Lo que está en juego en una fractura social

 Se ha convertido en un tópico muy visitado, y más aún desde el affaire Ricardo Darín, el de la llamada fractura que atravesaría a la sociedad argentina a partir de lo operado en ella por la experiencia de casi diez años de kirchnerismo. En realidad, se puede decir que existe –esta discusión– ya desde el llamado “conflicto del campo”, y se ha vuelto recurrente desde la reelección de la presidenta CFK. Incluso lo hemos abordado aquí y ha sido parte de un programa especial de Jorge Lanatacon evidentes intenciones de construcción editorial antigubernamental.

Se ha establecido desde diversos sectores que existiría al interior de la ciudadanía un odio mutuo que la tendría dividida en dos bandos irreconciliables. Pongamos que, efectivamente, así sea. Antes una aclaración: acá importa bien poco Ricardo Darín en sí; discutirlo a él, o a cualquier otra persona a que en el presente se pueda llegar a aludir, en particular.
Ahora bien, la intervención de Darín disparó, sí, cuestiones bien interesantes; las referidas en el primer párrafo del post, que formaron parte importante de sus respuestas en un reportaje otorgado a la revista Brando que mereció respuesta, vía carta, por parte de la Presidenta.
Por caso, días antes de este episodio incluso, en una mesa de debate celebrada en el programa de radio de Jorge Lanata entre varios periodistas de distintas empresas de medios de línea editorial adversa al oficialismo, uno de ellos, el doctor Nelson Castro, dijo, a este mismo respecto, que lo peor, a su juicio, era que se había recreado la vieja dicotomía peronismo-antiperonismo, que en su entendimiento era algo que se había solucionado durante la fase menemista del peronismo.
Y he allí, en la afirmación de Castro citada ut supra, lo preocupante. La pregunta vendría a ser, no si se desea (o no) la reconciliación nacional, sino para qué y cómo se la quiere.
Porque, aceptemos que durante el menemismo se haya elaborado la concordia, ¿al precio de qué fue todo eso? Es cierto: el doctor Menem se abrazó con el almirante Isaac Francisco Rojas, probablemente el símbolo máximo del gorilismo antiperonista, en lo que pareció –enfatícese el pareció– ser el cierre de un capítulo histórico de enfrentamientos que las más de las veces se saldaron a sangre y fuego.
Esa trama incluyó otros episodios resonantes en el mismo sentido, el más significativo de los cuales resultó ser el indulto, en 1990, de las penas de prisión que a esa fecha cumplían los jerarcas militares que integraron las distintas juntas de gobierno durante el auto denominado Proceso de Reorganización Nacional, en lo que realidad vino a completar la saga iniciada por las leyes de obediencia debida y de punto final.
Y que, en definitiva, formaban, todos esos expedientes, parte de un abordaje reduccionista de lo que fue aquella dictadura, en tanto depositaba las culpas sólo en los integrantes del ejército, que apenas ejecutaron decisiones construidas por una compleja red de intereses y actores ajenos al elemento castrense.
De modo tal que cabe concluir que aquella –para nosotros ficticia– paz referida, y al parecer anhelada por aquellos cuyas personas, se insiste, no pretendemos poner en cuestión, se construyó sobre la base de la impunidad y el olvido, o bien a través de la tergiversación de la historia más trágica que le tocó vivir al país –o de la falta de voluntad de inteligirla en su recto sentido y esencia, a tono con lo expresado en el párrafo anterior–.
No cuenten con nosotros si es que acaso se cree que resulta necesario retomar la senda dibujada por la legislación del olvido y el perdón para abonar a la tan ansiada calma de los espíritus. Porque bien es cierto que el edificio conceptual y operativo diseñado por el Proceso y sostenido por la democracia de la derrota –sustentado en la falta de correlación entre delitos y penas que surgiera a partir de la impunidad– ha venido siendo interpelado desde 2003 –aunque se entienda que inacabada y/o inadecuadamente–.
Todo eso generó, genera conmociones, pero que uno entiende necesarias. Es, quizá, el precio que cuesta la construcción de una democracia con contenido y espesor: y vale la pena pagarlo.

Acerca de Pablo D

Abogado laboralista. Apasionado por la historia y la economía, en especial, desde luego, la de la República Argentina.

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72 comentarios en «Lo que está en juego en una fractura social»

  1. Sin ser un entendido en estos temas, entiendo que el maniqueísmo político todavía no lo hemos podido resolver o estaríamos en alguna fase inicial en el que el mismo se estaría suavizando (a pesar que dudo que ese maniqueísmo sea tan profundo y extendido en nuestra sociedad). El mismo se encuentra presente desde las guerras de emancipación y el mayor exponente fue unitarios vs. federales.
    El proyecto de la generación del ’80 lo adormeció hasta la aparición del peronismo.

    Lo que señala el “dotor” (testigo de lo ocurrido dentro del quirófano cuando la operación de CFK, según él) de alguna manera tiene su razón pero como siempre y desde los ’50 se antagoniza con el anti cuando a distintos sectores del poder se le intenta discutir su liderazgo o se van contra sus privilegios, intereses e impunidad por un lado más otros «excesos» provenientes del otro.

    Y por supuesto, ni un paso atrás no sólo en lo relativo a DDHH si no en otros temas de carácter económico

  2. el mecanismo de division,un tanto esquizofrenico,sigue funcionando,no solo en la Argentina,sino en el planeta.Si lo manejaramos con cuidado podriamos disminuir la neurosis social mejarando la convivencia.

    1. El planeta es un poco grande. Pero, sacando paises estilo Rwanda, no se me ocurre facil un pais que, sin estado de guerra interna, tenga una division tan marcada en dos sectores que se odian a muerte como Argentina, y que ese odio sea fomentado y exacerbado desde el gobierno.

      1. Ésa es tu imaginación y nada más, Guillermo. ¿Dónde hay dos mitades que se odian? Acá pasó eso en serio, pero en otras épocas, no hoy. Y sí, antes que lo digan, hay que comparar para advertir que a la fecha no ocurre nada de eso que vos decís. Ahora bien, si yo no quiero ser amigo de Lanata, ¿por qué me quieren obligar a serlo? Una cosa es no ser todos amiguitos, otra que nos odiemos. No es cierto que hay odio, en todo caso ocurre en alguna esfera del microclima que no afecta al 95% del país.

