpeó y maltrató a Grimau. No sería ilógico que los golpes no aparecieran en la autopsia realizada de inmediato, y que se hayan disipado para la fecha en la que la familia pidió otra autopsia.”

        Ajajá, sos medico forense ahora?!??! Suelto de cuerpo presentás tu teoría con un contundente “no sería ilogico” ajajá, sos un caradura…

        “La revisión de la autopsia realizada sobre Lucas Rebolini Manso, el fallecido hijo de Antonio Grimau y Leonor Manso, confirmó que la causa de la muerte del joven fue neumopatía pulmonar. A su vez, no se detectaron “irregularidades ni golpes”.
        Peritos oficiales realizaron esta mañana la revisión de protocolo de la autopsia realizada sobre Lucas el 12 de febrero, cuando se encontraba en la morgue judicial en carácter de NN. Según los especialistas, aquella práctica no presentaba irregularidad alguna, lo que lleva casi a descartar la posibilidad de una segunda autopsia.”

        Fuente: http://momento24.com/2010/03/22/confirman-que-el-hijo-de-grimau-y-manso-murio-por-neumopatia-y-no-registra-golpes/

        “Pero el foco del post no es si hubo maltrato policial o no, ni si la camioneta municipal atropelló a los pibes o no.”

        Usaste los dos casos como disparadores para una reflexión sobre las injusticias o ineficiencias del Estado “burgués” y ambos casos el Estado pareció comportarse como correspondía…

      2. Como siempre, ignorancia kirchnerista al palo.
        No sabe nada de medicina y dice que los «moretones desaparecieron» al toque.
        Un moretón dura mínimo más de una semana en su ciclo de desarrollo, y una vez entrado el cadáver en Rigor Mortis no se desarrolla más (conclusión ves el moretón y sabés en qué momento fue hecho) por más que pase un mes el fiambre en el freezer. Sin contar que otros tipos de heridas son más visibles y dejan marcas.
        «Si no existe, lo inventamos». Si no hay golpiza, decimos que se la dieron pero fue «invisible». Así es como cierra todos con los mili-tontos kirchneristas. Ven visiones, golpistas en viejas de barrio que se quejan del precio en el super, ven gorilas en toda la clase media, y ven golpizas de la cana en cualquier fierita muerto por la falopa.

  18. «Sí queda en evidencia, en ambos casos la falta de contención familiar»

    Bueno, el hijo de Antonio Grimau, por más que le digan “Lucas” era un tipo de 36 años, que se dedicaba a vaguear y lo mantenían los padres (imagino que el departamento de Recoleta no lo había ganado él, tocando en las plazas). Qué más podían hacer los padres? Lucas Grimau no era un post- adolescente, era un tipo, un igual con sus progenitores. Los padres se ve que hicieron lo que pudieron: cuidar que ese Señor no terminará debajo de un puente. Cuando tenes un hijo de 36 años pelotudeando no sé si podes hacer mucho más y tampoco sé si te dan ganas de hacer mucho más.

    Me parece ridículo responsabilizar al Estado por lo que le pasó a este tipo, pero de igual forma me parece ridículo responsabilizar a los padres. Es la cara progre y la cara conservadora de la misma moneda: echarles las culpas a algún otro, los padres, el Estado o algún concepto vacío de contenido estilo “la sociedad”…

    Que de lo que le pasó a Grimau se quiera teorizar sobre las falencias o injusticias del Estado me parece una idiotez sin nombre :D

    1. Los tratamientos para adictos de la droga se hacen a viejos de hasta 80 años (hay comunidades donde hay casos excepcionales, aunque son todos borrachos más que merqueros). Y es la familia la que tiene que OBLIGARLO. Amparados en leyes que «criminalizan la droga» (como tanto les molesta a los progres cool kirchneristas), lo internan a la fuerza al familiar para que no se mate solo. Ya si la famila prefiere tirarle plata para que «se drogue tranquilo», es culpa total de ellos y firmarle sentencia de muerte. Droga libre con comportamiento adicto lleva a estas cosas.

      1. pancho, no se puede obligar a nadie a «curarse».

        es un error pensar en términos de «adicción», de «adictos». se debe pensar en términos de habituados. es decir, gente que acostumbra consumir psicofármacos. punto. la del adcito que debe recuperarse es un mito impuesto en los discirsis mediante la difusión de casos como el de lucas o tipos como los de trainspoting, que no pueden con su vida, pero casos así hay miles que por el contrario jamás consumieron drogas. esos casos en los que se muestran personas que no cumplen con los parámetros del «buen vivir» no reflejan la vida de millones de personas que consumen drogas a menudo, sin ser tipos sin laburo, estúpidizados, «dependientes» o marginales. somos millones los tipos que vivimos sin parecernos en nada a esos casos con los que se suele justificar la necesidad de penalizar las drogas y obligar a los consumidores a «curarse».

        en realidad, todos esos fenómenos más bien dependen del hecho de que las drogas sean ilegales. lo que hace que sean de peor calidad, carísimas, y ubicables en los lugares más lejanos a la autoridad policial, lo que acerca el consumo de drogas al crimen.

        pero creo que tu opinión al respecto responde a la ignorancia. no creo que hayas probado otras drogas que alcohol, café, tabaco, alplax o ribotril por receta y poco más. de haberte fumado un porro, tomado una pasti, una pepa o un par de lineas, entenderías de qué se trata el fenómeno.

        hay varios escritos al respecto. el más entretenido es la historia elemental de las drogas de antonio escohotado. vale la pena.

