El efecto Susana

“No tengo claro qué hacer con eso que nos inunda”, me dice Leopoldo Brizuela. Yendo en un taxi, cuenta, el taxista puso fuerte la radio para que se oyera mejor la reiteración de las declaraciones en que Susana Giménez llamaba a matar a los que matan y se pronunciaba contra los derechos humanos, y después las declaraciones de anónimos oyentes respaldándola. “¿Qué hice con el asco?”, sigue Brizuela, “Solamente pedirle al taxista que bajara la radio, lo que lo indignó, y ahí vino una perorata bestial contra las Madres de Plaza de Mayo. No sé qué se hace con eso”. Si “eso” es aquello a lo que se refiere Sergio Caletti, cuando se pregunta “cuáles son los ríos subterráneos que riegan en su raíz el alma argentina, capaces de promover este vómito de adhesiones a la ley del talión”, todo indica que hay quienes saben “qué hacer con eso”, pero no basta como respuesta ante la evidencia de que en proporción fueron muy pocas las voces que se opusieron a la sed de venganza, no sólo por una previsible elección de los medios masivos, sino, como también notaba Caletti, “por el sentimiento de minoría a contrapelo con el que parecían proferidas”.

En ese sentido, las declaraciones de Giménez no pasan de anecdóticas, “ya fueron”. Lo que sigue en pie son “los ríos subterráneos”, y el hecho de que en sus napas abreva una gran parte de la población, según parece la mayoría, o al menos la que más se hace oir. ¿Qué se hace con eso? Primero, tomar nota de que los ríos existen, y de que es algo propio de los fascismos –de las instancias fascistas presentes en la vida política de una sociedad– abastecerse en esas napas. No es imprescindible haber leído El malestar en la cultura para saber que esa potencia homicida está siempre disponible en cada uno, pero eso no atenúa el malestar que a algunos –muchos o pocos, no sé– nos produce tomar nota de que personajes como la Giménez puedan decir impunemente las cosas que vienen diciendo desde hace décadas y otras figuras consideradas “populares” salgan a respaldarlas y sean millones los que se sienten representados por ellas. El tema no es si las mayorías se equivocan o no: el tema es qué está ocurriendo realmente y cuáles pueden ser las consecuencias.

Pero también cabe preguntarse por qué el asunto se desató ahora. No por qué Giménez dijo lo que dijo, sino qué operaciones se pusieron en marcha. Por supuesto está el negocio, y nada ignoran menos los medios que el hecho de que la combinación de figura idolátrica con la palabra “muerte” vende, y vende un montón, y más con el condimento de la polémica. Pero quién sabe si no hay también operaciones políticas. ¿No se está, de hecho, convocando voluntades masivas para cerrar de una vez por todas –ponerle «punto final»– el tema de los derechos humanos, y, en el mismo movimiento, sustituirlo por el tema de «la inseguridad» (lo que a su vez implica un avance en la “política de la despolitización de la política”)? ¿Y no se traduce la opción “derechos humanos o seguridad”, al menos en la lectura más inmediata de “la gente”, en la opción «con los K o contra los K»?

En un plano más amplio, esté planeado o no, es evidente que exacerbar la pasión del linchamiento es campo fértil para un pensamiento de derecha, para que pululen mentalidades incapaces de pensar en el prójimo, para que la vida en sociedad sea concebida como una guerra a muerte entre fuerzas de la naturaleza (a la vez que, en una aparente paradoja, se exalta la moderación de ciertos personajes políticos), para alentar subjetividades que se niegan a ejercer la reflexión y a poner en acción sus capacidades críticas. Tal vez, incluso, haya que ver en el “efecto Susana” otro síntoma de lo que en el Espacio Carta Abierta se empieza a llamar “la restauración conservadora”: hace años que Giménez era como es, pero quien sabe si hace dos años se hubiera animado a decir lo que dijo ahora tan suelta de cuerpo, y si hubiera conseguido tanta repercusión, y tan entusiasta. Y, aunque el componente fascista en la subjetividad de cada uno ya estaba hace dos años, y siempre, algo ahora parece legitimarlo y levantarle las barreras de la legítima autorrepresión. La hipótesis sería que se están activando núcleos latentes y se están tornando activos elementos ideológicos de la cultura cotidiana que hasta ahora estaban bastante contenidos, y ojalá no sea más que una hipótesis.


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Acerca de balvanera

Daniel Freidemberg. Argentino, nacido en 1945 en Resistencia (Chaco), residente desde 1966 en Buenos Aires, actualmente en el barrio de Balvanera. Más información en el blog "días después del diluvio".

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104 comentarios en «El efecto Susana»

  1. Los ríos subterráneos pueden estar. Pero en este momento se percibe que hay alguien bombeando. Haciendo mover los motores para que esos ríos cambien de sentido. Es impresionante la campaña de ciertos medios, entre ellos el colorado canal 2, para instalar el tema.

    Creo que agitan el tema, no porque se vaya a instaurar la pena de muerte, sino porque son sus puntos fuertes de sus respectivas campañas. Tal vez incluso sirvan de anticipo de cual será la tendencia en caso que lleguen al poder y tengan que administrar la crisis…

  2. Excelente post, balvanera!El tema de la inseguridad nos pone en contacto con nuestros miedos más profundos,anula nuestra capacidad de reflexión, nos hace sentir desamparados.Los medios lo saben y nos venden la ilusión de protección, que da el pertenecer a a un grupo que comparte una creencia común,cualquier diferencia conspira contra esa unidad ficticia. Es una cultura del miedo, paranoica.
    ¿Como se hace para vivir con esto?

  3. Yo diría que en el fondo hay un choque entre antropologías muy diversas. La creencia en la igualdad fáctica de los seres humanos es producto de una cosmovisión que apenas tiene adherentes en unos pocos despistados del último siglo, la mayoría de los transeuntes planetarios, de un modo u otro, aun cuando en abstracto siente que la igualdad jurídica de los humanos es bienvenida en términos lógicos, apenas le hacen asco a la convicción de su superioridad o privilegio frente a los ‘otros’ que fueran.
    El equilibrio, sin embargo, se mantiene cuando la cultura se esmera para hacer de dique y evitar que los instintos canibalescos salgan a la luz. Ahora bien, en cuanto comienzan a justificarse ciertas distinciones en vista a los argumentos que fueran, y estos comienzan a airarse sin encontrar condena en el espacio público, sino muy por el contrario, reciben la ovación de los muchos que buscan una simplificado relato a la confusión en la que viven, se producen fenómenos como los que se nos vienen encima sin que podamos hacer mucho, o muy poco para evitar la avalancha.
    No hace falta que le diga que la indignación conjunta tiene un valor testimonial encomiable, y me adhieron sin peros a las reflexiones que ha planteado en su post, sin embargo, le recuerdo que esos ríos subterráneos de los que habla, son el producto de una larga genealogía que se ha mantenido incólume a las viscisitudes históricas, a las victorias y a las derrotas, porque hacen a la identidad nacional como la piel al oso.
    Recuerdo hace cosa de quince años. Corría el 95, lo recuerdo porque había ganado las elecciones Menem hacía unos poquitos meses. Yo regresaba a Buenos Aires después de 7 años de ausencia. Decidí hacerlo por Bolivia, para evitar Ezeiza, un lugar siempre denostado en mi memoria. Bajé en micro. Durante el viaje tuve ocasión de hacerme una panzada con los comentarios racistas de la azafata que asentía a las bestialidades de los conductores mientras se paseaba con cara de dormida entre los viajeros que sin pestañear escuchaban que los bolitas eran chorros, los chilenos mentirosos, los peruanos mugrientos, los paraguayos un asco, y no sé cuantas otras ‘bestiesas’.
    Lo que quiero decir, sin que esto justifique la imbecilidad que ahora se barrunta con ganas entre el personal al que endilga las brutalidades que Susana azuzo con descaro, sabiendo que hablaba ‘por el pueblo’, que en su sentir la apoya indignada, es que esta patria nuestra se encuentra como atontada frente a cada circunstancia histórica que se le presenta, frente a cada encrucijada a la que es arrojada, como una mujer golpeada que aun no se ha atrevido a dejar su casa definitivamente, y regresa pese a los ojos morados y las costillas rotas, al costado de su maltratador.
    En fin, espero no haberme ido por las ramas, pero creo que el asunto es de una profundidad dolorosa. En el fondo, muchos de nosotros somos unos tremendos hijos de puta.