      2. Como bien decis, paso fehacientemente en otras epocas. Si sos alcoholico, la forma de salir es no tomar. Si sos alcoholico, dejaste, pero llenas la casa de botellas abiertas y vasos servidos, vas a estar adicto de vuelta en poco tiempo. Este gobierno, alentando a bestias como Bonafini, D’Elia, etc, y haciendo deliberadamente un discurso setentista cada vez que puede, ha rerecreado a sabiendas, para su ganancia, el enfrentamiento y el odio de esa epoca. No son inocentes en lo que hacen.

    2. Lee los comentarios en este blog y otros, los discursos de Cristina, y los comentarios de lector de La Nacion, como muestra. Puede ser que, asi como hay matrimonios donde el la llama a ella ‘puta’ todo el tiempo y ella a el ‘sorete’, y se abofetean cuando les viene el humor, pero si uno de los dos se muere el otro queda desconsolado, la Argentina sea una comunidad en paz consigo misma con un alto grado de integracion. Mi creencia, por lo que veo, leo y escucho, incluyendo tus escritos, es que no.

      1. Y en que se basa el tuyo? Sos Poliarquia? Si pusieras la mitad de la energia que pones en buscar argumentos descalificantes en tratar de ver (y tratar dejar de ser un fanatiquito mantenido por sus viejos pelotudeando sobre temas que manejas por linea bajada mientras esperas que te traigan el desayuno) dirias cosas mas sensatas.

      2. Disculpame, pero vos sos el que descalificaste, en un blog, un comentario basado en opiniones en el blog – o sitios similares. Si podes argumentar que no es cierto, que las opiniones en este blog no confirman lo que digo, y los comentarios de La Nacion tampoco, hacelo. Pero si lo unico que podes hacer es personalizar el argumento y descalificarme, aguantate que te hagan lo mismo. Que no es insulto, simplemente reflejo de la realidad. Es tan obvio a esta altura que sos un burguesito con mami y mucama/s que se ocupan de la ropa y otras necesidades, mientras vos como Rousseau elaboras como salvar al pueblo (no sugiero que te rasques el higo en el proceso, como hizo alguien alguna vez aqui), que no veo porque te tiene que ofender. Es como si te dijeran que no sos rubio.

  3. Pablo, no seas inocente ni boludo, por favor. ¿A cuánta gente el kirchnerismo tilda de facho y gorila? Ni por asomo la inmensa mayoría depositaria de estos calificativos son pro milicos ni nada por el estilo. No jodamos, la confrontación dialéctica es una estrategia pensada que el oficialismo ha propuesto como juego.

    Moreno en el extranjero con una bandera que dice «Clarín la tenés adentro». Decime si eso no es ser hijo de puta, tener ganas de chicanear, barrabravismo puro.

      1. Antes del «campo» el enemigo fue, Botnia, EEUU, etc. Este gobierno supo desde el principio inventar enemigos imaginarios.

      2. No es una respuesta profunda, Milciades, tanto como no lo fue el comentario que la originó (a la respuesta), que impuso esa tónica. Yo desde el vamos no creo en eso del enfrentamiento a muerte. El 90% de mis relaciones personales y laborales son visceralmente antikirchneristas y sin embargo siguen siendo quienes eran en mi vida antes del kirchnerismo. Papá, mamá, tíos, abuelos, mejores amigos. Nadie de mi vida es kirchnerista, y no pasa nada. Si ustedes me invitan a un asado, voy. Así que básicamente me burlo del asunto. Pero no me caben dudas que a lo que se aspira es a cortar el clima «confrontativo» no por la supuesta inconveniencia de los enfrentamientos en sí, sino por el sentido que han adquirido.

        In memorian Guillermo Nimo ahora que nos ha dejado: por lo menos, así lo veo yo.

      3. Como dijo el abuelo de spider man, todo poder conlleva una responsabilidad. Y el oficialismo ha decidido generar espacios de confrontación. A mí me han dicho gorila, en una reunión, por exponer un punto de vista distinto. A todo esto, me defino políticamente – si hay tal cosa para un ciudadano común – como humanista. Me calenté, dije «ok, listo, hasta otra campeón», y punto. Ahora, pongo 678 y los de afuera son todos gorilas-fachos-golpistas, incluso los que hasta anteayer eran nac&pop.

        Hay una intencionalidad, y es clara. Combina la eterna victimización peronista – el famoso «nos atacan porque somos negros» con la amenaza imaginaria de un fascismo por suerte no olvidado pero actualmente inofensivo. Indigna un poco, ver a gente que vive en puerto madero, con choferes, aviones y casas en punta hablar de que son los negros. Indigna, también, ver decir estas cosas a gente que en su mayoría nunca se ha arremangado más que para dar un discurso con look&feel popular. En fin, hay mucha falsedad, aparte del insulto. Una vez más, violencia es mentir.

      4. ¿Como quien empezò???.
        Que carajo tiene que ver??? (aùn sindo cierto lo que decìs). Se gobierna de ARRIBA hacia ABAJO, se CONDUCE de la misma Manera, y se baja linea de la misma forma.
        Exite un relaciòn de fuerzas y por sobre todas las cosas una responsabilidad por parte del que Gobierna (y como tanto gusta a la militancia CONDUCE).
        Si, esto lo decìs con convicciòn y no fue un arrebato, te sugiero que te pases una privada, y dejes de dilapidar recursos publicos (seguro que alguien los necesita màs que vos) ya que la UBA no esta haciendo mella en tu persona.
        Perdòn, pero la pelotudez me hace calentar

      5. Ese fue el principio. Transformar un reclamo vigoroso por un tema impositivo en una guerra contra supuestos poderes destituyentes, un momento en el que todos tuvimos que tomar partido, y donde empezó la guerra contra la prensa independiente porque no defendía al gobierno y estigmatizaba a los que protestaban.

    1. Ninguna fiebre, pero que no me traten de idiota, gorila o facho, ni justifiquen una clara estrategia confrontativa escudándose en la dictadura. Conmigo no.

