La patronal terrateniente calienta motores para materializar su amenaza de reiniciar la extorsión dejada en suspenso desde el Voto NO Positivo, para nuevamente imponer por la fuerza a un gobierno democrático las políticas que favorezcan fundamentalmente a los 80.000 productores de soja los cuáles referidos a familias, representan menos del 1% de la población total del país.
La intención de extorsión es tanto más clara cuanto que se realiza en el contexto de un año electoral, donde ni siquiera los mandamaces de las organizaciones rurales tienen empacho en reconocer que sus intenciones exceden el marco político-institucional/gremial, para pasar a participar en la arena política abierta como candidatos, si algún agrupamiento de centro-derecha decidiera cobijarlos, lo que permite sospechar de la sinceridad de sus reclamos sectoriales cuando existe un interés en confrontar que puede ser independiente de la realidad del sector al que dicen defender.
En cierta medida, ese sinceramiento es positivo, porque el conflicto con la gauchocracia desatado con la 125 no es otra cosa que la lucha entre dos modelos de país: uno, el del pasado y todavía presente, ligado a la producción de productos primarios con bajo valor agregado y escasa generación de mano de obra; otro, que es el que han abrazado hace ya más de cien años atrás países que incluso tenían una base agraria y que decidieron apostar al desarrollo industrial, incluyendo a Australia, Canadá, pero incluso los propios Estados Unidos, cuya guerra civil tuvo mucho de un conflicto donde se impusieron los intereses de un norte industrial sobre un sur puramente agrario de exportación, partidario de mantener la dependencia con la potencia del momento, Inglaterra.
En ese sentido, la política de retenciones de los gobiernos NK y CFK no han sido otra cosa que establecer un tipo de cambio dual, uno para la industria y otro para el agro, estableciendo así una opción por la primera, lo que es simplemente una decisión de tipo estratégica establecida por un gobierno democráticamente elegido que se pretende desconocer mediante intentos deliberados de desestabilización política.
Sin embargo, dada la crisis mundial que determinó la baja de los precios de las commodities, sumadas al problema de la sequía, permiten que muchos puedan creer que AHORA SI, el reclamo de la patronal es genuino y no puede tener ninguna intencionalidad espuria. Este artículo del suplemento Cash de Página/12 muestra que aún con las condicionalidades anteriores, la situación se retrotrae al 2007, donde ya se había obtenido ganancias extraordinarias en los cuatro años previos.
Sigue por lo tanto sin haber nada que justifique este nuevo intento de extorsión en ciernes.
EL MARGEN (Pagina/12 Suplemento Cash)
Por Roberto Navarro
Entre 2003 y 2008 el sector agropecuario aumentó sus exportaciones en un 150 por ciento, sus ventas totales, un 160 por ciento, y sus ganancias un 340 por ciento. Esta excepcional performance estuvo basada, fundamentalmente, en la explotación de cereales y oleaginosas. El nivel de precios actual de estos granos, descontadas las retenciones, es similar al que regía a finales de 2007 para la soja, el maíz y el trigo, que representan el 90 por ciento de la cosecha, y un 27 por ciento menores en el girasol. Y los costos de explotación bajaron un promedio del 20 por ciento. En ese momento ninguna de las cámaras que representan al campo se quejaba de su situación. Hoy, en similares condiciones, acaban de anunciar un nuevo lockout empresarial.
La Secretaría de Agricultura y consultoras independientes estiman que la sequía tendrá como resultado una caída en la producción de la actual campaña de aproximadamente un 15 por ciento, con respecto a la anterior. Hecho que, obviamente, disminuirá las ganancias de 2009. Pero las 2500 grandes explotaciones, que concentran el 80 por ciento de la producción, tienen la posibilidad de utilizar métodos de riego adicional –si tuvieron la previsión de reinvertir parte de sus fabulosas utilidades en esta tecnología– y de cobrar los seguros de sequía que ofrecen los bancos. Para los más pequeños el Estado nacional destinó 230 millones de pesos en subsidios y declaró la emergencia agropecuaria, que pospone por un año el pago de los principales impuestos.
En 2003 la producción de granos, el principal rubro de explotación agropecuario, fue de 66,8 millones de toneladas; en 2008 alcanzó los 95,4 millones de toneladas, un 42 por ciento más. Aduana registró que esas ventas significaron ingresos para los productores por 10.214 millones de dólares en 2003 y por 25.397 millones de dólares en 2008, un incremento del 148,6 por ciento. En 2003 –siempre según datos de la AFIP– el campo tributó de impuesto a las ganancias por sus utilidades de 2002 un total de 1183 millones de pesos. El año pasado pagó 3841 millones, 225 por ciento más. Las estimaciones de lo que deberán pagar por sus ganancias de 2008 superan los 5000 millones de pesos. Es decir que, según sus propias declaraciones juradas, aumentaron sus ganancias en un 340 por ciento en términos nominales en un lustro.
El seis de noviembre de 2007, el gobierno de Néstor Kirchner aumentó los derechos de exportación de los granos. Las cámaras empresarias del sector protestaron por la medida, pero finalmente la toleraron por el buen nivel de precios de los cereales. El precio actual de los principales granos, descontadas las retenciones vigentes, es similar al de ese entonces. La soja, que representó en 2008 el 54 por ciento de la producción, cerró el jueves último a 384 dólares la tonelada. Descontándole el 35 por ciento de retención vigente, el productor recibe 250 dólares. En noviembre de 2007 recibía 252 dólares. El maíz, que significa el 27 por ciento de la cosecha, con una retención actual del 32 por ciento, cotiza a 124 dólares, un dólar más que en 2007. Es decir que en más del 80 por ciento de la producción, los ruralistas reciben el mismo precio que en 2007. En el caso del trigo, el productor obtiene un 9 por ciento menos que en el período citado, mientras que en el girasol la baja es del 27 por ciento.
Los principales dirigentes agropecuarios afirman que por la sequía los rindes por hectárea serán menores y que por lo tanto ganarán menos. Pero no hablan de la fuerte baja en los costos que los está beneficiando. El precio de los agroquímicos cayó un promedio de 35 por ciento en el último trimestre, arrastrado por la caída del petróleo y por la misma baja de los granos. Las semillas cuestan 20 por ciento menos. Pero la baja de costos más importante es el derrumbe en el valor de los arrendamientos, que supera el 40 por ciento. El año pasado se pagaban hasta 23 quintales de soja por hectárea; en la actualidad ningún alquiler supera los 15 quintales la hectárea y en muchos casos se están pactando 12 quintales. El 70 por ciento de la producción nacional de granos se realiza en campos arrendados y para los productores el costo del alquiler significa el 50 por ciento del total de sus gastos. Según la revista Márgenes Agropecuarios, la de mayor circulación entre los productores del campo, en promedio, se estima que la caída de costos supera el 20 por ciento.
