Hace un tiempo, veníamos hablando de la desconfianza en los planes de salvataje ejecutados desde los países desarrollados con la finalidad de poner fin a la tan mentada “crisis financiera internacional”. Lo dijimos acá, y acá.
Las críticas a las “soluciones” que se diseñan no provienen desde el análisis técnico de las medidas, sino mucho más simplemente, desde una especie de sentido común, expresado en un silogismo clásico de la lógica formal. Si el problema es de solvencia, si se ha generado por la sobre emisión de deuda, la solución no puede dirigirse hacia el incremento de las deudas, sino en el sentido contrario.
Este post de ayer de Andrés el viejo nos hizo recordar el asunto.
Realmente hay un problema grande en el desfasaje entre economía real y nominal. Y cuando hay que ajustar una con otra, todos pierden. El debate, ahora pasa por definir cómo se distribuyen las pérdidas. Si como dice Roubini se “tira deuda por la borda”, será necesario negociar, porque la cuenta se paga entre todos, queramos o no. Pero para empezar, es una postura de sinceramiento (también Soros expresó algo así), que no se verifica en los dichos de los líderes de los países centrales, todavía.
Vamos a ver cuánto pueden resistirse y a qué costos.
«Países emergentes» es un concepto que empezó siendo un eufemismo. Algo así como la condensación del sentido de la frase países no tan “ricos”, pero tampoco tan “pobres”. Hoy, el significado de la palabra “emergentes”, en su más cruda acepción, irrumpe con toda su fuerza. Realmente, se han transformado en países cuyas fuerzas productivas se encuentran encorsetadas por la actual forma adoptada por el sistema capitalista, y pujan por salir del corset. Pujan por emerger hasta la superficie de los países desarrollados, lugar en el cual no hay lugar para todos (los recién llegados y los que ya estaban).
Entonces, habrá que convencer a algunos países “ricos” que la fuente de su riqueza ya no existe, que es papel pintado, y que tienen que retroceder varios casilleros y empezar a remar de atrás.
Estamos de acuerdo que el problema que se origina por deudas no se soluciona con más deudas. Pero creo que tampoco es para decir de los países ricos que “la fuente de su riqueza ya no existe, que es papel pintado”.
Esos países ricos aun tienen el conocimiento, los recursos humanos y el posicionamiento como para seguir sosteniéndose por encima de los países emergentes. Tal es el posicionamiento de estos países ricos que las economías de los países emergentes dependen enormemente de ellos.
Entonces no me parece que haya que convencer a los países ricos de que la fuente de su riqueza ya no existe, sino que ellos mismos deberán entender que la forma en que sus recursos se movían y agrupaban en torno a ciertos mercados saturados en deuda ya no solo no funciona, sino que además resulta tóxico para sus propios mercados. Entonces esos capitales deberán articularse de otras formas en otros mercados, se abrirán nuevos circuitos financieros y se sincerará la economía real.
Bueno, puede ser un poco exagerada la afirmación, dependiendo en parte de cómo se la interprete.
Pero pienso que sin un sistema financiero global tan fuertemente sesgado para permitir un flujo de capitales tan de sentido inverso al generado por el comercio de mercaderías, la cosa cambiaría mucho.
El solo hecho de que el dólar perdiera parte de su «confiabilidad», de que los bancos centrales dejaran de atesorarlo, de que fuera desestimado como moneda de intercambio cambiaría radicalmente la correlación de fuerzas entre ciertas economías y otras. Con perjuicio compartido también para los emergentes. Las pérdidas serán de todos, de algunos más, de otros menos, pero de todos.
Gracias por el comentario. Saludos
Coincido con que los países ricos tienen el know how y los RRHH (bah, no sé si lo tienen los «países ricos», sí lo tiene EE.UU.). Pero el tema pasa por que para volver a poner ese motor en movimiento es necesario que se coman unas interesantes tasas de desempleo, bajas de salario, menor nivel de vida. En definitiva: ganar menos y laburar mucho más que lo que están acostumbrados.
