Argentina
“Mostramos flexibilidad, pero vamos a ser estrictos a la hora de controlar”
Lo dijo Norberto Yahuar, ministro de Agricultura.
Yahuar: “Biolcati fue claro al decir que quiere participar del PEA”
Por Merinno Soto
–¿El anuncio sobre el nuevo esquema comercial para el trigo es lo que el Gobierno entiende como un Estado que cuida el mercado interno?
–Sí. Es buscar el equilibrio justo entre las responsabilidades que tenemos como Estado de proteger la mesa de los argentinos. A medida que la Argentina avance en un proceso de maduración como Nación y cuando todos entendamos lo que es defender puertas adentro nuestras cosas, estas resoluciones no van a hacer ni falta.
–¿El mecanismo elimina los descuentos que vienen haciendo las exportadoras a los productores?
–La elimina porque genera transparencia en el mercado, luego porque se vuelve a la famosa pizarra, después porque el control se va a hacer a través de las distintas Bolsas de Cereales del país, facilitando que cualquier pequeño productor que tenga intención de exportar directamente va, retira su ROE (permiso para exportar) y lo hace.
–¿Blanquea el sistema?
–Sí, precisamente días atrás vi un debate entre un presidente de una Sociedad Rural y un dirigente de la Federación Agraria Argentina, respecto de cómo en algún momento se habían ocultado números reales sobre una cosecha de trigo, por lo tanto no es el Estado el que lo estaba diciendo. Entonces cuando uno ve que se empieza a dar este tipo de debates, es porque algo se está transparentando en el sistema.
–¿El esquema anterior no funcionó?
–No. Me parece que hay que saber reconocer que pudimos haber cometido errores. Yo creo que éstos han sido mínimos y el objetivo de garantizar está por encima de todas las cosas.
–Pero precisamente los cupos quedaron de manos de las multinacionales.
–Bueno, en ese punto las opciones de cupos que estaban restringidas para las grandes empresas fueron aprovechadas e hicieron un mal uso de estas cuestiones. Pero todo tiene vuelta. Por eso hablo de un Estado que controla, fiscaliza y que verifica.
–¿Y esto cómo se hará?
–Para eso ya estamos en un proceso de recuperar la función de la ex ONCCA y su rol fiscalizador que tenía el Ministerio de Agricultura, y para eso ya se habló con el Ministerio de Economía, para que transfiera rápidamente esas facultades de contralor. En definitiva, mostramos flexibilidad con la liberación, pero también seremos estrictos a la hora de controlar.
–¿A qué se refiere con rol fiscalizador?
–La salida del rol fiscalizador de lo que fue la ex ONCCA dejó una franja de falencias en cuanto al control que teníamos para ingresar a los molinos o determinados lugares. Y esto es lo que se está subsanando por estas horas. Pero en nada modifica el esquema de comercialización.
–¿Está mal si le digo que el anuncio que se hará pasado mañana es muy parecido a lo que fue en su momento la Junta Nacional de Granos?
–Yo le diría que hay cosas que rescatar de esa junta, y fundamentalmente tiene que ver con el rol de contralor que podía tener el Estado en ese organismo, y que era sumamente importante. Ahora lo vamos a hacer a través de controles a las grandes exportadoras y de los ingresos que están teniendo las cooperativas. Pero hay pasos que se perdieron en el medio que eran importantes y que tal vez algún pícaro le convenía que esos desaparezcan.
–¿Las cooperativas se verán beneficiadas?
–Sin duda. Llega el momento donde los pequeños productores que por equis motivo no pueden formar parte de los grandes esquemas de comercialización, ahora tienen uno más equitativo. Las cooperativas bien utilizadas son herramientas formidables para el cambio y transformación de los países como el nuestro.
–¿O sea que también hay que monitorearlas?
–Y sí, porque tampoco pueden quedar en manos de gente que aprovecha el esquema cooperativo para usarlo como trampolín en una segunda etapa, para conformar algún tipo de corporación, si se quiere. Lo que buscamos es que en la diversidad puedan estar la mayor cantidad de opciones para el más pequeño y que desde luego pueda ubicar al mejor precio su producto.
