> Descargar Documentos de Plataforma 2012 <
Plataforma 2012 es un espacio colectivo que nuclea a intelectuales, artistas y trabajadores/as de la cultura y de las ciencias provenientes de diversos ámbitos, preocupados por los derechos humanos, de ayer y de hoy, así como por las diferentes formas de desigualdad que atraviesan la sociedad argentina actual. Surgió en enero de 2012 de la convicción de que resultaba imperioso crear voces independientes de los diferentes poderes (políticos, económicos, mediáticos, etc.), sin caer en el peligroso juego de los diferentes reduccionismos que promueven encapsular el debate en esquemas binarios o polarizaciones descalificadoras.
Con este objetivo, Plataforma ha venido desarrollando diferentes acciones en pos de la construcción de un colectivo pluralista y democrático en torno de ciertos posicionamientos y temas que fueron expresados en el documento inicial. Entre otros temas de especial interés, desde el inicio destacamos cuatro: las diferentes formas de desigualdad, los vínculos entre gobierno, poder político y grandes corporaciones, la violación y la falta de reconocimiento de derechos básicos hoy; en fin, la construcción de un relato mistificador de parte del gobierno y sus voceros en torno de estos temas.
Respecto de lo primero, consideramos que una mirada compleja sobre las marcadas desigualdades que existen en la sociedad argentina debe abarcar sus diferentes dimensiones y registros. La destrucción del sistema estadístico nacional desde la intervención política del Indec es utilizada para deformar el sistema de indicadores económicos y sociales ocultando que persisten y en muchos casos se han reforzado las desigualdades, sea que nos refiramos a la educación, a la salud, a bienes y servicios culturales, a la justicia, a las distancias entre las provincias pobres y ricas y, de manera cada vez más dramática, a las angustiosas brechas territoriales y urbanas, relativas al acceso a la tierra y la vivienda.
Asimismo, creemos que es necesario denunciar las alianzas que sostiene el gobierno nacional con las grandes corporaciones, expandidas a lo largo de toda nuestra geografía, que incluyen desde los grandes productores de granos, notorias empresas industriales, hasta los actores trasnacionales de la minería y los hidrocarburos. Muchos gobiernos provinciales y municipales sostienen pactos y alianzas de la misma naturaleza.
En tercer lugar, muy vinculado con los dos puntos anteriores, estamos muy preocupados por la apertura de un nuevo ciclo de violación de derechos básicos, lo cual aparece minimizado desde el discurso oficial. Desde Plataforma consideramos que las numerosas muertes ocurridas en situación de represión en los últimos dos años no son casuales ni ocasionales; antes bien, éstas tienen que ver con la estructura de alianzas política que promueve el gobierno nacional (con los gobernadores y los grandes actores económicos), así como con la implementación de modelos de desarrollo insustentables y excluyentes. Por otro lado, con la llamada ley Antiterrorista, que fuera impulsada por el Poder Ejecutivo Nacional y sancionada en diciembre de 2011 con el apoyo unánime del bloque oficialista, el gobierno dio marco legal a la profundización de la criminalización que vienen padeciendo las diferentes organizaciones y luchadores sociales, sindicales y territoriales en nuestro país.
Por último, desde Plataforma nos propusimos desactivar el “relato” o discurso oficial, sostenido también por diferentes voceros e intelectuales oficialistas, el cual pretende investir de gesta épica y popular cada una de las acciones gubernamentales, obturando la posibilidad de la crítica, manipulando consensos, ocultando hechos y falseando estadísticas, mientras se afianza la persistencia de lo mismo que aparenta cuestionar y se multiplican acuerdos y prebendas a grupos financieros y económicos multinacionales, profundizando la entrega de nuestros bienes naturales y el daño a nuestro habitat.
Así, desde el comienzo, nuestra apuesta fue la de crear un colectivo de pensamiento crítico que debata abierta y públicamente los grandes temas que definen el rumbo de la sociedad argentina y comprometen el presente y el futuro de nuestro país. Fueron numerosas las personas que desde distintos puntos del país, desde diferentes ámbitos de la cultura, del pensamiento, del trabajo social y ambiental, de pueblos originarios, nos hicieron llegar su saludo entusiasta y apoyo activo, subrayando a través de ello la existencia de un pensamiento popular y crítico, por fuera y más allá de la hegemonía cultural del oficialismo.
Durante 2012 elaboramos ocho documentos sobre diferentes temas que atraviesan los cuatro tópicos más arriba enunciados: sobre la megaminería (febrero), sobre la masacre de Once y la trama de corrupción e impunidad; sobre la restricción a la libre circulación de productos de imprenta (marzo); sobre YPF y la crisis del sector energético (junio); sobre vivienda y especulación inmobiliaria en la ciudad de Buenos Aires (agosto); sobre los mitos y realidades de la re-reelección y la reforma constitucional (septiembre); sobre el aborto no punible y el aborto legal (diciembre).