    1. Sea huevo o gallina, podrias dar un ejemplo de estrategias conciliatorias del kirchnerismo? Cristina se encuentra regularmente con politicos opositores, por ejemplo? Alguna vez dijo algo elogioso sobre algun opositor (que no fuese cuando haya dicho que ella habia hecho algo bien, o apoyara al gobierno en el Congreso)? No hay huevo y gallina cuando se trata de politicas de gobierno. El gobierno tiene la posibilidad de plantear agenda y tono de debate, la oposicion mucho menos.

      1. Muy oportuno tu comentario justo el día en que Macri se niega a concurrir a una reunión de trabajo por el subte y una semana después de que el arco parlamentario opositor se niega a concurrir al acto por el regreso de la Fragata Libertad.

      2. El acto de la Fragata fue armado como un acto partidario de endiosamiento a la jefa del partido, con afiche atribuyendole un rol heroico que nunca tuvo, cuando se sabe que la Fragata se recobro gracias a la habilidad profesional de Susana Ruiz Cerutti y la embajadora en Nigeria. Dos mujeres que, en la orgia cristinista, no merecieron mencion alguna.

        Cuando CK deje de usar el poder como usa al cirujano plastico, seria concebible que la oposicion se sume actos genuinamente patrios. En payasadas partidarias, no.

      3. En efecto: el gobierno eligió a las personas adecuadas y les dio las instrucciones políticas adecuadas de lo que se debía hacer.
        Y esas personas, como son competentes, así lo hicieron.
        Así se analizaría normalmente cualquiera de estos casos que ocurriera en cualquier país.
        (Además, con un poco de objetividad no se pintaría a Ghana como un país ejemplar ni a los buitres como honestos inversores).
        Pero claro, hay que decir que todo es entre malo y horrible.
        Y las cosas buenas o exitosas se deben a los funcionarios técnicos de rango intermedio o menor.
        A esos funcionarios NADIE les dio instrucciones ni orientación.
        O se las dieron y ellos no las obedecieron e hicieron lo contrario.
        Pese a lo cual ¡oooops! siguen en sus puestos.
        Otras cosas buenas o exitosas de estos 10 años se deben al precio de la soja, al General Roca, a la victoriosa guerra contra la subversión, a las inversiones de la época de Menem y a las manchas solares.
        Estos son los gobiernos más suertudos de la historia, por lejos.
        Sin contar con las victorias electorales, que se deben a que la gente se confundió y puso otra boleta. Y al precio de la soja.

      4. Le pagan por palabra? Si es un acto nacional, en celebracion de un hecho nacional, es abierto a quien quiera ir. Incluida la oposicion, como ciudadanos del pais. Si es un hecho partidario, al que se invita a los miembros del partido, la oposicion no tiene lugar en eso, ni iria. No entiendo porque necesita defender cualquier cosa. No se a que paises se refiere con «así se analizaría normalmente cualquiera de estos casos que ocurriera en cualquier país.’ No en los que yo conozco o vivo, por suerte.

      5. Argumento alguno sobre actos partidarios para fines partidarios? Si va a salir con el verso de la corpo, la opo, etc, para inflar el vale, no se moleste.

      6. Sigo esperando si tiene algo que decir sobre la diferencia entre acto oficial nacional y acto partidario sectario. Que pasa, no consigue encontrarlo en la tabla de aranceles?

    2. Año 2003, Néstor Kirchner no había asumido todavía.
      – J. C. Escribano, patriarca de La Nación, le pone un pliego de condiciones en un desayuno. Ante la falta de asentimiento, publica un editorial que dice que, según dice la gente importante que toma decisiones en los EE. UU., el gobierno NO VA A DURAR NI UN AÑO.
      – Por esos mismos días, Mirta Legrand recibe a Néstor y Cristina y les dice como saludo: ¿Así que se viene el zurdaje?
      Es sólo ejercitar un poquito la memoria.
      Quiero decir con esto: esas actitudes venían de quienes NUNCA, pero NUNCA, pensaron siquiera en dialogar (vaya como ejemplo: 1976-1983).

      1. Bueno, Raúl, ese saludito de Mirtha Legrand es para cagarse de risa! Disfrutá un rato, relajate, viejo. Además, habla de cierta sensibilidad que flotaba en el aire en ese momento. Mirtha Legrand, así como los otros famosos mediáticos (Maradona, para empezar), cuando dicen algo así no es que tengan razón, sino que expresan algo que se respira en las colas de las verdulerías y que se nota en las caras de las señoras con el changuito. Y tenía razón Mirtha, nos guste o no nos guste, el gobierno de los Kirchner se estableció como a la izquierda de los que los habían antecedido en el poder, ¿o no? Después, que la izquierda que ellos se enorgullecen de encarnar «afuera» se viva como «zurdaje», y bueno, es un cierto estado de la cultura argentina. Sí, esa forma de pensar se recibe como «zurdaje», no como representante «directo» de lo que se expresa en las charlas entre los taxistas y sus pasajeros o en las oficinas públicas. De hecho, Kirchner en 2003 ganó sin prometer un gobierno de izquierda. Empezó a chapear con esa orientación política una vez en el poder y habiendo conformado cierto núcleo hegemónico en lo que hace a la cultura y habiendose asegurado que la rueda que Duhalde había dejado rodando en lo que refiere a la economía tenía aire para varios años.

        Saludos

      2. «habla de cierta sensibilidad que flotaba en el aire en ese momento»

        «Mirtha Legrand, así como los otros famosos mediáticos (Maradona, para empezar), cuando dicen algo así no es que tengan razón, sino que expresan algo que se respira en las colas de las verdulerías y que se nota en las caras de las señoras con el changuito«

        ¿Te fijaste bien lo que escribiste? ¿La sensibilidad era de «laggente» o de algunos? Mirtha y hasta el Diego arriesgo ¿saben lo que se dice «en la cola de la verdulería»?

        ¿Es lo mismo decir «izquierda» que «zurdaje»?

        Tus análisis sico/sociológicos, sin un claro fundamento más allá de tu profundo deseo, dan pena

      3. El comentario de Mirtha, ponele. De todas formas no es cierto que eso fuese algo que se hablara en las colas de la verdulería, entre otras cosas porque muy difícilmente en una verdulería conozcan el tema del zurdaje/derechaje, o si lo conocen lo traten. Y por supuesto es altísimamente improbable que Mirtha Legrand conozca qué cuernos se habla en la verdulería, siquiera en la vereda de su casa, sencillamente porque no las frecuenta.