–La Sociedad Rural Argentina había manifestado su alejamiento del PEA, pero a usted le señaló su apoyo.
–El mismo (Hugo Luis) Biolcati fue muy claro al decir que quieren ser parte del PEA. Esto lo dijo durante la reunión que mantuvimos la semana pasada, por lo tanto no tengo por qué dudar de su buena fe. Eso sí, lo quiero ver sentado discutiendo cuando haga la reunión y convoque a todos.
–Luego de su encuentro con la Mesa de Enlace, ¿tiene otras reuniones con el sector agropecuario?
–Sí, será en los próximos días con las cooperativas, ya que no están contenidas dentro de las cuatro entidades gremiales y muchas de ellas representan a importantes economías regionales del interior del país.
–¿Hay algún avance respecto del anuncio que diera la Presidenta para darle un puerto a las cooperativas?
–Lo estamos empezando a trabajar con el Ministerio de Planificación Federal y ya hemos establecido una agenda de trabajo en enero. También tenemos que resolver otras cuestiones con la AFIP.
–¿La Argentina mantendrá su postura en la próxima reunión de ministros de Agricultura?
–Nosotros tenemos una visión que es aportarle al mundo los alimentos que hagan falta para que éste pueda desarrollarse en forma pacífica, fundamentalmente porque indudablemente parte de la guerra son guerras por alimentos y lo que no queremos es seguir teniendo esta lucha con productos subsidiados como puede tener Europa. Entonces algunos países tienen que entender que el esfuerzo es en partes iguales y no sólo los países en vías de desarrollo.
Fertilizantes, tierras y arrendamiento
El ministro de Agricultura se mostró convencido en la necesidad de tener una política de relacionada a incentivar el uso de los fertilizantes con el objetivo de «buscar mayor productividad de nuestros suelos siendo esto cuestión sine qua non en el control del medio ambiente. Esto es fundamental para cumplir las metas del Plan 2020», fijo Yauhar.
Por otro lado adelantó que técnicos del Ministerio ya están trabajando en la reglamentación de la Ley. de Extranjerización de Tierras y que el mismo estará a disposición de todos los sectores.
Además manifestó que «hace falta trabajar sobre algún tipo de legislación relacionado al arrendamiento así como tener algún programa para darle valor agregado al suelo, y para esto ya están trabajando los técnicos del Ministerio.
El objetivo de todo esto tiene que ver con «volver a darle los nutrientes que estamos perdiendo con el correr del tiempo a los suelos».
La Argentina buscará un cupo para capturar atún
El ministro Yauhar señaló que ya se presentó un pedido formal en el organismo internacional que provee los cupos de captura de atún en el mundo para que la Argentina tenga participación en dicho mercado.
«A nosotros nos corresponde dicho cupo como país limítrofe ya que en el están dichas especies», manifestó el funcionario. Para esto se ha firmado un acuerdo con Corea y China para que «nuestros técnicos se capaciten con su tecnología y después sí, armar nuestra propia flota para salir a pescar atunes propios», dijo.
Respecto del sector pesquero señaló el mismo termina «bien», pero con «los coletazos naturales de los precios de la crisis de Europa».
En ese sentido, el ministro afirmó que «se ha terminado con una muy buena producción en el caso de los langostinos con casi 83.000 toneladas, todo un record», aunque aclaró que esto se debe a que «tampoco tenemos mercado para ese sector y el gran volumen hace que el precio baje, entonces ahí tenemos que trabajar puertas adentro. Un langostino se consigue a $22 pesos el kilo en el mercado argentino, antes se lo conseguía a 100 pesos».
Por último Yauhar destacó que el poco consumo que hoy existe de productos del mar, tiene que ver con «un problema cultural y que hay que ir resolviendo, y dichas políticas deben estar ligadas a los colegios».
«Hoy cada argentino come 7 kilos y medio de pescado, la idea es llegar a los 15 kilos en los próximos 4 años», enfatizó el ministro.
