¿La «sensación de inseguridad» no era kirchnerista?

Días atrás analizamos aquí mismo en la nota  “Sensación de seguridad? La verdadera criminalidad en Argentina”, el fenómeno de la criminalidad en nuestra sociedad en valores relativos en comparación con los demás países y con nuestra historia reciente; y en esa oportunidad verificamos que la realidad que muestran las cifras de la criminalidad en Argentina contrastan mucho con la percepción que tiene gran parte de la población sobre ese tema. También allí se brinda una explicación tentativa del por qué se produce esta discrepancia.
Para complementar ese informe apelaremos ahora a algunos textos relacionados con el tema extraídos de los principales medios, y veremos si corroboran o no lo postulado en esa nota sobre la seguridad o inseguridad que existe en Argentina.
Comencemos con una reflexión sobre la diferencia entre la percepción de la inseguridad y la realidad de la criminalidad, escrita por la pensadora de centro-derecha y actual columnista de La Nación, Beatriz Sarlo:
 
Tiempo presente.
En los últimos meses, los medios de comunicación informaron, entre otros, de los siguientes hechos: dos jóvenes asaltaron un supermercado, el policía de guardia quiso rendirse pero, cuando hizo entrega de su arma y credencial, fue asesinado de dos tiros en la cara; un estudiante universitario secuestró a su novia, compañera de estudios, la condujo al sótano de la facultad y allí, esgrimiendo un arma, amenazó con matarla y con matarse; en la fiesta de fin de curso de un colegio secundario privado, los guardias de seguridad de la discoteca castigaron a unos muchachos que estaban provocando a otros, la gresca se generalizó y hubo treinta heridos, algunos graves; un trío de delincuentes asaltó un banco, tomó rehenes, la policía intervino torpemente y éstos resultaron muertos; dos hombres intentaron robar una quinta y, como no encontraron nada valioso, torturaron a la dueña quemándole las manos; una pareja castigó a su hija de tres años hasta matarla y los vecinos estuvieron a punto de lincharlos; los pasajeros de un ómnibus suburbano liquidaron a garrotazos a un delincuente que intentó asaltarlos armado con un cuchillo; un ciclista le partió una botella de cerveza a una joven señora que cruzaba una avenida céntrica a las ocho de la noche, con su hijita en brazos; dos borrachos adolescentes atropellaron y dieron muerte a tres amigas, un sábado a la noche; un chico de seis años que jugaba en el pasillo de una villa miseria murió  ¿impactado por un proyectil durante un enfrentamiento entre bandas de narcos; un policía fue muerto a balazos mientras custodiaba la entrada de un banco; dos ladrones organizaron un raid por los barrios de Buenos Aires, tomaron media docena de rehenes y terminaron muertos por la policía con cuarenta tiros; un kioskero, un almacenero, un farmacéutico, un carnicero, mataron a tiros a un/unos delincuentes que quisieron asaltarlos; varios jóvenes delincuentes, en apariencia drogados, mataron a tiros a un kioskero, a un almacenero, a un farmacéutico a quienes estaban asaltando; varios delincuentes mataron a varios policías y viceversa. Todos los días hay robos, atracos, accidentes callejeros, violencia armada en las villas miserias y también en los barrios ricos; en el centro de la ciudad (…) los estudiantes secundarios son regularmente asaltados, cerca de las escuelas, por otros chicos, muchas veces conocidos de sus víctimas; después de las doce de la noche casi nadie toma un taxi por la calle temiendo ser despojado por el propio chófer.
La lista de los casos de violencia urbana es prácticamente infinita. Alimenta un sentimiento de inseguridad colectiva que se ha convertido en una pasión: la pasión del miedo como (des)organizadora de la relación con el espacio público.
Trataré de explorar las dimensiones culturales de este problema. La primera y más obvia: ni Buenos Aires ni el conurbano que la rodea son, como Caracas, Bogotá, ciudad de México o San Pablo, territorios homogéneamente violentos. Sin embargo, la violencia ha aumentado y, aunque esto no es cuantificable, tanto como la violencia ha  aumentado la sensación de inseguridad.
Esto sucedió porque la sensación de violencia no se mide en referencia a la de otras ciudades latinoamericanas, sino que se la compara con la experiencia histórica de buena parte de este siglo en Argentina. La violencia se lee en relación a las expectativas de seguridad.
Aunque la prensa dramatice la inseguridad en que viven los vecinos afluentes, sin duda es en los sectores más deteriorados de los barrios donde la delincuencia y la droga se constituyen como problemas permanentes. Es allí donde también se extiende el territorio de una policía sospechada de corrupción. Rodeando a esta ciudad transformada, el Gran Buenos Aires ofrece un patético y grotesco entramado de villas miserias y barrios pobrísimos, viejos barrios obreros consolidados donde hoy campea la desocupación y franjas enormes de nuevas urbanizaciones cerradas (los llamados country-clubs y barrios privados que son la versión tercermundista de los suburbia norteamericanos).
La violencia urbana da la idea, e impulsa la experiencia, de que el estado no puede garantizar esa paz entre los miembros de la sociedad.
La circulación y venta clandestina de armamento, la debilidad o la corrupción de las fuerzas policiales, el desorden de la represión cuando actúa excediéndose, son factores del naufragio sufrido por una sociedad que llega a sentir que el Estado ya no la sostiene. No se necesita ser filósofo de la política, para experimentar la idea de que el contrato originario (que como toda narración subsiste como mito) está fisurado y que el Estado, pese a los reclamos y pese a las intenciones de los gobernantes, no está en condiciones de hacer aquello para lo cual fue instituido.
Beatriz Sarlo
 
Esta interesante reflexión sobre la diferencia entre inseguridad y sensación sentimiento de inseguridad colectiva que ofrece Sarlo, no hace más que coincidir con el planteo de nuestra nota mencionada más arriba. Pero si esto sorprendiera al lector, mucho más lo sorprenderá saber que esta opinión de la actual columnista de La Nación fue publicada el 23 de setiembre de 2001, meses antes de la explosión del modelo de país neoliberal, por lo que su título, «Tiempo Presente», y el hecho de que fuera publicada en Clarín resulta paradójico.
Como vemos, el tema de la inseguridad ciudadana no es un problema que haya surgido en los últimos años. Más aún, como hemos demostrado en la mencionada nota, es un problema que viene de décadas, bien antes de que el kirchnerismo llegara al poder; e incluso que en esta última década ha mejorado notablemente.
 
Para completar ese análisis, repasemos lo que el mismo diario La Nación publicó hace unos años  (en base a encuestas realizadas por el Centro de Opinión Pública de la Universidad de Belgrano (Copub) entre los vecinos de Buenos Aires) sobre el mentado fenómeno de la “sensación de inseguridad” o “sentimiento de inseguridad colectiva”:
 
Los porteños consideran que el delito más frecuente es el robo, pero en segundo lugar ubican la violación, los secuestros y los homicidios, hechos ilícitos que están muy abajo en las estadísticas policiales.
«Hay una percepción inflada de estos delitos y los medios tienen mucho que ver, por ejemplo, con la violaciones y el caso denunciado en el subte [el más resonante, ocurrido en la estación Callao de la línea B]», explicó García Beaudoux.
D Adamo completó: «Hay delitos que por su naturaleza afectan más la sensibilidad, pero cuando un delito sale bastante seguido en los medios, muchas veces se recibe como si se tratara de diferentes hechos«.
Y explicó que muchos entrevistas respondieron cosas como ésta: «Yo no siento inseguridad, pero si me tengo que guiar por lo que dicen los medios, sí hay mucha inseguridad». Así, los medios actúan como un termómetro.
 
Crece la sensación de inseguridad entre los porteños. No quedan dudas de que (…) los ciudadanos de la Capital se sienten más desguarnecidos frente al delito. «Se registra una mayor sensación de inseguridad que antes. En los últimos meses, hubo algunos casos muy renombrados en los medios, con delitos del narcotráfico, o el crimen de los tres policías en La Plata, que llamaron la atención de la opinión pública y eso hace que se sienta que se  incrementó el delito«, explica Virginia García Beaudoux, coordinadora del Copub.
Pero la experta aclara: «La percepción de inseguridad no tiene que ver directamente con el aumento efectivo del delito -aunque se relaciona con ello- sino que tiene que ver con lo que percibe a través de ciertos casos más llamativos».
«En otras épocas eran otros los delitos; hace dos años, los encuestados mencionaban las violaciones, por la cobertura informativa que hubo entonces de varios casos en poco tiempo, y luego se hablaba del secuestro», explicó la especialista.
Tal vez por tratarse del delito más grave, el homicidio aparece en segundo lugar en las percepciones, pero no se corresponde esto con la realidad. En la ciudad hubo 116 homicidios en 2007, lo que da una tasa cada 100.000 habitantes de 3,83, sensiblemente más baja que la de Nueva York, que llega a 6. De hecho, el 70 por ciento de los delitos recientes más recordados por la gente en la actualidad se concentran en dos casos: el triple crimen de los jóvenes empresarios en General Rodríguez y la familia asesinada en Campana, a raíz de una venganza.
«Esta vez hay más percepción de la necesidad de penas más duras, pero no están tan disconformes con las penas vigentes; creo que se confunde con la sensación de que muchos delitos quedan impunes. Muchos dicen que entran por una puerta y salen por la otra, pero no saben si por el reducido valor de las penas o porque las personas no son acusadas debidamente por los delitos que cometen«, explica García Beaudoux.
 
 
 

Pero no sólo en la década kirchnerista el diario La Nación hablaba del tema de la «sensación de inseguridad», sino que también lo hacía en la década anterior, tiempos de la Alianza y en pleno menemismo. Hagamos un breve repaso de esas notas y editoriales:

 

Lunes 14 de agosto de 2000.

El ministro del Interior, Federico Storani, convocará a todos los gobernadores a una reunión del Consejo Nacional de Seguridad y los invitará a adherir a un plan nacional de prevención del delito.

En los próximos días, el ministro de Justicia, Ricardo Gil Lavedra, se reunirá con Storani para ultimar los detalles de un borrador de ese plan, que intenta dar una respuesta a la ola de delitos callejeros que se expande por todo el país y a la creciente sensación de inseguridad de la población.

El 31,5% de los porteños respondió haber sido víctima de algún delito contra la propiedad -asaltos, robos, hurtos-, mientras que ese porcentaje llegó a 36,8 puntos en el Gran Buenos Aires. En Rosario, la cifra es de 41%. Y en la Capital, durante los últimos cinco años se triplicó la tasa de robos con armas.

Lo que preocupa a las autoridades es que perdure la alta tasa de inseguridad: el 84% de los porteños y de los bonaerenses consultados dijeron que temían ser víctimas de algún delito.

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07 de enero de 1999.

Inseguridad: las autoridades no se ponen de acuerdo.