        Convenientemente eludieron lo que en su momentos incluso muchos que hoy no son kirchneristas como Tenembaum y Zlotogwiazda entendieron como amenaza velada: el editorial de Escribano.

      4. Diego:
        Esquivás el otro ejemplo: el del editorial de La Nación. Que no responde precisamente a la cola de la verdulería sino a las reuniones de gente muy rica y poderosa, de aquí y de afuera.
        Decís que Kirchner no prometía un gobierno de izquierda: más a mi favor.
        Los dos ejemplos que di (y habría más) significaban una ‘marcación de cancha’ PREVIA a cualquier cosa que hiciera NK.
        Porque NK, si bien no prometía nada de izquierda, sencillamente no había ‘hablado con quienes tenía que hablar’ antes de asumir.
        No había ‘consultado con quienes tenía que consultar’ sobre los ministros que tenía que nombrar.
        Era una forma de decir ‘aquí mandamos nosotros. Siempre hemos mandado, pero desde 1975 mandamos sin interrupciones’.
        Viene de los mismos sectores que antes dijeron: ‘hay que matar a todos los que sea necesario’.
        Yo diría que no se anduvieron nunca con chiquitas.
        Esto no es un tema de divas de TV, señoras del barrio ni taxistas.
        Son temas de poder. Banalizarlos para Doña Rosa, es lo que suelen hacer y es lo mismo que hacés vos.

      5. Eso es lo peor de todo, Raul. Que alguien sostenga que es normal y lógico que un presidente deba reunirse con tus mencionados. Ahora vas a ver que la respuesta es: «en los países serios es así».

      6. Mirtha Legrand es un personaje popular. No necesita hacer una encuesta por los barrios para largar lo que se percibe en la calle. Lo mismo, por ejemplo, con Maradona. ¿Qué sabe Maradona de política? Sí sabe colgarse de algo que «se respira» respecto de la oposición política hoy en día a lo que el otro día le puso una metáfora muy ingeniosa: «Estos no saben ni cómo se hace un guiso». Dentro de esa metáfora entra mucho. Con Mirtha, en aquella época del zurdaje, pasó lo mismo. La sociedad no es boluda, le llegan los signos que desde el poder se emanan. Mirtha Legrand con ese tonito picarón supo ponerle palabras dentro de la cultura argentina a ciertos mohínes que el kirchnerismo estaba haciendo y que la sociedad no había percibido de gobiernos anteriores.
        A Claudio Escribano no le conocen la cara en el consorcio del edificio en el que vive. No mueve el amperímetro lo que el diga o deje de decir. En todo caso sus editoriales estarían expresando la visión de ciertos sectores del poder real, pero lejos están de tener esa capacidad que personajes como Mirtha Legrand, Maradona, La Mona Giménez o Susana Giménez tienen para ponerle gestos o palabras a eso que en la calle se respira. De hecho, muchos de esos personajes famosos que en el plano mediático han conseguido esa mímesis con el pueblo luego se mandaron como candidatos a cargos políticos consiguiendo los votos en las urnas. O sea, este fenómeno existe, se da, se genera. Por supuesto, pienso que la mayoría de las veces estos personajes no sirven para gobernar. Una cosa es saber qué y cuándo tirar el guiño justo y otro poder gobernar, espacio en el que la mímesis de sentido no pude ser exacta.

      7. «No necesita hacer una encuesta por los barrios para largar lo que se percibe en la calle.»
        ¿así justificas tus leyes sociológicas»?

        «A Claudio Escribano no le conocen la cara en el consorcio del edificio en el que vive. No mueve el amperímetro lo que el diga o deje de decir. En todo caso sus editoriales estarían expresando la visión de ciertos sectores del poder real, pero lejos están de tener esa capacidad que personajes como Mirtha Legrand, Maradona, La Mona Giménez o Susana Giménez tienen para ponerle gestos o palabras a eso que en la calle se respira«
        Lo del pobre pibe Escribano es desopilante

        «La sociedad no es boluda, le llegan los signos que desde el poder se emanan«

        Ponete de acuerdo estás a full hoy.
        Insisto, fijate lo que escribís man

      8. Claro, Pablo. ¿O vos te pensás que Mirtha Legrand largó lo del zurdaje como pudo haber dicho, qué se yo, qué se venían los marcianos? Era algo que estaba en el aire, y que de hecho al poco tiempo el gobierno encarnó orgulloso, no sé por qué ahora se toman a mal este asunto. O sea, un presidente sacándose una foto con Hebe de Bonafini, se percibe en la calle como que «se viene el zurdaje», nos guste o no nos guste a nosotros. Y esa percepción, por supuesto no implica una reacción directa contra ese gobierno que «emanó zurdaje» desde sus gestos, ¿entendés? Además, ¿vos te pensás que Kirchner no sabía lo que sus gestos emanaban en el pueblo? Pero lo hizo igual porque en este país, lo que para algunos «emana zurdaje» para otros enamora. Y Kirchner, como yo y como tantísimos otros, sabemos que hoy en día, en este país, con el OK de esos que el kirchnerismo consiguió enamorar se obtiene una hegemonía cultural y moral muy fuerte. Una Sandra Russo suma más que 100 viejas comprando batatas en la verdulería. Figuras que va tomando nuestra cultura.
        Pero lo mismo pasó con Maradona el otro día. ¿O no se respira eso de que la oposición no sabría gobernar este país porque no tienen sintonía popular? Eso es no saber hacer un guiso. Y que lo diga Maradona no es lo mismo que si lo dice Aliberti, porque Maradona carga con todo ese peso de Fiorito y el chico que se identifica con los pobres y que al final pudo conquistar el mundo entero poniendo huevo, etc… ¿Va?

      9. «De hecho, Kirchner en 2003 ganó sin prometer un gobierno de izquierda. Empezó a chapear con esa orientación política una vez en el poder y habiendo conformado cierto núcleo hegemónico en lo que hace a la cultura…»

        Eso no es cierto, Diego. En 2002 Kirchner mantuvo varios encuentros con Carrió e Ibarra con vistas a formar un frente de centroizquierda. Dieron alguna que otra conferencia de prensa juntos.