Cuando se revisan los resultados de 2008, año marcado por el conflicto agropecuario, surge que el sector rural obtuvo una alta rentabilidad. El aumento de las ganancias declaradas a la AFIP fue del 52,8 por ciento con respecto al período anterior: 2514 millones de pesos en 2007 y 3841 millones el año pasado (los pagos de ganancias corresponden siempre a las utilidades conseguidas el año anterior). A la vez, las exportaciones treparon de 19.300 millones de dólares en 2007 a 25.397 millones en 2008, 31,5 por ciento de aumento.
La diferencia entre los costos de la sequía que estima el Gobierno con respecto a los de las cámaras agropecuarias es enorme. En el Ejecutivo hablan de 2000 millones de dólares; Confederaciones Rurales Argentinas asegura que se perderán 5000 millones de dólares. Más allá de los métodos de cálculo que haya utilizado cada uno, hay un concepto principal a definir: ¿a qué se le llama pérdida? Es lógico que un pequeño productor que tenía 50 cabezas de ganado y se le murieron hable de pérdida. Pero, según estimaciones del Ministerio de Economía, los grandes productores pasarán de ganar un 100 por ciento sobre inversión neta en 2008 a un 50 por ciento en 2009. Y dan un caso concreto: un campo de 200 hectáreas en el norte de la provincia de Buenos Aires sembrado de soja el año pasado arrojó una ganancia de 433 dólares por hectárea, mientras que en 2009, a precios del viernes último, dejará 290 dólares. Al cambio actual, esos 290 dólares significan 1015 pesos por hectárea, casi lo mismo que arrojaba esa explotación a fines de 2007, pero un 600 por ciento más que los 155 pesos que dejaba en 2001 ¿Puede llamársele pérdida a esos 290 dólares por hectárea? Los popes de las cámaras gremiales piensan que sí y por eso proponen un nuevo lockout.
La sequía reduce el rendimiento en cantidad de quintales que se cosechan por hectárea y en muchos casos ni siquiera permitió sembrar. El factor climático es un determinante de rentabilidad importantísimo para el campo. Los productores lo saben. Por eso existen elementos para paliar esa amenaza siempre presente. Una de ellas son los seguros climáticos que ofrecen los bancos. Según el tamaño de la explotación y el alcance de la póliza, el seguro significa entre un 2 y un 5 por ciento del costo total. Muchos grandes productores lo tienen; otros, más arriesgados, hoy se arrepienten de no haberlo contratado. Como siempre, para los productores muy pequeños, no es accesible. Si el Estado se hiciera cargo de las “pérdidas”, nadie necesitaría gastar en seguros.
Los primeros perjuicios económicos causados por la debacle internacional ya se conocen. En diciembre la producción automotriz cayó 41 por ciento; la producción de acero derrapó 31 por ciento; la de cemento, casi 10 por ciento, por citar algunos sectores relevantes. Hasta ahora ninguno de estos damnificados anunció ningún lockout ni amagó con cortar rutas. El sector agropecuario, el que contabilizó el mayor incremento en sus ventas y ganancias en los últimos cinco años, acaba de anunciar el primer lockout de 2009 para fines de febrero.
Flor de deshonesto ese Navarro.
La trampa es que te dice que los precios son iguales a los de 2007, y que los costos bajaron un 20% desde 2008. Lo que no dice es que todavía estan mucho más altos que en 2007.
Como calculo que si hizo estas cuentaslos costos de 2007 los tenía a mano, saco la conclusión que no es un problema de hacer mal las cuentas, solo un problema de falta de honestidad y buena fe.
No es tu caso, no entiendo, porque creo que genuinamente creés que aranceles a la importación y aranceles a la exportación es lo mismo, como dos caras de la misma moneda.
Muy fácil de rebatir, esos países que mencionás nunca aplicaron aranceles de exportación, pero si aranceles de importación.
La obvia diferencia es el sujeto de impuesto. Mientras que en un arancel a laexportación el impuesto es pagado exclusivamente por el productor del bien exportable, en el caso del arancel a la importación el impuesto es pagado por el consumidor. Si bien en algunos casospueden coincidur, lo más esperable es que, salvo que sean insumos específicos, el universo sobre el que recae este arancel es mucho myor, y si son bienes de consumo el destinatarioes el consumidor en general.
Peras y bulones.
noentender:
Me parece que la parte que no pusiste de la opinión de Navarro es más importante que la que sí pusiste. La primera parte expone las razones numéricas del gobierno. La segunda muestra que razones (por buenas que sean) sin política no sirve.
Los límites de la gestión
Por Roberto Navarro
Un equipo de 200 técnicos del INTA de todo el país elaboró un Plan Agropecuario Nacional, que contempla prácticamente todas las aristas que hacen al negocio del campo: crecimiento productivo, desarrollo rural, Ley de Suelos, Ley de Arrendamiento y varios aspectos más que constituyen un nuevo esquema general de producción agropecuaria. Pero el Gobierno, hasta ahora, no lo ha presentado a los dirigentes del sector ni a la sociedad. El secretario de Agricultura, Carlos Cheppi, que llegó a la cartera con el prestigio que le daban sus 20 años en el INTA, con propuestas concretas y un perfil alto, comparado con su antecesor, fue quedando diluido porque la Presidenta no le dio el poder para llevar adelante sus planes, porque la Mesa de Enlace lo ataca de manera sistemática y por su propia inexperiencia política.
Las propuestas en materia agropecuaria, lejos de estar unificadas en una cartera a la altura del sector, se dividen entre el secretario de comercio, Guillermo Moreno; la ministra de Producción, Débora Giorgi, Carlos Cheppi y el ex presidente Kirchner. La Mesa de Enlace elige a Guillermo Moreno como contrincante, por ser el funcionario de mayor desgaste. La distribución personal de fondos e insumos por parte de Moreno, sin explicar su criterio de selección de beneficiarios, suplanta el rol que deberían cumplir los intendentes de las ciudades agropecuarias, que son los que mejor conocen a los productores más necesitados. La falta de presentación de un plan agropecuario integrado sumado a esta serie de “desprolijidades” les hace ganar legitimidad a los desproporcionados reclamos de los popes del campo. Así, los datos que se muestran en la nota principal, que revelan que el sector agropecuario fue altamente beneficiado por el plan económico de la administración kirchnerista, quedan tapados, o como mínimo confundidos, por decisiones políticas equivocadas. De esa manera, el Ejecutivo se arriesga a que, a partir de los nuevos conflictos que comienzan este mes, el sector termine consiguiendo, como en el caso de la derogación de la Resolución 125, nuevos beneficios que no se ajustan a las necesidades del sector.
Sombra, gracias por tu opinión y por traer a cuento la nota de Navarro.