  4. restauración conservadora? pero para mí no necesitan restaurar nada, todo siempre estuvo más o menos igual, sólo hay que mover algunas fichas

  5. «No se está, de hecho, convocando voluntades masivas para cerrar de una vez por todas –ponerle “punto final”– el tema de los derechos humanos?»

    no creo,como seria eso, por ley? los medios venden con lo que sea y el tema de la seguridad encaja bien, la oposicion se sube a cualquier carro opositor.

    y, ademas, el problema existe y a gran parte de la sociedad le importa, no solo la clase media, ha habido marchas y reclamos en zonas pobres tambien, por esto la misma cristina ha salido a hablar de que los jueces liberan a todos y bla bla.

    1. Nadie dice que el problema no existe. No es eso lo que se está discutiendo acá: lea vea bien, pepe, y va a ver que se está discutiendo otra cosa.
      Ponerle punto final al tema derechos humanos: no dije que por ley, quise decir desacreditar la cuestión de los derechos humanos ante lo que suele llamarse «la opinión pública» de manera de que se vuelva imposible ocuparse de ella. Volverla «impopular». Quiero decir: se estaría alentando el reclamo de que no se hable más de derechos humanos, se estaría instigando en «la gente» la demanda de que quienes se supone que la representa o aspiran a representarla no se ocupen de los derechos humanos nunca más. Que más bien se opongan a esa cuestión y entren a cumplir con el viejo reclamo de La Nación: «dejemos de mirar hacia el pasado, ocupémosnos del futuro».

      1. creo que el reclamo «basta de derechos humanos» se refiere mas a los garantistas que al tema de la dictadura.
        por otro lado, mas alla del tema dictadura, no veo en que los K se ocupan del tema derechos humanos.

        saludos.

      2. Me parece que la gente no está diciendo «basta de derechos humanos», sino «nosotros también tenemos derechos humanos», aunque no nos haya matado y torturado un milico.

      3. Pepe: no, no se refiere a los garantistas, o no solamente. La propia Giménez, en su primer parrafada, se la tiró contra los derechos humanos. Explícitamente. Y luego, los «oyentes» de programas radiales también lo hicieron, explícitamente, en muchos casos.
        Por lo mismo, Adrián, puede que haya «gente» que diga «nosotros también tenemos derechos humanos», pero muchos de ellos entroncan directamente ese argumento (ya lo habían hecho durante Blumberg) con «basta de derechos humanos», empezando, como digo, por la propia Giménez.

  6. Ahora, más que nunca «es la política, estúpidos». La restauración conservadora vs. la propuesta populista. La exacerbación fachista (el fachismo es exacerbación) aflora cuando un gobierno «transgrede» el orden de los sepulcros. Las antinomías de siempre: derechas – izquierdas, país para pocos – inclusiòn social, peronismo – gorilaje, elitismo – pueblo, etc; son, también, las de esta hora.
    Hay un «país» que no soporta al «otro» y hay «otro» que siempre balbucea. La batalla cultural no está ganada, no está perdida, está presente y hay que darla.

  7. La oposición pega ahí por un motivo que el colorado pescó: Hay un divorcio profundo en ese campo entre el sentir popular y la opinión de la intelligentsia progresista. Una brecha donde es divertyido martillar.
    Me animaría a hacer una encuesta en el tercer cordón, y preguntar no sobre la pena de muerte, que sabemos que va a ganar, sino sobre si se debería aplicar con o sin dolor, estoy seguro que el resultado sería espeluznante.
    Además son inmunes al discurso de que la mejora de la desigualdad es la solución. Por experiencia propia, porque ellos sufren la desigualdad y no delinquen, sino que son víctimas.

    1. Por una vez estamos de acuerdo, Mariano T. Más: creo que el fogoneo del tema «pena de muerte» apunta a impactar más en los sectores más pobres que en la clase media.

      1. Los sectores pobres estan convencidos, estan martillando, como siempre, en la clase media.
        Y estoy en desacuerdo con que ellos ven que se la pueden aplicar a ellos, ningún obrero, o pequeño almacenero, ni suiquiera un desempleado se identifica con los chorros.
        Por supuesto la pena de muerte no soluciona nada, pero hay una sensación general de que los delincuentes salen demasiado rápido.

      2. Pareciera que no conociese a la gente de la que esta hablando. Ahora resulta que existe un grupo social homogeneo «los chorros», que son hijos de chorros, hermanos de chorros,sobrinos de chorros, etc, etc, que además se localizan en el tercer cordon urbano.

      3. osea que en este caso habria que escuchar mas lo que dice la clase media educada y leida.

        yo pense que ellos eran el problema, el «fascismo».

      4. Ay, pepe, pepe… Qué manera de enredar las cosas, y enredarlas mal. No sé si a propósito, quiero creer que no. ¿La clase media educada y leída es el fascismo? ¿Quién dijo eso? Yo no. Me parece ser un ejemplar bastante típico de la clase media educada y leída y, la verdad, no me parece ser más fascista que nadie, y tengo muchos motivos para considerarme antifascista. Usted confunde las cosas. Sí se ha dicho, y hay motivos para decirlo, que hay un cierto grado de fascismo latente en las capas medias que suele activarse con mucha facilidad, pero de ahí a decir que la clase media es fascista hay una distancia enorme. Que los fascismos, como fuerza política, utilicen como base social principal a las capas medias es otra cuestión, y no permite sacar ninguna conclusión esencialista, nada que permita decir que un sector social «es» algo. La cuestión es mucho más compleja.
        Ahora bien, no entiendo por qué de lo dicho en el comment se debe entender (porque ud. dice «o sea») que habría que escuchar más a la clase media. ¿Qué es lo que permite sacar esa conclusión? Acá nadie está proponiendo escuchar ni a la clase media ni a los pobres, como si en alguno de esos sectores residiera el secreto de la verdad revelada. De lo que acá estamos hablando es de no dejarnos seducir por las apelaciones a lo más impactante, lo que mueve ciertos resortes íntimos que son los que se activan con más facilidad e inhiben la capacidad de pensar con un mínimo de sensatez, y, sobre todo, con un mínimo de voluntad de interesarse en el prójimo y en la sociedad en vez de pensar solamente en uno mismo.

      1. No te metas con la mamá de otro.
        La pregunta es pertinente, en algunos lugares la pena de muerte esta bien?
        Lo mismo le preguntaría a Delía por Iran, (y espero que no me salga con israel)

    1. Primera cuestión: estoy en contra de la pena de muerte en Cuba y en cualquier parte. Lo que no me impide estar a favor de Cuba por otras cosas. No existe ni ha existido régimen ni gobierno en el mundo con el que esté de acuerdo en un 100 por cien.
      Segunda: mi artículo no dice que la pena de muerte es fascismo. Hay o hubo muchos regímenes o gobiernos que aplicaron o aplican la pena de muerte y no podría decir que son fascistas. Mi nota dice otra cosa muy distinta. Lea bien, por favor. Mi artículo dice que quienes fogonean el tema de la pena de muerte buscan alentar ciertos impulsos fascistas subyacentes en la subjetividad de cada uno, incluidos usted y yo.

