El Central empieza a remontar la cuesta

ECONOMIA › LA AUTORIDAD MONETARIA LOGRO RECUPERAR RESERVAS EN JULIO DESPUES DE SIETE MESES
Los pagos de la deuda en dólares, la salida de divisas por importación de combustibles y turismo, y la caída en la cotización del oro impactaron en las reservas en el primer semestre, pero esos factores se diluyen en la segunda mitad del año.
Las reservas internacionales ascendieron a 37.005 millones de dólares a fines del mes pasado, al disminuir 6285 millones respecto de diciembre de 2012. A pesar de la administración cambiaria, el incremento de las exportaciones industriales y el repunte de la cosecha, la autoridad monetaria perdió divisas. Eso fue por el pago de deuda en moneda extranjera, el déficit del bloque combustible-turismo, la caída del precio del oro y el retroceso de depósitos en dólares. Estos factores tendrán una menor relevancia en la segunda parte del año, lo cual ya se manifiesta en julio, el primer mes desde noviembre de 2012 en que el Banco Central pudo acumular divisas. Sumó 286 millones hasta ayer, cuando las reservas quedaron en 37.291 millones.
Las principales razones del retroceso del stock de divisas del Banco Central entre enero y junio de 2013 fueron las siguientes.
Cancelación de préstamos con acreedores privados y organismos internacionales por un total de 2300 millones de dólares. Entre los vencimientos se destacó el bono Discount, que requirió un desembolso de 600 millones de dólares.
Devolución de 3000 millones de dólares al Banco de Francia. Se trata de un pago que en el balance del año no tendría un efecto contractivo sobre las reservas internacionales. La entidad europea otorgaría nuevamente el préstamo en los próximos meses.
Salida de depósitos en dólares del sistema financiero. Este factor provocó una caída de casi 1000 millones de dólares en las reservas. Al cierre de 2012, los depósitos en moneda extranjera eran de 9393 millones de dólares, mientras que en junio de este año descendieron hasta un promedio de 8301 millones. Entidades bancarias retiraron los encajes y dinero ocioso que por regulación guardaban en el Banco Central para devolver el dinero a sus clientes.
Menor cotización del oro. Ese metal representa 7 por ciento del total de activos que componen las reservas internacionales. Al cierre del primer semestre, la onza de oro se negociaba a 1226 dólares, un retroceso de 26,9 por ciento respecto de diciembre pasado. Eso provocó una merma cercana a 1000 millones de dólares en las reservas, según estimaciones privadas.
Menor disponibilidad de divisas en el mercado cambiario. El Banco Central compró 1510 millones de dólares entre enero y junio. El dato adquiere relevancia si se tiene en cuenta que el año pasado adquirió 8355 millones de dólares en el mismo período.
Este último factor no generó un retroceso directo en las reservas, pero no permitió compensar el impacto de los otros elementos. Si la autoridad monetaria hubiera comprado divisas en la misma cantidad que el año pasado, las reservas internacionales habrían cerrado por encima de 45.000 millones de dólares en junio. Existen varios motivos que explicaron el menor volumen de divisas que pudo comprar el Banco Central. Uno: el aumento del déficit en la cuenta turismo. Dos: la contracción del saldo comercial, explicado por el fuerte incremento de las importaciones de combustibles a partir del repunte de la actividad económica. Además, hubo empresas que no renovaron préstamos con acreedores internacionales, por lo que usaron dólares del mercado cambiario para cancelar la deuda.
A diferencia de la primera mitad de 2013, los factores que afectaron las reservas perderían intensidad entre julio y diciembre. Según esperan en el BCRA y coinciden analistas privados, los depósitos en moneda extranjera dejarían de caer, tras haberse estabilizado en las últimas semanas en un monto de 8300 millones de dólares. La cotización del oro también parece haber encontrado un piso, aunque la volatilidad de los commodities hace que sea poco provechoso arriesgar afirmaciones.
El otro elemento relevante será el pago de deuda en moneda extranjera. Estimaciones del mercado proyectan vencimientos cercanos a 3000 millones de dólares. Se destaca el desembolso del Bonar 2013 por 2000 millones de dólares en septiembre. Este año no deberá abonarse el Cupón PBI, un pago que requirió 2792 millones de dólares en 2012. Eso implica que el reintegro de 3000 millones de dólares del préstamo del Banco de Francia compensaría la salida de divisas por deuda.
Como resultado, las reservas internacionales podrían avanzar en la segunda parte del año en función de lo que el Banco Central alcance a comprar en el mercado cambiario. Entre julio y diciembre de 2010, el Banco Central compró 6690 millones de dólares. En el mismo período de 2011, desembolsó 3562 millones. En 2012, reforzada la administración de la plaza de cambios, adquirió 1862 millones de dólares. Si logra repetir este desempeño, las reservas recuperarían casi la mitad de lo perdido hasta junio. Claro que, además, tendrán un rol relevante los dólares que resulten del blanqueo de capitales.
Informe: Federico Kucher.

Acerca de Napule

es Antonio Cicioni, politólogo y agnotólogo, hincha de Platense y adicto en recuperación a la pizza porteña.

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