Los controles a la fuga de divisas lograron frenar la salida de capitales
Crecimiento comparado entre los tres países
Por Pablo Waisberg
La economía argentina comenzó a sentir los efectos de la crisis mundial pero mantiene tasas de crecimiento superiores a las de Brasil y México. Los coletazos, que habían comenzado a sentirse en el último trimestre del 2011 en forma de desaceleración del crecimiento, se morigeraron en el primer trimestre de este año y, al mismo tiempo, se mantuvo constante el consumo público y se frenó la fuga de capitales. Esa es la fotografía que tomaron los economistas que trabajan bajo la órbita del Centro de Investigación y Formación (CIFRA), donde analizan la policromía de la coyuntura actual.
Allí señalaron la profundización de la desaceleración del ritmo de crecimiento económico, que comenzó a sentirse con mayor presencia en el último trimestre del 2011, pero “se profundizó” en los primeros tres meses de este año. “Esta tasa de crecimiento interanual del producto interno bruto [PIB] en el primer trimestre de 2012 resultó cerca de 2 puntos porcentuales menor que la del último trimestre de 2011 y más de 4 puntos inferior a la del tercer trimestre del año pasado”, precisó el informe realizado sobre la base de los datos de la Dirección Nacional de Cuentas Nacionales del INDEC.
Sin embargo, la Argentina se mantuvo en niveles superiores a los de otros países de la región, como Brasil y México. “Estas economías sufrieron en mayor medida el impacto de la crisis en el 2009 [en especial México, cuya economía es más vulnerable frente a la economía norteamericana] y registraron una recuperación menos marcada en los años sucesivos, con tendencia descendente desde mediados del 2010”, indicó el trabajo del centro de estudios que fundó Eduardo Basualdo y que funciona bajo el paraguas de la CTA oficialista, que lidera Hugo Yaski.
Espejo. En el cuadro que ilustra la nota se ve claramente que la mayor desaceleración fue sufrida por la economía brasileña, que pasó de tasas del 8,5% interanual en el primer trimestre del 2010 al 0,6% en el 2012. Ese dato contiene un comparación “favorable” engañosa por el por el impacto que tiene la economía brasileña sobre la local.
Durante el mes pasado el intercambio comercial cayó 32 por ciento. La baja tiene motivos de política comercial de ambos países que está empujada por la crisis: las restricciones puestas por la Argentina tienen como contraparte la protección del mercado brasileño que instrumenta la administración de Dilma Rousseff. A eso se suma la baja de la demanda automotriz de Brasil y las “medidas espejo” aplicadas por el gigante del Mercosur sobre peras, manzanas, aceitunas y aceite de oliva, precisó la consultora Abeceb. Esa contracción en las exportaciones a Brasil hizo que la Argentina perdiera un lugar en el ranking de los principales proveedores del país vecino: Estados Unidos (u$s2.734 millones), China (u$s2.650 millones), Alemania (u$s1.110 millones) y la Argentina (u$s1.049 millones).
Pese a ese comportamiento, durante la primera quincena de junio se entregaron 177.042 unidades a Brasil. Eso representó “una suba del 15,3% con respecto al mismo período del año pasado y una disminución del 3,0% respecto de los primeros 15 días de junio último”, agregó el reporte de Abeceb sobre el mercado automotor.
Controles. Además, en el trabajo que realizó la economista Ana Laura Fernández se indicó que durante este año se observó una “marcada reducción de la formación de activos en el exterior del sector privado”. Ese comportamiento tiene relación directa con “la imposición de fuertes controles a la compra de divisas”.
“En los primeros tres meses del año la fuga de capitales fue, en promedio, de u$s535 millones mensuales, en marcado contraste con un promedio de u$s1.086 millones durante el mismo período del año pasado”, precisó.
La deuda pública bajó al 41,8% del PBI
“La deuda pública dejó de ser un problema estructural para la economía argentina”, señaló el último informe elaborado por la consultora Ecolatina, que indicó que la deuda pública alcanzó el 41,8% del PBI en 2011, lo que significó 3,5 puntos porcentuales menos en el 2010. Es, además, el menor valor desde mediados del 2009.
Agregó que «el ratio deuda pública/PBI viene descendiendo continuamente tras el ‘pico’ alcanzado en 2002 (149%), especialmente luego de la reestructuración de 2005».
Además, los pasivos denominados en moneda extranjera, que en 2001 alcanzaban a 97% de la deuda total (52% del PBI), hoy son solamente 60% (25% del PBI). De hecho, la deuda en moneda extranjera muestra importantes mejoras tanto en relación a las exportaciones como al stock de reservas.
El trabajo precisó que la deuda en moneda extranjera con privados y organismos apenas alcanza 15% del PBI, 67% de las exportaciones y 142% de las reservas. En 2001 estos ratios se ubicaban en 54%, 448% y 760% respectivamente.
«El peso de la deuda pública local (41,8% del PBI) contrasta con el fuerte endeudamiento que registran las economías avanzadas (108% del PBI) y se ubica incluso por debajo del 50% del PBI de los países de América Latina», señaló el informe de la consultora que fundó Roberto Lavagna.