Estoy de acuerdo que razones sin política no sirve. Sobretodo si se entiende «política» simplemente como la forma de lograr consenso en toda la sociedad en torno al modelo desarrollo económico más adecuado para un país. Claramente en ello ha fracasado el gobierno, pero eso no quiere decir que el modelo propuesto (obviamente desde mi punto de vista) sea equivocado.
En ese aspecto, y creo que en algún otro lugar de AP he dicho mi opinión de que el gobierno no sabe/quiere comunicar ádecuadamente la idea implícita claramente en las medidas que toma. Idea que quise transmitir en la introducción: que una opción por un modelo de mayor valor agregado necesariamente implica un menor acento en las actividades primarias. Y esto no puede estar exento de conflicto. No es una excepción pervera del mundo «K», sino la regla histórica del mundo desde la revolución industrial a esa parte.
Mi tesis es esa: no estoy defendiendo a tabla rasa a la política del kirchnerismo en este punto (ni en general), pero sí la concepción modélica que está por detrás de sus medidas de gobierno.
Pero obviamente la crítica es que ellos mismos no han sabido/querido defender esa concepción, en mi opinión más por una cuestión de un estilo político donde «pensar en voz alta» explicando claramente de cara a la sociedad las ideas subyacentes es siempre perjudicial por las reacciones que genera.
Pero en mi opinión ha sido al revés: por no explicitar sus ideas, la reacción generada ha sido más fuerte y ha tenido mayor eco en la sociedad (sobretodo la clase media), con lo que el gobierno debería preguntarse si no sería conveniente cambiar de estilo. La pregunta es: no quieren, no pueden o no saben?
Cada vez creo más en la última de las respuestas.
Sin emmbargo, y ese es el punto que yo quiero resaltar: siguen siendo correcto el modelo propuesto por el gobierno, y sigue siendo una extorsión injustificada la de la patronal agraria, independientemente de la ineptitud táctica (*) del primero.
Salutti//MV.
(*) En lo táctico, incluyo el no presentar el Plan Agropecuario. Pero vos creés que si lo presentara se acallaría la protesta de la patronal? Yo creo que deberían hacerlo para restarle argumentos, pero talvez el gobierno crea que si ponen toda la carne al asador ahora, a todavía varios meses de las elecciones, no tendrá más nada para responder a los ruralistas. Se inscribe en la táctica de «no hablar de más» (o no hablar directamente) del gobierno. Ya dije, equivocada, pero ellos tienen su fundamento.
Viendo los resultados, creo que hubiera sido mucho más conveniente haber sido más explícitos en este y otros temas, asumiendo frente a la sociedad el objetivo último perseguido.
Porque como el propio Navarro
porque sacar(o bajar) retenciones significaria volver al modelo agroexportador? que le impediria a la industria desarrollarse?
Gracias por preguntar, Pepe.
Respuesta rápida: porque si quitás las retenciones, sube el precio interno de los productos agrícolas, que son bienes saalario, lo que impacta en el costo salarial de la industria, que al subir la vuelve menos competitiva. En pocas palabras: sin retenciones, el precio del dólar que ha permitido la reactivación industrial no sería más adecuado.
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Respuesta Larga (en caso que no se haya entendido):
Como dijo un tal Stiglitz, aparte de que es obvio al ver la suba de los precios de los alimentos a nivel mundial 2002-2008, la mayor componente de la inflación de estos años fue IMPORTADA. Y por algo casi todos los países productores de alimentos (ejemplos más notorios: India, China, Rusia) aplicaron retenciones y hasta prohibiciones de exportación.
Qué tiene que ver la exportación con lo que se consume internamente, dirás? Muy simple: si los precios internacionales suben, el productor va a querer EXPORTAR TODO. Si exporta todo y faltan alimentos en el mercado interno, por ley de oferta y demanda el precio interno va a subir hasta…adiviná…que el iguale el precio externo. Así que por una simple ley económica, el precio interno iguala al externo en ausencia de restricciones.
Cómo evitás que el precio interno iguale al externo? «Bajando» el precio externo efectivo, y eso se logra con las retenciones. Entonces, ahora el precio interno termina igualando al externo MENOS LAS RETENCIONES.
De hecho, eso es lo que se hizo con el petróleo, sin que nadie de esa industria pretendiera parar el país, porque al igual que el productor agrícola estaban ganando mucho aún con retenciones (la diferencia que los gauchócratas se creen dueños del país desde la «generación del 80»). El precio de exportación del petóleo está clavado a US$ 43 aunque haya llegado en su momento a US$ 145 a nivel internacional: ese es el único motivo por el cuál la nafta en Argentina es dos y tres veces más barata que en los países limítrofes.
En el caso de la soja, aunque no es un alimento, opera por la vía indirecta: a mayores ganancias con la soja, menor incentivo a plantar trigo y maíz…y nuevamente por ley de oferta y demanda suben los precios.
AHORA BIEN, QUÉ TIENE QUE VER ESTO CON LA PARTE INDUSTRIAL?
PUES MUCHO, Y MUY SIMPLE.
La recuperación de la industria argentina desde el 2002 tuvo como elemento central el nuevo tipo de cambio competitivo. Ello implica que:
«UN BUEN SALARIO INDUSTRIAL CUESTA POCO EN DOLARES»
===> COMPETITIVIDAD INDUSTRIAL FRENTE A LOS IMPORTADOS.
Pero, si la inflación importada obliga a AUMENTAR LOS SALARIOS MAS DE LO QUE SERIA NECESARIO (obviamente manteniendo el mismo poder adquisitivo, no estoy hablando de hambrear a los obreros, justo LO CONTRARIO), se termina perdiendo esa competitividad.
Por lo tanto: las retenciones no hacen otra cosa que evitar una mayor inflación de BIENES-SALARIO (los agrícolas), lo que repercute que la INDUSTRIA PUEDE MANTENERSE COMPETITIVA SIN AUMENTAR MAS EL TIPO DE CAMBIO (lo cuál también es inflacionario para los bienes que sí o sí debemos importar porque no producimos).
Si vos querés: es como si el tipo de cambio fuera diferente para los productos industriales que para los agrícolas. Una retención del 30% implica que el dólar agrícola está a $2.45 en vez de $3.50. El «campo» igual recibe un dólar más elevado que durante la convertibilidad, pero la industria tiene otro todavía más competitivo.
Esto se llama «opción estratégica por los productos de mayor valor agregado», algo que un gobierno democráticamente elegido tiene todo el derecho de hacer y nadie a volteralo por la fuerza como quieren los gauchócratas. Que vayan a las urnas para eso.
Para finalizar: este esquema es calcado de lo que pasó en otros países que se industrializaron antes que Argentina, y que el no se hayan utilizado retenciones es absolutamente anecdótico, nada más tiene que ver con las circunstancias particulares de cada país.