(…) el gobernador de la provincia, Eduardo Duhalde, está serio, si se quiere distante: habla de la ola delictiva en la provincia que gobierna.

Arranca con una frase estructurada. «Hay una sensación de inseguridad que es tan grave como la inseguridad misma. De nada vale que le diga que hoy hace 25º si su sensación térmica es de 0º», remarca.

-Pero la gente tiene miedo porque la asaltan o la matan mientras va a tomar un colectivo.

-Es que mientras no tengan una sensación de tranquilidad, van a seguir teniendo miedo. Lo que se requiere es un cambio de la sensación, que se va a producir cuando bajen efectivamente o en forma permanente los índices delictivos.

-Al hablar de índices, ¿no percibe usted que la gente no les cree cuando dicen que bajó la delincuencia?

-Mire, espero el regreso de Arslanian para firmar un decreto a través del cual, mes tras mes, vamos a publicar oficialmente los índices delictivos del ministerio, pero chequeados con la Corte. Hablaremos, eso sí, de delitos que no tienen cifras ocultas, como los homicidios dolosos.

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13 de enero de 1998.

DÍGASE cuanto se diga para tratar de atemperarla, los porteños se sienten agobiados por la permanente sensación de inseguridad. Los paños tibios que tratan de prescribirles para remediarla no surten efecto. Su preocupación no se funda en las estadísticas, sino en datos concretos. Ya no quedan lugares en que un porteño se pueda considerar a salvo de las codiciosas apetencias de los amigos de lo ajeno.

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07 de abril de 1997.

Editorial

La comunidad se siente insegura.

Nuevas y osadas modalidades del delito contribuyen a exacerbar la sensación de desprotección que embarga a la comunidad. Una de ellas son los asaltos a los pasajeros de taxis que, por otra parte, no son exclusiva obra de una mafia enquistada en el Aeroparque, como erróneamente se suele suponer, ni tampoco se limitan al Centro, los ámbitos de la zona bancaria y los barrios de alto poder adquisitivo, pues los asaltantes sobre ruedas llevan a cabo sus fechorías en casi toda la ciudad.

Si llegase a subsistir «sin soluciones» la sensación de inseguridad que afecta a gran parte de la población metropolitana, el temor se podría convertir en pánico.

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05 de mayo de 1997.

Encuesta en el Gran Buenos Aires para La Nación.

Delito y desempleo son los males más temidos.

Uno de cada cuatro habitantes del Gran Buenos Aires sufrió algún robo o asalto, entre otros delitos, en los últimos seis meses.

El dato surge claramente de una encuesta realizada para La Nación por Graciela Römer y Asociados y seguramente explica por qué el 64% de los residentes en el conurbano se siente poco o nada seguro cuando camina por las calles de sus barrios.

En ese sentido, y acorde con el espacio cada vez más amplio que los hechos criminales ocupan en la prensa, el 84 por ciento de los votantes sostuvo que aumentó la violencia en la calle en los últimos tiempos.

Pero más aún:el 85 por ciento expresó que la violencia no sólo creció en el Gran Buenos Aires sino en toda la sociedad en general.

«De noche casi no se ven patrulleros. Esto no puede seguir así. Para que te des una idea de como está la situación acá, sólo tenés que ir para el lado de Fuerte Apache. Allá tienen más poder que la policía. Definitivamente el conurbano es muy inseguro«, sentenció.

Elda Díaz, de 48 años, dueña de quiosco de Caseros, coincidió plenamente con Rodríguez: «Ya nos robaron 5 o 6 veces en menos de 4 meses. Nosotros mantenemos la puerta cerrada y atendemos por la ventanilla, pero es lo mismo que vos tomes precauciones o no. Vienen a cualquier hora, caminando, en auto o en moto.

«Ya no me siento segura -comentó parapetada detrás del mostrador-. Me parece que debería haber más efectivos. No se puede vivir pensando en que a uno lo van a asaltar».

«En la provincia se respira miedo«, comentó Cynthia Volmer, una encuestadora de 21 años que realiza su trabajo por la zona oeste, concentrándose Ramos Mejía. De acuerdo con la joven, los habitantes en el Conurbano son muy cautelosos y no hablan con desconocidos.

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24 de septiembre de 1996.

Editorial

Varios hechos delictivos -entre ellos, el asesinato a sangre fría del farmacéutico que sorprendió a los asaltantes de su esposa, del que fueron culpados cuatro menores de edad que vivían en la villa de emergencia La Cava, de San Isidro-, ha traído a colación, una vez más, el recurrente y crítico cuestionamiento por la subsistencia de esos asentamientos. Allí mismo, pocos días después, fueron detenidos otros delincuentes, en un caso que revela la sistemática explotación de menores para cometer graves delitos.

Esa consideración se ha agravado por la proliferación explosiva de delitos -desde ínfimas raterías hasta crímenes aberrantes-, desencadenante de una evidente sensación de inseguridad que ha exacerbado las prevenciones -muchas veces injustas- de buena parte de la comunidad respecto de las villas de emergencia.

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30 de noviembre de 1997.

LA CRISIS DE LA SEGURIDAD

El país del miedo.

El fantasma del robo, la violencia y la muerte electriza a la Argentina.

Hay gente que sólo entra en los cajeros automáticos de avenidas iluminadas y con un amigo de guardia en la puerta. Hay quienes desconfían de los taxistas, de los jóvenes de la esquina. Hay consorcios que cambian las llaves de la puerta de calle hasta dos veces por mes. Hay countries y barrios privados que cobran más caro porque tienen bajada directa de la autopista. Hay miedo en la calle. El fantasma del robo y la violencia sopla en la nuca de la ciudad, suelta sus perros de caza en los suburbios y aúlla en las noches sin sueño de quienes vuelven a su casa en barrios poco iluminados. Algunos medios de comunicación, el Gobierno, la Policía Federal y hasta algunos jueces lo exhiben, lo utilizan, lo amenazan de muerte.

Escéptica en cuanto a los resultados, la sociedad ha optado por privatizar la seguridad. Aquellos que pueden pagar se recluyen en barrios privados -cuyos principales clientes son jóvenes de 25 a 35 años con hijos pequeños- y countries, u obtienen servicios adicionales de la Policía, como la custodia de las bajadas de la Autopista del Sol, que conduce a los suburbios del norte de la ciudad.


CLIMAS

Hasta el año pasado, la inseguridad no existía en el discurso oficial. Las estadísticas de la Policía Federal marcaban un descenso del delito y su jefe, hoy secretario de Seguridad Interior, comisario general Adrián Pelacchi, advertía que se difundía un mito sobre Buenos Aires como «ciudad violenta», que no se compadecía con la realidad.

Bastaba comparar los 1500 homicidios anuales de Nueva York -enarbolados como un éxito frente a los 2600 del pasado- con los 132 de Buenos Aires en ese 1996 para respirar aliviados; más si se tenía en cuenta que un 68,93 por ciento de los casos había sido resuelto.

Esa idea no desapareció. Carlos Brown, secretario de Seguridad bonaerense, acepta pensar que la actual sensación de inseguridad responde a una «histeria colectiva» alimentada por «algunos medios de comunicación que hacen negocios y obtienen rentabilidad con la dramatización» de delitos, condenas y hasta ejecuciones de la pena de muerte.

Para Brown, no hay un aumento de delitos graves que permita pensar en la necesidad de mayores castigos. El malestar social, según él, nace de la persistencia de los delitos menores -arrebatos, hurtos, pequeños robos-, instigados por causas «económicas, sociales y culturales».

La Federal había tomado con frialdad profesional la ola de asaltos armados a restaurantes en pleno centro de Buenos Aires del año anterior. Pero la muerte de uno de los suyos era un desafío imposible de admitir.

También un sector del Poder Judicial encontró allí respuestas a su ineficiencia, que ha llevado a una situación en la que, de acuerdo con cifras del Ministerio de Justicia, de cada 200 delitos se denuncian 60, se identifica a sólo 12 sospechosos, se condena apenas a seis y va a la cárcel sólo uno.

En primer lugar, jóvenes de dieciocho a veinte años, sumergidos en la marginación económica, social y cultural, y estimulados -a falta de mejor opción- por alcohol y drogas diversas.

«No dan valor a su propia vida ni a la ajena«, reflexiona el secretario general de la Federal, comisario mayor Angel Ciancio.

Esta franja explicaría los simulacros de fusilamiento sufridos por personas asaltadas en una esquina, los asesinatos de víctimas que ni siquiera se resistían, o la revancha sangrienta contra quienes, fatalmente, cometieron el error de no llevar dinero suficiente para ser robados con provecho.

Nota completa

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Entonces, visto y considerando que se afirma en La Nación que “la percepción de inseguridad no tiene que ver directamente con el aumento efectivo del delito y que Beatriz Sarlo señala en su nota en Clarín que la sensación de violencia no se mide en referencia a la de otras ciudades latinoamericanas, sino que se la compara con la experiencia histórica de buena parte de este siglo en Argentina» , nos disponemos aquí a traer a nuestra memoria algunos ejemplos de los casos de inseguridad ciudadana que se publicaban en aquellos años y que refuerzan lo demostrado en nuestra citada nota anterior.

Para no apabullar con todos los casos, en este breve refresca-memoria sólo tomaremos algunos publicados entre 1997 y 2002, y no en diarios catalogados como amarillistas sino (una vez más) sólo en los diarios La Nación y Clarín.

Pasemos ya, pues, a los hechos publicados en esos años:


Año 1997


Duhalde propuso la pena de muerte.

Delitos graves: el gobernador instaló la idea de aplicar la pena capital en violaciones y secuestros seguidos de muerte.


Durante el año 1997 en la Argentina, se robaron 17 automóviles por hora, una cifra que revela «un crecimiento exponencial» en este tipo de delitos.

 

Detienen a los presuntos ladrones de banco que asesinaron a un policía

Fueron atrapados un hombre y una pareja, que iba con su hijo de 2 años

 

* INSEGURIDAD: DISPARO CONTRA DOS MUCHACHOS QUE ASALTABAN A UNA JOVEN Y A SU HIJA

Una mujer de 64 años fue quien mató a un ladrón.

La Policía secuestró el revólver calibre 38 con el que tiró desde una ventana



Año 1998


* La ola de inseguridad.

Roban hasta en puestos de peaje y cementerios

Inusual: una banda asaltó un blindado en la necrópolis de Flores y se llevó más de 250.000 pesos.

MATAN A UN JUBILADO PARA ROBARLE DOS PESOS

SECUESTRAN Y ACRIBILLAN

OTRA VEZ SE ELIGEN RESTAURANTES COMO

 

Simulaban ser taxistas y robaban a sus pasajeros.

Cuatro sujetos fueron detenidos en pleno microcentro.

Fuentes policiales aseguraron a La Nación que se trata de los responsables de una seguidilla de robos en la modalidad conocida como salidera de bancos cometidos durante el mes en curso.

