Fue para presentar el hecho de la no aprobación del presupuesto como una derrota del cristinismo que Clarín armó con Carrió la opereta del miércoles pasado. El “amenazado” periodista Alfredo Leuco confirma, hoy, que ya hasta Poliarquía advierte que CFK viene arrasando en cuanta encuesta se realiza. Clarín desespera ante eso, y para desesperación, histeria y actuación, nada mejor que acudir a Carrió, quien no tiene nada para perder.
Súmese a ello, además -y esto también lo reconoce Leuco-, la líder única e indiscutida del peronismo ha retomado su agenda a pleno, ejerce su mando a fondo y el peronismo con algún peso se le está alineando por detrás sin chistido alguno (en el otro extremo, un payaso como el salteño Romero va a tener que recurrir al cavernícola de Alfredo Olmedo en su provincia para intentar retomar algo del poder perdido). En resumidas, a CFK parecen no entrarle las balas.
A consecuencia de lo dicho en los dos primeros párrafos surge la imperiosa necesidad para el establishment de mostrar caos en el Gobierno tras la muerte de Néstor, al que le han otorgado el grado post mortem de estadista. Y no paran de salirles los tiros por la culata a los GGEE, otro ejemplo de esto es que el Club de Paris accedió al pedido argentino de negociar sin el FMI de por medio, pretensión que hubo de ser calificada de irrealizable por el monopolio.
Y hay la necesidad de embarrar también, obviamente. (Sigue… http://segundaslecturas.blogspot.com/2010/11/cuando-de-desgastar-se-trata-apele-al.html)
Juás…! Leí el post del leucocito, que redepente parece escrito por Kunkel.
Lo lamento, Lulú. Ahora parece que en vez de «post-kirchnerismo» tendremos «neo-kirchnerismo» :)
Lo de Leucobich es un desastre periodístico, no tiene discurso el tipo, se agarra de donde más le conviene.
Si antes era poco creíble, ahora lo es al cubo.