“Mostramos flexibilidad, pero vamos a ser estrictos a la hora de controlar”
Lo dijo Norberto Yahuar, ministro de Agricultura.
Yahuar: “Biolcati fue claro al decir que quiere participar del PEA”
Por Merinno Soto
–¿El anuncio sobre el nuevo esquema comercial para el trigo es lo que el Gobierno entiende como un Estado que cuida el mercado interno?
–Sí. Es buscar el equilibrio justo entre las responsabilidades que tenemos como Estado de proteger la mesa de los argentinos. A medida que la Argentina avance en un proceso de maduración como Nación y cuando todos entendamos lo que es defender puertas adentro nuestras cosas, estas resoluciones no van a hacer ni falta.
–¿El mecanismo elimina los descuentos que vienen haciendo las exportadoras a los productores?
–La elimina porque genera transparencia en el mercado, luego porque se vuelve a la famosa pizarra, después porque el control se va a hacer a través de las distintas Bolsas de Cereales del país, facilitando que cualquier pequeño productor que tenga intención de exportar directamente va, retira su ROE (permiso para exportar) y lo hace.
–¿Blanquea el sistema?
–Sí, precisamente días atrás vi un debate entre un presidente de una Sociedad Rural y un dirigente de la Federación Agraria Argentina, respecto de cómo en algún momento se habían ocultado números reales sobre una cosecha de trigo, por lo tanto no es el Estado el que lo estaba diciendo. Entonces cuando uno ve que se empieza a dar este tipo de debates, es porque algo se está transparentando en el sistema.
–¿El esquema anterior no funcionó?
–No. Me parece que hay que saber reconocer que pudimos haber cometido errores. Yo creo que éstos han sido mínimos y el objetivo de garantizar está por encima de todas las cosas.
–Pero precisamente los cupos quedaron de manos de las multinacionales.
–Bueno, en ese punto las opciones de cupos que estaban restringidas para las grandes empresas fueron aprovechadas e hicieron un mal uso de estas cuestiones. Pero todo tiene vuelta. Por eso hablo de un Estado que controla, fiscaliza y que verifica.
–¿Y esto cómo se hará?
–Para eso ya estamos en un proceso de recuperar la función de la ex ONCCA y su rol fiscalizador que tenía el Ministerio de Agricultura, y para eso ya se habló con el Ministerio de Economía, para que transfiera rápidamente esas facultades de contralor. En definitiva, mostramos flexibilidad con la liberación, pero también seremos estrictos a la hora de controlar.
–¿A qué se refiere con rol fiscalizador?
–La salida del rol fiscalizador de lo que fue la ex ONCCA dejó una franja de falencias en cuanto al control que teníamos para ingresar a los molinos o determinados lugares. Y esto es lo que se está subsanando por estas horas. Pero en nada modifica el esquema de comercialización.
–¿Está mal si le digo que el anuncio que se hará pasado mañana es muy parecido a lo que fue en su momento la Junta Nacional de Granos?
–Yo le diría que hay cosas que rescatar de esa junta, y fundamentalmente tiene que ver con el rol de contralor que podía tener el Estado en ese organismo, y que era sumamente importante. Ahora lo vamos a hacer a través de controles a las grandes exportadoras y de los ingresos que están teniendo las cooperativas. Pero hay pasos que se perdieron en el medio que eran importantes y que tal vez algún pícaro le convenía que esos desaparezcan.
–¿Las cooperativas se verán beneficiadas?
–Sin duda. Llega el momento donde los pequeños productores que por equis motivo no pueden formar parte de los grandes esquemas de comercialización, ahora tienen uno más equitativo. Las cooperativas bien utilizadas son herramientas formidables para el cambio y transformación de los países como el nuestro.
–¿O sea que también hay que monitorearlas?
–Y sí, porque tampoco pueden quedar en manos de gente que aprovecha el esquema cooperativo para usarlo como trampolín en una segunda etapa, para conformar algún tipo de corporación, si se quiere. Lo que buscamos es que en la diversidad puedan estar la mayor cantidad de opciones para el más pequeño y que desde luego pueda ubicar al mejor precio su producto.