 

Roban un banco y toman rehenes

Fuga: tres de los siete delincuentes fueron atrapados; uno de ellos se escondió en el placard de la casa de una mujer de 74 años que en ningún momento lo supo.

 

* Temor en la zona norte de la Capital por la inseguridad

Los vecinos denuncian una ola de delitos

Sienten que los delincuentes pueden sorprenderlos en cualquier momento y lugar: cuando corren por los bosques de Palermo, entran en un comercio o a comer en un restaurante, y hasta cuando caminan por la calle.

 

Armas de las fuerzas militares y policiales en manos criminales

En la Argentina y en las favelas cariocas.

 Los secuestros de Pablo Belluscio, Mirta Fernández, Facundo Laffont, Rubén Astrada, Juan Carlos Cirelli, Christian Riquelme, por nombrar sólo algunos, tienen un elemento en común: los delincuentes, a la hora de privar de la libertad a sus víctimas, portaban fusiles FAL, el fusil automático liviano de origen belga producido en el país por Fabricaciones Militares.

 

* INSEGURIDAD: UNA MODALIDAD QUE SE REPITE

Una banda asaltó un restorán en el Bajo Belgrano

 

Crece el mercado negro de armas en la Argentina

El Ministerio de Defensa y la Policía Federal calculan que hay un millón de armas ilegales sólo en la Capital y el conurbano.

Esto da que hay un arma trucha cada diez personas.


* INSEGURIDAD: CUATRO CUADRAS A LOS TIROS ENTRE POLICÍAS Y LADRONES

Una persecución alteró la tranquilidad de Recoleta

Empezó en Callao y Quintana y terminó frente al cementerio

Iban en un auto robado.


* INSEGURIDAD: TRES HORAS DE TERROR PARA UN JOVEN EN LA PLATA

Lo secuestran en su auto y lo llevan a asaltar varios negocios

Lo metieron en su auto y lo encapucharon.


* INSEGURIDAD: PRIMERO MATARON A UNA PAREJA Y UN RATO DESPUÉS A UN HOMBRE

Salen a robar autos y terminan asesinando a tres personas

Fue el martes a la noche, en el Oeste del Gran Buenos Aires

En el primer caso, un nene de 5 años que iba con sus padres en una camioneta se salvó por milagro.


* GATILLARON APUNTÁNDOLE A LA CABEZA, PERO EL DISPARO NO SALIO

Dos chicos asaltan una iglesia y casi matan a un sacerdote

Los ladrones tenían entre 15 y 17 años

Entraron diciendo que la madre estaba enferma y que precisaban ayuda

El párroco dijo que se salvó por un milagro de Dios

 

* INSEGURIDAD: UN FIN DE SEMANA SANGRIENTO

Nadie detiene la ola de asaltos violentos en el Gran Buenos Aires

Entre el sábado y el domingo hubo al menos siete robos con muertos y heridos


* INSEGURIDAD: LO AMENAZARON CON UNA ESCOPETA Y SE DEFENDIO A TIROS

Un excombatiente mató a un joven que intentó asaltarlo

Ocurrió en Temperley

 

* Cuando lo hace de noche siempre va armado
Un empresario mató a un ladrón e hirió a otros dos

Fue ayer a la mañana en Ituzaingó.

Dos hombres y una mujer se le subieron al auto.

Querían que volviera a su casa para robar allí.


* INSEGURIDAD: CUATRO JOVENES BIEN VESTIDOS EN PALERMO

Ladrones audaces: para asaltar un pub secuestran a tres serenos

Lo hicieron para evitar que los vieran y llamaran a la Policía.

Luego robaron la plata de la caja del pub y de unos 25 clientes y escaparon.

 

* INSEGURIDAD: UNA VECINA INDIGNADA EN BENAVIDEZ

Le vaciaron la casa y quemó la casilla del supuesto ladrón

 

Más seguridad, ya.

La opresiva sensación de inseguridad que impera hoy en el país, provocada por el impune acrecentamiento de la violencia delictiva, parece agravarse día tras día.


Por temor, caen los viajes en taxi.

La ola de asaltos redujo hasta en un 50% el gesto de levantar un brazo para parar un auto; se los contrata más por teléfono.

 

 

Año 1999

Balean a un comisario en un tiroteo en Beccar

Con otros 5 policías recorría la zona investigando un robo a la Municipalidad de San Isidro Vio a tres hombres en un auto que cargaban varias armas. Se acercó y lo hirieron a tiros.


* INSEGURIDAD: SECUESTRO EN ZARATE

Desvalijan una casa y se llevan como rehén a toda la familia

Fueron dos ladrones, que finalmente escaparon.

 

* INSEGURIDAD: OCURRIÓ EN CONSTITUCIÓN Y EL CONURBANO

En un día, matan a quemarropa a tres policías

Uno quiso evitar un asalto en Pablo Nogués. Los otros, ni siquiera alcanzaron a intervenir

Pero los reconocieron y los asesinaron.

 

* INSEGURIDAD: JOSE C. PAZ

Asesinan a un remisero

 

Están presos dos chicos por el asesinato de un arquitecto

Tienen 15 y 17 años.

 

* INSEGURIDAD: SE RESISTIÓ A UN ROBO

Lo balean en la puerta de la casa

Fue en Banfield. Tres hombres interceptaron a un joven cuando caminaba cerca de su casa

Lo obligaron a subir a un auto y guiarlos hasta su casa. En la puerta estaba el padre del chico. Los enfrentó y lo balearon.

 

* INSEGURIDAD: ANTECEDENTES

Una larga lista de hechos violentos

 

* INSEGURIDAD: PRESIDE LA COMISIÓN DE SEGURIDAD DE LA CÁMARA BONAERENSE

Una diputada persiguió a ladrones y la balearon.

Dos jóvenes robaban un auto y se llevaban secuestrado al dueño.

Ordenó a su chofer que los persiguiera.

Los delincuentes la balearon y luego liberaron al rehén.



Ahora atacan la inseguridad con un grupo de agentes especiales

Son miembros de Inteligencia de la Policía Bonaerense

Buscan prevenir golpes e identificar a las distintas bandas

 

* INSEGURIDAD: OTRA PERSECUCIÓN A SANGRE Y FUEGO EN EL CONURBANO

Setenta cuadras a los tiros en la zona norte

Una banda robó un banco en La Lucila. La persiguieron doce patrulleros.

Los ladrones tiraban con fusiles y ametralladoras. Mataron a un policía e hirieron a otros 5.



Año 2000
 

* INSEGURIDAD: TIROTEO EN RAMOS MEJÍA

Matan a dos ladrones que metían a sus víctimas en el baúl del auto

Actuaban siempre entre las 5 y las 7 de la mañana. Así sorprendían a quienes iban a trabajar en auto. Y los retenían hasta vaciarles sus cuentas en un cajero automático.

Calculan que hubo más de 20 casos.

 

Un ministro de Seguridad y la Gendarmería se dicen de todo

El ministro bonaerense Verón dijo durante un acto que la Gendarmería debería ser más profesional. El titular de esa Fuerza le respondió: Nos la pasamos secuestrando autos que son robados en la provincia.

 

* EDITORIAL

Mercado negro de armas e inseguridad

 

* INSEGURIDAD: LOS POLVORINES

Cuatro muertos y 9 heridos en un tiroteo entre policías y ladrones

Tres hombres escapaban tras robar un banco. Perseguidos, se refugiaron en dos casas.

Se enfrentaron con la Policía durante casi una hora.

 

* INSEGURIDAD: DEL MAL TRAGO A LA TOMA DE REHENES

Un cuadro que cambió porque se volvió violento

Hace años no era común matar a la víctima. Ahora los asaltos son una tragedia.

 

* INSEGURIDAD: QUERÍAN ROBARLE EL AUTO Y SE RESISTIÓ A TIROS

Matan a un militar que esperaba a su hija en la puerta del colegio

Fernando Lomuto era mayor retirado del Ejército.

Había llevado a una de sus hijas al colegio y se quedó esperando a otra.


* INSEGURIDAD: HABLA LA MADRE DE UNO DE LOS REHENES QUE USARON COMO ESCUDO HUMANO

Los policías nunca me dijeron que mi hijo estaba herido

Adela Rodríguez es la madre de Mario Bogado, quien recibió un balazo y está en terapia intensiva. Durante siete horas estuvo secuestrado por los delincuentes. Casi siempre tuvo una pistola apuntando a su cabeza.


* INSEGURIDAD: EL PALOMAR

Quisieron robarle el auto y lo mataron de un tiro a quemarropa

Intentó defenderse con un palo de golf cuando dos asaltantes se metieron en el garaje de su casa Forcejearon unos segundos y le dispararon.

 

La gente va a reclamar gatillo fácil

Para lograr que le den más poder a la Policía Bonaerense, el ministro Casanovas dice que eso pasará si no aprueban leyes propuestas por Ruckauf.


 

Año 2001
 

Asesinan a golpes a un hombre para robarle

Era dueño de campos en los que criaba ganado. Lo hallaron, aún con vida, dentro del baúl de su auto. Hay tres sospechosos detenidos.

 

* INSEGURIDAD: UNA BANDA DE LA MAFIA DE LOS TAXIS ACUSADA DE ROBAR Y MATAR.

Detuvieron a tres hombres por el asesinato del marido de la actriz Georgina Barbarossa

Fue en una villa de San Martín. La Policía llegó a ellos por los datos de un informante. 

 

Dos casos de inseguridad

 

* INSEGURIDAD: VILLA MARTELLI

Un juez federal mató a balazos a dos jóvenes que lo estaban por atacar

Es Claudio Bonadio Disparó más de siete tiros.

El hecho ocurrió el viernes a la noche cuando iba con un amigo a comer un asado.


* INSEGURIDAD: MAR DEL PLATA

Asaltan la casa de una familia de policías: un muerto y cinco heridos

Tres ladrones entraron al chalé de un suboficial retirado.

Hubo un tiroteo y cayó muerto uno de sus hijos, de 15 años.

 

* Proyecto aprobado en el Senado

Condenas de hasta 25 años para delincuentes que tomen rehenes

La norma fue girada a Diputados para su tratamiento.

 

Radiografía de una causa por robo.

Es la historia de un asaltante y tres de sus víctimas.

El las atacaba tironeándoles las carteras y cortándolas con una navaja.

 

* INSEGURIDAD: LA POLICÍA LOGRO LIBERARLOS Y DETENER A LOS DOS ASALTANTES

Cinco horas de pesadilla para un ejecutivo, secuestrado con su familia.

Fue una pesadilla de cinco horas para un gerente de la empresa Perez Companc, su esposa y su hijo de seis años. Dos ladrones asaltaron a la familia en la puerta de su casa de Ramos Mejía y la llevaron a recorrer cajeros automáticos para sacarles dinero.