Crecimiento comparado entre los tres países
Por Pablo Waisberg
La economía argentina comenzó a sentir los efectos de la crisis mundial pero mantiene tasas de crecimiento superiores a las de Brasil y México. Los coletazos, que habían comenzado a sentirse en el último trimestre del 2011 en forma de desaceleración del crecimiento, se morigeraron en el primer trimestre de este año y, al mismo tiempo, se mantuvo constante el consumo público y se frenó la fuga de capitales. Esa es la fotografía que tomaron los economistas que trabajan bajo la órbita del Centro de Investigación y Formación (CIFRA), donde analizan la policromía de la coyuntura actual.
Allí señalaron la profundización de la desaceleración del ritmo de crecimiento económico, que comenzó a sentirse con mayor presencia en el último trimestre del 2011, pero “se profundizó” en los primeros tres meses de este año. “Esta tasa de crecimiento interanual del producto interno bruto [PIB] en el primer trimestre de 2012 resultó cerca de 2 puntos porcentuales menor que la del último trimestre de 2011 y más de 4 puntos inferior a la del tercer trimestre del año pasado”, precisó el informe realizado sobre la base de los datos de la Dirección Nacional de Cuentas Nacionales del INDEC.
Sin embargo, la Argentina se mantuvo en niveles superiores a los de otros países de la región, como Brasil y México. “Estas economías sufrieron en mayor medida el impacto de la crisis en el 2009 [en especial México, cuya economía es más vulnerable frente a la economía norteamericana] y registraron una recuperación menos marcada en los años sucesivos, con tendencia descendente desde mediados del 2010”, indicó el trabajo del centro de estudios que fundó Eduardo Basualdo y que funciona bajo el paraguas de la CTA oficialista, que lidera Hugo Yaski.
Espejo. En el cuadro que ilustra la nota se ve claramente que la mayor desaceleración fue sufrida por la economía brasileña, que pasó de tasas del 8,5% interanual en el primer trimestre del 2010 al 0,6% en el 2012. Ese dato contiene un comparación “favorable” engañosa por el por el impacto que tiene la economía brasileña sobre la local.
Durante el mes pasado el intercambio comercial cayó 32 por ciento. La baja tiene motivos de política comercial de ambos países que está empujada por la crisis: las restricciones puestas por la Argentina tienen como contraparte la protección del mercado brasileño que instrumenta la administración de Dilma Rousseff. A eso se suma la baja de la demanda automotriz de Brasil y las “medidas espejo” aplicadas por el gigante del Mercosur sobre peras, manzanas, aceitunas y aceite de oliva, precisó la consultora Abeceb. Esa contracción en las exportaciones a Brasil hizo que la Argentina perdiera un lugar en el ranking de los principales proveedores del país vecino: Estados Unidos (u$s2.734 millones), China (u$s2.650 millones), Alemania (u$s1.110 millones) y la Argentina (u$s1.049 millones).
Pese a ese comportamiento, durante la primera quincena de junio se entregaron 177.042 unidades a Brasil. Eso representó “una suba del 15,3% con respecto al mismo período del año pasado y una disminución del 3,0% respecto de los primeros 15 días de junio último”, agregó el reporte de Abeceb sobre el mercado automotor.
Controles. Además, en el trabajo que realizó la economista Ana Laura Fernández se indicó que durante este año se observó una “marcada reducción de la formación de activos en el exterior del sector privado”. Ese comportamiento tiene relación directa con “la imposición de fuertes controles a la compra de divisas”.
“En los primeros tres meses del año la fuga de capitales fue, en promedio, de u$s535 millones mensuales, en marcado contraste con un promedio de u$s1.086 millones durante el mismo período del año pasado”, precisó.
La deuda pública bajó al 41,8% del PBI
“La deuda pública dejó de ser un problema estructural para la economía argentina”, señaló el último informe elaborado por la consultora Ecolatina, que indicó que la deuda pública alcanzó el 41,8% del PBI en 2011, lo que significó 3,5 puntos porcentuales menos en el 2010. Es, además, el menor valor desde mediados del 2009.
Agregó que «el ratio deuda pública/PBI viene descendiendo continuamente tras el ‘pico’ alcanzado en 2002 (149%), especialmente luego de la reestructuración de 2005».
Además, los pasivos denominados en moneda extranjera, que en 2001 alcanzaban a 97% de la deuda total (52% del PBI), hoy son solamente 60% (25% del PBI). De hecho, la deuda en moneda extranjera muestra importantes mejoras tanto en relación a las exportaciones como al stock de reservas.
El trabajo precisó que la deuda en moneda extranjera con privados y organismos apenas alcanza 15% del PBI, 67% de las exportaciones y 142% de las reservas. En 2001 estos ratios se ubicaban en 54%, 448% y 760% respectivamente.
«El peso de la deuda pública local (41,8% del PBI) contrasta con el fuerte endeudamiento que registran las economías avanzadas (108% del PBI) y se ubica incluso por debajo del 50% del PBI de los países de América Latina», señaló el informe de la consultora que fundó Roberto Lavagna.