–La Sociedad Rural Argentina había manifestado su alejamiento del PEA, pero a usted le señaló su apoyo.
–El mismo (Hugo Luis) Biolcati fue muy claro al decir que quieren ser parte del PEA. Esto lo dijo durante la reunión que mantuvimos la semana pasada, por lo tanto no tengo por qué dudar de su buena fe. Eso sí, lo quiero ver sentado discutiendo cuando haga la reunión y convoque a todos.
–Luego de su encuentro con la Mesa de Enlace, ¿tiene otras reuniones con el sector agropecuario?
–Sí, será en los próximos días con las cooperativas, ya que no están contenidas dentro de las cuatro entidades gremiales y muchas de ellas representan a importantes economías regionales del interior del país.
–¿Hay algún avance respecto del anuncio que diera la Presidenta para darle un puerto a las cooperativas?
–Lo estamos empezando a trabajar con el Ministerio de Planificación Federal y ya hemos establecido una agenda de trabajo en enero. También tenemos que resolver otras cuestiones con la AFIP.
–¿La Argentina mantendrá su postura en la próxima reunión de ministros de Agricultura?
–Nosotros tenemos una visión que es aportarle al mundo los alimentos que hagan falta para que éste pueda desarrollarse en forma pacífica, fundamentalmente porque indudablemente parte de la guerra son guerras por alimentos y lo que no queremos es seguir teniendo esta lucha con productos subsidiados como puede tener Europa. Entonces algunos países tienen que entender que el esfuerzo es en partes iguales y no sólo los países en vías de desarrollo.
Fertilizantes, tierras y arrendamiento
El ministro de Agricultura se mostró convencido en la necesidad de tener una política de relacionada a incentivar el uso de los fertilizantes con el objetivo de «buscar mayor productividad de nuestros suelos siendo esto cuestión sine qua non en el control del medio ambiente. Esto es fundamental para cumplir las metas del Plan 2020», fijo Yauhar.
Por otro lado adelantó que técnicos del Ministerio ya están trabajando en la reglamentación de la Ley. de Extranjerización de Tierras y que el mismo estará a disposición de todos los sectores.
Además manifestó que «hace falta trabajar sobre algún tipo de legislación relacionado al arrendamiento así como tener algún programa para darle valor agregado al suelo, y para esto ya están trabajando los técnicos del Ministerio.
El objetivo de todo esto tiene que ver con «volver a darle los nutrientes que estamos perdiendo con el correr del tiempo a los suelos».
La Argentina buscará un cupo para capturar atún
El ministro Yauhar señaló que ya se presentó un pedido formal en el organismo internacional que provee los cupos de captura de atún en el mundo para que la Argentina tenga participación en dicho mercado.
«A nosotros nos corresponde dicho cupo como país limítrofe ya que en el están dichas especies», manifestó el funcionario. Para esto se ha firmado un acuerdo con Corea y China para que «nuestros técnicos se capaciten con su tecnología y después sí, armar nuestra propia flota para salir a pescar atunes propios», dijo.
Respecto del sector pesquero señaló el mismo termina «bien», pero con «los coletazos naturales de los precios de la crisis de Europa».
En ese sentido, el ministro afirmó que «se ha terminado con una muy buena producción en el caso de los langostinos con casi 83.000 toneladas, todo un record», aunque aclaró que esto se debe a que «tampoco tenemos mercado para ese sector y el gran volumen hace que el precio baje, entonces ahí tenemos que trabajar puertas adentro. Un langostino se consigue a $22 pesos el kilo en el mercado argentino, antes se lo conseguía a 100 pesos».
Por último Yauhar destacó que el poco consumo que hoy existe de productos del mar, tiene que ver con «un problema cultural y que hay que ir resolviendo, y dichas políticas deben estar ligadas a los colegios».
«Hoy cada argentino come 7 kilos y medio de pescado, la idea es llegar a los 15 kilos en los próximos 4 años», enfatizó el ministro.