* INSEGURIDAD: DETUVIERON AL PRESUNTO ASESINO DE LOS SUBOFICIALES

Cómo funcionaba la banda que mató a dos policías en el asalto de Once

Uno de los empleados del negocio robado se quebró ante el juez.

Y le explicó que en lo que va del año ya habían asaltado tres veces al mismo comerciante

 

* El costo de la inseguridad en América latina: cifras alarmantes.

La violencia agrava la crisis de la región

Según un informe del BID, los gobiernos destinan anualmente el 15% de sus magros PBI en combatirla.

Nuestros, robos y homicidios. Atracos y amenazas. Temores de empresarios locales y prevenciones de inversionistas extranjeros. Enormes desigualdades sociales.

 

* REUNION POR LA INSEGURIDAD EN EL CONURBANO NORTE

Reclamo de cuatro intendentes.

Cuatro intendentes de la zona norte de la provincia de Buenos Aires se reunirán hoy con el ministro de Seguridad bonaerense, Ramón Verón, para reclamar por la inseguridad. 


* INSEGURIDAD: UNA NORMA QUE RIGE DESDE 1994

Casos que provocaron las mayores polémicas


* ANÁLISIS

Una tarea de detectives.

 

* CREEN QUE HABRIA OTROS CASOS SIMILARES

Mafia de los taxis: asaltan a una mujer y después la violan

La mujer tomó el auto en Recoleta.

A las pocas cuadras subieron dos hombres y fueron a un cajero automático para sacar plata de su cuenta.


* INSEGURIDAD: ASALTOS QUE TERMINAN CON PERSONAS ENCERRADAS EN EL BAÚL

Una situación angustiante que marca a las víctimas

Es una situación angustiante que se suma a otra. Ya le pasó a muchas personas durante los dos últimos años: sufrir un asalto y, encima de todo, terminar adentro del baúl de su propio auto, con la más absoluta incertidumbre sobre su destino inmediato.

 

* INFORME ESPECIAL INSEGURIDAD: CONSEJOS DE LA POLICÍA FEDERAL

Los diez tipos de robo más comunes y cómo prevenirse

En la Capital se denuncia un robo cada 4 minutos.



Año 2002
 

* FRUSTRAN UN SECUESTRO

Liberan a un hombre tras un tiroteo

Recién llegado al país, Alejandro Pigni, empleado de una empresa petrolera, aprendió en forma rápida sobre los problemas de inseguridad. Fue secuestrado en Olivos y liberado en Munro, tras un tiroteo entre la Policía y los asaltantes que planeaban exigir 50.000 pesos por su liberación.

 

* CREEN QUE TODO SE INICIO COMO UN INTENTO DE ASALTO

Secuestran y asesinan a balazos a un comisario de la Policía bonaerense

Era el segundo jefe del Comando de Patrullas de San Miguel. Salía de su casa, en una 4×4, vestido de civil, cuando lo interceptó un grupo de entre tres y cuatro personas.

 

Protesta contra la violencia y la inseguridad 

La Coordinadora de Actividades Mercantiles Empresarias (CAME) llamó a hacer sonar hoy las bocinas, cacerolas y sirenas, a las 10 y a las 20 horas, «contra la inseguridad y la violencia».

 

Reunión por otro reclamo nacional

El presidente de la Coordinadora de Actividades Mercantiles Empresariales (CAME), mantuvo el jueves una reunión con el secretario de Seguridad Interior, Alberto Iribarne, para informarle acerca de todas las acciones que se van a desarrollar por el reclamo nacional «Basta de Inseguridad».

 

* ESCENARIO: MUCHOS CAMBIARON SUS HÁBITOS PARA PROTEGERSE

Los futbolistas dicen que son una tentación muy grande


* INSEGURIDAD: TRAGEDIA EN EL JAGÜEL

Lo llevaban como rehén en su auto y murió cuando los atropelló un tren

Omar Gandolfo tenía 49 años. Uno de los ladrones está muy grave. El otro, un chico de 15 años, sobrevivió y quedó preso.

 

* LA INSEGURIDAD EN UN PUNTO LIMITE: LOMAS DE ZAMORA

Asaltan a un funcionario de la Presidencia

Un funcionario del Gobierno nacional, que iba con su camioneta 4×4 por Lomas de Zamora, fue asaltado el martes a la noche. Lo retuvieron dos horas, le sacaron dinero de su casa y lo liberaron en San Francisco Solano.


* INSEGURIDAD: ERA VICEPRESIDENTE DE LA UNIÓN INDUSTRIAL DE LA PROVINCIA DE BUENOS AIRES

Un empresario de Avellaneda fue asesinado a tiros dentro de su auto

Era Jorge Fernández Prieto, de 44 años. Llegaba a su casa cuando se produjo el ataque. Aceleró y quiso escapar. Le dispararon al menos 12 veces. Cinco balazos dieron en el auto y uno lo mató. La Policía cree que se trató de un intento de robo o de secuestro.

 

* INSEGURIDAD: PROVINCIA DE BUENOS AIRES

Crecen los robos en la calle que terminan en homicidio

Según datos oficiales, hay un asesinato cada cuatro horas. En casi la mitad de los casos las muertes se producen en un asalto callejero.

 

* INSEGURIDAD: EN EL BAJO FLORES LE ROBARON A RAÚL «TOTI» IGLESIAS

Un ex futbolista, otra víctima de un asalto

Volvía a su casa en su camioneta 4×4 luego de comer un asado con amigos y al salir de un semáforo en el bajo Flores, dos jóvenes armados se le acercaron. A culatazos rompieron el vidrio de la ventanilla y bajo amenazas lo obligaron a dejarlos subir a la camioneta.

 

* INSEGURIDAD: HACÍAN ASALTOS EN CAJEROS Y SECUESTROS EXPRÉS

Buscan a once ladrones de una banda de zona norte

La Justicia aún busca a once personas relacionadas con una banda de delincuentes —especializados en secuestros exprés y en llevar a sus víctimas a cajeros automáticos— que fue desbaratada en mayo pasado.

 

* INFORME ESPECIAL| DELITOS EN EL CAMPO: LA DEVALUACIÓN DEL PESO AUMENTO LA COTIZACIÓN DE LOS PRODUCTOS AGROPECUARIOS

Cada vez roban más ganado, semillas y fertilizantes

Según la Policía, en cinco meses se duplicó el robo de hacienda y subieron un 60 por ciento los casos de «piratas del cereal».


* INSEGURIDAD: UNA PESADILLA CON FINAL FELIZ

Un grupo de vecinos juntó la plata para liberar a un chico secuestrado

El adolescente, de 15 años, fue secuestrado junto a su tío. Pero el hombre fue liberado para que pagara el rescate. Como no tenía el dinero acudió a sus vecinos, que le ayudaron a juntarlo: pagó 700 dólares, 400 pesos, algunas joyas, un televisor y una videocasetera.

 

* SECUESTRO AL VOLEO EN QUILMES

Pagan $ 1.600 de rescate y liberan a un hombre secuestrado

Los secuestradores se comunicaron con su mujer, que personalmente pagó el rescate.

 

* INSEGURIDAD: UNA MODALIDAD QUE NO PARA

Secuestros exprés: hubo dos en Capital y otro en la provincia.

Las víctimas fueron de clase media y se pidieron pequeñas sumas como rescate. Clarín adelantó en exclusiva que hay un secuestro cada 36 horas.

Enojados, los integrantes de la banda siguieron recorriendo cajeros automáticos.

En la fiscalía informaron que en menos de tres meses se registraron 25 casos similares en Saavedra, Núñez y Belgrano.

 

* POLICIA: INSEGURIDAD EN LA PATERNAL

Matan a una mujer que quedó en medio de una persecución.

Dos ladrones habían robado en un supermercado. Cuando iban a escapar, llegó la Policía y hubo tiros. Los ladrones fueron apresados. Aún se ignora de dónde provino el balazo que mató a la vecina.


* POLICÍA / INSEGURIDAD: TIROTEO EN LOMAS DEL MIRADOR

Mataron a balazos a dos policías de la Bonaerense.

Fue frente a una sucursal del Correo. Los policías estaban de custodia. Tenían puestos chalecos antibalas pero les dispararon a la cabeza.

 

* DISPAROS EN LA CRISIS

La seguridad en la era del corralito

Fatales episodios de justicia por mano propia. Tensión y víctimas en los piquetes y en las marchas de los cacerolazos. Temor por nuevas formas del delito. A la inestabilidad política le corresponde también un nuevo y dramático perfil de inseguridad.

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Acordamos con la afirmación que se hizo en el diario La Nación, de que la percepción de inseguridad no tiene que ver directamente con la cantidad efectiva del delitos sino mayormente con el tipo de difusión que se haga de ellos.

Asimismo, como hemos visto, ni la creación del concepto de «sensación de inseguridad» ni el origen de esta supuesta ola de criminalidad son atribuibles a los gobiernos (provinciales o nacionales) de este siglo, por lo que el necesario debate serio sobre la evolución de los delitos en nuestro país no debe basarse en preconceptos, prejuicios o eslóganes, ni en el «sentido común», la débil memoria histórica o datos antojadizos o inexactos sobre los hechos, sino en una visión amplia y fundamentada sobre el tema. Un tema demasiado importante como para dejarlo sólo en manos de opinólogos mediáticos, políticos oportunistas, blogueros aficionados o criminólogos de café. Debemos escuchar también, y principalmente, a penalistas, criminólogos y científicos sociales especializados en el tema. Como hemos mostrado, humildemente, tanto en ésta como en nuestra anterior nota.




Acerca de Basurero

Soy un basurero interesado en Antropología, Historia Argentina, Política, Economía Política, Sociología, idioma Inglés, Fotografía y Periodismo, y culpable confeso de ejercicio ilegal de estos temas en mi blog.

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58 comentarios en «¿La «sensación de inseguridad» no era kirchnerista?»

  1. Impresionante investigación. Se agradece nuevamente, Basurero.

    El dispositivo mediático, muy hábil, después de hablar hasta el cansancio de la ‘sensación de inseguridad’, cuando Aníbal Fernández usó la frase se la dejaron ‘pegada’ para pegarle. Es importante lo que usted publica aquí para ver de dónde viene la frase.

    Cada vez me convenzo más de que, en los medios que ya sabemos, las cuestiones como inseguridad, corrupción e incluso inflación, son manipuladas políticamente: con algunos gobiernos sí y con otros gobiernos no. Mientras las cifras reales dicen otra cosa.

