Alberto Sileoni
La definición de la pauta salarial 2012 del sector docente nacional comenzará a discutirse la próxima semana, en reuniones informales que encabezarán en Buenos Aires funcionarios de la cartera de Educación nacional que comanda Alberto Sileoni y del Ministerio de Trabajo, junto con dirigentes de los principales gremios que nuclean a los maestros de todo el país.
El punto de partida ya presenta dificultades. Mientras se estima que el Gobierno llevará a esa mesa de negociación una propuesta cercana al 18%, la CTERA anticipó que pedirá un 23% y la Unión Docentes Argentinos (UDA) aseguró que no aceptará ese techo y que, en cambio, reclama «para empezar a hablar» aumentos por encima del 25%.
No es, sin embargo, la única condición para garantizar el inicio de clases en todo el país, el 28 de febrero próximo: se exige, además de un aumento inicial, la reapertura de la paritaria nacional en el segundo semestre del año y la exclusión de los docentes del Impuesto a las Ganancias. «El salario que discutimos en paritaria lo perdemos de la mano de este impuesto absolutamente injusto», dijo el titular de UDA, Sergio Romero.
La pretensión de los maestros está en línea con los planteos de la CTA y la CGT nacionales, de rechazar una meta salarial del 18% y, en cambio, exigir una mejora cuyo piso sea de al menos el 25%. De allí que la negociación con los docentes sea clave en la definición del resto de las paritarias que comenzarán a convocarse en febrero a nivel nacional y provincial, tanto en el sector público como en el privado.
En la misma línea avanzaron ayer los principales gremios de la provincia de Buenos Aires -la de mayor matrícula nacional- que integran el poderoso Frente Gremial Docente: el Sindicato Unificado de Trabajadores de la Educación de la provincia de Buenos Aires (Suteba) y la Federación de Educadores Bonaerenses (FEB).
«La cifra final la acordarán todos los gremios que integran el Frente Gremial, pero el monto va a estar por encima del 25%», anticipó el secretario general de Suteba, Roberto Baradel.
«Además -amplió-, vamos a insistir en dos cuestiones: las asignaciones familiares, porque el 50% de los docentes no cobra un solo peso (en ese concepto) y es algo que puede corregir el Gobierno (bonaerense) y en materia de Ganancias vamos a discutir en el ámbito nacional».
En tanto, para Mirta Petrocini, titular de FEB, «no habrá piso, ni techo salarial» y «lo definiremos tomando como base los números de la inflación no oficial».
Para el titular de UDA, en cambio, «la discusión salarial debe darse por encima del 25%, pero no comparto discutir salarios con la mirada puesta sólo en la inflación porque eso significa no reconocer la tarea de los educadores».
La definición de la pauta salarial 2012 del sector docente nacional comenzará a discutirse la próxima semana, en reuniones informales que encabezarán en Buenos Aires funcionarios de la cartera de Educación nacional que comanda Alberto Sileoni y del Ministerio de Trabajo, junto con dirigentes de los principales gremios que nuclean a los maestros de todo el país.
El punto de partida ya presenta dificultades. Mientras se estima que el Gobierno llevará a esa mesa de negociación una propuesta cercana al 18%, la CTERA anticipó que pedirá un 23% y la Unión Docentes Argentinos (UDA) aseguró que no aceptará ese techo y que, en cambio, reclama «para empezar a hablar» aumentos por encima del 25%.
No es, sin embargo, la única condición para garantizar el inicio de clases en todo el país, el 28 de febrero próximo: se exige, además de un aumento inicial, la reapertura de la paritaria nacional en el segundo semestre del año y la exclusión de los docentes del Impuesto a las Ganancias. «El salario que discutimos en paritaria lo perdemos de la mano de este impuesto absolutamente injusto», dijo el titular de UDA, Sergio Romero.
La pretensión de los maestros está en línea con los planteos de la CTA y la CGT nacionales, de rechazar una meta salarial del 18% y, en cambio, exigir una mejora cuyo piso sea de al menos el 25%. De allí que la negociación con los docentes sea clave en la definición del resto de las paritarias que comenzarán a convocarse en febrero a nivel nacional y provincial, tanto en el sector público como en el privado.
En la misma línea avanzaron ayer los principales gremios de la provincia de Buenos Aires -la de mayor matrícula nacional- que integran el poderoso Frente Gremial Docente: el Sindicato Unificado de Trabajadores de la Educación de la provincia de Buenos Aires (Suteba) y la Federación de Educadores Bonaerenses (FEB).
«La cifra final la acordarán todos los gremios que integran el Frente Gremial, pero el monto va a estar por encima del 25%», anticipó el secretario general de Suteba, Roberto Baradel.
«Además -amplió-, vamos a insistir en dos cuestiones: las asignaciones familiares, porque el 50% de los docentes no cobra un solo peso (en ese concepto) y es algo que puede corregir el Gobierno (bonaerense) y en materia de Ganancias vamos a discutir en el ámbito nacional».
En tanto, para Mirta Petrocini, titular de FEB, «no habrá piso, ni techo salarial» y «lo definiremos tomando como base los números de la inflación no oficial».
Para el titular de UDA, en cambio, «la discusión salarial debe darse por encima del 25%, pero no comparto discutir salarios con la mirada puesta sólo en la inflación porque eso significa no reconocer la tarea de los educadores».