Por ejemplo, en la mismísima Inglaterra pasó una cosa similar, es decir la disputa entre el sector agrario productor de alimentos que tenía intereses contrapuestos al industrial. En ese caso, como INGLATERRA NO TENIA EXCEDENTE DE PRODUCCION DE TRIGO, en vez de ser un conflicto en torno a los derechos de exportación agrícola lo fue en torno a los derechos de IMPORTACION agrícola.
Pero la esencia es la misma: los agricultores ingleses entre 1816 y 1846 obligaron al gobierno a mantener ALTOS DERECHOS DE IMPORTACION DE TRIGO, para protegerse del trigo del resto de Europa. Pero, a los INDUSTRIALES esto les causaba un problema muy grave: el precio del PAN que comían sus operarios era muy elevado.
Estuvieron peleando (incluidas revueltas operarias en contra de los hacendados ingleses) durante 25 años, hasta que al final ganó el lobby industrializador y las «Leyes de Granos» que imponían altos derechos de impo de trigo fueron volteadas.
A partir de ahí, Inglaterra se decidió por un modelo industrial donde importaba alimentos y exportaba productos industriales. La única diferencia con Argentina es que al ser un país ENORME, nos podemos dar el lujo de producir tanto alimentos como productos industrializados, y es nada más por eso que estamos hablando de RETENCIONES A LAS EXPORTACIONES en vez de DERECHOS A LAS IMPORTACIONES de granos. Salvo eso, la discusión es exactamente la misma que en Inglaterra.
No voy a abundar en ejemplos de otros países como E.U.A., Canadá, Australias…y sin ir más lejos actualmente China, que ha aplicado y sigue aplicando retenciones, justamente para apuntalar su modelo de moneda subvalauda (el Yuan) respecto del dólar para apuntalar el crecimiento industrial.
Salutti//MV.
fue excesiva la explicacion noentender, entiendo como funciona la idea de las retenciones, al fijar un precio menor de exportacion el cual se traslada a los precios internos.
sin embargo aca casi nadie come soja, con lo cual ese argumento no sirve. Ojo yo estoy de acuerdo que las retenciones sean una estrategia fiscal(o para usar la guita en infraestructura), pero no a todos por igual y no que sigan igual de altas cuando los precios internacionales se fueron al tacho y la ganancia extraordinaria no existe mas.
por otro lado no han logrado contener la inflacion de alimentos , los liberales diran es por el dolar alto, ustedes diran es por la cadena de comercializacion, de cualqueir manera NO LA HAN CONTROLADO Y LOS SALARIOS CONTINUAN POR DEBAJO DE LA INFLACION.
si el tema es el proteccionismo para poder desarrollarse, poner retenciones a tu exportaciones no es una medida proteccionista, al contrario. Proteccionismo es lo que hace USA y Europa con sus productores agricolas lo cual no nos conviene.
no estoy en contra de subir aranceles a la importacion de autos o alguna otra inductria en la que argentina este desarrollando con cierta eficiencia.
saludos.
el tema del mercado interno y los alimentos tiene mas que ver con la prohibicion de exportacion de carne y cerrar la exportacion de lomo, carne que casi exclusivamente comen ricos, no es asegurar los precios bajos para el asadito de los obreros.
De acuerdo: yo también apoyo la concepción modélica. La cuestión entonces es porque no desarrollaron las políticas adecuadas ; porque no quieren, no pueden o no saben.
El problema agrario argentino (granario, más precisamente) es complicado. El sesgo marcadamente exportador que ha tenido en toda la historia, y que genera tensiones con el resto de la economía orientada al mercado interno, tiene dos posibles soluciones: o la industrialización acá de la materia prima o la importación de unos 250 millones de habitantes que demanden alimentos que sí estaría en condiciones de producir la pampa subhúmeda (mal llamada húmeda).
La segunda opción nunca escuché a nadie defenderla. La primera es la que parece más a mano. Esta segunda opción requiere a su vez una serie de condiciones:
– debe haber mercados para los productos elaborados con esas materias primas, y si no están hay que crearlos con una política coherente estatal/privada a largo plazo. Si los mercados no existen vos podés enunciar el cambio de paradigma en letras góticas si querés que no vas a conseguir que ese cambio se haga real, pase del enunciado. Un ejemplo de política para crear y desarrollar esos mercados fue el IPCVA: después de gastar, sin control, millones de dólares aportados por los productores ganaderos se logró posicionar la carne argentina en mercados interesantes. Ahí llegó Moreno y empezó a trabar las exportaciones, a incumplir contratos, etc. ¿Entendés lo que quiero decir?
– debe haber capitales dispuestos a invertir en esas industrias de transformación (acá incluyo lácteos, carnes, huevos, fármacos, aceites, combustibles, plásticos orgánicos, alimentos acondicionados para la góndola, etc). Esos capitales están, en el propio sector agropecuario. La renta de la tierra, propiamente dicha, no consumida por los rentistas es enorme. Hay que crearle las condiciones para que se vuelquen a la industria de transformación. Algo de eso venían haciendo los pools con visión más estratégicas para fondearse y expandir su actividad. Ejemplo a tener en cuenta. Parte misma de las retenciones (que gravan en última instancia a la renta de la tierra) debieran haberse volcado en esa dirección.
– debe haber empresarios. Si existen mercados, y existen capitales, pero no hay empresarios, los capitales locales se derivan a otras inversiones más rutinarias (inmobiliaria urbana, por ejemplo) y entonces los mercados van a ser aprovechados por inversores extranjeros concentrados en megaproyectos como ha ocurrido en la industria aceitera. Ese recurso (el empresarial) también está en el propio sector agropecuario. La transformación capitalista que ha registrado el agro en las últimas dos décadas ha generado como subproducto un sector empresarial dinámico, joven, formado técnicamente, abierto al mundo, ambicioso (como debe ser un empresario – como debe serlo un buen político, dicho sea de paso-). Ignorar a ese recurso ya es grave; acusarlo de oligarca, reaccionarios, antipueblo.
– debe haber un fuerte polo científico tencnológico orientado a la búsqueda de soluciones a los problemas que acarrea ese cambio de paradigma, a mejorar la competitividad porque sin eso no se conquistan ni se mantienen mercados. El Estado dispone de esos recursos (desde el INTA a las FFAA existen recursos en abundancia) pero, según autoridades del FONTAR sólo se aprovechan en un 10% en la producción.
Aun con todas esas condiciones operando necesitás tiempo, décadas, para que esa reconversión estructural legue a buen puerto. Y política, mucha política.