  2. Para los que nos interesa la política y los problemas que tenemos en la sociedad, es interesante este artículo. Pero me hago una pregunta sincera: ¿sirve para explicarle a quienes viven atravesados por el miedo y/o tienen una ideología de derecha? Quiero decir, cualquier persona cuyo discurso esté atrevesado por la inseguridad, es muy difícil explicarle cualquier cosa ya que estamos hablando del miedo más intimo que tiene todo ser humano y es el de la muerte. No es casual que la “inseguridad” sea el caballito de batalla de todos los medios de comunicación a nivel mundial, saben que pueden entrar directo a la mente de las masas, y que no habrá luego datos, ni teorias, ni comprobaciones empíricas que puedan desarmar el discurso del miedo. Realmente es preocupante, muy preocupante. Cuando se habla de la manipulación mediática, este es el verdadero problema. No creo que los medios de comunicación puedan obligar a los ciduadanos a votar por tal o cual candidato, pero tienen un poder superior, que es el de manipular sus miedos más humanos, más profundos, y eso es alarmante.

    1. Con la manipulación mediática es como con la remarcación excesiva de precios de los supermercados: sólo se enfrenta con una fuerte oferta paralela de otra cosa (información menos sesgada, precios menos remarcados).

      1. Estoy de acuerdo con vos. Pero para que esa infromación menos sesgada sea recibida por las masas, hay que cambiar el mapa de medios. Yo me pregunto, en las circunstancias actual, donde los medios tienen un discurso dominante denominado inseguridad, ¿cómo enfrentarlo? Yo puedo explicar mucho pero me van a responder con lo que vieron en la tele, y sobre todo: con las emociones que les provocaron esas imágenes. Hasta que no cambien los medios, no creo que sirvan los datos. Es triste pensarlo, pero así lo creo. Porque como dije antes, los medios acuden al miedo más íntimo de lo humano que es el miedo a la finitud, a la intrascendencia y sobre todo a la muerte. Y los miedos, las emociones, no pueden ser rebatidos con razonamientos, porque son dos dimensiones humanas diferentes. A mi me sirven los datos, pero me pregunto cómo hago para explicarle a mi vecino que, aunque no tiene motivos, tiene miedo de verdad. Es complicado.

      2. Te cambio la pregunta: ¿cómo hago para que mi vecino deje de tener miedo? No creo que diciéndole que su miedo es infundado lo logre, ya que todos los miedos son infundados e irracionales y aún así todos los seres humanos sentimos diferentes miedos por diferentes cosas.

      3. Tenés toda la razón sobre eso: acuden al miedo más profundo de todos nosotros.
        El posible remedio social, para mí, es análogo al remedio individual: cuando a uno lo atormenta un miedo, no puede seguir el sano consejo ‘no pensés más en eso’ porque es imposible proponerse ‘no pensar’ en algo. La única salida es… tener otras cosas en las que pensar (y que en lo posible sean placenteras).
        Un ejemplo social: durante los festejos del Bicentenario en 2010 ¿mucha gente se acordó del miedo? Varios millones circulaban por la calle entre la multitud sin ningún miedo.

      4. Totalmente de acuerdo. En la época de «Braden o Perón» se usaban los graffitis escritos con tiza, hoy en día contamos con muchos más medios. Usarlos inteligentemente es la tarea.

      5. Lamento decir que soy pesimista. Recuerdo estar hablando con alguien sobre el miedo a las violaciones. Su temor era que entrara un pibe chorro durante la noche y, luego de robar, abusara de su hija. Muy revelador, ya que en ese miedo estaba condensado todo el discurso mediático de la inseguridad en una sola persona. Pero es triste, porque es una tortura vivir con ese miedo. Le conté algo que no sabía, y es que la mayoría de los abusos sexuales son intrafamiliares, y eso no se dice. Nadie en su sano juicio tendría miedo de que sus hijos sean abusados por su padre, abuelo, tío, hermano; ya que eso impediría los vínculos sociales más elementales y por ende todos los vínculos sociales. Y sin embargo es lo que más sucede dentro del delito sexual. Lo lo cual no quita que existan violaciones perpetradas por desconocidos. Sin embargo, no le pude sacar el miedo. Ojalá algún día cambiemos eso, por ahora yo intento ir uno por uno.

      6. Precisamente hoy sale esta noticia:

        http://www.lanacion.com.ar/1688800-repartiran-600000-decoficadores-de-television-digital-en-bares-y-comercios

        «Vamos a entregar decodificadores en bares, confiterías, sanatorios y otros lugares de acceso público y semipúblico con el objetivo de avanzar en el crecimiento de la Televisión Digital Abierta , que a fines de este año llegará una cobertura del 95%», indicó De Vido.

        Por fin…
        Varias veces me referí a cómo TN logró un cuasi-monopolio en ese tipo de lugares gracias a ofrecer TV por cable gratis si clavaban allí la sintonía todo el día.
        Encima, por si el ruido ambiente no deja escuchar bien ponen los ‘zócalos’, que ‘casualmente’ son más virulentos e incendiarios que la información de audio y video.

        Por ese lado se debe ir.

        Ahora van a saltar diciendo que ‘laggente’ lo quiere y lo pide. Nada de eso. En esos lugares, claramente, es algo impuesto. El medio ‘independiente’ monopolizando la audiencia.

      7. Veamos tipos de delitos:
        Desde fines de los 90, cuando se popularizaron las alarmas en coches, empezaron a recrudecer los robos de auto con arma. No se si se roban más o menos autos, pero para la víctima es muy diferente.
        Y desde hace 4 o 5 años,a los muchachos nac & pop se les dio por una de las peores cosas que le puede pasar a una familia, y es un robo con ellos adentro, las famosas entraderas que antes no existían. En la estadística estos robos estan asociados a «lesiones leves» o «lesiones graves» «amenazas», etc.
        Pero en realidad estas familias son sometidas a tormentos físicos y psicológicos (los ancianos muchas veces no los soportan y mueren durante la tortura).
        Un solo juez lo calificó como «tormento», lo que eleva mucho las penas. La cámara se lo dio vuelta. Para despejar dudas, el nuevo código aclara que los tormentos punibles solo los aplican los funcionarios. En el caso de chorros, el único agravante es la lesión en si.
        Acá en Mar del Plata todo el mundo esta aterrorizado, ya ha muerto gente, sobre todo ancianos, y en todos los barrios ha habido casos, pero más en los más periféricos. Por eso los departamentos han subido mucho más de valor que las casas. Se que en muchos barrios del Gran Buenos Aires la situación es peor. Llaman por teléfono antes de llegar, y esperan al que llega con el portón del garage abierto y con un perro o armados.

  3. Pero esta investigación no vendría a demostrar entonces que NO es cierto que los «medios monopólicos» tienen una política destituyente del actual gobierno? O al menos que no cargan las tintas en los temas de delitos con la finalidad de perjudicar al actual gobierno.Porque lo que estaríamos viendo es que los medios de comunicación siempre, con cualquier gobierno, están hablando insistentemente sobre la supuesta inseguridad.

    1. Charendon, para mi lo que quiso decir Basurero con su nota, es que los que sostienen que AHORA hay inseguridad porque TODOS LOS DIAS hay delito en las NOTICIAS, en realiad fue siempre así. Lo nuevo es que los noticieros y los diarios, dicen que ya es insostenible la situación. Antes lo planteaban como fenómeno social, principalmente urbano, y ahora lo plantean como resultado del gobierno de CFK. Hay difrencias obvias, y esta nota lo demuestra.

      1. Un solo ejemplo entre miles: Lanata toma un par de casos y titula ‘Violencia juvenil en la era K.’. Es decir, asocia las dos cosas en su ‘discurso’.
        Cuando hay un gobierno que les gusta, cada hecho violento puntual se muestra como… un hecho violento puntual.

    2. Una breve acotación al tema que están debatiendo: no olviden lo que le enseñó Héctor Magneto a José Pirillo, cuando éste compró el diario La Razón, que era uno del trío dueño de Papel Prensa: «Los gobiernos duran seis años, los diarios duramos 100 años. Los primeros dos años al gobierno hay que sacarle todo lo posible. Los siguientes dos años hay que pegarle para sacarle más, y los últimos dos años hay que pegarle para voltearlo y empezar de nuevo con el gobierno que sigue». Los golpes para lograr concesiones o para desestabilizar comienzan luego del segundo año… Más referencias en http://basureronacional.blogspot.com.ar/2012/07/mitos-argentinos-hoy-el-periodismo.html

    3. Si la cobertura siempre fue la misma, no creo que sean las editoriales las que causan la inquietud de la gente.
      Es la realidad, el hecho de que cada vez conocemos más gente que fue asaltada, o que le entraron en la casa, etc. Eso confirma lo que se ve en TV o radio.

  4. Y yo que pensaba que el choreo era otra consecuencia ¿no deseada? del populismo stalinista-fascista-mazorquero

    Una vez, como nos tiene acostumbrado y con el tiempo suficiente para leer, como corresponde, los dos posteos: excelentes investigaciones como dice el amigo don Raúl…. ¡¡¡¡Pathétique!!! (4to. mov.: Presto: Allegro molto vivace)

    Bai de uei Pathétique

    Saludos

    PD: me llama poderosamente la atención la falta de participación de los «progres-liberales de izquierda»

  5. Basurero querido:

    Entonces, si la nota de Sarlo es de 2001, lo que es genuinamente kirchnerista, corazón del modelo, alma de la patria es…..el NARCOTRÁFICO….

    Porque si hay algo que sin duda no tenía la dimensión que hoy tiene eso es el narcotráfico,…..ah… y el juego, el juego también, ….bueno en definitiva junto con el futbol para todos es nuestra querida cultura popular.

    Basurero, sinceramente no esperaba de vos algo tan trivial.

    Digamos podría ser un planteo de Silenoz en plan de chicana o alguna arenga de Napule ,……… pero Ud. maistro suele ser mas profundo, creo que el 6 7 8 ya lo tiene aprobado hace rato como para querer repetir.

    En fin,…ALGO HAN HECHO para que pase lo que está pasando.

    ……adivina adivinador….¿Qué habra sido?

    1. «lo que es genuinamente kirchnerista, corazón del modelo, alma de la patria es…..el NARCOTRÁFICO….»

      Ja ja… Y mirá, por el momento lo probado es que es «genuinamente» socialista… bahh al menos así se «venden» los que gobiernan Santa Fe, de los tuyos bai de uei ¿o te desafiliastes?

      Saludetes desde Parque Norte

      1. Para nada, es que UNIR voluntades cuesta un laburo…..

        Pero lo que no sabía era que a las fronteras las custodiabamos nosotros y que además nos habían dado el mando de la gendarmería y la federal.

        Cristina es generosa.

        Ves, uno se va del foro por un rato… y chau…..me cambiaron el relato de nuevo……

        Así no lo via´prender nunca.

        Bueno, te digo, ya tengo tu ficha completa, solo falta que firmes, ……mira que las ratas abandonan el barco…… y bueno un lugarcito te vamo´hacer…..

      2. No, no les dieron el mando de la gendermería y la federal.
        Sólo tenían el poder de nombrar las autoridades de SU policía, por lo que nombraron al narcotraficante en ¡Drogas! y trascartón lo ascendieron a Jefe de Policía.
        No tengo noticias de que en la provincia nombren a alguien que les haya recomendado el PEN.