Entre marzo y diciembre de 2012 realizamos tres reuniones plenarias, en las cuales fueron convocadas las personas firmantes de los diferentes documentos del colectivo, en las que discutimos modalidades de organización y pautas de trabajo colectivo.
Asimismo, entre junio y noviembre organizamos seis encuentros-debates sobre diferentes problemáticas, algunas de ellas directamente ligadas a los documentos producidos por Plataforma -YPF y la cuestión energética; vivienda y especulación inmobiliaria en la ciudad de Buenos Aires, luchas socioterritoriales-, y otras que el propio colectivo consideró como cuestiones centrales a abordar, tales como las luchas sindicales y sociales, la ley de medios y el acceso a la información, y el estado de la salud en la república Argentina. Concebido como un espacio de diálogo y discusión, desde una perspectiva plural y comprometida, todos estos encuentros contaron con la participación central de reconocidos/as referentes y luchadores/as sociales procedentes de diferentes puntos del país, así como de notorios/as especialistas (académicas, investigadores/as) de los temas propuestos.
Los análisis, las críticas y propuestas enunciadas en los ocho documentos elaborados y difundidos durante 2012 aluden a cuestiones medulares de la agenda política y pública que, dadas las características y tendencias del actual régimen económico, político y social, lejos de ser resueltas, se han profundizado negativamente, mostrando mayor relevancia y centralidad. Lo sucedido durante el año 2012 demostró con claridad que los diferentes temas abordados por Plataforma no constituyen meras “cuestiones de coyuntura”, ni tampoco pueden ser vistas como “asignaturas pendientes” o simples “costados débiles” del modelo que promueve el oficialismo, y que a futuro serían resueltos favorablemente.
Por todo ello, al cumplirse un año de nuestra presentación pública, hemos considerado oportuno difundir en formato de libro los documentos elaborados colectivamente. Esperamos que esta compilación, que es también memoria y balance de un año turbulento, contribuya al debate de las grandes cuestiones nacionales, desde una perspectiva política popular y emancipadora.
Plataforma, 4 de enero de 2013
Plataforma 2012 es un espacio colectivo que nuclea a intelectuales, artistas y trabajadores/as de la cultura y de las ciencias provenientes de diversos ámbitos, preocupados por los derechos humanos, de ayer y de hoy, así como por las diferentes formas de desigualdad que atraviesan la sociedad argentina actual. Surgió en enero de 2012 de la convicción de que resultaba imperioso crear voces independientes de los diferentes poderes (políticos, económicos, mediáticos, etc.), sin caer en el peligroso juego de los diferentes reduccionismos que promueven encapsular el debate en esquemas binarios o polarizaciones descalificadoras.
Con este objetivo, Plataforma ha venido desarrollando diferentes acciones en pos de la construcción de un colectivo pluralista y democrático en torno de ciertos posicionamientos y temas que fueron expresados en el documento inicial. Entre otros temas de especial interés, desde el inicio destacamos cuatro: las diferentes formas de desigualdad, los vínculos entre gobierno, poder político y grandes corporaciones, la violación y la falta de reconocimiento de derechos básicos hoy; en fin, la construcción de un relato mistificador de parte del gobierno y sus voceros en torno de estos temas.
Respecto de lo primero, consideramos que una mirada compleja sobre las marcadas desigualdades que existen en la sociedad argentina debe abarcar sus diferentes dimensiones y registros. La destrucción del sistema estadístico nacional desde la intervención política del Indec es utilizada para deformar el sistema de indicadores económicos y sociales ocultando que persisten y en muchos casos se han reforzado las desigualdades, sea que nos refiramos a la educación, a la salud, a bienes y servicios culturales, a la justicia, a las distancias entre las provincias pobres y ricas y, de manera cada vez más dramática, a las angustiosas brechas territoriales y urbanas, relativas al acceso a la tierra y la vivienda.
Asimismo, creemos que es necesario denunciar las alianzas que sostiene el gobierno nacional con las grandes corporaciones, expandidas a lo largo de toda nuestra geografía, que incluyen desde los grandes productores de granos, notorias empresas industriales, hasta los actores trasnacionales de la minería y los hidrocarburos. Muchos gobiernos provinciales y municipales sostienen pactos y alianzas de la misma naturaleza.