        En cuanto al tema en sí: para mí la empezó Clarín en 2008. Clarín inventó que nos odiamos. Incluso consigue que gente antikirchnerista que «odia» (por decirlo de alguna manera) a Cristina pero no odia a ningún kirchnerista de a pie repita el mantra y lo señale como el mal que nos aqueja.
        Es gente que fue a los cacerolazos, gente que quiere «que se vayan», medio de derecha, medio gorila, medio antipolítica, medio lanatera (no siempre son todo junto, ojo); toda gente a la que le tengo mucho aprecio, gente macanuda con la que nunca me voy a pelear, y que nunca se va a pelear conmigo, por diferencias políticas.

        No es una impresión, debe ser así en la gran mayoría de los casos. La minoría de los casos está compuesta por, empezando por casa, los kirchneristas bobos y los alcahuetes, y por los anti-k furiosos (tipo guillermo, quintín y los que repiten sus gansadas).

        Y un párrafo aparte para los violentos que en cualquier situación (la cola del súper, el subte), a cuento de cualquier cosa, *y sin conocerte*,te empiezan a hablar pestes del gobierno con complicidad, en plan código común. Esos son los que la empezaron, señorita.

      10. Si leen ‘Pecado original’ de Graciela Mochkofsky podrán ver bien QUIÉN EMPEZÓ Y CUÁNDO.
        G. M. no es K. y no demoniza a Clarín. Pero te la cuenta tal como ocurrió.
        Pablo: ‘los de la cola’, como los ‘opinadores’ de medios y blogs, son como los tacheros fachos (de ahora y de siempre). No son ‘gente suelta’. Son estaciones repetidoras de una central.

      11. Pablo 12.26, cada uno ve lo que tiene alrededor. Vos ves ‘gente macanuda’ con la que nunca te vas a pelear. No coincide con lo que yo veo cuando voy a Buenos Aires, familias que hacen pacto de silencio para no hablar de politica en el asado, o que lo hacen cuando el/los kirchneristas de la familia se va/n. Que es el resultado de un discurso oficial que, desde 2003, alentó la confrontación y creó un ‘enemigo’. Perfectamente expresado la inmortal de Maradona LTA, ahora voz predilecta de la Sra Presidenta, en el odio que se lee en este y otros blogs. Si la gente no puede hablar de desacuerdos politicos con sus familias, mal va a poder hacerlo con gente que le importa poco y nada mas alla de las normas de civilidad.

        Es joda que salgas con un planteo de armonia nacional cuando el post es sobre la necesidad de no olvidar, de llevar a fondo el proceso de liquidacion de la dictadura. No fui videlista, ni me importa lo que le pase a los responsables de las atrocidades. Pero si se entra en la caza de brujas que el kirchnerismo plantea, en buscar conexiones con la dictadura no para corregir nada, sino para silenciar o anular gente que molesta, no veo mucha armonia nacional. Ni donde quedarian gente como Maradona o CK o Alicia K, besaculos de los militares, menemismo, y cuanto ismo ha estado en el poder.

      12. guillermo:
        Te considero dentro del grupo de los fanáticos anti-k, no formás parte del universo que describo.
        Entiendo que la fractura social es otra cosa, no el no poder discutir de política con los conocidos, estás mezclando las cosas.
        Lo del asado y los amigos que se pelean o no se hablan o no se ven más o se ven y no hablan de política creo que lo inventó Caparrós. Y es eso, un invento. Y un terrible lugar común inconducente. Las personas comunes y corrientes no pactan nada cuando se juntan a comer, sencillamente hablan de otra cosa, como hicieron, hacen y harán toda la vida. Fútbol, cine, libros, minas/chabones, viajes, crianza, qué sé yo, un montón de cosas. Se puede hablar de política, un cacho, e incluso ahí es poco probable que se vaya todo a la mierda. Salvo que, como dije antes, entre los protagonistas haya idiotas fanáticos como vos, que por suerte son un fenómeno marginal y microclimático.
        Afortunadamente la vida nos puso muy lejos. Yo con vos no voy ni a la esquina.
        Parafraseando a Seinfeld (adaptación libre), jamás en la vida me voy a cruzar con vos ni con tu psicopatía.

      13. Me faltó agregar que en esa hipotética mesa puede también haber un kircherista bobo capaz de mandar todo a la mierda.

      14. Raul no seas infatil.
        Escribano (pagado de si mismo) le puso ese pliego (si la historia fuese cierta) y Nestor lo mando a Cagar (como corresponde). Punto, no analicemos la representatividad o poder REAL de escribano ¿Para que? Hay que sostener la leyenda del «Figther».
        Lo de «La Señora», si es cierto, ocurriò en un almuerzo a solas con el y Cristina, y fue el disparador para que se despachen. Macho la misma vieja los presentò como «Zurdaje» ¿Que mejor manejo mediatico queres?. No jodamos TODO EL KIRCHNERISMO ES UN INVENTO MEDIATICO.

      15. Yo lo que hice notar es una cuestión de FECHAS tempranas.
        Si para vos el escritor de los editoriales de La Nación es un tipo suelto, y tanto ese tipo como La Nación no son ni voceros ni representantes de NADA… en fin, cada uno con su ilusión, ¿no?
        ¿Ni siquiera la participación en Expoagro te dice nada? ¿La Nación es una cooperativa de periodistas que tenían ganas de hacer un diario y nada más?
        Además, ahora resulta que ‘la Señora’ es kirchnerista…
        Y respecto a Clarín, repito: ver en el libro ‘Pecado original’ cómo fue la sucesión de hechos que llevó a la ‘guerra’.

      16. No se que tiene que ver Expoagro, en ese momento no había problemas entre el gobierno y el campo.
        Y Clarin era oficialista. La nacion nunca lo fue, pero los editoriales de La nacion(no los columnistas) son expresiones de la derecha conservadora desde hace décadas, irrelevantes.

      17. Nombré a Expoagro porque tiene que ver con La Nación, no la nombré por el conflicto. Por mí que expongan lo que se les cante.
        Lo que sí significa es que La Nación defiende intereses económicos, por si queda alguien en Argentina que todavía no se dé cuenta.
        Y eso de ‘irrelevante’ es cierto: en el aspecto electoral.
        Aparte de ese detalle, hay algo que se da en llamar ‘establishment’ o algo así.

