Alivio:las paritarias cierran con 24% de tope

La marcha de las paritarias 2012 tranquiliza ahora al Gobierno. Luego de un comienzo con muchas dudas y demoras en cerrar acuerdos importantes, con los actores más alertas a la interna de la CGT que a una negociación seria, en los últimos días parecen acelerarse los tiempos con la confirmación que más se esperaba en la Casa de Gobierno: finalmente se podrá mostrar una baja en los promedios de aumentos salariales en comparación con 2011. El año pasado, el promedio había sido del 25,5%, y si se confirma la tendencia de los acuerdos firmados hasta ahora (más de la mitad del listado total), la media de este año estará bastante por debajo del 24%. En un año en el que el Gobierno tiene que dar señales de reducción en la presión inflacionaria, una caída en al menos dos puntos porcentuales sería una forma de dar alivio a los costos laborales. Ésta era la misión que se le había encomendado para este año al ministro de Trabajo, Carlos Tomada; que, sí o sí, debía cerrar acuerdos con menores porcentajes que en 2011. En algún momento desde el Gobierno se esperanzaron con un 18% de promedio. Eran los días de fines de 2011, cuando aún se pensaba en la posibilidad de la firma de algún tipo de pacto social que incluyera al camionero Hugo Moyanoy pleno diálogo con el titular de la UIA, José Ignacio de Mendiguren. Luego vinieron la pelea política con el titular de la CGT, las primeras presiones de los sindicatos sobre las alzas salariales para este año y las demoras en las firmas de las paritarias más importantes de los aliados al oficialismo. Esto derivó en que la meta de aumentos subiera y se alejara del 20%. En algún momento, se temió que las presiones sindicales hicieran que el promedio se acercara al de 2011, lo que finalmente en las últimas semanas quedó descartado para alivio oficial. En las últimas horas cerraron sus acuerdos laborales los trabajadores del cuero (24% de aumento), los portuarios del SOMU (22%), actores (24%), periodistas (23,5%), tintoreros y lavaderos (24%), y se espera que esta semana acuerden también los gastronómicos de Luis Barrionuevo. El rebelde titular de la CGT Azul y Blanca amenazaba con paros si no obtenía un alza salarial de más del 35% para este año. Sin embargo, fuentes del gremio aseguraban que estaría por firmar un aumento de sueldos para 2012 del 25% en promedio, pagadero en dos cuotas. Como una cuota se liquidará en febrero de 2013, el incremento total se acercaría al 27%. Curiosamente, aseguran en el Gobierno, y más allá de lo que Barrionuevo suele decir en público, desde la Unión de Trabajadores del Turismo, Hoteleros y Gastronómicos (UTHGRA) se reconoció en las negociaciones que la situación del turismo internacional es complicada en el país, y que por eso hubo prudencia en los reclamos. La semana anterior habían acordado sus paritarias los mineros, el sector de la economía argentina que mejor cobra (más de 20.000 pesos mensuales), con un incremento del 24%, junto con los encargados de edificios (18%), alimentos avícolas (17%) y panaderos (entre un 20% y un 23% dependiendo de la ubicación geográfica). Ahora el Gobierno quiere acelerar tres paritarias importantes de sectores más o menos aliados al oficialismo: la UOCRA (construcción), SMATA (terminales automotrices) y alimentación. Tiene también en carpeta acelerar los acuerdos de los trabajadores de servicios (electricidad, telefónicas y distribución de gas) y los de sanidad. En todos los casos, se asegura, el alza salarial no superaría el techo del 24%. Una vez terminado este panorama negociador, se espera la lucha mayor de este año: la discusión de las paritarias de 2012 del gremio de camioneros de Hugo Moyano, en el estreno de su con-dición de opositor político y sindical del Gobierno nacional. La conducción de ese gremio, a través de la voz y la presencia de Pablo Moyano, ya alertó que tiene en carpeta paros sorpresivos en cualquier punto del país, si los empresarios del sector no aceptan un aumento salarial del 30% y pagar un bonus de 3.000 a 4.000 pesos como compensación de la falta de novedades por parte del Gobierno nacional sobre la suba del mínimo no imponible de Ganancias. La propuesta, obviamente, causó espanto en los oídos de empresarios, que rápidamente pidieron clemencia en Trabajo. El Gobierno les dio la razón a los privados y prometió batallar contra el camionero.

Acerca de Nicolás Tereschuk (Escriba)

"Escriba" es Nicolás Tereschuk. Politólogo (UBA), Maestría en Sociologìa Económica (IDAES-UNSAM). Me interesa la política y la forma en que la política moldea lo económico (¿o era al revés?).

Ver todas las entradas de Nicolás Tereschuk (Escriba) →

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *