Las acciones de los bancos argentinos que cotizan en Nueva York volvieron a desplomarse ayer y profundizaron las pérdidas sufridas en los últimos días. Severamente afectadas en las últimas semanas por un clima interno que empezó a mostrarse más hostil para los mercados, las compañías que operan en el mercado local siguen perdiendo nivel.
Los controles y las medidas poco market friendly le siguen poniendo un freno al despegue del mercado a nivel local. Mientras tanto, afuera los indices accionarios suben y llegan a valores de resistencia, comentó a este diario el analista de InvertirOnline, Alejandro Bianchi.
La estampida de los inversores sobre los papeles argentinos también castiga a YPF, por el conflicto que mantiene la empresa con el Gobierno y que se incrementó en los últimos días. Ayer, el papel de la petrolera cayó un 5,6% en Nueva York. Su caída sólo fue equiparada por el Grupo Financiero Galicia y seguida de cerca por el Macro (-3,80%) y el BBVA Francés (-1,31%). Siguen todavía estas turbulencias, que hacen dudar a los inversores, más que nada impulsadas por políticas internas, temas de regulación, sobre los cuales a veces no se puede estimar aún cuál puede ser el impacto, agregó Bianchi.
Los papeles argentinos ya habían sufrido un duro castigo el viernes pasado. Entre los papeles que más bajaron se ubicaron Galicia (-4,89%), Siderar (-3,65%) y Banco Macro (-3,25%).
La performance contrasta con los buenos balances que difundieron las entidades financieras locales en las últimas semanas. Un reporte de Portfolio Personal indicó que los bancos que mayores ganancias obtuvieron fueron los de capital extranjero, con beneficios de 3,4% respecto de su nivel de activos. A estos le siguieron los bancos nacionales con un 2,6% de sus activos y los públicos con un 2,3%. Quizás el motivo del derrumbe esté en que los buenos beneficios obtenidos no podrán ser distribuidos entre sus accionistas porque la entidad que dirige Mercedes Marcó del Pont emitió una comunicación con la que obligó a los bancos a aumentar su liquidez, comentaron en la sociedad de Bolsa.
Con la caída de las últimas ruedas, los bancos borraron ya prácticamente toda la recuperación que insinuaron en el comienzo de 2012. El Macro, por caso, acumuló una baja de 5,4% en dos días para quedar en los $ 10,40, a sólo centavos de la cotización con la que empezó el año ($ 9,40). El Galicia lleva perdido en esas dos jornadas un 6%; y el Francés, un 4%.
El mercado local entero sorprende con nuevos mínimos todas las semanas y parece no encontrar un piso. Si bien no se animan a pronosticarle un final a la caída, los analistas confían en que tarde o temprano llegará la recuperación: Si se quiebran las resistencias en las bolsas del exterior, acá los activos van a tener que subir. Por la inflación, que ayuda a los commodities y a los activos vinculados al agro. Si mejoran sus precios el impacto es positivo para Argentina, completó un operador.
En el mercado atribuyeron la caída del viernes a un recorte en la estimación de crecimiento que hizo el Deutsche Bank para la Argentina. A esto se le sumó el dato de que para muchos consultores el país deberá exportar este año con precios de commodities que se ubicarán un 7% por debajo del año pasado. En este contexto, los cupones atados al crecimiento perdieron el viernes entre 2,5% y 4%.
La gran pérdida de valor de mercado de los últimos días fue atribuida por algunos analistas a que muchos inversores deciden y planifican sus inversiones en bolsa de acuerdo al track-record de las firmas como pagadoras de dividendos, ya que de esta forma la inversión en renta variable se acerca, de alguna manera, a una inversión de renta fija o al menor permite minimizar los riesgos. Y esto porque, para el accionista, que una compañía no pague dividendos representa una mala noticia, ya que la apuesta a una apreciación del valor de la empresa en bolsa no se cristaliza.
Los controles y las medidas poco market friendly le siguen poniendo un freno al despegue del mercado a nivel local. Mientras tanto, afuera los indices accionarios suben y llegan a valores de resistencia, comentó a este diario el analista de InvertirOnline, Alejandro Bianchi.
La estampida de los inversores sobre los papeles argentinos también castiga a YPF, por el conflicto que mantiene la empresa con el Gobierno y que se incrementó en los últimos días. Ayer, el papel de la petrolera cayó un 5,6% en Nueva York. Su caída sólo fue equiparada por el Grupo Financiero Galicia y seguida de cerca por el Macro (-3,80%) y el BBVA Francés (-1,31%). Siguen todavía estas turbulencias, que hacen dudar a los inversores, más que nada impulsadas por políticas internas, temas de regulación, sobre los cuales a veces no se puede estimar aún cuál puede ser el impacto, agregó Bianchi.
Los papeles argentinos ya habían sufrido un duro castigo el viernes pasado. Entre los papeles que más bajaron se ubicaron Galicia (-4,89%), Siderar (-3,65%) y Banco Macro (-3,25%).
La performance contrasta con los buenos balances que difundieron las entidades financieras locales en las últimas semanas. Un reporte de Portfolio Personal indicó que los bancos que mayores ganancias obtuvieron fueron los de capital extranjero, con beneficios de 3,4% respecto de su nivel de activos. A estos le siguieron los bancos nacionales con un 2,6% de sus activos y los públicos con un 2,3%. Quizás el motivo del derrumbe esté en que los buenos beneficios obtenidos no podrán ser distribuidos entre sus accionistas porque la entidad que dirige Mercedes Marcó del Pont emitió una comunicación con la que obligó a los bancos a aumentar su liquidez, comentaron en la sociedad de Bolsa.
Con la caída de las últimas ruedas, los bancos borraron ya prácticamente toda la recuperación que insinuaron en el comienzo de 2012. El Macro, por caso, acumuló una baja de 5,4% en dos días para quedar en los $ 10,40, a sólo centavos de la cotización con la que empezó el año ($ 9,40). El Galicia lleva perdido en esas dos jornadas un 6%; y el Francés, un 4%.
El mercado local entero sorprende con nuevos mínimos todas las semanas y parece no encontrar un piso. Si bien no se animan a pronosticarle un final a la caída, los analistas confían en que tarde o temprano llegará la recuperación: Si se quiebran las resistencias en las bolsas del exterior, acá los activos van a tener que subir. Por la inflación, que ayuda a los commodities y a los activos vinculados al agro. Si mejoran sus precios el impacto es positivo para Argentina, completó un operador.
En el mercado atribuyeron la caída del viernes a un recorte en la estimación de crecimiento que hizo el Deutsche Bank para la Argentina. A esto se le sumó el dato de que para muchos consultores el país deberá exportar este año con precios de commodities que se ubicarán un 7% por debajo del año pasado. En este contexto, los cupones atados al crecimiento perdieron el viernes entre 2,5% y 4%.
La gran pérdida de valor de mercado de los últimos días fue atribuida por algunos analistas a que muchos inversores deciden y planifican sus inversiones en bolsa de acuerdo al track-record de las firmas como pagadoras de dividendos, ya que de esta forma la inversión en renta variable se acerca, de alguna manera, a una inversión de renta fija o al menor permite minimizar los riesgos. Y esto porque, para el accionista, que una compañía no pague dividendos representa una mala noticia, ya que la apuesta a una apreciación del valor de la empresa en bolsa no se cristaliza.