      1. me había equivocado de destinatario

        Ricardo, no se ofenda… no me metí con su madre, es una expresión que significa ¿Qué tiene que ver esto con la conversa?
        EN fin, paso a explicarle por qué razón le respondí de ese modo:
        Usted plantea una pregunta sobre la posibilidad de determinar un universal: ¿Es la pena de muerte universalmente reprobable? Yo creo que empieza por donde no debe, desde ningún lado. Lo primero en el orden de la argumentación es preguntarse, ¿qué es lo que considero apropiado desde la perspectiva particular que ocupamos respecto a la pena de muerte? Para ello habrá que preguntarse qué tipo de bienes son a los que aspiramos. Si el único bien al que concedemos importancia es la seguridad puede que hasta cierto punto pudiera estar justificada una medida de esta índole. Pero no somos tan ‘robóticos’ no sólo nos importa la seguridad, sino otras cuestiones que están relacionadas con el tipo de personas en las que deseamos convertirnos, en el tipo de sensibilidad que pretendemos cultivar, en el valor que le damos a la noción de reinserción, por ejemplo, la noción de que los seres humanos no son esencialmente esto o aquello y que por lo tanto, pueden redimirse, etc. Todas estas nociones, y otras muchas, me hacen creer que la opción de la pena de muerte es intentar resolver el problema de los mosquitos a cañonazos, totalmente contraproducente, y por otro lado, plantea problemas enormes para el tipo de sociedad en la que queremos convertirnos.
        Una vez visto esto, usted me pregunta: ¿Qué es lo que piensa de la penas de muerte en Cuba, Irán, Israel, los Estados Unidos? La respuesta no es fácil, porque las circunstancias de cada una de estas, naciones para elegir tal o cual medida son muy diferentes: Por ejemplo, en el caso de Cuba, la traición al proyecto revolucionario, es decir, la traición a la patria, a los cubanos, de acuerdo al relato que justifica las ejecuciones, es lo que lleva a aplicar semejante pena. Pero en el caso de Irán es muy diferente, porque se trata de una decisión fundamentada en una visión de orden premoderno, religiosa, que es incomparable con la realidad moderna cubana. Quizá lo que más próximo nos queda es Estados Unidos, donde los propósitos son los más similares a los que nosotros argüimos, y el resultado es francamente deplorable. No sólo no se cumple la regla de una reducción de la violencia en proporción a las ejecuciones, sino que por el contrario, contribuye a hacer de los Estados Unidos una de las sociedades más violentas del planeta. Las muertes por arma de fuego en EUA, según el documentalista Michael Moore, ronda 10.000 almas anuales.
        En España se ha abierto la cuestión de la pena de muerte hace algunos meses a raíces de una violación con asesinato de una niña: el resultado de la inoportuna participación de la presidencia en el debate, ha sido desvirtuar profundamente el equilibrio de poderes. Las leyes penales no pueden estar al arbitrio de las emociones circunstanciales del personal. Habrá que tomar otras medidas, sociales, políticas, policiales (también), pero es evidente que no se juega con un tema como este.
        Se trata de cambiar el espíritu mismo, el fundamento de la república, lo que significa para nosotros ser un humano.

        [Responder]

    2. Me parece una chicana berreta Ricardo, tanto Cuba como USA tienen pena de muerte asi que con esa concepción sería paradojal que una persona de izquierda o una persona de derecha se opoonga a la pena de muerte.

    3. Ricardo, no se ofenda… no me metí con su madre, es una expresión que significa ¿Qué tiene que ver esto con la conversa?
      EN fin, paso a explicarle por qué razón le respondí de ese modo:
      Usted plantea una pregunta sobre la posibilidad de determinar un universal: ¿Es la pena de muerte universalmente reprobable? Yo creo que empieza por donde no debe, desde ningún lado. Lo primero en el orden de la argumentación es preguntarse, ¿qué es lo que considero apropiado desde la perspectiva particular que ocupamos respecto a la pena de muerte? Para ello habrá que preguntarse qué tipo de bienes son a los que aspiramos. Si el único bien al que concedemos importancia es la seguridad puede que hasta cierto punto pudiera estar justificada una medida de esta índole. Pero no somos tan ‘robóticos’ no sólo nos importa la seguridad, sino otras cuestiones que están relacionadas con el tipo de personas en las que deseamos convertirnos, en el tipo de sensibilidad que pretendemos cultivar, en el valor que le damos a la noción de reinserción, por ejemplo, la noción de que los seres humanos no son esencialmente esto o aquello y que por lo tanto, pueden redimirse, etc. Todas estas nociones, y otras muchas, me hacen creer que la opción de la pena de muerte es intentar resolver el problema de los mosquitos a cañonazos, totalmente contraproducente, y por otro lado, plantea problemas enormes para el tipo de sociedad en la que queremos convertirnos.
      Una vez visto esto, usted me pregunta: ¿Qué es lo que piensa de la penas de muerte en Cuba, Irán, Israel, los Estados Unidos? La respuesta no es fácil, porque las circunstancias de cada una de estas, naciones para elegir tal o cual medida son muy diferentes: Por ejemplo, en el caso de Cuba, la traición al proyecto revolucionario, es decir, la traición a la patria, a los cubanos, de acuerdo al relato que justifica las ejecuciones, es lo que lleva a aplicar semejante pena. Pero en el caso de Irán es muy diferente, porque se trata de una decisión fundamentada en una visión de orden premoderno, religiosa, que es incomparable con la realidad moderna cubana. Quizá lo que más próximo nos queda es Estados Unidos, donde los propósitos son los más similares a los que nosotros argüimos, y el resultado es francamente deplorable. No sólo no se cumple la regla de una reducción de la violencia en proporción a las ejecuciones, sino que por el contrario, contribuye a hacer de los Estados Unidos una de las sociedades más violentas del planeta. Las muertes por arma de fuego en EUA, según el documentalista Michael Moore, ronda 10.000 almas anuales.
      En España se ha abierto la cuestión de la pena de muerte hace algunos meses a raíces de una violación con asesinato de una niña: el resultado de la inoportuna participación de la presidencia en el debate, ha sido desvirtuar profundamente el equilibrio de poderes. Las leyes penales no pueden estar al arbitrio de las emociones circunstanciales del personal. Habrá que tomar otras medidas, sociales, políticas, policiales (también), pero es evidente que no se juega con un tema como este.
      Se trata de cambiar el espíritu mismo, el fundamento de la república, lo que significa para nosotros ser un humano.

      1. asi que en cuba esta bien que se mate si se «traiciona» al «pueblo cubano»? como seria eso? al no estar de acuerdo con fusilamientos por ejemplo se estaria traicionando?

        uno de los ultimos fusilados fue un cubano que se afano una lancha para irse.

      2. Yo no dije en ningún sitio que estuviera de acuerdo con la pena de muerte en Cuba, sólo expliqué (aunque usted se rasgue las vestiduras) que hay fenómenos que no son fácilmente conmensurables. Que hay que pensarlos con más profundidad. La respuesta era para la pregunta de Ricardo que insertaba como argumento la cuestión cubana e iraní. Si a mi respuesta su contestación es que todo es igual en todos lados y en todas las latitudes y todo merece un mismo y único modo de argumentación, supongo que es parte de un tipo de ideología muy particular que le hace creer que puede tomar fenómenos dispares y tomarlos como equivalentes universales.
        No, personalmente, la pena de muerte en Cuba, y mucho más en Irán, me resultan excecrables, pero equiparar una hipotética pena de muerte en Argentina con la que practican los aborigenes de Nueva Guinea o las Islas Molucas me parece de un infantilismo gigantesco.
        En Cuba, como en Irán, existen cosmovisiones que llevan a sus adherentes a aceptar la pena de muerte por motivos muy diferentes. El asunto es muy complejo, pero intentaré ponérselo fácil. Imaginemos la siguiente escena: En la edad Media se juzga a un astrónomo X porque sostiene que no hay 7 planetas que giran alrededor de la tierra, sino ocho. Las razones que dan los fiscales es la siguiente:
        No puede haber 8 planetas porque hay siete puertas en la cabeza humana: dos orejas que representan el planeta a y b, los orificios nasales, que representan c y d, y los ojos que representan e y f. La boca está por Mercurio que es un planeta solitario.
        Es evidente que para nosotros el argumento resulta rocambolesco. Sabemos que es falso, porque no hay una correspondencia entre los planetas y los órdenes del microcosmos humano, pero también sabemos que estas personas tenían razones que les hacía defender dichas ideas que eran el núcleo del ordenamiento social en el que vivían, etc.
        Lo único que deseaba poner en consideración es que el caso cubano y el caso iraní no es de mucha utilidad para juzgar la pena de muerte en Argentina, y que en todo caso, debiamos utilizar algo que nos quedara imaginariamente, cosmovisionalmente más cerca.
        Punto y final… lamento que haya entendido lo que ha entendido, creí que mi argumento era más sólido de lo que usted me responde.

  8. y la pena de muerte en eeuu? es fascismo también? (no pregunto por otras prácticas sociales institucionalizadas, como el linchamiento de negros)

    mariano: sí, puede ser que haya apoyo a la pena de meurte entre los pobres, igual lo que yo digo es que no hace falta ni ley ni encuestas, la pena dem uerte se da cuando un pibe pobre es boleta, etc

  9. A PROPÓSITO DE GUSANA SIMÉNEZ

    Cuando en el 2011 la versión garca del peronismo (Macri-Solá) o el gorilismo puro de siempre (Binner-Carrió) tomen el poder, harán sin duda lo que han hecho siempre, que es ahora lo que quiere «la gente», es decir, volver a explotar trabajadores, a desguazar las empresas públicas, a reanudar las relaciones carnales con los que inventaron la crisis (hoy la propia) y, fundamentalmente, a perseguir, a secuestrar, a torturar, a asesinar y a deportar. Acaso en ese momento (o unos meses o años después) los beneficiados en el período 2003-2011 comiencen una nueva resistencia. Será tarde para ellos, como suele ocurrir. Pero estarán sus hijos, esos que tiempo después (cuando nuevos K arreglen la economía) volverán a pedir mano dura y pena de muerte para poder gastar la guita con tranquilidad. Será la enésima proyección de la misma película, protagonizada por la gusana de turno.

