La reestructuración de la deuda soberana de Grecia parece seguir los pasos del desordenado cese de pagos de Argentina en el 2002, advirtió el martes un acreedor que está participando en las negociaciones.
Los ministros de finanzas de la zona euro rechazaron el lunes una oferta hecha por los acreedores privados de Grecia, enviando a los negociadores de vuelta a la mesa con la misión de rebajar más el cupón sobre los nuevos bonos que serían emitidos en la reestructuración.
La decisión mostró que las autoridades europeas son incapaces de acordar un punto medio y aumenta los riesgos de un quiebre en las negociaciones, dijo Hans Humes, jefe de inversiones en el fondo de cobertura Greylock Capital Management, que forma parte del comité directivo de deuda de Grecia.
«Lo que ha ocurrido recientemente me recuerda a Argentina», dijo Humes en un evento organizado por Bloomberg Link. «Aunque tenía mucho optimismo de que no estábamos yendo por el camino de Argentina, parece que vamos por esa senda», añadió.
El difícil proceso de negociación podría ser un «reflejo de los asesores», agregó Humes en referencia a Cleary Gottlieb, la misma firma de abogados que representó a Argentina durante su moratoria del 2002 y sigue defendiendo al país frente a inversores que aún buscan el pago de su deuda.
Las autoridades europeas no han hecho una clara contrapropuesta sobre un nuevo cupón para los reestructurados bonos después de rechazar la tasa de 4 por ciento que ofrecieron los acreedores, dijo Humes.
«Ellos no están diciendo les proponemos un 3,50 por ciento. No hemos tenido eso. Sólo tenemos un montón de titulares», dijo Humes a Reuters en el marco de la conferencia.
Aseguró que ajustar el cupón en 50 puntos básicos no haría una gran diferencia para la sostenibilidad económica de Grecia.
Humes, quien asistirá a una reunión de acreedores griegos en París esta semana, dijo que los próximos días serán cruciales para la resolución de la crisis de deuda de Grecia. Una moratoria desordenada, acotó, tendría ramificaciones muy negativas en la zona euro.
Los ministros de finanzas de la zona euro rechazaron el lunes una oferta hecha por los acreedores privados de Grecia, enviando a los negociadores de vuelta a la mesa con la misión de rebajar más el cupón sobre los nuevos bonos que serían emitidos en la reestructuración.
La decisión mostró que las autoridades europeas son incapaces de acordar un punto medio y aumenta los riesgos de un quiebre en las negociaciones, dijo Hans Humes, jefe de inversiones en el fondo de cobertura Greylock Capital Management, que forma parte del comité directivo de deuda de Grecia.
«Lo que ha ocurrido recientemente me recuerda a Argentina», dijo Humes en un evento organizado por Bloomberg Link. «Aunque tenía mucho optimismo de que no estábamos yendo por el camino de Argentina, parece que vamos por esa senda», añadió.
El difícil proceso de negociación podría ser un «reflejo de los asesores», agregó Humes en referencia a Cleary Gottlieb, la misma firma de abogados que representó a Argentina durante su moratoria del 2002 y sigue defendiendo al país frente a inversores que aún buscan el pago de su deuda.
Las autoridades europeas no han hecho una clara contrapropuesta sobre un nuevo cupón para los reestructurados bonos después de rechazar la tasa de 4 por ciento que ofrecieron los acreedores, dijo Humes.
«Ellos no están diciendo les proponemos un 3,50 por ciento. No hemos tenido eso. Sólo tenemos un montón de titulares», dijo Humes a Reuters en el marco de la conferencia.
Aseguró que ajustar el cupón en 50 puntos básicos no haría una gran diferencia para la sostenibilidad económica de Grecia.
Humes, quien asistirá a una reunión de acreedores griegos en París esta semana, dijo que los próximos días serán cruciales para la resolución de la crisis de deuda de Grecia. Una moratoria desordenada, acotó, tendría ramificaciones muy negativas en la zona euro.