El Movimiento Progresista del candidato presidencial Andrés López Obrador pedirá hoy la invalidación de las últimas elecciones ante el tribunal federal, que ya dio como ganador al postulante del PRI, Enrique Peña Nieto. Obrador denunciará la violación de los principios constitucionales en cientos de irregularidades e incluso la compra millonaria de votos, ampliamente documentada por las redes sociales y también denunciada por el actual presidente Felipe Calderón.
«No se pedirá que analicen lo que pasó en la casilla de votación, que también lo vamos a revisar, sino que se violaron los principios de certeza, de imparcialidad, de equidad, de objetividad y de profesionalismo», apuntó el jefe de campaña del Movimiento Progresista, Ricardo Monreal, respecto de la presentación de «invalidación».
El equipo de López Obrador afirma que hubo inequidad, por ejemplo, a través de la adquisión indebida de tiempos en radio y televisión para la difusión de encuestas supuestamente «amañadas» para dar una ventaja a Peña Nieto mucho mayor de la que en realidad tenía.
Peña Nieto se impuso, en primera y única vuelta, por el 38,21 por ciento, con una diferencia de 6,62 puntos frente a López Obrador, que equivale a 3,3 millones de votos. La mayoría de los sondeos difundidos durante la campaña le daban a Peña Nieto una ventaja de 15 a 20 puntos.
Otro de los argumentos que manejará la izquierda es que el candidato ganador rebasó los gastos permitidos de campaña y violó el principio de libertad de sufragio mediante la compra y coacción del voto. «Lo que estamos alegando es que se violó la Constitución», explicó Monreal.
El Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, que debe dar una resolución final antes del 6 de septiembre, «no es un órgano sólo de legalidad, sino también de constitucionalidad», agregó. «Su obligación es revisar y corregir las violaciones a la Carta Magna, no sólo a la ley electoral».
Peña Nieto ha rechazado las afirmaciones de la izquierda, con las que coincidió el partido oficialista Acción Nacional (PAN), de que hubo compra de votos e inequidad en las elecciones y dijo que el PRI defenderá jurídicamente su triunfo.
En México sólo una vez se han invalidado unas elecciones con esta causal abstracta. Fue en los comicios para la alcaldía de Morelia, en el estado de Michoacán, el año pasado, después de que se cuestionó la limpieza de la victoria del PRI. Las elecciones municipales se repitieron el 1 de julio pasado, en la misma jornada del triunfo de Peña Nieto, y volvió imponerse el PRI.