    2. Bueno, ya que aceptamos que el tema de la inseguridad o sensación de inseguridad es un tema vigente desde hace décadas, pasemos de pantalla.
      En cuanto a tu atribución al kirchnerismo como generador del narcotráfico (?) lamento informarte que no es lo que piensan las Naciones Unidas, porque según su último informe su evolución está más cerca de ser un fenómeno mundial que de ser un «logro de la década K». Salvo que los kirchner o la Cámpora tengan tanto poder como para infectar de narcotráfico al mundo…
      Veamos sólo lo que dice el último informe de la ONU con respecto a la cocaína (para no abundar):
      «Las mayores incautaciones de cocaína del mundo (sin ajustar la pureza) se siguen notificando en Colombia (200 toneladas) y los Estados Unidos (94 toneladas). Sin embargo, ha habido indicios en los últimos años de que el mercado de cocaína se ha ido desplazando a varias regiones que antes no se asociaban al tráfico o al consumo. Se han observado aumentos considerables en Asia, Oceanía y América Central y del Sur y el Caribe. En América Central, la mayor competencia en el tráfico de cocaína ha dado lugar a niveles de violencia crecientes.
      (…) Este hecho puede vincularse a varios factores, relacionados a menudo con la sofisticación que se asocia a su consumo y al surgimiento de secciones más ricas de la sociedad. En el caso de América Latina, en cambio, la mayor parte del aumento parece obedecer a efectos de “desbordamiento”, ya que la cocaína se consigue fácilmente y es relativamente barata a causa de la proximidad de los países productores.
      (…) Las incautaciones de cocaína en Colombia indican que la ruta del Atlántico puede estar adquiriendo mayor importancia en comparación con la del Pacífico en el tráfico por vía marítima; los lazos lingüísticos parecen desempeñar un papel en el tráfico de cocaína de América del Sur a Europa por el Brasil, Portugal y los países de habla portuguesa de África. Al parecer, el mercado de cocaína se está expandiendo hacia las economías emergentes de Asia.
      En Oceanía, en cambio, las incautaciones de cocaína alcanzaron nuevos máximos en 2010 y 2011 (1,9 y 1,8 toneladas, respectivamente, frente a 290 kg en 2009). La tasa de prevalencia anual de consumo de cocaína en Australia entre la población de 14 años o más se duplicó con creces del 1,0% en 2004 al 2,1% de la población adulta en 2010; esa cifra es más elevada que el promedio europeo y supera las
      correspondientes tasas de prevalencia en los Estados Unidos.»
      Y si averiguamos en los informes de los años noventa nos sorprenderíamos (?) de ver lo que reflejan las cifras…
      Ver más en: http://www.unodc.org/unodc/secured/wdr/wdr2013/WDR2013_ExSummary_S.pdf

      1. ¡¡Que lo tiró, Argentina país rico carajo!!

        ¿Cómo no me di cuenta antes?

        No es que los pibes que viven a la vuelta de mi barrio en la 1-11-14 son pobres y drogadictos sino que están festejando Halloween.

        Y esos muchachos que andan calzados en autos lujosos como sacados de «Breaking Bad» son actores que están filmando en un set la película «Recordando la Argentina pobre».

        Es increíble como laburaron los habitantes del barrio privado 1-11-14 para armar la escenografía de la villa, no se como hicieron para esconder los chalets detras de las chapas……. y la caracterización de los pibitos…….. con los ojos hundidos y la mirada perdida……. seguro que gana el Oscar.

        Dice el refrán…..no hay peor ciego que el que …etc etc etc..

        1. No, ZXC, el refrán diría: No hay peor ciego que el que no quiere leer… o el que lee lo que quiere leer: la ONU dice (no yo) lo siguiente:
          «Este hecho puede vincularse a varios factores, relacionados a menudo con la sofisticación que se asocia a su consumo y al surgimiento de secciones más ricas de la sociedad. En el caso de América Latina, en cambio, la mayor parte del aumento parece obedecer a efectos de “desbordamiento”, ya que la cocaína se consigue fácilmente y es relativamente barata a causa de la proximidad de los países productores».

      2. Basurero, anoche vi a dos parejas de argentinos que estan de paso. Ellos de alrededor de 50, con hijos (7 entre las dos parejas) entre 13 y 20 y pocos. Viven en Buenos Aires. Salvo al de 13, a todos los hijos los han asaltado en la calle, desde arrancarles el celular de la mano a ponerle botella rota en la cara para sacarle todo lo que tiene. Si salen de noche, los padres les dan dos lotes de plata, una para gastar y otra para tener en el bolsillo cosa de que tengan algo si los asaltan volviendo a la casa. A uno de los padres le hicieron secuestro express hace unos anios.

        Ya se que la experiencia personal no tiene valor en tus mediciones, pero tengo 6 sobrinos entre 40 y 50, mas los hijos de mis primos. A nadie en mi familia en esas generaciones, cuando eran chicos, lo asaltaron. A lo mejor habra habido uno que no me entere, pero no 6 de cada 7.

      3. Guillermo:
        Un par de aclaraciones: No son «mis» mediciones, sino que son de la ONU o de la Corte Suprema de Justicia. No hablan de robos o hurtos sino de algo mucho peor: homicidios y las cifras demuestran que bajaron en esta década.
        Y coincido con tus apreciaciones, en los años sesenta y setenta había menos robos y hurtos que ahora, yo los viví también. Pero también éramos menos de 25 millones de habitantes, las condiciones económicas eran otras y la desigualdad de la distribución de la riqueza era mucho menor. En definitiva: era otro país. Después vino la dictadura, las hiperinflaciones, la hiperdesocupación, se disparó la pobreza y la indigencia y la hiperdesigualdad y, como consecuencia lógica, aumentó el delito y demás subproductos de esas décadas. Aunque en esta última década post estallido neoliberal esos temas mejoraron notablemente no llegamos aún a igualar aquellas cifras. Eso también lo viví en carne propia pero, como dije en otra ocasión, los casos personales no sirven para hacer análisis o sacar conclusiones generales , que es lo que trato de hacer en estas notas.

      4. Basurero:

        Como dijo alguien alguna vez: «El máximo dolor que puede sufrir la humanidad es el que puede sufrir un solo hombre»

        La vida no se vive a través de las estadísticas, son meras herramientas de análisis, en general útiles en series largas y solo al fin de comparativas globales.

        Las estadísticas no explican el aumento de la crueldad en los delitos ni el desborde emocional de los delincuentes, solo miden si mataron o no, si robaron o no, si estafaron o no, etc etc.

        Yo te planteo, si hubiera mañana un referendum que preguntase:
        ¿Ud cree que hoy hay mas violencia e inseguridad que hace diez años?

        ¿Cual sería a tu entender un posible resultado?

        Tan importante como la seguridad objetiva es la percepción subjetiva de seguridad ya que ella es un componente fundamental para una vida feliz.

        ¿Ha colaborado el kirchnerismo a que aumente la percepción subjetiva de vivir en una sociedad mas segura?

        Te voy a ser muy crudo con esto.

        Como te dije vivo a muy pocas cuadras de la villa 1-11-14 y ya he comentado en otras oportunidades que tengo trato con varios de sus habitantes.

        Sabés que los haría sentir seguros:
        Ver que el estado ataca a los nacotraficantes con todo su poder militar y los mata.

        Si, los quieren muertos.

        Ni siquiera pretenden juzgarlos, quieren que el estado los mate porque los perciben como a una plaga de cucarachas.

        Todo esto a poquitas cuadras de mi casa.

        A ninguno de ellos los conforma la legalización de las drogas como recurso, todos tienen algún pariente o amigo a quién los narcos han jodido de una u otra manera, o directamente los han matado.

        Yo a esta altura empiezo a aceptar que el progresismo posible es tan amplio como tu necesidad de sobrevivir.

        Esta gente vive aterrorizada y esta bajo las balas.
        ¿Porqué tendrían que tener escrúpulos morales con los narcos, que si no los matan les envenenan a sus hijos?

        Para ellos los Derechos Humanos solo significan que les saquen los narcos de encima.

      5. Basurero, si titularas tus posts ‘La Sensacion de Que Nos Van a Asesinar Cuando Salimos Es Culpa del Kirchnerismo?’ todo lo que decis se sostiene. Pero si usas la sensacion de inseguridad en el titulo para alegar que el gobierno no es responsable, pero haces la demostracion con UN aspecto de la inseguridad, podras traer todas las estadisticas que quieras, pero estas sacando una conclusion general de un punto especifico. Desde ya que que te maten es peor a que te corten la cara para afanarte, violen a tu hija o tu mujer, lo que quieras. Pero si hay menos asesinatos pero mas robos y violaciones, por decir algo, no puede haber menos sensacion de inseguridad. Ni deja de ser responsabilidad del gobierno, aunque no la haya causado. Si la gente se muriera por falta de hospitales, el gobierno no esta eximido de responsabilidad porque se dejaron de construir mucho antes de que asumiera.

      6. ZXC:
        Creo saber cuál sería el resultado de ese referéndum, por eso publiqué parte de una nota de la BBC de Londres en la nota anterior, que dice:
        «Cono Sur: poca violencia, mucha preocupación.
        Este jueves habrá una manifestación contra la inseguridad en Montevideo convocada por una organización civil que busca llamar la atención de las autoridades uruguayas.Afirman que es un problema que se agrava.
        En Argentina, el tema también preocupa. De manera diaria se oye mencionar el asunto entre la población o a través de los medios de comunicación privados.
        Irónicamente, ambos países tienen algunas de las tasas de criminalidad más bajas del continente.
        La diferencia entre lo que se percibe y lo que realmente es ha sido objeto de estudio por parte de académicos de las ciencias sociales mediante indicadores de opinión pública.
        “(…) una de las principales cuestiones que surgieron es que en el Cono Sur hay una percepción absolutamente desfasada con los datos duros de la criminalidad“, señaló a BBC Mundo Carola Concaro, directora del Instituto Latinoamericano de Seguridad y Democracia, organismo basado en Buenos Aires que forma parte de RIAD.
        “Argentina, Chile y Uruguay están al tope del ranking en victimización, pero son los más bajos en índice de homicidios”, agregó.
        etc., etc. Y de eso se trata la nota, de diferenciar los fenómenos, sólo conociendo realmente cuáles son los problemas es como se los soluciona».