Todo eso sumado a los conflictos sociales que se generarán por la caída del empleo (hay que decir que las redes de contención social allá no existen).
Exactamente.
Una buena devaluación.
Saludos
pa si nunca se cambia ese problema
Si,la solucion no pasa por incrememtar la deuda,sino por cambiar la estructura y el sistema economico,incluso los valores imperantes.Es un problema politico en el que los pueblos deberian imponer sus derechos.Y la necesidad,tarde o temprano,lo determinara.
Con respecto al termino»emergente» cito a Adolfo Colombres,autor de America,una civilizacion emergente,por su util aporte a la situacion.Emergente resulta un termino mucho mas feliz que subdesarrollado,como deciamos en el tiempo de A.Frondizi,asi como»down»es mucho mas feliz que «mogolico».Colombres propone como unica salida digna y constructiva el logro de una propúesta latinioamericana,que enfrente sobre todo la realidad deshumanizante del hemisferio norte,sobre todo de los E.E.U.U.,manejada por los intereses economicos transnacionales,creadores de una exclusion creciente de la mayoria de la poblacion y depredadpra del medio ambiente.Hay que combatir tanto el militarismo barbaro y el consumismo de la»era del vacio»,del falso progreso que solo significa beneficios concentracionistas.En la globalizacion se sigue viviendo la cultura como»adorno»mientras se afirma»la idea de derrumbe y decadencia».La solucion pasa por el fortalecimiento de las redes solidarias y los sujetos coectivos.Frente a las ideologias discriminatorias debemos defender la cultura en su pluralismo.El encierro y el aislamiento son caminos suiicidas.La union latinoamaericana es el proyecto deseable,con la socializacion de la riqueza y la integracion del individuo a su comunidad.Es necesario»resocializar»al hombre
Muchas gracias, Isabel, por el aporte.
Saludos
Tarde o temprano, la realidad se va a encargar de convertir esa montaña de papel (títulos, bonos, acciones, derivativos y derivativos de derivativos) en humo. La diferencia es si va a ocurrir por una acción conciente, como la que propone Roubini, o porque en los hechos ya no se pueda sostener la ficción.
El grave problema de las últimas tres décadas (el llamado neoliberalismo) es que constantemente la reinversión de utilidades fue decreciendo en relación con la masa de rentabilidad. Esto se vuelve insostenible por dos razones: 1) la débil inversión conduce a un crecimiento también débil; 2) las utilidades pagadas en concepto de intereses y dividendos se vuelcan al mercado financiero, donde contribuyen a inflar la burbuja. A su vez, esa masa de capital colocado en los mercados financieros reclama su participación en las ganancias, ya sea como prestamistas o como accionistas. O sea, la masa de «inversores» ávidos de ganancias pretenden comer una torta que crece más despacio que el apetito.
Es un círculo vicioso que, o se rompe o continúa su rotación enloquecida.
Muy buena entrada, Mariano.
Saludos
Queridos compañeros.
Soy una estudiante turística de Madrid primeriza, y me gustaría que me comentáseis a groso modo cuales son las carácterísticas de los paises emergentes, ya que, después de todo lo que está ocurriendo en nuestro país me siento un poco perdida y así en un futuro poder tener su capacidad de debate sobre estos temas que tenemos a diario en nuestras vidas.
Un saludo
Alicia: la definición de países emergentes es medio difusa. Algunos usan el término para hablar de todos los países que se conocían como subdesarrollados, otros son más específicos y lo usan más acotadamente.
En esta entrada se lo eligió para representar a países como Rusia, China, Corea, India, etc. cuyas fuerzas productivas se encuentran en proceso de industrialización fuerte, el sector secundario es el más importante de su economía, y necesitan expandirse, conquistando mercados para alcanzar mayor escala de producción, y empujando para convertirse en potencias mundiales (muy rapidita la definición).
Un saludo
no ps si nunca cambia eso