El 22,8 por ciento de los mayores de 18 años fuma y, de ese número, siete de cada diez están pensando en abandonar el cigarrillo. Los datos corresponden a la Encuesta Mundial de Tabaquismo en Adultos, realizada por primera vez en el país por el Ministerio de Salud.
Más de 700.000 personas dejaron de fumar en los últimos tres años y, entre los que aún continúan fumando, siete de cada diez están pensando en abandonar el cigarrillo. Los datos se desprenden de la Encuesta Mundial de Tabaquismo en Adultos, realizada por primera vez en el país por el Ministerio de Salud de la Nación y cuyos resultados completos serán divulgados mañana, en coincidencia con el Día Internacional del Aire Puro.
El estudio fue realizado entre 7000 personas de todo el país seleccionadas al azar. La misma encuesta ya se realizó en más de 20 países y a partir de estos resultados vamos a poder profundizar el conocimiento sobre la epidemia del tabaquismo en la Argentina y, además, podremos comparar el consumo de tabaco aquí con el de otros países, destacó la subsecretaria de Prevención y Control de Riesgos de la cartera sanitaria, Marina Kosacoff.
Este estudio que contó con la colaboración de la Organización Panamericana de la Salud (OPS) y el Centro para el Control de Enfermedades (CDC) de Estados Unidos releva el consumo de tabaco, la exposición al humo ajeno, la cantidad de gente que dejó o quiere dejar de fumar, aspectos económicos del tabaquismo, la publicidad y las actitudes y percepciones de la población mayor de 15 años relacionadas con el tabaquismo.
De acuerdo con los resultados obtenidos que fueron comparados con información similar surgida de la Encuesta Nacional de Factores de Riesgo (ENFR) del año 2009, se sabe que el 22,8 por ciento de los mayores de 18 años fuma, lo que evidencia un gran descenso con respecto a los datos anteriores, cuando la proporción de fumadores era del 27,1 por ciento. Además, se constató una mayor disminución del consumo de tabaco en mujeres que en varones.
En relación con la exposición al humo de tabaco ajeno, el estudio mostró que el 31,6 por ciento de los adultos que trabajan en ambientes cerrados 3,4 millones de personas estuvieron expuestos al humo de tabaco ajeno, mientras que el 33 por ciento 9,1 millones de personas corrió la misma suerte en sus hogares, mientras que otro 23,2 por ciento 2,3 millones lo sufrió en restaurantes.
Las 7000 sustancias que contiene el humo del cigarrillo incluyen metales pesados, componentes cancerígenos e incluso materiales radiactivos que pueden permanecer en el ambiente hasta dos semanas después de que se ha ventilado la habitación donde se estuvo fumando, recordó Kosacoff, para mostrar cómo el humo ajeno afecta la salud de los no fumadores.
Este relevamiento nos permite, entre otros temas, conocer con mayor detalle los hábitos de los fumadores y los recursos que utilizan para dejar de fumar, lo que constituye un insumo de mucha utilidad para planificar políticas sanitarias orientadas a fortalecer la cesación tabáquica, explicó el director de Promoción y Control de Enfermedades No Transmisibles, Sebastián Laspiur.
El tercer jueves de noviembre se celebra en todo el mundo el Día Internacional del Aire Puro, fecha instaurada en 1977 por la Organización Mundial de la Salud (OMS) para concientizar a la comunidad sobre la importancia de vivir en ambientes ciento por ciento libres de humo a incentivar a los fumadores a abstenerse de fumar por, al menos, 24 horas.
El 13 de junio de 2011 la presidenta Cristina Fernández de Kirchner promulgó la Ley Nacional Nº 26.687 de Control de Tabaco, en la cual se destacan la disposición de ambientes de trabajo y de uso público libres de humo en toda la Argentina y la prohibición de que las tabacaleras realicen publicidad, promoción y patrocinio con sus productos.
La ley obliga a incluir advertencias sanitarias con imágenes en los paquetes de cigarrillos medida que ya está vigente desde el mes pasado y la prohibición de utilizar términos engañosos como suave o bajo en nicotina, que generan la falsa idea de que existen cigarrillos más seguros para la salud.
Asimismo, la ley dispone la divulgación de la línea telefónica gratuita del Ministerio de Salud de la Nación (0800-999-3040) en los atados de cigarrillos, para ayudar a los fumadores a dejar esta adicción; la prohibición de la venta de cigarrillos sueltos y a través de máquinas expendedoras y la venta a menores de edad, entre otros puntos.