      18. RaulC: En esas «fechas tempranas», ni vos estabas soñando defender a un gobierno contra viento y marea. Asi que màs que fecha temprana, te sugiero que lo reeemplazes por Contexto.
        Y todavìa habrìa que ver si siquiera los votaste, o si le creias el saludo.
        La Señora Kirchnerista?, no dije esto, pero Magnetto tampoco lo era y andaba por allì instalandolo.

      19. Yo lo voté a NK. De todos modos, eso no viene al caso.
        Mi tema es cómo lo pusieron en la mira desde temprano. La Nación lo trataba como vimos. También registré lo que decía M. Grondona de NK después de que él ‘osó’ no aceptar ir a su programa.
        Cuando vi que La Nación y MG se ponían de punta contra NK, empecé a pensar que mi voto (que era un voto al menos malo) había tenido algún sentido.

  4. Con facilidad se concluye que existe un correlato entre las leyes de PF y OD y los indultos (a las juntas militares) dado que el denominador común es: “leyes de impunidad” (en función de que consagraban la impunidad) aunque se traten de normativas diferentes.
    Y esta simplificación termina sirviendo a cierto relato que desacredita el Juicio a las Juntas y la figura de Alfonsín (quien cometió el sacrilegio de denunciar el Pacto de no revisar los crímenes de la dictadura) y es groseramente indulgente con el rol jugado por Menem. Sin embargo la historia es otra.

    Los indultos no fueron tema de la campaña electoral, más aun el propio Menem desmintió con bastante antelación dicha posibilidad, ante la ola de críticas que desató tal versión. Pero sabido es que él fue quien inauguró la defraudación democrática: “si yo hubiera dicho lo que iba a hacer no me hubiesen votado”.

    “Éste (C. Menem) no sólo continuó sosteniendo la teoría de los dos demonios que esgrimiera el gobierno anterior sino que profundizó una política de «reconciliación nacional» respecto a los hechos sucedidos durante la dictadura.
    De esta manera, a través de indultos presidenciales, el Dr. Carlos Menem dio marcha atrás a los avances logrados en el Juicio a las Juntas.
    Esta política fue resistida masivamente. Se realizaron varias marchas contra el indulto, la primera de las cuales tuvo lugar el 8 de septiembre de 1989 bajo el lema “Verdad y Justicia. No al indulto” y reunió a 100 mil personas.
    A pesar del repudio social, en octubre de 1989 el Presidente Menem dictó el primero de una serie de indultos…” / http://www.sdh.gba.gov.ar/descargas/materiales/apuntes/archivos/e2.html

    De esta breve reseña puede establecerse algunas cuestiones interesantes, la ponderación del Juicio a las Juntas, la falta de consenso social para la sanción de los indultos y que estos no fueron precipitados por la presión del “partido militar”, tal como aconteciera con los alzamientos “carapintadas” que arrancaron por la fuerza las leyes de PF y OD.

    Sin embargo la historia es otra, que hasta con detalles se indica aquí:
    http://www.clarin.com/zona/montoneros-llevaron-Menem-idea-indultos_0_400759945.html

    Como se puede observar en dicho texto, hay una cantidad de acontecimientos que contradicen la afirmación de la existencia de una trama secreta. Cualquier semejanza con el proceso de pacificación nacional llevada a cabo por el gobierno de Mandela es mero desvarío.

    “¿Qué hacer, entonces, cuando determinadas sociedades o grupos humanos quedan presos de un resentimiento que se retroalimenta, estableciendo un círculo vicioso que amenaza no tener fin? Para no caer en el abismo de la barbarie, vencedores y vencidos deberán buscar algún tipo de reconciliación. (…)
    El perdón es el único camino que garantiza la reconciliación. Sin pedir perdón, sin perdonar a quien lo pide, los errores del pasado continuarán amenazando al presente y al futuro. Pero sin el sacrificio de la confesión, el perdón puede tornarse un artificio instrumental sin efecto. El sacrificio es un elemento central porque demuestra la autenticidad del perdón. El sacrificio de la confesión garantiza la verdadera intención de paz. Que esa intención no existe en Argentina se prueba fácilmente: incluso después de cuarenta años de la tragedia de los años 70, no existe el menor deseo de confesar por parte de los participantes en los hechos de violencia. (…)
    …¿Como se podría perdonar lo imperdonable? se preguntaba Jacques Derrida a propósito del Holocausto. No obstante, el perdón es imaginable como posibilidad siempre que la verdad sea revelada para todos. Sin verdad no hay qué perdonar. ¿Pero qué hacer entonces cuando la verdad no es consensual y, por lo tanto, ni siquiera existe la eventualidad de una reconciliación por el perdón? En este caso sólo restan las confesiones.”
    / Héctor R. Leis / Testamento de los años 70 / http://www.bonk.com.ar/tp/category/leis/

    Sobre los indultos y la lucha contra la impunidad:
    “Después del Juicio a las Juntas hubo claudicaciones éticas” / Hugo Cañón
    http://www.pagina12.com.ar/diario/elpais/1-32996-2004-03-20.html

    http://www.sdh.gba.gov.ar/descargas/materiales/apuntes/archivos/e3.html

  5. A propósito de los dichos de N. Castro, cabe repasar los fundamentos del «aporte estratégico que esperaba la sociedad», «la reconciliación con el peronismo y la reconciliación con el antiperonismo» que concluirían con el dictado de los indultos:
    http://www.clarin.com/politica/Montoneros_3_407989202.html

    Los indultos de Menem datan de octubre de 1989 y diciembrede 1990.
    En 1995 el gobierno de Sudáfrica creó La Comisión para la Verdad y la Reconciliación quien actuó bajo el lema: «Sin perdón no hay futuro, pero sin confesión no puede haber perdón».

