¿Así era lo del pacto de la Moncloa?


Tenemos que hacer un gobierno para todos, dice. Para los que quieren a Videla y para los que no lo quieren. Genial.

Un gobierno para los que quieren elegir mandatarios a través del voto. Y para los que prefieren bombardear plazas, desenfundar armas y sacar a los presidentes elegidos por aquellos votos con custodia policial.

Pensemos un gobierno para los que quieren el Congreso. Pero también para los que quieren una Comisión de Asuntos Legislativos integrada por tres muñecos de uniforme.

Un gobierno para los que editan libros y para los que los queman, ¿por qué no?

Para los que tienen hijos y para los que robaron los de otros en algún procedimiento.

Para los que te tocan el timbre y para los que te patean la puerta de tu casa a las 4 de la mañana.

Para los obstetras y para los que picanean embarazadas.

Para los periodistas y para los que publican lo que les mandan en un sobre desde el batallón 601.

Para los que les gusta viajar y para los que les gusta tirar gente drogada desde los aviones.

Es hora de pensar un gobierno que incluya a los maestros y a los que empalan niños, a los médicos y a los torturadores, a los artistas y a los censores, a los delegados y a los entregadores, a nosotros y a los que nos quieren matar, a los jueces que juran por la constitución y a los que lo hicieron por el estatuto del proceso.

A todos. Que eso es el pluralismo. Eso es, después de todo, la república que sueña esa gente buena.

En paracuandolotenes.blogspot.com

Acerca de Alejandro Turner

Tiene 40 años, es guionista y dramaturgo. Aunque prefiere pensar que es simplemente alguien que escribe. Escribió entre otras obras de teatro "La Salud de los moribundos" (1er Premio del Fondo Nacional de las Artes obra inédita de teatro, 2007); "Canciones tristes (cantadas como si fueran alegres)" (Primera Mención en el mismo certamen), "Dónde caerse muerto" (incluido en la Antología "Autores en construcción" editorial C. C. Rojas) y "Villarrica", estrenada en diciembre del 2008 en el Camarín de las Musas con la dirección de Gabriela Bianco, en el marco del Primer Festival de Monólogos NO HAY DRAMA.

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8 comentarios en «¿Así era lo del pacto de la Moncloa?»

  1. Antes que salte cualquier pelotudo a decir «pero Duhalde fue el que lo puso a Kirchner en el gobierno», respondo: tambien mi viejo me puso a mi en el mundo, y sin embargo si un día se pone a defender a Videla yo soy capaz de escupirle la cara.

      1. ??
        ahora estar en contra del Proceso es ser inglés?
        apoyar a los militares y sacarse fotos con un ex-capo de la policía (por tanto, un capo de las patotas de la época) y que es militar nombrado interventor de la provincia (el que maneja la zona, tal como hizo Bussi en Tucumán), hacer todo eso es lo normal de un garca.
        Por supuesto que si el garca es Kirchner, los boludos inventan alguna excusa. Podemos ver a «Varizat» también, otro garca Kirchnerista que atropelló con su 4×4 a un grupo de manifestantes y fue libre porque -en ese entonces- la justicia era adicta a los pingüinos (ahora ta en duda de en qué palenque ir a rascarse).
        Che, el único anglófilo es Kirchner que cedió explotaciones de petróleo a empresas controladas por los ingleses sin chistar (por la platita). No lo van a hacer el San Martín, y menos justificar su pasado de especulador garca al servicio de milicos interventores durante el Proceso.
        Hasta Menem en esa época estuvo preso, y el turro este, en fotos junto al Bussi de su provincia. Y por supuesto que deschavarlo es «anglófilo».

  2. Duhalde es un mamarracho.
    Pobre, está carriotizado. Se ve que le hizo mal reunirse con Lilita -como describió Morales Solá-.
    Todas estas declaraciones fueron la certificación de que el tipo fué. Solo alguien sin posibilidad alguna declara así.

  3. Yo me preocuparía por algo distinto. porqué lo dijo? Porque esta gagá? O porque piensa que le suma más de lo que le resta? Habrá detectado algun grupo significativo en algo, que se hayan sentido alcanzados por esa frase? Estoy seguro que hace dos años no lo habría dicho nadie.

  4. Mariano Te
    Mas allá de algunas decisiones populistas como el plan Jefas y Jefes que evitó un probable baño de sangre, Duhalde es un conservador pragmático que sueña con una sociedad controlada por sus corporaciones. No está gagá aunque probablemente subestime la importancia que la defensa de los DDHH ha adquirido en nuestra sociedad pese a la dueña de Jazmín y sus soluciones tan radicales como publicitadas en contra de los ladrones de manzanas.
    A diferencia de Videla no es un fascista aunque se siente junto a un cómico involuntario como Posse.
    Propone un hueco Moncloa argentino sin percatarse que eso ya ocurrió en el ’83, con una intensidad bastante superior al original español.

    No creo que haya detectado ningún grupo significativo ya que no creo que ese grupo exista.

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