    1. Tu hipótesis, no solo es interesante sino absolutamente viable.
      Ya que el periodo 2003/2011, y por sobretodo el periodo 2003/2008.
      Debería haber sido prioridad N° 1 una gran reforma política y de sistema electoral, como así una reforma institucional profunda, y modificar todas las leyes que le otorgan excesivo poder al PEN.
      Y que tiene que ver????- Tiene mi querido Mono, una reforma política, te saca un montón de monitos del juego. Y una buena reforma institucional evitaría lo que según vos va a ocurrir (y es posible) Recorda amigo, que lo actuado por Menem fue ajustado a derecho y a la CNA.
      Es por eso que nunca le creí a los K, esa lógica de cambio todo menos lo que reste poder a mi corporación (política)demostró (al menos para mi) que era lo mismo de siempre y es por eso que tu»ciclo» inexorablemente ocurrirá.

    1. Mejor, habría que someterlos a entrevistas de periodistas serios y responsables, de esos que ya casi no quedan, que en vez de dorarles la píldora y halagarlos y lamerles los zapatos se dediquen a preguntarles en serio qué están diciendo, si se dan cuenta de qué están diciendo, qué implicaciones tiene lo que están diciendo. Que se animen a confrontar con una estrella famosa y a ponerla en dificultades. Por supuesto, en la Argentina de hoy eso es imposible.

  10. entonces habría que recomendar tu muerte fede m (y también la mía y la de todo el que se meta en el juego)

    sí mono, los kirchner son unos pobres incomprendidos

  11. CINCO

    Sin llegar a los extremos que propone Fede M (aunque comparto la rabia que subyace a su propuesta), habría que responder a la violencia discursiva que se está ofreciendo para preparar la violencia represiva de mañana con algún tipo de revulsivo. Hace un par de años leí un artículo muy bueno de John Gray, el filósofo y ensayista británico, a favor de la tortura. Todo el artículo era una justificación a la tortura, pero escondía una trampa. Una vez que nos convencía de su posicionamiento, de la racional indignante de su propuesta, daba vuelta la tortilla para explicarnos lo que eso significaba desde el punto de vista social.
    Yo creo que esa es la parte que nos olvidamos de explicar a la gente cuando ofrecemos nuestros argumentos, y tienen un peso importante cuando los argumentos del otro ya están fosilizados en una posición X.
    Paso a explicar el procedimiento:
    1) el señor A esta a favor de la pena de muerte.
    2) nosotros escuchamos atentamente su propuesta, y le seguimos la corriente. Muy bien, señor A, puede que usted tenga razón, hay que aplicar la pena de muerte a tal y cual persona. Yo estoy plenamente de acuerdo, pero deberíamos ponernos un poco técnicos y afilar los procedimientos. ¿Cómo lo hacemos? quiero decir, que mecanismos utilizamos para acabar con los tipos estos. Una vez que recorremos con espeluznante ironía las posibilidades que tenemos a la mano pasamos al punto 3
    3) le recordamos que una vez hemos decidido a favor de la pena de muerte hay que hacer otras cosas no menos necesarias. Ahora que el asesinato de los criminales es legalmente recomendado, hay que formar a los verdugos, crear las cámaras correspondientes para llevar a cabo los asesinatos, enseñar la pena de muerte como procedimiento aceptado socialmente en las universidades y los colegios. El estado debe contar con un equipo técnico que se dedique a proteger de sus traumas a los verdugos correspondientes, psicólogos y terapeutas al servicio de nuestra decisión recién tomada y lubricada por medio de los tecnicismos expuestos, en fin, debemos hacer una transformación social gigantesca, que ocupa no sólo una porción del aparato represivo del estado, sino a todos los estamentos de la sociedad que debe involucrarse en el crimen si queremos que sea una medida legal. Eso sin descontar las consecuencias políticas de semejante transformación en lo que respecta a la figura del presidente, que cada año tendrá que lidiar con la decisión de hipotéticos indultos y cosas por el estilo.
    En fin, lo que deberíamos hacer es dedicar una buena cantidad de hora investigando hasta donde llega la serpiente de la pena de muerte en una sociedad que la utilice, para mostrar que no se trata de matar gente, sino de cambiar radicalmente quienes somos, quienes pretendemos ser…
    Supongo que una campaña de este tipo, que se articule a partir de la ironía y no en la indignación resultará más efectiva, por varias razones. Entre ellas porque hemos llegado a un punto que los defensores de la mano dura, lo dicen ante las cámaras con orgullo.

  12. Aclaro que discrepo en muchas cosas con la gente del tercer cordón, y la pena de muerte es una de ellas, pero solo es una manifestación de elitismo mío.
    Cuando escucho:»habría que castrarlos primero», o «hay que matarlos sin juicio» o «que sufran primero como hicieron sufrir a otros», solo puedo responder con silencio reprobatorio, o débiles protestas.

    1. Supongo que un silencio reprobatorio fue lo que ofrecieron muchos durante épocas siniestras de la historia… supongo que habrá que crear algún tipo de receta discursiva que de en el blanco y evite la extensión de un virus de este tipo. Yo he propuesto una respuesta socrática, irónica. Sin embargo, no la propongo con liviandad, creo que es necesario tomarse el asunto seriamente. Cuando un discurso de este tipo está en la calle y se extiende sin resistencia a través de las ‘corrientes subterráneas’, las consecuencias pueden resultar aterradoras. Reconozcamos que la llamada Dictadura Militar no hubiera ocurrido sin la anuencia y connivencia de una buena parte del pueblo argentino, que justificó el desmadre porque ‘había que parar a estos zurdos de mierda’.
      En fin, lo que muestra este asunto, como bien ha apuntado el mono gatica, es que estamos en un revival, del revival, del revival de una historia archiconocida.

    2. Ante el dolor y la ira de quien ha sufrido violencia extrema o de que tiene muy reales motivos para sentirse en peligro no hay mucho que decir, quizá no se le pueda decir nada. Se puede hasta comprender por qué opta por definiciones vengativas crueles, y quizá justificarlo si en los hechos opta por vengarse. Lo que no se puede (o no se debe) es emprender toda una campaña para acrecentar aun más la necesidad de linchamiento y para colocar la necesidad de linchamiento como tema central.

      1. No estoy hablando de la respuesta a la víctima… evidentemente esa no era mi intención, me refiero a lo que decía Mariano T, que no se refiere a lo que la víctima dice, sino a lo que dicen los que hablan en nombre de la víctima. Los ejemplos que ha ofrecido Mariano T. y son conocidos por todos: ‘primero hay que castrarlos, antes de matarlos, etc.’ Eso se dice en una mesa con un vino de por medio, convirtiendo en euforia la venganza. Ante estos aspavientos de macho vengador es ante lo que le propongo a Mariano T. que agudice su argumento.

      2. Por supuesto que entendí que no era una afirmación suya. Pero no creo que pueda hacer una distinción como la que acabaes de hacer: argumentos del PJ, no del PRO. Me parece que no está en contacto con la realidad: los muchachitos y muchachitas del PRO son aficionados a esas perversas indignaciones que acaban en afirmaciones del tipo a las que se refería. Lo cual no quiere decir que no podamos encontrar semejantes en el ámbito del PJ. Ahora mismo, los recortes que hacemos a la realidad no son tan claros. Se trata de un tipo de imaginario que es transversal. Sin embargo, puedo decirle algo. Desde el punto de vista de la justificación, un discurso que da prioridad absoluto al inndividuo, a la seguridad y al éxito personal en detrimento de lo social tiene mucho más fácil los argumentos a la hora de decidir lo que se propone. No deberíamos ser ingenuos en este punto. Eso no quiere decir que haya de todo en todas partes, como usted mismo ejemplifica, pero al final de cuentas el imaginario de PRO mantiene una clara distinción entre los de afuera y los de adentro. Basta con ver el tamaño de los muros que se levantan para proteger a los de adentro en detrimento de los de afuera, y el modo en que se utiliza la policia militar con funciones de gendarmería para mantener a los ‘grone’ fuera del perímetro.

