Todo listo para el rescate de la cuarta economía de la eurozona. Después de que esta madrugada el Fondo Monetario Internacional (FMI) adelantara 48 horas la publicación de su informe sobre el sector financiero español, fuentes oficiales del Eurogrupo han confirmado que los ministros de Economía y Finanzas de la zona euro están reunidos desde las 16.00 por videoconferencia. El orden del día gira en torno a la “aprobación de una declaración que subraye la intención de España de solicitar la ayuda y el apoyo del Eurogrupo”, señala una fuente gubernamental europea citada por la agencia France Presse.
Las mismas fuentes comunitarias añaden que el comunicado posterior al Eurogrupo incluirá la petición de rescate y, según Reuters y la propia AFP, el programa podría alcanzar los 100.000 millones de euros, una cifra que más que duplica las que maneja el FMI, que estima en 40.000 millones de euros la inyección necesaria para la banca española. El Gobierno español ni confirma ni desmiente su postura en la reunión y dice que, en todo caso, informará de lo sucedido tras el encuentro, pero todo apunta a que en esa teleconferencia se abordará el plan de salvamento para España. Fuentes comunitarias han asegurado a AFP que, de hecho, el Ejecutivo ya habría solicitado activar el programa de manera no oficiosa hace algunos días.
Si finalmente el ministro de Economía, Luis de Guindos, se da por vencido y acepta la necesidad de recibir varias decenas de miles de millones de euros para evitar que buena parte de su sector financiero caiga en la insolvencia, las presiones externas habrán acelerado los plazos. Porque el Gobierno prefería esperar a conocer los informes del FMI y de las dos consultoras privadas Roland Berger y Oliver Wyman, cuya publicación está prevista a lo largo de las dos próximas semanas.
Pero los datos del organismo que dirige Christine Lagarde han llegado antes de lo previsto y todo el proceso se ha acelerado. “Todo el mundo espera que España va a pedir ayuda. Hay incluso conversaciones sobre el monto, que podría llegar a los 80.000 millones”, ha dicho el primer ministro sueco, Fredrik Reinfeldt, en la radio pública. También han influido las prisas de los países más ricos de Europa. Pese a que la canciller alemana, Angela Merkel, sostenía ayer mismo que solicitar el rescate era una decisión autónoma de España y que su Gobierno no presionaría, los mensajes que llegaban del Banco Central Europeo (BCE) y de algunos Gobiernos eran cada vez más evidentes.
El presidente del Eurogrupo y primer ministro luxemburgués, Jean-Claude Juncker,ha pedido hoy mismo una solución rápida y urgente para los problemas de España. También el presidente del Bundesbank, Jens Weidmann, ha aconsejado al Gobierno español que no retrase esta medida por miedo a las condiciones para recibirlas. «Si España se ve desbordada por sus necesidades financieras debería aprovechar los instrumentos que se han creado para ello», ha señalado Weidman.
Ayer fue el gobernador del Banco Nacional de Austria y miembro del BCE, Ewald Nowotny, el que reclamó rapidez. “Cuanto más se aplazan las decisiones, más caras pueden volverse. La experiencia demuestra que es mejor pedir ayuda más pronto que tarde”, dijo ayer. El vicepresidente del BCE, Vitor Constâncio, que admitió las conversaciones con España, dijo ayer que es posible que el Gobierno pida el rescate hoy sábado. El portugués también reclamó a Madrid “una respuesta urgente para calmar a los mercados”.
Aunque el mecanismo de salvamento se active hoy no está claro que vaya a incluir desde el primer momento las necesidades de recapitalización. Algunas fuentes apuntan que se podría anunciar el plan para ahuyentar el riesgo de una fuga de capitales tras las elecciones griegas, y que en las próximas semanas, cuando se conozcan los análisis de los consultores privados, se concretarán las cifras del rescate.
El diputado socialista Eduardo Madina ha dicho en la Cadena Ser que el líder de su partido, Alfredo Pérez Rubalcaba, ha mantenido una conversación esta mañana con el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy. “No sé de qué, pero han hablado en las últimas horas”, ha asegurado.
Las mismas fuentes comunitarias añaden que el comunicado posterior al Eurogrupo incluirá la petición de rescate y, según Reuters y la propia AFP, el programa podría alcanzar los 100.000 millones de euros, una cifra que más que duplica las que maneja el FMI, que estima en 40.000 millones de euros la inyección necesaria para la banca española. El Gobierno español ni confirma ni desmiente su postura en la reunión y dice que, en todo caso, informará de lo sucedido tras el encuentro, pero todo apunta a que en esa teleconferencia se abordará el plan de salvamento para España. Fuentes comunitarias han asegurado a AFP que, de hecho, el Ejecutivo ya habría solicitado activar el programa de manera no oficiosa hace algunos días.
Si finalmente el ministro de Economía, Luis de Guindos, se da por vencido y acepta la necesidad de recibir varias decenas de miles de millones de euros para evitar que buena parte de su sector financiero caiga en la insolvencia, las presiones externas habrán acelerado los plazos. Porque el Gobierno prefería esperar a conocer los informes del FMI y de las dos consultoras privadas Roland Berger y Oliver Wyman, cuya publicación está prevista a lo largo de las dos próximas semanas.
Pero los datos del organismo que dirige Christine Lagarde han llegado antes de lo previsto y todo el proceso se ha acelerado. “Todo el mundo espera que España va a pedir ayuda. Hay incluso conversaciones sobre el monto, que podría llegar a los 80.000 millones”, ha dicho el primer ministro sueco, Fredrik Reinfeldt, en la radio pública. También han influido las prisas de los países más ricos de Europa. Pese a que la canciller alemana, Angela Merkel, sostenía ayer mismo que solicitar el rescate era una decisión autónoma de España y que su Gobierno no presionaría, los mensajes que llegaban del Banco Central Europeo (BCE) y de algunos Gobiernos eran cada vez más evidentes.
El presidente del Eurogrupo y primer ministro luxemburgués, Jean-Claude Juncker,ha pedido hoy mismo una solución rápida y urgente para los problemas de España. También el presidente del Bundesbank, Jens Weidmann, ha aconsejado al Gobierno español que no retrase esta medida por miedo a las condiciones para recibirlas. «Si España se ve desbordada por sus necesidades financieras debería aprovechar los instrumentos que se han creado para ello», ha señalado Weidman.
Ayer fue el gobernador del Banco Nacional de Austria y miembro del BCE, Ewald Nowotny, el que reclamó rapidez. “Cuanto más se aplazan las decisiones, más caras pueden volverse. La experiencia demuestra que es mejor pedir ayuda más pronto que tarde”, dijo ayer. El vicepresidente del BCE, Vitor Constâncio, que admitió las conversaciones con España, dijo ayer que es posible que el Gobierno pida el rescate hoy sábado. El portugués también reclamó a Madrid “una respuesta urgente para calmar a los mercados”.
Aunque el mecanismo de salvamento se active hoy no está claro que vaya a incluir desde el primer momento las necesidades de recapitalización. Algunas fuentes apuntan que se podría anunciar el plan para ahuyentar el riesgo de una fuga de capitales tras las elecciones griegas, y que en las próximas semanas, cuando se conozcan los análisis de los consultores privados, se concretarán las cifras del rescate.
El diputado socialista Eduardo Madina ha dicho en la Cadena Ser que el líder de su partido, Alfredo Pérez Rubalcaba, ha mantenido una conversación esta mañana con el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy. “No sé de qué, pero han hablado en las últimas horas”, ha asegurado.