    “La guerra civil no es un invento peronista, obviamente, pero su fantasma asoló a sus dos gobiernos emblemáticos: el de Perón y Eva (1946-1955) y el de Perón e Isabel (1973-1976). Tanto en 1955 como en 1973 el país vivió al borde de la guerra civil, con grupos de civiles y militares armados matando gente por la calle. No es casualidad. La historia del peronismo y de las fuerzas armadas es concomitante, ambos actores se resienten por igual de su destino, se sienten incomprendidos y sujetos a injusticia por parte de sus adversarios, los cuales no merecen ni la ley. “Al amigo, todo; al enemigo, ni justicia”, según una conocida sentencia de Perón pronunciada frente a las cámaras en 1971, que sirve para ilustrar tanto el comportamiento histórico del peronismo, como el de las dictaduras militares.” H.R. Leis / Testamento de los años 70

    “La sucesión perversa de fracasos que se registran en la historia argentina en las últimas seis décadas es tanto el efecto como la causa de los sucesivos cambios de “personalidad” que cíclicamente renuevan las fuerzas del peronismo, el cual fue de derecha a izquierda, y de ésta para el centro sin solución de continuidad. El fascismo, en el peronismo de los años ’50, cumplió la misma función que el socialismo, en el peronismo de los ’70, y que el liberalismo, en el peronismo de los años ’90. Esto es, el peronismo nunca fue al encuentro de una identidad o proyecto nacional definido sino de aquello que mejor pudiese garantizar su existencia como movimiento. No puede entonces causar sorpresa que, frente a tanto movimiento, el resentimiento argentino entrase en un crescendo, abarcando al conjunto de la sociedad a través de las más variadas circunstancias. (…)
    El paradigma del discurso peronista continúa siendo aquel que describieron veinte años atrás Sigal y Verón (1986): algo en el cual cabe todo. A lo largo de su vida Perón afirmó “certezas” contradictorias sin tomar partido por ninguna de forma definitiva. Sus mejores discípulos se mantienen fieles a esa enseñanza. Pero una cosa es cierta, después del liberalismo menemista el peronismo ya no tiene más una línea de fuga hacia adelante, ya inventó todo lo que era posible dentro del repertorio existente en la Argentina. Así, el peronismo no tiene hoy condiciones para diferenciarse de su propio pasado; lo cual también quiere decir que la distancia entre peronistas y antiperonistas se acortó a su mínima expresión (en cierta forma, hoy casi todos los actores son peronistas, inclusive los antiperonistas). La Argentina asiste a la apoteosis del movimiento. Esto, hipotéticamente, abre alguna esperanza de mutación profunda de los habitus, pero el hecho es que, hasta donde la vista alcanza, por ahora el futuro de la Argentina parece ser el “eterno retorno” de lo mismo.” / H. R. Leis / Argentina en movimiento / http://www.saap.org.ar/esp/docs-revista/revista/pdf/2-3/leis.pdf

  6. Leis y quien lo cita se olvidan de que los milicos no fueron elegidos por el pueblo y los peronistas si.Es que parece que la democracia no les interesa o la desprecian.La «habilidad»de J.DPeron y de los lideres posteriores ha sido ganarse la voluntad de la gente,y favorecer(relativamente)a las mayorias.No se trata de un»eterno retorno»porque su habilidad les permita correr con el cambio de los tiempos historicos-sociales.De su adaptabilidad e interpretacion de las realides,nos guste o no.Y no es que ellos creen,porque la segunda guerra mundial y la crisis del H.N.(ECONOMICA E IDEOLOGICA)actual han sido producciones les son de origen ajeno.

  7. Como bien se indica la frase de Perón fue pronunciada en 1971.
    Antes de emitir juicio sobre las convicciones democráticas de Leis y propias, sería oportuno que leas los ensayos citados, en particular Argentina en Movimiento, ahí se explicitan las motivaciones del ensayo:

    “ …se intentará presentar aquí un abordaje basado en la condición general de la política argentina desde la segunda mitad del siglo XX hasta la actualidad. (…) …se pretenderá apenas llamar la atención sobre la existencia de factores que establecen fronteras o límites invisibles dentro de los cuales se desarrolla el accionar político de todos los actores.
    (…)Desde la perspectiva del presente ensayo resulta difícil estar de acuerdo con cualquier hipótesis de robustez o fortalecimiento progresivo de las instituciones y procesos de la democracia en las últimas dos décadas. Esto supondría que en la Argentina existe acumulada una reserva de “energía democrática”, cuando el problema del país es, precisamente, que nada es lineal y lo que se acumula en un período se gasta en otro hasta entrar en default (y eso vale tanto para la acumulación democrática como para la acumulación económica). En otras palabras, si hay algo espantosamente evidente en la historia argentina de los últimos sesenta años es que ella transcurre dentro de un gran período de involución. Los pequeños ciclos de acumulación democrática y económica se pautan, a rigor, dentro de ese gran período de desacumulación. Es en este contexto que parece oportuno investigar la naturaleza de la política argentina.”

    Saludos

    1. Aclarando que leí lo de Leis un poco a las apuradas, uno puede inferir su visión pesimista (por ser benévolo) del asunto peronista aunque no descarto prejuicio por mi parte precisamente por no haberlo leído con mayor tranquilidad.

      Como curioso no más y sin ser un conocedor profundo del peronismo, yo creo que esa falta de ideología del mismo se debe ni más ni menos la personalidad de su líder fundador y que se puede resumir en la frase célebre “la única verdad es la realidad”, basta ver las medidas impopulares o a contramano respecto de la 1er. presidencia tomadas en la 2da.
      Además, quizás, la conformación heterogénea inicial del peronismo de alguna manera quizás influyó en esa falta de compromiso con alguna ideología en particular. De hecho el abrazar a los sindicatos o trabajadores, Perón, con el núcleo de militares industrialistas, buscaba cierta legitimidad al golpe del ’43. En su primer gobierno el peronismo no se dice representante del pueblo si no es el pueblo directamente reflotando así al maniqueísmo dormido. Y su derrocamiento en el ’55 le dio la épica por que, a pesar de tomar medidas no gratas, tenía apoyo popular y reflotó en el imaginario los años dorados que serían los 3 o 4 iniciales.

      Ahora bien, es innegable la capacidad del peronismo por construir poder antes que conformar un proyecto político social, sumadas las características carismáticas de sus distintos líderes con su capacidad para percibir lo que, al menos, una minoría importante, pide o necesita. Con sus pro y contras que traen aparejados. Bajo estos términos entonces Mendez no es una anomalía dentro del peronismo. Perón, el susodicho y ponele NK han sabido implementar lo que precisamente “la gente” buscaba.