      3. Este es un juego de malos entendidos… Manu: cuando escribí sobre lo que se puede esperar de quien sufrió violencia extrema o realmente vive en peligro, no le estaba contestando a usted, le contestaba a Mariano T. Con lo suyo estoy muy de acuerdo, y no hacía falta la aclaración porque se entendió bien.

  13. He leido algunos articulos del Sr. balvanera que me hacen pensar en una persona culta e inteligente. Dedicarle horas, me imagino varias, a los dichos de una bataclana analfabeta que cree que los dinosaurios pudieran estar vivos, me hace pensar: asi estamos, no hay solucion, en esto perdemos el tiempo. Susana, por su dinero, no por su nivel socio-cultural, es una pequeno burguesa; y que es un fascista sino un pequeno burgues asustado. No da para mas. Le pido disculpas a balvanera, sinceramente, en el proximo post espero sus finos razonamientos sobre cosas mas importantes

    1. No, quinche, lea bien lo que escribí. No hablo de la Giménez. Hablo de lo que otros armaron y siguen armando a partir de lo que dijo esa señora. El tema no es ella, y eso está explicitado en mi artículo.

  14. Con la lumpenfarandula muchos pueden entretenerse, parte importante de los sectores populares porque no.Pero por mi experiencia particular en modo alguno estoy de acuerdo con lo que afirma Mariano T. sobre la gente del tercer cordon, más bien tienen expresiones similares a las de los sectores medios, es decir, convalidar apresuradamente, de palabra , de vuelta a la vida cotidiana comprenden perfectamente bien que los suyos serían los primeros en quedar bajo la linea de fuego.
    No creo que tenga sentido discurrir sobre la retroalimentación discursiva que pueda provocar (esta cuestión en particular)la instalación del tema en los medios de comunicación, más bien me parece que no es parte sino de una operación corporativa que busca obtener un visto bueno de la población en los candidatos «mano dura» que les ponen la publicidad que no les pone el gobierno. Logrados los objetivos (o no) pasadas las elecciones, vuelven a pasar documentales sobre la democracia.

  15. Yo me sumo a lo que propone Manu y balvamera sobre los periodistas serios. Me imagino a Nelson Castro (un periodista serio, no?) poniendo en aprietos a Susana preguntandole si se debería incluir en la pena de muerte a los millonarios que intentando evadir impuestos se compren autos para discapacitados.

  16. Este Balvanera es un fenomeno. Segunda vez que acierta fuerte. Si, Balva, los rios subterraneos se hincharon las pelotas de bancar el discurso hipócrita y vacio del kkismo sobre los ddhh, mientras los roban, matan y violan. Eso es lo de Susana, y Tinelli: la expresión del hartazgo del ciudadano de a pie.
    Seguramente, cuando a alguno de uds les maten a la esposa, a un hijo, o les violen a la hija, o los caguen de un balazo porque tienen nada más que 20 mangos en el bolsillo (en el caso de uds no lo creo, por supuesto, andan con una luca mínimo, bondades del estado kk).
    Pero falta poco para que este aborto de los montes se termine, muchachos, cada vez menos.
    Me parece que vuelve el peronismo.

    1. «el hartazgo de los ciudadanos de a pie». Que expresión más ridicula. A Gabriela Michetti entonces no le molesta la inseguridad? Paren con el lenguaje confuso muchachos, si no les da para meterle belleza filosofal al análisis hablen mas bajito que no son menos por eso. Ah y eso del experimento monto, bueno, ni hablar, otra gansada. Ah, ¿así que que te maten una hija te da autoridad para hablar de política criminal mejor que otors? ¿esto significa que yo puedo hablar mejor que un médico de disfunción erectil porque el sábado acabé antes y agarré experiencia en fracasos sexuales?
      Por ultimo, yo defiendo al gobierno pero no tengo una luca en el bolsillo eh. Y no me fijaría en tenerlo para defender a un gobierno u otro.

    2. Faaa, que espécimen este….

      ¿Ves manu?, a tipos como este no hay discurso irónico que le entre, al segundo condicional se pierden…. (este, por ejemplo, cree que quienes se oponen a la pena de muerte son todos kirchenristas ¿incluyendo a marianote?)

  17. Se sumó Tinelli a la lista.
    Ahora sólo falta Maradona y ya tenés a todos los ídolos populares martillando con la pena de muerte.
    Para los progresistas nacionales y populares los ídolos populares son fantásticos hasta que ve que uno dice que celebró el voto no-positivo de Cobos como un gol en la final de la copa del mundo.

    Yo no veo ninguna conspiración. Se martilla con el tema, porque es el tema que según las encuestas preocupa más a la gente. Se martilla para tratar de lograr alguna reacción en la clase política.
    No puede ser que el gobierno y la oposición nunca hablen del problema que más preocupa a los argentinos, por lo menos a los que viven en el AMBA, porque es un tema incómodo y peligroso.

    Ahora el gobierno está acusando a los jueces que liberan, es una primer reacción, pero creo que lo que la gente quiere es más bien un plan de mano dura como construcción de nuevas cárceles con leyes más duras, algo así, y no que el ejecutivo se pelea con el poder judicial.

    Y sí, no creo que Magdalena y Nelson estén a favor de la pena de muerte. El puto de San Isidro que se peleó con D’Elia es el único famoso que salió a criticar a Susana por sus declaraciones.
    Mariano T tiene razón. El núcleo duro de la mano duro es aquel que votó a Ruckauf y Rico en el 99.

    1. ojo Lurker entiendo que es un problema grave, pero no creo que los medios y la oposicion martillen simplemente porque es lo que le preocupa a la gente.

      ni tampoco creo que la solucon va a salir del tratamiento mediatico, que por definicion es superficial.

  18. Sí, después de todo las leyes de Blumberg no solucionaron nada.
    La oposición se sube a cualquier cosa que desgaste el gobierno.
    Pero si no le mataban al florista a Susana no habríamos visto al desfile de famosos pidiendo mano dura.

  19. Balvanera, si, lo que digo la clase media es chicana y lo digo porque aqui se suele mecionar a la clase media generalizadamente, tanto la de derecha como la progres, como que es la que banco a menem, la dictadura, es fascista, egoista,veleta, inculta,funcional a la derecha,etc y jamas en la vida se dice algo de los sectores populares.

    tal vez no sos vos el que suele decirlo, de ser asi disculpas.

  20. Bueno, Tinelli se tomó su tiempo. Vio para donde iba el viento y soltó el pedorreo. Con un amigo nos acordábamos del «Tinelli sensible» pos 2001, su época «tumbera» y arty etc..
    Hay que decirlo, el «tema no se trata» porque no tiene «solución», al menos no en el sentido que parece tener para esa gente, no es algo que se pueda arreglar como el motor de la fiorino. Se puede tratar un poco mejor o un poco peor, pero seguirá existiendo de manera importante en las actuales condiciones. Mucho más en la Argentina donde, reconozcámoslo, la conducta delictiva es casi universal. El problema con el delincuente pobre, aún cuando su violencia no pase a lo físico (la absoluta mayoría de los casos), es que es pobre también respecto de sus posibilidades delictivas, se encuentra limitado al humillante cuerpo a cuerpo, al territorio físico, etc., es un delincuente «al contado rabioso». Creo que ese costado humillante explica tanto hincapié en este tipo de delitos (así como en las violaciones)en lugar de, por ejemplo, la delincuencia general de los automovilistas que en términos de muerte y desastres familiares se lleva todas las palmas por lejos.

    1. Me parece muy acertada la caracterización de la ‘delincuencia pobre’ en términos de cuerpo a cuerpo… en contraposición a otros tipos de delincuencia… el contacto rabioso, etc. Intente darle más forma al asunto en un post… creo que es interesante ahondar por ahí

  21. La inseguridad tiene su parte buena.
    Tinelli acaba de decir que se iria del pais, seria buenisimo que lo sigan Susana y Moria.

  22. En la Argentina no habrá pena de muerte, pero en las cárceles es ejecutada gente cada día. Nadie le preguntó a Felipe Solá (cuando todavía era FpV, además) por los muertos de Magdalena. Total, en la carcel mueren negros chorros, y a esos ni el PJ se hace cargo de representarlos (como sí se ocupó de mandarlos en cana, por supuesto).

    Pero yo no pensaría una confabulación sino en «efecto de campo». Los periodistas a lo sumo diran «la pena de muerte no es solución» pero son tan cagones y tan venales que nadie sale a decir lo que es evidente (que Su y Tinelli son ignorantes y canallas) porque en una de esas un día les tocan de patrones.