¿No pudo, no quiso, o no sabe? Yo diría que, em primer lugar, no sabe. No sabe hacer política. Sabe apropiarse de capital político ajeno para acumular poder (al modo del capitalismo mafioso ruso), pero es incapaz, empezando por sus propios ministros, de operar como coordinador de recursos humanos y simbólicos, que es lo que necesita un pais como éste, que (diría que gracias a dios) tiene tan devaluao su sistema de representación tradicional que está servido para emprender una verdadera innovación política. Para eso hay que entender el sistema de redes (consultarán a Boyle alguna vez?) y olvidarse del modelo piramidal. Y ahí sí, ante la posibilidad de dar ese paso, yo digo que no pueden y que no quieren. No pueden porque no quieren.
Hace falta un recambio en la conducción del modelo.
Sombra:
«Recambio…» querés decir no kirchnerista, tendré la leve sospecha?
De ser así, por favor decime rápido QUIEN CAZZO, porque absolutamente todas las alternativas de oposición que me imagino, sean ellas perucas (perdón los peronistas por el término, no me puedo desligar de mi origen gorila, aunque me haya transformado en una especie de peronista converso [puaj! qué asco me doy!]) o NO, son versiones libres del neo-liberalismo que supimos conseguir que nos gobernara…
O sea, apoyamos la misma «concepción modélica», y el movimiento político que la ha llevado hasta ahora no puede/quiere/sabe defenderlo políticamente como debería…el problema es que el resto de la case política, salvo que me digas a quién no estoy consiguiendo ver, está EN CONTRA de la concepción modélica.
Cosa faciamo, Sombra?
Cualquiera que no sea abogado. ¿Te gusta Capitanich? A mí me gusta. Como no va a tener un grupo de 4 o 5 amigos que lo secunden?. Si en el kirschnerismo más no son. Lo demás es la rosca con los gobernadores, intendentes, corporaciones. Los Kirschner no son imprescindibles y a ésta altura creo que son prescindibles.
en cuanto a que toda la oposición sea un versión libre del neo-liberalismo si vos querés creerte ese bolazo, dale. Acá no hay posibilidad de modelo neo-liberal porque ese modelo se acaba de derrumbar en el mundo. El que venga va a tener que seguir más o menos con éstos lineamientos que no los inventó Kirschner sinó la burguesía industrial más concentrada. Lo que pasa que los Kirschner carecen de memoria mediata. Con tal de no repartir dividendos políticos se olvidan de Duhalde, de Lavagna y de todos los que enfilaron para éste lado antes que ellos. Así que no te hagás tantos problemas. No hay otro modelo. Por eso la oposición no puede hacer propuestas diferenciadas.
Muchachos: respetuosamente, yo sgueriría dejar ya de lado discusiones técnicas. Los precios de los quintales, de los insumos, de los rinde, etcétera. No es irrelevante, no quiero decir eso. A lo que me refiero, es que el objetivo de la mesa de enlace es distinto. Se trata de que el título que dejó el «no positivo» de Cobos, tomado en positivo, podría titularse: «Se aprobó en el parlamento la deslegitimación del papel del estado de intervenir con regulaciones a las actividades económicas a fín de conseguir equilibrios ante los posibles desbarajustes importados por la economía de mercado». Ese es el legado. LA mesa de enlace logró que el gobierno quedase desestimado de «meter mano», ante la sociedad, ganando su terreno para reclamar su verdadero deseo: la desregulación total de sus actividades a fin de tornar orgiásticas sus ganancias. El mundo, con crisis y todo, seguirá demandando alimentos, proteínas. El terreno para ganar extraordinariamente, está. Falta que el «intervencionismo» sea aniquilado. Así, esta que hoy podríamos llamar como una alianza social de centro derecha (a decir de Aliverti) intenta imponer condiciones a un gobierno democrático. A partir de ahi hay que plantear lka discusión y de que lado estará cad uno. Lo otro, pura sanata. Ni ellos lo toman en cuenta, hablan «situación desesperante», «conflcito irreversible», «mal humor extremo» o «violencia engendrada de arriba a abajo». En fin, nada de lo que tan bien detalla el artículo de Página. Entonces es cierto. Hay que meterle mas política.
De acuerdo en cuál es el «legado». No podríamos estar más de acuerdo. También de acuerdo en que hay que meter más política. Pero hay que ver qué entendemos vos y yo por «política».
Por ejemplo, «política» puede ser (en un sentido verdaderamente muy minúsculo de la palabra) lo que estamos haciendo vos y yo en este espacio, que para mí ES: que al menos los que estamos de un mismo lado del mostrador tengamos claro el fondo de lo que se discute, que sería lo que VOS llamás «discusiones técnicas» y lo que yo llamo nada menos que «discusiones sobre el modelo de país que queremos».
Pregunto: esta misma clarificación que yo intento hacer acá, pero dirigida al conjunto del pueblo argentino y obviamente con otro lenguaje, no debería haber sido una parte de la «política» que estamos de acuerdo que el gobierno no quiso/pudo/supo realizar desde 2003 (2004)? Hubiera sido pura sanata técnica o hubiera sido plantear nada menos que el modelo de país buscado y los peligros que teníamos por delante?
Algunos dirán: hubiera sido un suicidio político, el quilombo de la 125 lo hubieran tenido en puerta al asumir o al año posterior…puede ser…pero fijate lo que pasa ahora: toda la clase media se creyó el verso de La Nación y de la patronal oligárquico-agraria de que la política de retenciones era para recaudar y nada más que eso.
Porque casi nadie entiende que si no se hubiera hecho lo que se hizo, la «inflación importada» hubiera sido mucho mayor y se hubiera comido la ventaja cambiaria que fue el motor de la reactivación tanto industrial como incluso la propia agrícola.
Pregunto: Porqué el gobierno nunca instaló el modelo de país como elemento central de su agenda política, como sí lo hizo y muy bien con el tema de los derechos humanos?
Pregunto: Porqué nunca batalló adecuadamente contra el monopolio de los medios (Kirchner no dando conferencias de prensa ni entrevistas, etc. etc. etc.) ?
Resultado: evitaron confrontar de entrada, pero cuando finalmente e inevitablemente el conflicto les explotó en la cara, como tenía que ser, la oligarquía agraria ya tenía ganada la batalla de las mentes intelectualmente debilitadas de la clase media argentina.
Está bien, vos dirás: ahora ya es tarde para hacer lo que no se hizo. La discusión está puesta en otro escenario, más puramente de disputas políticas, de alianzas con quien y como se pueda para ganar las elecciones de Octubre y seguir a flote. Pero no terminará siendo una victoria (de ocurrir) a lo Pirro? Por ejemplo llevando como estandarte al productor sojero Reuteman? Antes de defender el modelo, ya están claudicando.
Pero aunque sea tarde para explicaciones, y aunque estemos en tiempos «políticos»…podemos prescindir totalmente del aspecto económico del problema cuando es justamente el núcleo del conflicto por tratarse de una disputa en torno al MODELO DE PAIS que se busca defender?
Qué más «político» que eso querés?
