g. freitas y m. caetano San Pablo
Los precios internacionales de la soja, uno de los productos con más peso en las exportaciones brasileñas, pueden sufrir una retracción histórica en los próximos meses, de acuerdo al escenario planteado por el presidente de Hackett Financial Advisors, Shawn Hackett, en un informe divulgado el lunes a sus clientes.
Los productores deberían aprovechar los precios actuales y vender de la forma más agresiva posible. Estamos cerca de las (cotizaciones) máximas para el resto del año y, posiblemente, para los próximos años, afirmó. Entre las razones que lo llevan a apostar a una caída de precios, Hackett mencionó la cosecha sudamericana, que a pesar de haber sido duramente castigada por la sequía este año, es probablemente mayor de lo que se imagina y deberá revisarse para arriba.
Además, Hackett evaluó que los precios actuales de la commodity se tornaron muy atractivos y podrán convencer a los agricultores de Estados Unidos a plantar entre 800.000 y 1,2 millones de hectáreas más, lo que garantizaría un aumento de los stocks para 2013.
El analista afirmó también que los fondos especulativos detentan un volumen record de contratos futuros de soja en la bolsa de Chicago. Más de 35% de la producción esperada para Estados Unidos, señaló. Los fondos raramente mantienen una posición por más de tres meses, y cada uno de esos contratos será devuelto al mercado cuando llegue la cosecha. Dudo que el mercado acepte 35 millones de toneladas de soja a u$s 14 por bushel, afirmó.
Hackett destacó los efectos del cambio Brasil. Para el analista, la suba del dólar frente al real abre camino para que las cotizaciones internacionales caigan, e incluso así, se mantengan atractivas para estimular el cultivo necesario en el país. (Un precio entre) u$s 8 y u$s 10 por bushel puede resolver el problema, agregó. Además, aseguró que los márgenes de descenso del precio de la soja en Asia frustrarán las elevadas expectativas de exportación de Estados Unidos a China.
Después de alcanzar los precios más altos en siete meses la semana pasada, los contratos futuros de soja cerraron el lunes en caída en la bolsa de Chicago. Los contratos con entrega en julio, más líquidos, retrocedieron 8,50 centavos de dólar, a u$s 14,41 por bushel, corrigiendo parte de las ganancias registradas el viernes. Los precios de la soja subieron 19,3% en 2012 y se aproximaron a los picos históricos de 2008.
Vinícius Ito, analista de Jefferies Bache, afirmó que hay una tendencia estacional de caída de las cotizaciones a partir de julio, cuando el escenario para la cosecha estadounidense se presenta más evidente. Pero estimó que es prematuro hacer previsiones sobre la extensión del movimiento.
La intensidad de la caída depende de donde el mercado establecerá el pico de precio, y no está claro. Por ahora, la siembra sigue con clima favorable en Estados Unidos. Si hubiera algún problema, es posible que el mercado tenga aliento para subir más, dijo el analista. Según Ito, los fundamentos del mercado indican que la soja puede alcanzar hasta u$s 15 por bushel.
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Los precios internacionales de la soja, uno de los productos con más peso en las exportaciones brasileñas, pueden sufrir una retracción histórica en los próximos meses, de acuerdo al escenario planteado por el presidente de Hackett Financial Advisors, Shawn Hackett, en un informe divulgado el lunes a sus clientes.
Los productores deberían aprovechar los precios actuales y vender de la forma más agresiva posible. Estamos cerca de las (cotizaciones) máximas para el resto del año y, posiblemente, para los próximos años, afirmó. Entre las razones que lo llevan a apostar a una caída de precios, Hackett mencionó la cosecha sudamericana, que a pesar de haber sido duramente castigada por la sequía este año, es probablemente mayor de lo que se imagina y deberá revisarse para arriba.
Además, Hackett evaluó que los precios actuales de la commodity se tornaron muy atractivos y podrán convencer a los agricultores de Estados Unidos a plantar entre 800.000 y 1,2 millones de hectáreas más, lo que garantizaría un aumento de los stocks para 2013.
El analista afirmó también que los fondos especulativos detentan un volumen record de contratos futuros de soja en la bolsa de Chicago. Más de 35% de la producción esperada para Estados Unidos, señaló. Los fondos raramente mantienen una posición por más de tres meses, y cada uno de esos contratos será devuelto al mercado cuando llegue la cosecha. Dudo que el mercado acepte 35 millones de toneladas de soja a u$s 14 por bushel, afirmó.
Hackett destacó los efectos del cambio Brasil. Para el analista, la suba del dólar frente al real abre camino para que las cotizaciones internacionales caigan, e incluso así, se mantengan atractivas para estimular el cultivo necesario en el país. (Un precio entre) u$s 8 y u$s 10 por bushel puede resolver el problema, agregó. Además, aseguró que los márgenes de descenso del precio de la soja en Asia frustrarán las elevadas expectativas de exportación de Estados Unidos a China.
Después de alcanzar los precios más altos en siete meses la semana pasada, los contratos futuros de soja cerraron el lunes en caída en la bolsa de Chicago. Los contratos con entrega en julio, más líquidos, retrocedieron 8,50 centavos de dólar, a u$s 14,41 por bushel, corrigiendo parte de las ganancias registradas el viernes. Los precios de la soja subieron 19,3% en 2012 y se aproximaron a los picos históricos de 2008.
Vinícius Ito, analista de Jefferies Bache, afirmó que hay una tendencia estacional de caída de las cotizaciones a partir de julio, cuando el escenario para la cosecha estadounidense se presenta más evidente. Pero estimó que es prematuro hacer previsiones sobre la extensión del movimiento.
La intensidad de la caída depende de donde el mercado establecerá el pico de precio, y no está claro. Por ahora, la siembra sigue con clima favorable en Estados Unidos. Si hubiera algún problema, es posible que el mercado tenga aliento para subir más, dijo el analista. Según Ito, los fundamentos del mercado indican que la soja puede alcanzar hasta u$s 15 por bushel.
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Ojalá, así se les pudre todo a los K. Cuanto peor, mejor.
y asi nos jodemos todos y tenemos otro 2001…genial