    Lo que dicen, asqueroso.

  23. En cuanto al problema real de «la inseguridad», coincido con Werte: no esperemos solución. No la hay. Así de sencillo. Ni aquí ni en ninguno de los países que lo padecen. Quiero decir, no hay solución inmediata, visible, tranquilizadora, a corto plazo y ni siquiera a mediano.
    Pero además del «problema» de «la inseguridad» está el «tema» de «la inseguridad». Yo hablaba del tema, no del problema, en tanto otros hablaban o hablan del problema. Y el tema no se corresponde exactamente con el problema: el tema se arma a partir del problema, pero es un armado, una construcción. Y lo jodido que acá aparece es que, tal como viene planteándose, difundiéndose e imponiéndose el tema de la inseguridad, agrava el problema, porque impide tratarlo como se debiera. Si el problema en sí mismo es angustiante, el tratamiento del tema lo vuelve mucho más, siembra pavor, paranoia, recelo, reflejos autodefensivos, la sensación de que estamos todos a punto de ser asesinados en cualquier momento y «hay que hacer algo» (y, aunque ese «algo» que proponen no resuelve nada, proponerlo les sirve para aliviar la angustia e imaginar en las posibles ejecuciones una revancha simbólica de muchos malos momentos pasados). En ese clima, el problema de la inseguridad (y acá estoy hablando del problema, no del tema) no sólo no va a resolverse, sino va a agravarse. Y no sólo el problema de la inseguridad, sino unos cuantos otros, para alegría de los que vienen a pescar en el río revuelto de un pueblo psicotizado.

    1. Quiero decir: una de las condiciones, tal como están las cosas, para resolver el problema de la inseguridad (o no para resolverlo: para ir empezando a resolverlo y, entretanto, atenuarlo, mejorar un poco la situación) es bajarle mucho los decibeles al tema de la inseguridad -quitándole horas de pantalla, por ejemplo, y dejando de mandar movileros a buscar «famosos» que digan gansadas brutales, y sacándolo de los grandes titulares-, pero no lo van a hacer. Por dos motivos fundamentales: 1) económicamente no les conviene, perderían plata; 2) políticamente les conviene menos aún. Porque tener una ciudadanía preocupada antes que nada por la seguridad es el gran sueño del poder económico. Y porque no quieren que se resuelva el tema de la inseguridad o que mejore la situación en ese aspecto. Cuanto más inseguridad haya, mejor para ellos, en lo económico y en lo político.

    2. estoy de acuerdo balvanera.

      lo poco que se discute de prevencion, de bandas de policias que secuestran, de zonas liberadas, de miles y miles de giles que estan presos sin condena en las carceles llenas, muchos porque los agarraron con un fasito, nunca se analiza la tendencia si viene bajando en los ultimos meses o subiendo, que delitos, como se combate cada uno (da lo mismo un choreo de una cartera, a una violacion, a un secuestro seguido de muerte,etc)

      hace poco eduardo real habia posteado un articulo en el que decia que se cometen algo asi como 200 delitos diarios, que queria decir? que, lamentablemente, SIEMPRE va a haber delitos y o crimenes para mostrar, solo que se decide cuando esta caliente el tema.

      1. Si, pepe. Mi tesis es que no hay modo de vincular delito con inseguridad, porque el delito es cuantificable, y «la inseguridad» no lo es. Y que si esta última fuera cuantificable (p.e., información sobre delitos/día) es demasiado baja respecto de los números reales.

        Pero quizás debiera haberle agregado el hallazgo de Balvanera, separando el problema de la inseguridad del tema de la inseguridad.

        (1) http://centroizquierda.blogspot.com/2008/10/inseguridad-y-delito-lo-sospech-desde.html

  24. tema «seguridad/inseguridad» (o «la vaca»)

    ¿Todos estamos inseguros? o ¿todos nos sentimos inseguros?, el campo porque dice que no tiene precios a futuro, los adinerados porque les roban y los matan, los pobres porque se mueren de hambre y falta de atención o porque los mata la policía o algún vecino, los narcos porque los persiguen en el mundo, los consumidores porque los cagan las empresas, las niñ@s porque l@s atrapan desde internet para prostituirl@s, el paco que mata nuestros chicos, los patovicas matan en los boliches, los dueños de los boliches queman chicos, los automovilistas pisan gente como cucarachas, los que comemos hormonas+transgénicos+cancerígenos, los celulares que te dan cáncer de cerebro (yo lo tengo hace rato), los exportadores porque bajaron los precios internacionales, los constructores porque los exportadores no traen plata (je), las mujeres porque nos matan como moscas, los gay porque padecen similares problemas a los que padecen las mujeres, porque nos excedemos todos y cada uno en distintas cosas, porque porque porque …

    ¿Existe «seguridad absoluta»? (o verdad absoluta)

    Para qué, en qué y porqué queremos seguridad …

    1. No entiendo su punto. ¿Adónde quiere ir? ¿Pretende que todo es ilusión? Proclama usted acaso una suerte de renuncia radical: todo fue y será una porquería, etc. Vale, estoy de acuerdo, las cosas nunca han sido fáciles, no hay una solución absoluta para los problemas del ser humano, no hay posibilidad de alcanzar un paraiso en la tierra, de acuerdo, ¿Entonces, qué hacemos? ¿Nos sentamos a ver pasar los feretros, nos convertimos en víctimas, verdugos o espectadores de esta feria de vanidades, esta ciclo de nacimientos y muertes sin sentido? En fin, ¿diganos si apunta en esa dirección?

      1. no. nada de eso.

        No es una ilusión sino una construcción de valores exclusivos, por la exclusividad y lo expulsivo, y sí pienso que cada vez somos más los excluídos, te diría que el florista de la Su es un excluído que a ella le despertaba «ternura» y el tipo iba y le ponía flores a la sarta de boludeces (a mi entender) a las que ella se dedica.

        Nada es una ilusión, está ahí, es, es generado, sostenido o repudiado, manipulado o usado.

        No es un boom aislado «las declaraciones de Susana», hace tiempo que venimos viendo esta formación … por eso relato de manera desordenada, como lo hacen los medios.

        A todo eso se le ha puesto un nombre «inseguridad», que oculta otras cuestiones.

        Un nuevo monstruo han creado. Un nuevo enemigo imaginario, aunque sean varios, le pusieron un solo nombre sin discriminar.

        Personalmente acuerdo en bajar los niveles de boom segurístico, disolver el enemigo imaginario y encarar las problemáticas concretas (políticas y sociales)… insisto en lo fundamental de la distribución de los medios de información en principio.

        Hace par de años masomenos convocaron en la esquina de mi barrio una reunión de vecinos por el tema «la inseguridad», que eran los menores decían, y charlamos ahí entre los vecinos, realmente no me había llegado lo que pasaba (un par de casos de robos de bici entre chicos y amedrentamientos), la propuesta era llamarse entre los vecinos y uno batió «nos juntamos le damos una paliza y lo dejamos ahí tirado, nadie se entera», lo paré en seco contestando que no había asistido a esa reunión para formar un «comando parapolicial golpeadores de menores», bueno quedamos en darnos los teléfonos y realizar una reunión con el comisario de la zona, a la que no pude asistir pero me dijeron que el comisario les dio una clase contra la justicia por mano propia, etc. Resulta que en todo este tiempo no pasó mas nada … ¿como era la cuestión tan grave? había convocado un concejal (o candidato)que fue trajeado a la reunión y ni pudo abrir la boca casi, ni quise averiguar quién carajo era. Ahí quedó, disuelto el asunto.

        En panamá las encuestas dieron como ganadora «la inseguridad» dijo la CNN, por ej. … mas clarito echale agua, al vino no, por favor …

        bue … no soy ordenada …

        Saludos

  25. Yo no ne la quiero dar de que caminé la vida por todos lados ni mucho menos. Pero yo vivo rodeado de villas para los cuatros costados. Conozco y he tratado y trato constantemente con lo que se denominaría «negros de mierda» por aquellos que sostienen que el color de piel es generador de maldad y violencia. Muchachos, no jodan más. En serio. No les importa nada, les chupa un huevo, les calienta tres pendorchas, que haya pena de muerte o no, que por asesinato te den de 8 a 25 años o de 40 a 1500. No tienen idea de lo que es un código penal. No saben si los van a agarrar si se mandan alguna. Si van a bailar y se quieren agarrar a trompadas lo hacen y ya, no le tienen miedo a que un patovica les haga un agujero en el estomago de una trompada. No tienen empacho en cometer la ridiculez de agarrarse a trompadas con personal de seguridad si la situación «se pone peluda». NO LES IMPORTA NADA. Entonces la ecuación no pasa por aniquilarlos. Porque van a nacer atrás de ellos otros que vivan su misma historia de vida y tampoco les vaya a importar nada un carajo. La solución pasa por llegar a ellos y hacer que les importe algo, lo que sea. Que no les de lo mismo morirse o no. Que no les de lo mismo estar adentro si tienen la desgracia de ser de los pocos que son condenados. Total afuera no hay nada que valga la pena. Amenazandolos con matarlos, unicamente obtendremos una risotada como respuesta de su parte. Y los que vengan atrás, seguirán igual. Esto no quiere decir que no castiguemos eh. Nada de eso. Pero no pretendamos que estaremos solucionando algo castigando. Es simplemente eso, un castigo. Al monstruo se le gana por otro lado.