Salutti//MV.
me parece que decir que «quedo imposibilitado para meter mano en la economia» es ridiculo considerando que unos meses despues estatizo los fondos jubilatorios.
hoy nadie, pero nadie, saldria a decir que esta mal si solo cobraran retenciones del 30 o 25 por ciento a los mas grandes pools, a pesar de que los liberales les seguiria pareciendo mal, pero el discurso de «sentido comun» NO es liberal.
todo tiene que encajar «empresarios del agro egoistas neoliberales quieren 0 intervencion vs gobierno nacional y popular que lamentablemente no le queda otra que pedir esa plata para que los chicos pobres no tengan hambre» asi parece que lo ven ustedes.
yo me pregunto cuantos productores tienen la guita y las propiedades de moyano..
En realidad, lo peor es que no quedó imposibilitado…de hecho con los precios actuales las retenciones (a la soja, y sobretodo para los «pequeños» productores) hubieran sido del 28% en vez del 35%…así que la Fede Agraria perjudicó a los que ellos dicen defender.
es cierto ahi les salio el tiro por la culata.
sin embargo si con la 125 hoy estarian mas bajas las retenciones, porque no las bajan ese mismo porcentaje? mostrarian grandeza me parece.
No, no, no. Si no quieren que se meta mano cuando la mano viene pipona, ahora que necesitan una rebaja tampoco. ¿Como es eso? Cuando hay que poner no, cuando hay que pedir si. No es así Pepe. Y reitero, quedó imposibilitado porque ahora van a fondo con todo: elimincaión de regulaciones y devolución de dinero de retenciones. Y sino, no serán 120 días como antes, se vienen 500, 1000. Preparense porque o se les libera todo el mercado o adios a todo. Y esi así eh, van por todo.
Porque no había personificación en las AFJP tan nitidamente como la había en lo de la 125. Por otro lado, nadie era capaz de poner el pellejo para defender lo que era lisa y llanamente un robo.
Aparte allí no metió mano a modo de regular desequilibrios, retomó una función estatal que la Constitución Nacional le impone (no otorga, impone) que es la administración de los fondos jubilatorios.
Meter mano era en un negocio que ejercido, sin límites, se lleva puesto varios items de la vida nacional. Era un simple regulación, no una apropiación desmedida como instalaron.
¿Cuantos productores tienen la guita de Moyano? De Angelis, Biolcatti, Llambias, Gioino… ¿Que pregunta es esa?, mejor es preguntarse cuantos sindicalistas campestres protestaron en los `90 como Moyano contra Menem y sus políticas neo liberales que sí destruyeron de verdad al campo. ¿La respuesta?
De acuerdo Pablo, firmo abajo.
Tenés razón. Seguramente desmerecí muchos datos que no son obsoletos al llamarlos simplemente «técnicos». Son política, te doy la razón. Lo reformulo: digamos, análogamente, que en política, como en un texto, hay título y apartados. Lo que yo califique de «legado», sería el título y lo que mal llamé «técnico», serían los apartados. Ni mas ni menos importantes niguno que el otro. Partes ambos de un todo común, pero que hay que analizar correlativamente. Uno un texto lo arranca del título y lo sigue por los apartados. A partir de ahi, veo la dificultad. Es que con el título que legó el conflicto, los apartados, en los que estoy plenamente de acuerdo en todos, suenan incongruentes. Es que sí el mensaje primario es «desregulen», cualquier cosa que se plantee desde un proyecto o ideario intervencionista, será rechazado, será tomado como nueva medida de un gobierno obsecado, como cerrazón ideológica, negación al diálogo, ceguera de la realidad.
A eso me refería cuando decía que no nos enrosquemos en lo que, erróneamente, mencioné como detalles técnicos.
Aclarado esto, creo que finalmente caemos en igual conclusión. La estrategia comunicacional, la presentación en sociedad del proyecto de la 125, de las AFJP. Creo que primero muestran lo de abajo y luego lo de arriba. Frente a esto da margen a que los parlanchines mediáticos puedan decir que tira manotazos de ahogado, cuestiones que no tenía planeadas, y tantas sandeces más. No se entiende que un proyecto, que por allí requería algún maquillaje, algún retoque, que era netamente progresivo y progresista, tuvo que ser explicitado y defendido, muchas veces, por quienes ni están involucrados en la esfera gubernamental.
Dado que ahora están envalentonados tanto los medios como los empresarios agrofinancieros, resulta dificil imaginar que se quite del imaginario clasemediero la idea de que lo que se quita por retenciones es para las carteras de Cristina. La extorsión, disfrazada de pedido de diálogo, está planteada en un título de que se han apropiado y que quieren que se respete como «la decisión de la gente», a lo que fue el miedoso `no positivo` (ni agallas de decir estoy en contra tuvo). En fín, estabamos en la misma, cambiar el titulo para mi, defender el modelo, mas concreto, para vos, a eso me refería con más política. Está bastante bastante dificil, eso seguro.
Nuevamente de acuerdo. El nuevo título sería la explicitación clara del modelo de país, de modo a que el mensaje llegue a donde tiene que llegar, si entendí bien.
La pregunta es «cuál sería el nuevo título» a cambiar para vos.
Y cómo hacer para que «llegue». Sería una forma de que llegue por ejemplo que Reuteman sea un candidato «oficalista» (perdón, un segundo – jua jararja jua juajua jaua jarajaja !!!) ???
Ojo, más allá de la ironía, por ahí ahora hay que cooptar al alemán sojero, por aquello de: «si no puedes contra ellos haz de cuenta que te unes a ellos» (era así). Al final de cuentas si se pierde en Octubre, es el principio del fin del modelo. Pero repito, de alcanzarse la victoria, no sería una victoria a lo Pirro?
Pepe: por eso había una opción de respuesta corta y al principio; si con esa entendiste no se necesitaba leer la otra…de onda te digo. Obviamente acepto críticas y entre ellas la de que NO soy sucinto, qué va a hacer…
Pepe dixit:
«sin embargo aca casi nadie come soja, con lo cual ese argumento no sirve…»
Otra vez de onda, parece que no leíste la respuesta larga, no más, porque eso estaba respondido de antemano allí:
«En el caso de la soja, aunque no es un alimento, opera por la vía indirecta: a mayores ganancias con la soja, menor incentivo a plantar trigo y maíz…y nuevamente por ley de oferta y demanda suben los precios».
Es más, la Soja no sólo ha desplazado otros granos como el trigo y el máiz, sino también a la ganadería y la lechería…
Algunos datos extraídos del artículo «El Disparate Sojero»:
http://www.pagina12.com.ar/diario/suplementos/cash/17-3771-2009-02-01.html
Resumen si no querés leerlo completo:
– La soja representa el 50% del área plantada total del país y el 55% de la producción de granos.
– Las 35 millones de has. de soja actual supera a TODA el área plantada en 1995.