      7. Guillermo:
        Veamos si te entiendo: ¿el gobierno es responsable del deterioro de la seguridad en estos últimos veinte o treinta años (aunque la tasa de homicidio objetivamente bajó en estos últimos diez)? ¿También es responsable de lo que difunden los medios masivos sobre la «inseguridad» que, como dicen Clarín y La Nacion, afecta la subjetiva «sensación de inseguridad» en la población? ¿No será mucho?
        Que hay menos homicidios es un hecho, y no digo si hay más o menos robos o violaciones que antes porque, como señalo en la nota anterior, para el tema que analizo se toma la tasa de homicidios (no yo, los que estudian el tema) porque no dependen de la denuncia efectiva y por eso es más confiable esa tasa. Si vos afirmás que hay más robos o violaciones hoy que hace 10; 15 ó 20 años, espero ver tus datos al respecto o, al menos, el enlace al sitio. Así pasaremos a debatir con más información y no con supuestos o «sensaciones» subjetivas.

      8. No, Basurero, el gobierno no es responsable del deterioro anterior a su llegada. Pero si es responsable (como cualquier gobierno en cualquier lado) si la inseguridad (o el miedo a la inseguridad) se mantiene identico o empeora durante su gestion.

        Pones un enfasis feroz en homicidios. De lo que la gente con la que hablo tiene mas miedo es de que la asalten, en su casa o en la calle, cosa que puede incluir un grado de violencia fuerte. Si muere gente asaltada, por poca que sea en %, pero ser asaltado es un hecho corriente y generalizado, estas en la misma situacion que la gente que tiene miedo a volar, aunque % el porcentaje de accidentes es bajisimo.Si te pasa, estas fregado.

        No se si hay mas robos y violaciones que hace 15 anios. Lo que si se es que entonces eran hechos puntuales (hablo de robos, gracias a Dios no conozco a nadie violado/a)ahora le pasa a practicamente todos. No trates de entramparme con lo de datos, sabes perfectamente que no los hay, por eso te colgas de los de homicidios. Que no se tenga datos de algo no quiere decir que no exista.

        El problema que tiene el gobierno, y que vos tratas de aliviar en tu escala con estos posts, es que, aunque no hubiera ‘agravado’ el problema de la inseguridad, al crear una cultura en la que el que viola la ley tiene razon, porque lo que le pasa lo justifica (caso de las infinitas protestas con cortes de trafico,o danios a edificios (alguna vez alguien de Quebracho fue arrestado y juzgado por dano intencional a edificios?), ha creado una version nac pop del horror usual durante la dictadura: ‘Y, si se los llevan por algo sera.’ La version de eso creada por el kirchnerismo es: ‘Y, si los roban, sera porque tienen’, aunque la enorme mayoria de robos es en los sectores mas pobres. En esa version, el ladron es victima de la injusticia social, y por lo tanto no sancionable, o no mucho. Ha habido bastantes comentarios aqui en esa linea, y que la solucion es educacion, terapia,re-educacion, etc. Cierto o relativamente cierto, pero llevara 20 o 30 anios reducir criminalidad por esa via. En el interin, algo hay que hacer, y en eso el gobierno no parece haberse molestado demasiado sobre el tema.

      9. El comentario se perdio, te lo simplifico:

        El gobierno no es responsable por lo que pasaba antes de asumir.

        El gobierno (cualquier gobierno) es responsable por lo que pasa durante su mandato.

        Todos los medios en todos lados le dan manija al crimen. Vende. La gente va a ver films de horror, video games con masacres, hacen millones a los productores. El interes/fascinacion con el tema es segundo solo al sexo o a si se llega a fin de mes, se tiene mas o menos plata, etc.

        La gente se interesa/obsesiona con lo sexual o lo economico porque son hechos y motivaciones en la vida de todos. El crimen en gral interesa, no obsesiona, a no ser que seas enfermo. Para que obsesione, (que es de lo que vos y los otros oficialistas aqui hablan, una obsesion creada por La Nacion, Clarin y TN segun Uds) tiene que pasar a ser un hecho que te pueda ocurrir a vos, con chance alta. Que es lo que pasa en Argentina, en las zonas urbanas donde vive la gran mayoria de la gente. Es la experiencia directa de Mariano T, y la mia por lo que oigo de la gente que conozco.

        Vos reconoces eso. Que la tasa de homicidio baje no le va a cambiar a la gente el miedo a que la asalten. Con suerte sin mucha violencia, sin suerte cagandolos a golpes, cortados con botellas rotas, o matandolos.

        Si no se ve una politica a lo Giuliani, de poner el enfasis en reducir el crimen y sancionar al culpable, con resultados, no vas a tener disminucion de la sensacion de inseguridad, en el pais del Indec, publicando que la tasa de homicidios demuestra que la seguridad, en relacion al resto del mundo, no es un problema.

      10. Guillermo:
        Como en las notas no hablo de obsesión sino de cifras, sobre ese tema que planteás, si leés nuevamente ambas notas vas a ver que no yo sino la BBC dice que:
        «La diferencia entre lo que se percibe y lo que realmente es ha sido objeto de estudio por parte de académicos de las ciencias sociales mediante indicadores de opinión pública.
        “(…) una de las principales cuestiones que surgieron es que en el Cono Sur hay una percepción absolutamente desfasada con los datos duros de la criminalidad“, señaló a BBC Mundo Carola Concaro, directora del Instituto Latinoamericano de Seguridad y Democracia, organismo basado en Buenos Aires que forma parte de RIAD.
        “Argentina, Chile y Uruguay están al tope del ranking en victimización, pero son los más bajos en índice de homicidios”, agregó.
        Su contracara es el índice de percepción de inseguridad que busca determinar qué tan segura se siente la población en donde vive.
        “Pero Argentina tiene la mayor brecha en la región entre la percepción de la población y la victimización”, indicó a BBC Mundo Germán Lodola, uno de los autores de la investigación.
        “No quiere decir que no haya un problema, sino que hay factores que escandalizan más a la gente, como por ejemplo la actividad de los medios”,aseveró.
        “Ahora al tener canales con noticias con más frecuencia, la noticia de un remisero (taxista) muerto se transmite 20 veces en un día y pareciera que fueron 20 remiseros (taxistas) que murieron”, agregó Lodola.»
        Además, Beatriz Sarlo (y no yo dice) que:
        «Todos los días hay robos, atracos, accidentes callejeros, violencia armada en las villas miserias y también en los barrios ricos; en el centro de la ciudad (…) Alimenta un sentimiento de inseguridad colectiva que se ha convertido en una pasión: la pasión del miedo como (des)organizadora de la relación con el espacio público.»
        Y La Nación dice (no yo) que:
        «Los porteños consideran que el delito más frecuente es el robo, pero en segundo lugar ubican la violación, los secuestros y los homicidios, hechos ilícitos que están muy abajo en las estadísticas policiales. “Hay una percepción inflada de estos delitos y los medios tienen mucho que ver (…) “Hay delitos que por su naturaleza afectan más la sensibilidad, pero cuando un delito sale bastante seguido en los medios, muchas veces se recibe como si se tratara de diferentes hechos“.
        “La percepción de inseguridad no tiene que ver directamente con el aumento efectivo del delito -aunque se relaciona con ello- sino que tiene que ver con lo que percibe a través de ciertos casos más llamativos”.»
        Los delitos pueden bajar, pero lo que los medios llaman «sensación de inseguridad» tarda en bajar.
        Y decir que para mí «la inseguridad no es un problema» es una chicana pobre; leé los artículos de nuevo y después hablamos.

  6. sILENOZ:

    mUY bueNo eSo dEl «populismo stalinista-fascista-mazorquero», suPeR pOp & nAc.

    lO unTamO coN DuLce dE lecHE Y lE pEGamo l´sTamPita de BeTOven y Y´sTá.

    1. ¿Vi’te que en algo ‘stamo’ de acuerdo man?

      Por otro lado no me digas que no disfrutaste de las 2 sinfonías.. Por favor, no me desilucione….

  7. La primera vez que me asaltaron fue en Diciembre de 1993. De la incredulidad de estar siendo asaltado, me resisití y terminé baleado en una pata (nunca más cometí ese error).
    Hasta entonces no conocía ninguna persona, y mi familia tampoco, que hubiese sido asaltado alguna vez. Ese año estaba tramitando un seguro de vida, la compañía se tomo tres meses en aceptarme porque debían determinar si el asalto y la herida eran algo al azar o si era debido a mi actividad.
    Recién a fines de los 90 la sensación de que podíamos ser víctimas se exacerbó. Después de ese hecho, fui asaltado una vez en 2004, otra en 2006, y dos en 2010. Al revés de 1993, hoy TODO EL MUNDO conoce gente que alguna vez fue asaltada.
    Las estadísticas que provengan del gobierno (los tres poderes) son siempre dudosas, y muchas veces contradictorias.
    Lo que es diferente desde hace 15 años es el creciente número de quasiabolicionistas (o pseudogarantistas) que llegan a la justicia como jueces o fiscales.

    1. Que la seguridad se deterioró en estos 30 años no lo pongo en duda. En la nota anterior lo trato, aunque muestro que la tasa de homicidios bajó en estos últimos 10. En la nota anterior muestro también que lo de los «garantistas» o «abolicionistas» no deja de ser un mito: ene stos últimos 20 años hay cada vez más presos en las cárceles.
      Ahora bien, si para vos las estadísticas de la Corte Suprema de Justicia o las Naciones Unidas no son creíbles, no hay debate posible porque ninguna otra fuente sería más confiable, entonces nos manejaríamos con opiniones personales o de charlas de café sin base objetiva o comprobable. Cerremos, entonces todas las carreras sociales o de derecho y escuchemos sólo a Ventura, Majul, Barone o Lanata y creamos que esa es la verdad objetiva…

      1. Si reconoces que la seguridad se deterioro, se puede saber como esperas que no haya ‘sensacion de inseguridad’, y si la hay, como esperas que se corrija? Publicando estadisticas que prueben que no es para tanto, en el pais del Indec, o con una politica visible de control y sancion?

      2. No juguemos a la falacia de autoridad, y evaluemos bien las estadísticas, con alguna profundidad.
        La ONU no mide nada, sino que reproduce alguna estadística que le da un país. Me consta en otros rubros con la FAO.
        Esa tasa de 5,5 es incompatible con la tasa de 8,24 para la provincia de Buenos Aires, donde vive el 40% de la población. Te dejaría una cifra absurdamente baja para el resto, que incluye lugares significativos como el gran Rosario o Córdoba(que son el 15% del resto). Así que hay que mirar ese númer con lupa y ver si representa el mismo tipo de homicidios, y si estan todas las regiones consideradas en ese promedio, no vaya a ser que la PBA este afuera, lo que haría inutil el dato.
        En cuanto a la tasa de presos, que aumente puede ser causado por un aumento de los delitos imprisionables, u aumento en la reincidencia, y no con un cambio en los criterios del Poder Judicial.
        Y no estoy personalizando en Cristina, que más de una vez se quejó(supongamos que honestamente) sobre la actitud laxa de los jueces al respecto, sinó en los estamentos juduciales que han ido aumentando su supremacía paulatinamente en los últimos 30 años.