    1. es cierto pablo, cuando dicen que «esto es joda», se piensan que los que salen a chorear para comprar paco o lo que sea dicen «vamos total, la legislacion penal es blanda»?

      1. O salen y dicen «vamos vamos q todavía tengo proceso pendiente y si me agarran con este no caigo en reincidencia y me morigeran la condena ademas puedo pedir la condicional pq el art. 2342344234 inc e dice q si tengo proceso pendiente la puedo pedir por otra detencion». por dios…

    2. Justamente. Al monstruo se lo combate con inclusión, trabajo , salud y educación. Pavadas, no?
      Cuando te tienen atrás del punto de la mira y les ves las caras, entendés que ni la vida de ellos ni la tuya les importa un bledo.
      Los Nadies, que no valen ni la bala que los mata, Galeano dixit.

      1. Toda la vida se la pasan banalizando a la educacion a la pobreza y a todas las variables sociales como si se tratara de pavadas, de cosas q no van a solucionar nada, como si con eso uno intentara justificar y no buscar su génesis en fín enmarañan el debte bastante bien.

    3. Ni tan bueno, ni nada de obvio. Comparto sí y me parece importante: «La solución pasa por llegar a ellos y hacer que les importe algo, lo que sea. Que no les de lo mismo morirse o no.»
      Ahora bien sin la necesidad de basarse en estadísticas cualquiera debe saber que por lo general las personas que cometen actividades delictivas y más aun, las que generan particularmente un más fuerte rechazo acorde a los valores más fuertemente compartidos, no son personas que al primer atraco en su vida salen con un fierro y matan una persona, agreden una anciana, y tantas otras situaciones que requieren y generan a su vez fuertes corrientes morales de opinión en sentido contrario, sino que el acometimiento de las mismas son producto de un acomodamiento en el mundo delictivo, a sus leyes de funcionamiento y a la estabilidad en el mismo.
      Para no parecer muy académico, voy a intentar explicarme en base a situaciones más concretas. La mayoría desembocan en ello acorde a una vida de reincidencias que se va desarrollando como una bola de nieve que cuanto más grande más destrozos puede causar. Las personas que se exponen como señala el comentarista no necesitan conocer un código penal o tener una conciencia acabada del riesgo a su integridad física y mental cuando lo hacen para acomodarse las reglas del mundo en que interactuan. No es lo mismo que te saquen la ficha en un reconocimiento o no, que tengas testigos que puedan declara en tu contra, que el guardacarcel diga que entraste por violación o por asaltar una estación de servicio, que te saquen la visita, vino de por medio en el barrio que un año adentro.
      El debate sobre la probidad o no de la pena de muerte (que no es el tema del post) carece de sentido en la sociedad en que vivimos imagínense un plebiscito al respecto. Como le respondí a otro comentarista, aunque si bien es cierto y debo reconocer que cada vez más en ciertas regiones sociales donde fermenta la anomia social acorde a la desaparición del Estado (salvo por cuestiones electorales del equipo político de administración gubernamental) uno se acostumbra a escuchar afirmaciones del tipo “en el barrio o sos tranza o sos chorro”, eso no implica que el delincuente no forme parte a su vez de redes familiares o sociales más amplias.
      En el caso de Cuba o Irán (al que si quieren pueden agregar Mauritania, Burkina Faso o el que se les cante), mal que nos pese están dadas las condiciones sociales por las cuales la pena de muerte tiene otra receptividad social. El cubano por ej. sale a la calle todos los días pensando en que lo poco que tiene y la libertad de su pueblo, puede verse en riesgo constantemente por la amenaza quintuagenaria de los traidores a la revolución. En estas condiciones donde lo que se defiende día a día a costa del sacrificio del pueblo entero es la libertad (así entendida) del pueblo, y no necesariamente la de apropiarme de aquello que legítimamente obtengo con el producto de mi trabajo, circular y comerciar libremente (lo que en ninguna forma digo que este mal), es casi de maduro que la idea de individuo o la centralidad de la misma a la que nosotros con el moderno capitalismo de mercado estamos acostumbrados opere de otra manera. En sociedades como la nuestra por tanto la aplicación de la pena de muerte o el acrecentamiento de la legislación penal implica una muy fuerte contradicción de principios con terribles correlatos en la realidad como podemos ver en los sociopatas norteamericanos o europeos.

  26. Acabo de advertir que se sumó TINELLI a la tendencia auspiciada por SUSANA GIMENEZ de aplicar la pena de muerte como respuesta al aumento de los delitos violentos.

    No conozco el CV de estas figuras pero sì que llegan a un elevadísimo porcentaje de la poblaciòn que no solo no reacciona con rechazo a esta propuesta de implantar la pena de muerte, sino que hasta puede, con la legitimaciòn que dos personajes asì encarnan intrinsecamente, pensar que no serìa una mala soluciòn, embarcàndose en la tendencia de que algo hay que hacer y esto de la muerte es mucho màs expeditivo que ponerse a pensar en donde se encuentra el origen del incremento de la inseguridad.

    La inseguridad llegò para quedarse, tanto como tiene de profundo el conjunto de variables que la producen.

    El aumento constante de la desigualdad social, generador de escalas de ingresos que van desde niveles irrisorios y miserables hasta la opulencia obscena y que se traduce en que la salud, la educacion, la higiene, la nutriciòn, la vivienda digna, el entretenimiento, el trabajo decoroso y tantos otros tòpicos son privilegios para unos pocos y privaciòn relativa o absoluta para la mayorìa, es la conocida raiz del aumento de la criminalidad.

    No hay un perfil delictivo que responda a paràmetros biològicos o naturistas. El indicador bàsico de este sujeto gira alrededor de la falta de sometimiento a reglas que no ha conformado, a la necesidad de incluirse como se pueda en un sistema que no sòlo lo excluye, sino que le muestra de modo ostensible todo aquello a lo que no puede acceder.

    En los mismos medios donde SUSANA GIMENEZ y MARCELO TINELLI agitan sus mensajes ante millones de espectadores, se publicitan una masa diversa de artìculos de consumo que no resultan facilmente accesibles para esos mismos televidentes que en muchos casos solo pueden hacer un paseo dominguero por los hipermercados o shoppings, para ver como son o como otros los compran.

    Como dice TInelli, te pueden robar por un pancho. Es verdad y la exclusiòn social es eso. Al mundo le sobran recursos para que haya panchos para todos. Solo hace falta mejorar la distribuciòn de lo que hay.

    Dice tambièn este animador que el paga todos los impuestos. No hay porque dudar de que asì sea, pero serìa bueno tener en cuenta que la mayor parte de los grandes empresarios, de los ricos por decirlo de una manera tosca pero simple, no paga todos, sino que evade bastante . Entre ellos, Susana Gimenez, que se comprò un lujoso auto importado y estuvo procesada penalmente por evadir el pago del tributo, simulando la compra de un discapacitado. Y que si bien no habría que haberla victimizado con la pena de muerte que pide, se habrìa merecido algunos años de càrcel de los que se salvò por los favores del poder de turno.

    Las sociedades con mayor nivel de seguridad cìvil y menor ìndice delicuencial, registran los mejores coeficientes de igualdad social.

    El resto es terrorismo mediàtico.

  27. http://lapoliticaonline.com/noticias/val/55244/las-trabas-de-marambio-para-que-los-presos-no-puedan-estudiar.html

    De estas cosas no habla Susana, ni Tinelli, ni nadie. De la situación carcelaria, nada. De las condiciones de hacinamiento y tortura sistemática contra los presos, que denunció el Informe 2008 de Procuración, ni una palabra. Ya ni siquiera de la posibilidad de que los detenidos puedan estudiar carreras, con el UBA XXII. Eso también es inseguridad. Y ahí sí que el Estado «problematiza», autonomizando las esferas de lo carcelario y dejándola en manos de efectivos preparados para situaciones de violencia pero no para un detenido capaz de presentar por sí mismo un habeas corpus.