– EL crecimiento se dio a expensas de: «ganadería, a la lechería, al monte frutal, a la horticultura, al monte virgen, a la apicultura, a la producción familiar, y a otros cultivos que fueron desplazados por la soja como el girasol, el maíz, la batata y el algodón».
– «Sólo 19 naciones en el mundo permiten el cultivo de variedades transgénicas –es decir modificadas genéticamente (OGM)– de manera libre y sólo 5 lo permiten en gran escala: la Argentina es una de ellas, siendo la que posee la mayor superficie relativa de OGM sembrada de manera abierta en el mundo».
– La Soja produce problemas graves de fertilidad en los suelos, lo que significa que aún si se logra reinstaurar otros cultivos, el problema de falta de fertilidad heredado seguirá afectando la producción de alimentos de todos modos.
O sea que el argumento SI VALE para la soja, y MUUUUUUUCHO….!
Entonces, no estoy de acuerdo para nada en que quitar las retenciones de la soja sería «un acto de grandeza». Sería un acto de suicidio colectivo e irresponsabilidad, eso sí!
Depende. Para mi se debe unirse a Reutteman a fin de hacerlo uno de los mascarones de proa de la victoria en octubre. A partir de allí, y para nuestralizarlo en 2011, hacerlo ir a una interna con alguno del verdadero riñón: el propio Nestor? Cristina? Massita? Scioli?. En la interna se lo come crudo cualquier K puro dado el handicap que otorga la provincia.
Mejor lo expliqué en un post que escribí al respecto:
http://artepolitica.com/nestor-you-did-it-again-nestor-lo-hiciste-de-nuevo/
tá bien…pero mirá que está jugando con fueeeego…
Y si Reuteman se la cree y los demás impresentables del PJ perdido por perdido terminan yendo con él? Ojo que hasta el 2011 va a pasar mucha agua bajo el puente.
Y no nos olvidemos que De la Ruina pudo llegar a ser presidente. Fijate como lo terminó segundeando al Chacho (se supone que el más piola era este último, no?). Porqué el aleman sojero no puede adquirir vida propia? Sobretodo si la supuesta victoria de octubre llega a ser ajustada? (ni hablemos si hay una derrota pero Santa Fe es el único distrito donde salvan la ropa…).
Igual brillante su editorial, debería haber sido incluido en el «número especial Reuteman» de la revista Debate, posta. Espero que sea como ud. dice. Suena muy convincente, al menos.
Tenés razón. Es peligroso, totalmente de acuerdo. En lo que propongo de lanzar a Lole, para luego usarlo de rival generando una interna, no me falta temor a la traición. Para nada. Todo movimiento como ese involucra jugar con fuego. Desde ya. Pero se está en una situación límite que no puede postergar la recolección de fuerzas sin pausa. Entre todas las opciones de hacer algo como eso, está presente el temor de traición o de que se de vuelta la taba. Pero de todas, la de Reutemann me suena la mas cercana a que no ocurra o que, ocurriendo, se la pueda evitar. Motivos que me conducen: su eterno caracter de indeciso y temeroso (potenciado su temor por la habitual ferocidad que le da Kirchner a los movimientos internos), su edad, mas de 70 para ese entonces, sospecho que en una interna le va a faltar poder de fuego para debate. Todo puede salirme por la culata, lo se. Pero tambien creo que la política es riesgo ante todo y, mas hoy, apelo a la vieja frase «si no arriesgo, no gano».
Se impone retomar la iniciativa y generar cisma en la «oposición», y esta jugada de Lole ha sido efectiva, a mi parecer, en ambos aspectos. Dios quiera que salga al pie de la letra.
La analogía de De La Rua – Chacho esta buena tambien como elemento a tener a mano, pero tenés que tomar en cuenta un dato para mi. En esa interna, el aparato lo tenía la UCR no el FREPASO. Acá sería distinto, el aparato es de Nestor, lo cual le hace mas cuesta arriba las cosas a Lole, dependiente del voto no peronista, cosa que se soluciona con una interna cerrada.
Anoche estaba en un bar y un par de mesas atrás mío escuchaba a un tipo que hablaba por teléfono. Lo escuchaba porque el tipo hablaba fuerte, a veces a los gritos. su interlocutor era un tal Lucas (no Carrasco, supongo). El tipo que hablaba parecía ser del ejército. Y aparentemente el otro también, porque le recordaba cuando habían estado en Malvinas y en Chipre: «inseguridad, misterio y violencia» decía. A veces la conversación se hacía tierna, como de amantes, y otras veces los gritos mostraban que el otro lo contradecía. La cosa duró casi una hora, hasta que me trajeron la pizza y los lisos y terminé de comer y pagué. Al levantarme fuí para el lado de donde venía la voz y me encontré con que el tipo no tenía ningún teléfono, simplemente hablaba como si lo tuviera.
Ahora entro aquí y me los encuentro a N Entender y Pablo D hablando de si lo ponen a Reutemann o si puede ser que los traicione, calculando si su temeroso temperamento o su su edad pueden ser o no un factor favorable. Todo ésto como si se tratara de Nestor y Cristina mientras pasean del bracete por los jardines de Olivos.
¿Qué nos está pasando a los argentinos?
Pablo D.: tengo dos preguntas para usted
¿antes de la 125 hubo aumentos en las retenciones?
¿a algun sector que perdió por el avance de la soja se le aplicó alguna política real de fomento que mejorara la situación de esta?
Contesto: si, hubo aumentos. No, la 125 tenía el ingrediente, para mi al menos importante, de la movilidad. Fíjese ud. la volatilidad que sufre la economía mundial. Tengamos presente entonces la duda, al menos la duda, de saber si la 125 no hubiese respondido mejor que las retenciones fijas y cualquier otro gravamen a las mareas que sacuden los precios, no sólo de la soja, sino de todos los granos.
Dejemos de lado el número máximo donde usted o yo anclaríamos el valor de la reteción. Si 45, 44, 40, dejemos de lado el número. Lo rico, a mi entender y que ojalá y por dios, se rescatara, es el instrumento de la movilidad. Si 35% es un número ya abundante hoy, cosa que yo no sé, me gustaría un sistema de mini graduaciones y segmentaciones móviles. La cuestión es responder con mayor eficacia a las cuestiones con que el mundo nos golpea. Es a mi juicio, la movilidad, un instrumento valorable par la sanidad de la Constitución Nacional, ese si es mi tema porque estudio derecho.