      2. Tapones, no hablés pavadas.
        El 100% de los adictos recuperados en las «comunidades» fueron «obligados» a curarse. Fueron llevados a patadas por la familia (o con la policía). Y por supuesto, luego de unos meses de tratamiento cuando dejaron de estar fisurados, algunos se dieron cuenta que tienen que recuperarse y salen adelante (el resto, «juega» a que se portan bien para que los dejen salir, luego vuelven a la calle, a la droga y al tacho).
        No hay adictos que vayan «voluntarios». Los que lo hacen siempre tienen a la familia amenazando detrás (que te rajo de casa, que llamo a la policía si no te internás, si no vas a esa comunidad por las buenas te mando a una cerrada por las malas).
        Precisamente lo que tiene el adicto a las drogas es que NO quiere «curarse» (el cuerpo tiene una NECESIDAD tal de drogas que no puede dejarlas «a fuerza de voluntad» como si fuera un cigarrillo… que ya bien cuesta que alguien deje de fumar sólo gracias a su «buena voluntad»).

      3. no respondés nada de lo que te digo.

        pura cháchara de la ignorancia supina. es como mi abuela opinando de las drogas después del programa de chiche gelblung.

  19. Coincido con Político Aficionado, falta estado pero también falta presencia familiar, pero no es un terreno que corresponda opinar, digo el de la familia.

    El estado debe educar y controlar, la destrucción de la municipalidad es innecesaria, hay que explicarles que es de todos, mañana necesitaras de la muni y estará rota bobo!!!, es como cuando rompes un teléfono y luego queres pedir una ambulancia y no lo tenes
    Pero bue, alguno hacen catarsis o otros juegan a hacerse los loquitos, en el mientras tanto hay tres muertos jóvenes
    Un saludo

  20. Excelente tus reflexiones, me reconforta tanto que la gente jóven pueda hacer analisis de situacioens complejas que los supuestamente más experimentados no logran acertar; esto me llena de ilusión por un país más inclusivo, más sensible y más sensato. El artículo es un mensaje hacia los más viejos y hacia el futuro. Un abrazo. Victor.

  21. Creo que lo que falta fundamentalmente, es sentido común en los que no tiene otra responsabilidad más que comentar aquí por que la web es gratis. Pero por favor, muchachos, panchitos, no se les cae una idea ni a palo!!! Son puro Anti, lo que sea, Anti Anti Anti, son …Antidiluvianos!!!!!!
    Saludos.

    1. «no tiene otra responsabilidad más que comentar aquí por que la web es gratis»

      Vos pagas por comentar, Carlos? :D

    2. Y que ideas presentan ustedes Carlitos?
      Decir la culpa es del Estado, o de la clase media o del neoliberalismo, y seguir festejando la frula no sirve de mucho.
      Proponer el corte con esa cultura progre berreta del «hacer lo que dé», de droga free y de no hacerse cargo es una buena solución.
      Mejor ni citar a Pepe Mujica que acaba de decir que a los adictos hay que llevarlos a trabajar al campo, o si es necesario darles instrucción militar «no tirar tiros y todo eso, sino disciplina y trabajo duro».
      Ay, ay, ay. Cuándo los falsos revolucionarios locales se parecerán a los verdaderos guerrilleros de afuera?
      Acá los kirchneristas son muy anti, anti. Son todos malos, la clase media, Mujica, y cualquiera con dos dedos de frente que no vea 6,7,8. Por suerte en dos años se van, con toda esa cultura decadente y falopa. No los vamos a extrañar, pichones de Duhalde.

  22. aLITAX, TENÉS RAZÓN, OPINAR EN LA WEB ES GRATIS, POR ESO ESTÁ LLENA DE TIPOS QUE OPINAN CÓMO VOS, POR QUÉ ES GRATIS.

  23. Lo del autor del post es lamentable: parte de una falsa hipótesis y cuando se lo indican, sin cambiarla, mantiene la conclusión.
    Y todo muy sueltito de cuerpo.

    1. Es kirchnerista: no importan los argumentos (falaces), que son en realidad una linda excusa para su declaración de principios (disfrazada de conclusión).

  24. A mi me hace ruido esto y no estoy de acuerdo con que se diga que para éste gobierno los derechos humanos son una prioridad, que se diga que nunca un gobierno había hecho tanto en el sentido de hacer justicia y que no se tenga en cuenta que ha pactado con los siniestros aparatos del conurbano y del sindicalismo. Aparatos en los que funcionan, en perfecta armonía, intendentes, comisarios y, valga la redundancia, delincuentes. ¿Porqué los organismos de derechos humanos no le recuerdan al gobierno que la mano de obra desocupada quedó ahí, enseñando y perfeccionando métodos? ¿Porqué no tener presente que el mismo gobierno que habla de los derechos humanos fué el que puso a Scioli como gobernador? Yo creo que es una pose muy redituable. Creo que al gobierno le convenía mucho más buscar el apoyo de la izquierda que el de la derecha; por el momento histórico, por mayor afinidad y porque la izquierda es mucho más leal y cuando te dió el apoyo es capaz de utilizar las chicanas más imposibles en una discusión, antes que reconocer que se equivocó. La derecha en cambio, te deja de araca en cuanto caes en desgracia y buscar su apoyo es pan para hoy, hambre para mañana.
    ¿Alguien me explica esas contradicciones sin utilizar la fórmula «El fin justifica los medios»? Hace tiempo que no la uso más.

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