      Yo creo que el peronismo actual, con los K, es más democrático que los anteriores a pesar que internamente seguiría más o menos con la misma rigidez y verticalismo y –lo que sigue es una apreciación mía- estaría intentando conformarlo como un partido que responda a las demandas populares para evitar la emergencia del sector de derecha que tiene. Pero yo lo tomaría con una fase más de nuestra evolución que estuvo fuertemente marcada por la inestabilidad política que, como no, ha traído frustraciones económicas. Crisis política que abarca a todos, no sólo al peronismo. Que no sería un fenómeno local inclusive sino basta ver los de España antes del Rajoy o el mismo Hollande con sus centro izquierdas.

      Veremos, en la medida que los procesos sigan, mientras podamos votar digamos, se debe ser optimista o no tan pesimistas.

      Igual prometo leerlo bien y si hay que rectificar pensamientos no hay drama y algunas cosas que me parecen exageradas o incorrectas desde mi punto de vista.

      Saludos

    2. Habiéndolo leido mejor el texto y estando en desacuerdo casi en todo me gustaria resaltar dos cosas:

      Lo primero es adosarle a los movimientos e izquierdas esa cuestión fascista nazi. Si nos remontamos a esas épocas creo que todos en mayor o menor medida, están surcados por cierto totalitarismo, falta de democracia y otros vicios. De hecho al día de hoy ¿quién no tiene algo de facho dentro? Sobre todo cualquiera que esté por encima de los 30 años mínimo. Además ya ha pasado bastante tiempo ya como para que esas características sigan tan palpables hoy. Y si me apurás las derechas hoy son más totalitarias y racistas inclusive que las supuestas izquierdas.

      Su crítica al peronismo y lo hago extensible a las izquierdas, es demasiada fanática a mi modo de ver, afirmar que los reclamos por derechos atentan contra «las instituciones de la república» es un exabrupto.

      Yo creo que vos sos alguien que defiende al movimiento obrero y el sindicalismo si mal no recuerdo de intercambios en posteos viejos. De ser así me llama la atención que traigas este texto como crítico y para reflexionar sobre nuestra coyuntura actual. Si estoy confudido respecto a tu defensa de los laburantes antes dicha, pido disculpas por la confusicón.

      Saludos

      1. No. Leis se enfoca en el concepto de movimiento. Afirma que esta idea surge históricamente con fuerza en las primeras décadas del siglo XX y concluye con que “…ocurre tanto a la derecha como a la izquierda del espectro (fascismo, nazismo y comunismo se autodefinen principalmente como movimientos y sólo secundariamente como partidos).” (…) “La Alemania de Hitler y la Rusia de Lenin y Stalin demostraron que la supresión movimentista de la democracia no es un hecho de pocas consecuencias.”

        Luego en ningún momento habla de que reclamar por derechos atenta contra las instituciones democráticas, si en cambio alude a aquellos que desvirtuando la legitimidad de origen han pasado a “trabajar” de profesionales de la protesta. (pág. 499)

        Ampliando esta cuestión del movimiento que impregna la vida política argenta van algunos párrafos de un reportaje a Leis / http://www.clubsocialista.com.ar/scripts/leer.php?seccion=articulos&archivo=220

        “Lo que la mayoría de los argentinos parece no percibir es que los ciclos de la vida política argentina están marcados por un resentimiento acumulativo que tiene que ver con una dinámica de la vida política donde es mas importante impulsar el movimiento que sustenta el poder del líder, que construir las instituciones del país. El ejercicio de la justicia y el Estado de derecho dependen en gran medida de la reconciliación permanente de los ciudadanos enfrentados circunstancialmente por conflictos, pero el movimiento se construye a partir de la acentuación de la división entre amigos y enemigos.”

        “…en la historia de las últimas décadas, el movimientismo dejó de ser patrimonio exclusivo del peronismo para ser patrimonio nacional, siendo que hasta la propia dictadura militar de los Videla, Massera y Galtieri estuvo impregnada de movimientismo, como lo probó irrecusablemente el episodio de la Guerra de las Malvinas.”

        “…en determinado momento se encontraron en nuestro medio estadistas de gran valor, como fue el caso de Alfonsín, quien con todos sus errores pudo reconstruir parcialmente las bases de la comunidad política en un momento de extremo deterioro. En sentido estricto no existe nada contra la sociedad argentina, sino contra la lógica en que se inscribe su política, siempre queriendo construir el movimiento por encima del Estado de derecho, sea por izquierda o por derecha, en dictadura o democracia.”

        Saludos

  8. me gusto y comparto el coment de Silenoz de las 8.36.La alusion de leis por Ricardo F.sobre los 60 años de» involucion»en general me produce nauseas porque me hace pensar que he vivido al pedo.Que su bilis se la traguen solos.En cuanto a periodos de acumulacion y perdida economica el trabajo de Portantiero es ya clasico .

  9. Los indultos a dirigentes militares y guerrilleros fue una medida horrible desde el punto de vista ético. Ambos merecían acabar su condena antes de salir.
    Pero desde el punto de vista práctico tuvo algun mérito. Aisló a los grupos acarpintadas dentro del ejército, lo que fue fundamental para su liquidación final luego de la rebelión de Seineldin. Salir por TV en calzoncillos y con las manos en la nuca como los hizo desfilar Balza fue el final del «partido militar»

  10. entonces …
    ¿ no estamos divididos?
    que desilusión

    entonces
    ¿no vamos a una guerra civilotra
    que bajón

    entonces
    ¿la actualidad
    no es la continuación natural
    de la guerra civil inacabada del siglo XIX
    entre unitarios y federales
    y la del siglo XX
    entre peronistas y gorilas?

    otra vez mas,
    acumulo una nueva frustación
    yo estaba ilusionado con asaltar
    la recoleta, lomas de san isidro, los countries
    y proceder a ejecutar
    a todos sus habitantes
    soretes mal nacidos
    que no van a dudar
    como lo hacemos nosotros
    de hacernos cagar fuego
    si logran volver al poder

    Para que triunfe el fascismo
    es necesaria la previa existencia
    de los reformistas
    de los amantes de las buenas costumbres
    de los que pretenden mear agua bendita
    y hacen sus trucha.revoluciones desde los bares de las facu

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