En tercer lugar, muy vinculado con los dos puntos anteriores, estamos muy preocupados por la apertura de un nuevo ciclo de violación de derechos básicos, lo cual aparece minimizado desde el discurso oficial. Desde Plataforma consideramos que las numerosas muertes ocurridas en situación de represión en los últimos dos años no son casuales ni ocasionales; antes bien, éstas tienen que ver con la estructura de alianzas política que promueve el gobierno nacional (con los gobernadores y los grandes actores económicos), así como con la implementación de modelos de desarrollo insustentables y excluyentes. Por otro lado, con la llamada ley Antiterrorista, que fuera impulsada por el Poder Ejecutivo Nacional y sancionada en diciembre de 2011 con el apoyo unánime del bloque oficialista, el gobierno dio marco legal a la profundización de la criminalización que vienen padeciendo las diferentes organizaciones y luchadores sociales, sindicales y territoriales en nuestro país.
Por último, desde Plataforma nos propusimos desactivar el “relato” o discurso oficial, sostenido también por diferentes voceros e intelectuales oficialistas, el cual pretende investir de gesta épica y popular cada una de las acciones gubernamentales, obturando la posibilidad de la crítica, manipulando consensos, ocultando hechos y falseando estadísticas, mientras se afianza la persistencia de lo mismo que aparenta cuestionar y se multiplican acuerdos y prebendas a grupos financieros y económicos multinacionales, profundizando la entrega de nuestros bienes naturales y el daño a nuestro habitat.
Así, desde el comienzo, nuestra apuesta fue la de crear un colectivo de pensamiento crítico que debata abierta y públicamente los grandes temas que definen el rumbo de la sociedad argentina y comprometen el presente y el futuro de nuestro país. Fueron numerosas las personas que desde distintos puntos del país, desde diferentes ámbitos de la cultura, del pensamiento, del trabajo social y ambiental, de pueblos originarios, nos hicieron llegar su saludo entusiasta y apoyo activo, subrayando a través de ello la existencia de un pensamiento popular y crítico, por fuera y más allá de la hegemonía cultural del oficialismo.
Durante 2012 elaboramos ocho documentos sobre diferentes temas que atraviesan los cuatro tópicos más arriba enunciados: sobre la megaminería (febrero), sobre la masacre de Once y la trama de corrupción e impunidad; sobre la restricción a la libre circulación de productos de imprenta (marzo); sobre YPF y la crisis del sector energético (junio); sobre vivienda y especulación inmobiliaria en la ciudad de Buenos Aires (agosto); sobre los mitos y realidades de la re-reelección y la reforma constitucional (septiembre); sobre el aborto no punible y el aborto legal (diciembre).
Entre marzo y diciembre de 2012 realizamos tres reuniones plenarias, en las cuales fueron convocadas las personas firmantes de los diferentes documentos del colectivo, en las que discutimos modalidades de organización y pautas de trabajo colectivo.
Asimismo, entre junio y noviembre organizamos seis encuentros-debates sobre diferentes problemáticas, algunas de ellas directamente ligadas a los documentos producidos por Plataforma -YPF y la cuestión energética; vivienda y especulación inmobiliaria en la ciudad de Buenos Aires, luchas socioterritoriales-, y otras que el propio colectivo consideró como cuestiones centrales a abordar, tales como las luchas sindicales y sociales, la ley de medios y el acceso a la información, y el estado de la salud en la república Argentina. Concebido como un espacio de diálogo y discusión, desde una perspectiva plural y comprometida, todos estos encuentros contaron con la participación central de reconocidos/as referentes y luchadores/as sociales procedentes de diferentes puntos del país, así como de notorios/as especialistas (académicas, investigadores/as) de los temas propuestos.
Los análisis, las críticas y propuestas enunciadas en los ocho documentos elaborados y difundidos durante 2012 aluden a cuestiones medulares de la agenda política y pública que, dadas las características y tendencias del actual régimen económico, político y social, lejos de ser resueltas, se han profundizado negativamente, mostrando mayor relevancia y centralidad. Lo sucedido durante el año 2012 demostró con claridad que los diferentes temas abordados por Plataforma no constituyen meras “cuestiones de coyuntura”, ni tampoco pueden ser vistas como “asignaturas pendientes” o simples “costados débiles” del modelo que promueve el oficialismo, y que a futuro serían resueltos favorablemente.
Por todo ello, al cumplirse un año de nuestra presentación pública, hemos considerado oportuno difundir en formato de libro los documentos elaborados colectivamente. Esperamos que esta compilación, que es también memoria y balance de un año turbulento, contribuya al debate de las grandes cuestiones nacionales, desde una perspectiva política popular y emancipadora.
Plataforma, 4 de enero de 2013