      1. Entonces decile a los medios que no le pongan un micrófono a quien no corresponde, nada es casual, hacé responsable a quienes parecen «los intocables» … son irresponsables como comunicadores sociales, irresponsables, irresponsables, aunque no existan leyes al respecto.

        Saludos

  28. Bueno, fíjense que dentro de este discurso represivo el que los presos sufran en las cárceles se toma como algo positivo, y es un lugar común crritcar los pocos aportes del Estado para mejorar la situación de los presos, con un criterio de utilidad que dice que mejor que esa plata se vaya para otro lado. Digamos que está bien delimitado que esas personas, los pobres, los delincuentes digamos, no son ni humanos (ni derechos ni humanios si quieren) ni gozan de derechos civiles.

  29. La venganza es un asunto entre privados (y hacete cargo después….). El Estado solo puede administrar justicia.
    Los que le reclamann al Estados ser ejecutor de la venganza son, basicamente, cagones.
    Aunque también estará el que reclama pena de muerte para aquietar sus propios e inconcientes instintos asesinos….

    1. Así es , si yo quiero matar a alguien me hago cargo, jamás voy a pedir la legalización de eso. Espero no llegar a esa instancia, pero uno nunca sabe….

    1. Por preguntar lo mismo me reportaron un comentario en el foro de LNOL y el moderador lo censuró.Parece que de eso no se habla…

  30. Leer «Politica y delito», del aleman Ensenzberger, extraordinario libro pero dificil de conseguir, especialmente para este tema el articulo «Reflexiones frente a una celda de cristal», en el que explica la fascinacion que ejerce en el pueblo la pena de muerte.

  31. Hace unos años en los countries era «cool» bailar con «los pibes chorros», y en un «gran hermano» uno de los candidatos a ganador era un pibe que había estado en cana por chorear, también era un éxito Tumberos.

  32. Lo que no se preguntan todos estos individuos que pertenecen a esa clase media que parece querer ser lo que no son que hay en lugar de este gobierno. Cual es el proyecto de pais que nos ofrece la oposicion, porque hasta ahora solo es embanderarse en estar en contra de.. y nada mas.
    Esa oposicion sabe cuales seran sus reditos economicos ya que trabajan para ciertas coorporaciones nacionales y muchas internacionales. Ahora bien creeran estos taxistas que su vida va a aser mejor creera la señora burguesa que gracias a este gobierno al que critica apoyando a la oposicion va a tener una mejor jubilacion, esa jubilacion que obtuvo sin haber aportado en su vida
    Vuelvo a la pregunta SABRA QUE ES LO QUE HAY DEL OTRO LADO
    PD EL AÑO PASADO ESTUVE EN BS AS CUANDO LO SACARON DE LA RUTA AL DESDENTADO Y UN TACHERO Y SIN QUERER HACER RACISMO DE PIEL OSCURA E INMIGRANTE TOCABA BOCINA EN SU TAXI EN LA ZONA PAQUETA Y LE DIGO QUE TOCAS BOCINA O A VOS TE VA A DEFENDER EL CAMPO SE QUEDO MUDO SIN RESPUESTA

    ddrosario

  33. Independientemente de que el post apunta a lo simbólico (o a lo sociológico) más que a lo jurídico, creo necesario aclarar que:

    1 – Nuestro país es firmante del Pacto de San José de Costa Rica, el cual en su art. 4.3. expresa que «No se restablecerá la pena de muerte en los Estados que la han abolido»
    2 – Este pacto, conforme el art. 75 inc. 22 de la Constitución Nacional tiene «jerarquía constitucional»

    Ergo, para imponer la pena de muerte habría que, mínimamente, reformar la Constitución Nacional (y aun así sería muy dudoso que la ley que la implementara fuera constitucional aun sin este artículo 75 inc. 22).
    O sea: olvídense de esa posibilidad.

  34. pensando sobre lo que dice Guillermo, el problema está en esa «habilitación civil» (no legal) a través de los medios.

    Más arriba relaté algo sobre «una clase contra la justicia por mano propia» que dio un comisario. Qué pasará si esto sigue armandose cual globo mediático incontenible ¿qué hará ese mismo comisario?.

    Porque hay que reconocer que hace rato que vienen insistiendo, recuerdo que en las revueltas asambleas post 2001, algunos sectores comenzaron a insistir con este tema, ya desde ahí, y vuelta con axel, y vuelta y vuelta, y gente que se movilizó con el campo batió cosas parecidas, y gente que se movilizó contra la nacion. de las afjp también batió la misma consigna.

    «de la seguridad de la vida (de algunos) a las seguridad de las inversiones (de algunos)» podríamos titularlo …

    saludos

  35. No le creo a Mariano T. No, no le creo. SOy del Conurbano aunque viva en el Primer Cordón. Pero creo que la ideología de la mano dura está presente en todos los ámbitos sociales. No sólo los ricachones y los pobres lo haen suyo.

    Puedo afirmar sin temor que votntes de partidos progresistas y hasta de izquierda piensan de esa forma. El principal error que cometemos es el creernos fuera de ese sentimiento represivo generalizado en la población.

    Por otra parte, la hipótesis de Mariano dice que son los pobres los que más sufren el delito, coincido. Más son ellos los que más sufren el desempeño represivo policial e institucional. Por lo que pueden odiar a los que delinquen, pero no confían ciegamente en la cana como Susana y Sandro.

  36. #

    No deberíamos asombrarnos nada: ni de los dichos de estos boludos, ni de los micófonos de los medios carroña, ni del río subterráneo, ese que asoma fortalecido cuando se instala el tema.
    La consecuencia de un esquema preciso: primero, aterrorizaron los milicos, después desilusionó la democracia , los noventa y el menemismo nos alienó con pizza y champán, con Madonna, con el golf y el shopping. Ni qué hablar de los ideales. Y este es el resultado: se prenden de la teta de una boluda , mañana será de cualquier otra , sin medir la atrocidad de lo que apoyan.
    Hay una genración y una clase que fue vaciada de contenido, no educada . Y hay quienes se aprovechan de eso.

  37. Estoy en contra de la pena de muerte por un tema filosófico. También m parecería bien todo esfuerzo de inclusión sobre la niñez y adolescencia en riesgo.
    Pero sinceramente no tengo ninguna empatía con los chorros y asesinos como tienen algunos acá.
    Como la carcel no regenera a nadie, las condenas deberían ser más largas y cumplirse. Y se debería construir una celda por cada chorro en actividad(y laburar para llenarla), y no esperar que larguen a uno para encerrar a otrs.Esa rotación cuesta cientos de muertos inocentes por año.
    Las condiciones de vida en la carcel no son lo más importante, más vale gastar en la niñez marginada. Lo importante es que no salgan de la carcel caminando, sino con bastón, o con los pies para adelante.

  38. Obviamente hay una búsqueda de correr el vértice de toda la problemática argentina hacia la inseguridad (y hacia la derecha).
    La derecha argentina se identifica usualmente con la idea de orden.
    «En la época del proceso, pasaría lo que pasaría, pero yo podía caminar tranquilo por la calle», no es raro escuchar.
    La derecha argentina se autoconstituye en la guardiana de la seguridad y orden argentinos. Sólo falta ver cuáles son los «puntos fuertes» de las campañas electorales de los políticos de esta corriente para darse cuenta.
    Generar pánico generalizado, poner en la boca de la gente la palabra «inseguridad», y mostrarse como la persona que tiene la solución para todos estos problemas, por ser portador/a de una mano dura, es la manera de garantizarse una buena cantidad de votos.
    No dudo de la existencia de esos ríos subterráneos.

  39. Realmente muy buena la nota y tambien la polemica con los coemntarios. Quisiera agregar muchas cosas pero si me permiten casi todo lo dije en esta nota que escribí para otro blog amigo. Es un poco largo pero si tienen ganas de leerla y/o recomendarla ahi va: http://fuegoenlascallesdelmundo.blogspot.com/2009/03/noticias-por-gonzalo-tomas-perez.html
    No conozco mucho todavia del mundo bloguero, asi que espero que esto no rompa ninguna regla.Abrazos
    Gonzalo Tomás Pérez

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