    2. Guillermo:
      Un par de aclaraciones: no es que reconozco que la seguridad se deterioró en estos 30 años sino que lo digo en la nota anterior, y con las cifras de instituciones confiables que encontré. Y con respecto a la «sensación de inseguridad», no doy cifras sino que reproduzco lo que dicen al respecto Clarín y La Nación. Y te repito lo que digo en la nota: «Acordamos con la afirmación que se hizo en el diario La Nación, de que la percepción de inseguridad no tiene que ver directamente con la cantidad efectiva del delitos sino mayormente con el tipo de difusión que se haga de ellos». Por lo que la mejora de ese inasible concepto subjetivo de «sensación de inseguridad» que hablan los medios dependen más de ellos que de mí. Yo sólo puedo intentar aclarar de qué hablamos cuando hablamos de estos temas.
      Eso sí, algo más importante es reducir la inseguridad objetiva y allí mismo digo que lo que todos debemos saber es que «el necesario debate serio sobre la evolución de los delitos en nuestro país no debe basarse en pre-conceptos, prejuicios o eslóganes, ni en el “sentido común”, la débil memoria histórica o datos antojadizos o inexactos sobre los hechos, sino en una visión amplia y fundamentada sobre el tema. Un tema demasiado importante como para dejarlo sólo en manos de opinólogos mediáticos, políticos oportunistas, blogueros aficionados o criminólogos de café. Debemos escuchar también, y principalmente, a penalistas, criminólogos y científicos sociales especializados en el tema».

      Mariano T:
      Tampoco juguemos a la reprobación de todo lo que provenga de Argentina por el mero hecho de su origen nacional. No nos pongamos por encima de la misma ONU, pensando que nosotros, los piolas la sabemos lunga y estos gringos zonzos se creen todo lo que los malvados K le dicen… Si impugnamos tan fácilmente los datos sobre Argentina, impugnemos todos los demás y no hablemos más del tema…
      En cuanto a los datos en sí, la última tasa anual de homicidios dolosos del conurbano que informa la Corte Suprema de Justicia (y que uso en la nota) para 2012 es de 7,66 homicidios por cada 100.000 habitantes, sobre una población de 10.302.907 bonaerenses. No veo la contradicción de acuerdo a las proporciones y las concentraciones de población en todo el país, porque es perfectamente posible que si promediamos ese 7,66 del conurbano (más violento, supongo, que Bariloche, Jujuy, Salta, Ushuaia o Posadas) con el resto de 30.000.000 de habitantes que hay en el país, la tasa nacional dé 5,5 como dice la ONU para 2012.

      1. La ONU saca sus datos de la información oficial argentina, no tiene más remedio.
        Pero esos datos son increíbles.
        Si los contrastamos con éstos:
        http://www.saberderecho.com/2014/04/delitos-en-provincia-de-buenos-aires.html cuyo origen es la Procuradoría de la PBA, vemos que son incompatibles.
        Si ambos datos son reales, la tasa de homicidios en el resto del país sería de algo más de 3, incluyendo Rosario y Cordoba, impensable. Es un dato de muy mala calidad y además sin dividir por distritos.

      2. Y encima comprobamos como en 2012 y 2013 se dispararon las cifras de «robo con armas por mayores», que es el delito de más repercusión social y el que más miedo causa.

    3. ¿Por qué increibles? Si la cantidad de homicidios provienen de la información de los juzgados de cada provincia, no de los medios, y de allí debe ir a las Cortes Supremas de cada provincia y la de la Nación. No hay doble recolección de datos, el origen es el mismo. Tampoco veo incompatibilidad en el promedio resultante. ¿Cuál es la tasa de homicidios en Misiones, Córdoba, Mendoza, San Luis, Enter Ríos? Que la tasa sea alta en Rosario y en el Conurbano no quiere decir que en las provincias sea igual. No dudo que en ciudades como Jujuy, Posadas, Neuquén o Tucumán la tasa sea bastante menor que en esos grandes conglomerados (genrealmente más violentos en todo el mundo). Es totalmente posible que el promedio del país dé lo que dice la ONU, de acuerdo a los datos de la Justicia Argentina (no del Indec). Además, según lo que informa Arballo en su blog, el dato es que en la provincia de Buenos Aires en 2013 (los de la Corte y la ONU no son de ese año aún) aumentó un 8% con respecto al 2012 (una tasa de 8,37 homicidios c/100.000 habitantes) luego de que fue bajando desde 2009 hasta 2012, que es lo mismo que reproduzco yo según los datos de la ONU y la Corte Suprema Nacional, además que aclara que no es lo mismo tomar un solo semestre que el año como dato a comparar.

      1. No se puede poner las manos en el fuego sobre que la información este bien recopilada, bien sumada, sin omisiones, etc. Por algo no esta desglosada.
        Después de todo estas estadísticas estan hechas por abogados y no por ingenieros.
        La de la provincia de Buenos Aires (no GBA sino toda la provincia)también , pero al estar más desglosada sería más fácil detectar inconsistencias. Hay distritos del GBA con tasas de 12, casi colombianas.
        Y volviendo a la incompatibilidad, el interior rural de la pcia de Buenos Aires presenta tasas entre 5 y 6. Dudo muchísimo que Capital federal, Posadas, Tucumán, Mendoza, Jujuy etc tengan tasas menores a eso, y probablemente sean mayores. Y esas ciudades, junto con Rosario y Cordoba, son el 60% del 60% restante.
        En resumen, es insostenible e increíble postular que el resto del país (lo que no es PBA)tiene una tasa de 3,3

    1. Es verdad, delitos hubo siempre, y siempre los habrá. Aquí y en todo el mundo. Es una verdad de perogrullo. Ahora, en cuanto al tema que trato en esta nota, prestemos más atención a lo que dicen quienes estudian el tema, si queremos un diagnóstico más certero sobre la criminalidad objetiva y su posible disminución (la erradicación es imposible) en lugar de enloquecernos tanto con lo que Clarín y La Nación (no yo) llaman la subjetiva «sensación de inseguridad».

      1. A los estudiosos del tema, no a los abogados, aunque algunos de ellos sean abogados. En materia de infecciones ¿a quién escucharías, a los médicos que investigan el tema o a los periodistas u opinólogos profesionales o manosantas?

  8. Basurero, a esta altura no tengo claro cual es tu mensaje. Que la sensacion de inseguridad no se justifica, aunque aceptes que hay perceptiblemente mas robos, de no violentos a con muertes? A mi en BA nadie me dice: «tene cuidado cuando andes por la calle, te pueden asesinar», el tema siempre es el asalto o el robo. Estas diciendo que eso no tiene relacion con la realidad, porque la estadistica de asesinatos no sea mala en relacion a otros paises? Estas diciendo que la incidencia de robos, algunos con violencia fisica o muerte, no justifica alarma, porque la tasa de homicidios es lo que es?

    Aprecio lo bien que has analizado la tasa de homicidios, pero me cuesta ver como se relaciona eso con el meollo de tu argumento, que la sensacion de inseguridad no se justifica.

    1. Guillermo:
      Lamento la confusión, por eso trataré de resumir ambas notas.
      En esta nota recorro lo que los diarios Clarín y La Nación explican que es la «sensación de inseguridad» de la que hablan los medios masivos, lo que es básicamente algo subjetivo y está influenciado (como señalan estos mismos diarios) por lo que muestran los mismos medios sobre lós delitos. Ellos dicen: «la percepción de inseguridad no tiene que ver directamente con la cantidad efectiva del delitos sino mayormente con el tipo de difusión que se haga de ellos”, que la misma «no se mide en referencia a la de otras ciudades latinoamericanas, sino que se la compara con la experiencia histórica»; «Los porteños consideran que el delito más frecuente es el robo, pero en segundo lugar ubican la violación, los secuestros y los homicidios, hechos ilícitos que están muy abajo en las estadísticas policiales. Hay una percepción inflada de estos delitos y los medios tienen mucho que ver»; “Hay delitos que por su naturaleza afectan más la sensibilidad, pero cuando un delito sale bastante seguido en los medios, muchas veces se recibe como si se tratara de diferentes hechos“; “La percepción de inseguridad no tiene que ver directamente con el aumento efectivo del delito -aunque se relaciona con ello- sino que tiene que ver con lo que percibe a través de ciertos casos más llamativos”.
      En cuanto a tu preocupación sobre si yo digo que la sensación de inseguridad se justifica o no, o si tiene o no relación con los delitos que efectivamente ocurren, o si la tasa de homicidios influye o no en la sensación de inseguridad, creo que ya traté ambos temas por separado en las dos notas. En la primera tomo las tasas de homicidios de Argentina, Capital Federal y Conurbano y las comparo con el resto del mundo y con la historia nuestra y analizo lo que muestran, y digo que los dichos populares del comienzo de la misma nota no se justifican, que esa tasa no subió como se cree sino que bajó en esta década, y pido que para opinar sobre el tema escuchemos más a los estudiosos y no a los medios.
      Y en esta segunda nota desmitifico el hecho de que la «sensación de inseguridad» es una mera excusa para no discutir la criminalidad, un invento actual de los gobiernos nacionales, provinciales o municipales, sino un concepto que algunos medios vienen utilizando también desde hace décadas, pero que no reflejan necesariamente la criminalidad fáctica, como dicen los mismos diarios que la difunden día a día, lo que en lugar de informarnos nos escandaliza cada día más. Para que no nos perdamos en tomar algo subjetivo, manipulable y que no varía proporcionalmente con los hechos sino con la difusión que se hace de los delitos y nos enfoquemos en los hechos en sí, en qué debemos atacar más y mejor, como sugieren los datos que muestro en la nota anterior. Que en definitiva es a lo que apuntan los estudios de la Suprema Corte de Justicia, cuando dice:
      «Es momento de comenzar a ocuparnos del daño real del delito. Para cuantificarlo y monitorear los niveles de violencia en nuestra sociedad, hay que iniciar y potenciar la investigación criminológica de campo. Nadie puede prevenir lo que desconoce. Tenemos que profundizar el conocimiento e identificar las características y causas de la violencia social. Es menester superar la etapa de análisis empírico y usar los métodos científicos que permitan diagnosticar y monitorear las situaciones de violencia con más fina precisión, detectando los núcleos problemáticos que señalen condiciones de vulnerabilidad criminalizante y victimizante, como también las debilidades del funcionamiento del aparato preventivo y represivo. Esto requiere que la criminología nacional potencie la investigación en el terreno de los hechos. Debe quedar claro que la criminología de campo no es una mera estadística criminal, sino investigación orientada a la obtención de resultados que orienten estrategias preventivas. Ante la ausencia de estas investigaciones, la reacción política suele consistir y agotarse en la mera reforma de leyes penales, omitiendo los esfuerzos para optimizar el aspecto preventivo que tienda a evitar o disminuir la frecuencia de los hechos y no a operar con posterioridad a ellos, cuya eficacia es poco menos que nula.»

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