Es cierto que los impuestos deben ser decididos por el congreso. Pero tambbien es cierto que, al menos en el caso de los commoditties agropecuarios, la volatilidad mundial juega a un ritmo en el que la constitución no puede seguir. Se mueve, para arriba o para abajo, con una velocidad mayor a la de la CN. La pregunta, un buen debate, sería ver en que medida estamos inmersos en un mundo que demanda acciones públicas que nuestra constitución no admite. Es de lejos el Poder Ejecutivo quien mas eficazmente puede responder a los vaivenes del mercado. Pero reconozco que no se le puede dar la potestad de una forma tan amplia. La solución de la movilidad es un punto intermedio para mi entre la lentitud del congreso y la necesidad de no individualizar tanto la discrecionalidad de la desición del gravamen. Una discusión parlamentaria decide trasladar al ejecutivo la responsabilidad de generar un instrumento de movilidad que quede definido y tenga preparadas las respuestas a culaquier coletazo en las cotizaciones. Repito, dejando de lado el valor en sí, el instrumento de la movilidad me parecía y me parece muy pero muy piola. Una solución que media, que toca varios puntos.
Pablo D: vamos poniendo algunas cosas más claras, de acuerdo con usted la movilidad en terminos claros (esto es sin intervenciones posteriores distorsivas) sería algo positivo, lo que no estamos de acuerdo en que ahora no se deban bajar, no podés jugar con un sector de conformación muy dispar castigando a todos por igual.
Sobre las actividades distintas de la soja casi todas las intervenciones del estado fueron pésimas o inexistentes.
Por último me gustaría muchísimo que se bajen las cantidades de has. de soja, pero para eso necesitas restricciones a la soja y estímulos al resto, si no lo balanceas tenés los resultados actuales.
Yo preguntaría, si cuando el estado pide un mayor aporte se dice NO, por que cuando se necesita de el se le reclama a los gritos? Si el mercado equilibra todo solo segun ellos, y cuando les viene fácil mandan a los que menos tienen a esperar que su copa se llene y derrame, que hagan ellos lo que pregonan ahora. Juro que lo digo sin rencor, ni sarcasmo, ni ironía. Es pura aplicación de los conceptos por los que la dirigencia agrofinanciera aboga.
Pero el estado ya había pedido mayores aportes y no había pasado nada, no será que se fueron de mambo?
Es hora de asumirlo: la 125 fue un error y los errores hay que corregirlos.
No Entender, si te está interesando el tema agropecuario te recomiendo buscar información directamente del INDEC o bien en las miles de publicaciones del INTA o las secretarias de agricultura de las provincias. Página 12 no me parece lo más apropiado para conocer como son las cosas:
Fijate en lo de Navarro que vos pegaste: el tipo dice que el daño por sequía se podría haber evitado si se hubiera invertido en riego; no tiene ni idea de lo que habla: además de que gran parte del territorio agrícola no dispone de aguas de calidad (es decir que no arruinen el suelo) ese tipo de inversiones (si hubiera agua) solo lo puede hacer el propietario que siembra su propio campo, situación que hoy es minoritaria en el régimen de tenencia. Que se podría haber contratado seguros (¿en los bancos? primera vez que lo escucho). Las compañías de seguros solamente aseguran contra sequía en las zonas de mejor comportamiento climático histórico (justamente las que éste año van a tener una cosecha normal). Más adelante se pregunta ¿a qué se le llama pérdida? Y pone el ejemplo de un campo ¡¡en el norte de BsAs!!! Para mostrar que no va a tener pérdida sino menos ganancia. Evidentemente el tipo no ha salido en todo éste tiempo de su oficina en la Capital. Una vueltita que se hubiera dado por el centro norte de Sfe, E.Ríos, Norte de Córdoba, S. del Estero, centro este de Bs.As., SO de Bs As y La pampa y tendría una idea de a qué se llama pérdida.
Y ahora traés a éste Lapolla. Que dice que se siembran 35 millones de has de soja (contra el INDEC que habla de 10 mill.); que dice que la soja representa el 50% del area implantada (el INDEC dice 10 mill sobre 33 mill implantadas, no le anda la calculadora a Lapolla); que la soja produce “problemas graves de fertilidad en los suelos” (cuales serán esos problemas graves y qué cultivo no tendrán esos problemas?); etc. etc. No sigo porque lo que sigue es el ya harto conocido panfleto de cierto fundamentalismo reaccionario que, a falta de mejor causa, decidió transformar a la soja en el eje del mal.
Yo no sé de donde saca P12 éstos expertos. Lo que sí se es que hay dos maneras de encarar la cuestión agropecuaria (como cualquier otra cuestión socioeconómica, por otra parte): una es con información de fuentes serias (Censo Agropecuario, INTA) y con ciertos criterios técnicos para la interpretación de esos datos : y otra, que a mí no me interesa, que consiste en inventar números e interpretaciones libres de número spara el lector urbano que total no sabe un carajo del tema. La deshonestidad intelectual de éstos tipos es del mismo nivel que la de De Angelis cuando dice que va a faltar trigo “por la política del gobierno” como si la sequía no tuviera nada que ver.
Ahora que la presidenta puso como último argumento para las retenciones que no puede desfinanciar el estado, las otras elucubraciones quedan en el ámbito académico, los Kirchner nunca pensaron en otra cosa con las retenciones, el resto es muy teórico, cuando no chicanero. La realidad dura es que esa mosca les vien bien.
Pero me quedó picando esa comparación con la Inglaterra del siglo 19:
A lo que ellos renunciaron fue a que su mercado interno subsidie a sus productores, relativamente menos eficientes que los yankis, con una protección arancelaria, más o menos lo que nosotros (y muchos más) hicimos siempre con nuestra industria. No lo veo mal, tampoco a proteger la industria. La pena es que abandonaron esa política de desproteger a sus agricultores en la década del 30 y que la UE tampoco la practicó.
Pero no debe perderse de vista que la situación de un país que no se autoabastece es radicalmente diferente a la de un exportador de bienes salarios. En el primer caso, aún cuando no tuvieran aranceles a la importación de alimentos, sus bienes salario son más caros que en el agroexportador, solo por efecto de los fletes y los costos de transacción, si encima ponen aranceles, la diferencia aumenta.
El consumidor argentino tiene el privilegio de que su país exporta, en vez de importar, bienes salario. Enorme privilegio que lo hace merecedor de los menores precios del mundo (a nivel commodities alimenticios) aunque eso no significa que los alimentos sean mucho más baratos porque el precio de la materia prima no incide demasiado en el costo de los alimentos, salvo en contadas ocasiones.
De tal manera que es innecesario acentuar ese privilegio con retenciones a la exportación, la experiencia internacional indica que no es condición necesaria ni suficiente para el desarrollo industrial. Que no es necesaria lo indica el hecho de que ninguno de los países que se desarrollaron industrialmente lo necesitó, incluso muchos lo hicieron aplicando la política inglesa pre Corn-Laws(o sea protegiendo a sus agricultores de la competencia extranjera como en la UE, Corea del Sur o Japón), o los otros simplemente con precios de mercado (como Canadá, USA, Brasil). Para afirmar que no es suficiente me basta el ejemplo de Argentina.