El experimentado productor televisivo analiza la interna del kirchnerismo y considera que el gobernador bonaerense es el mejor candidato dentro del espacio oficialista. Elogia algunas decisiones del Gobierno pero critica su verticalismo. Su mirada sobre el nuevo Marcelo Tinelli y el impacto político de su programa.
Estoy en un momento muy feliz de mi vida», asegura Claudio Villarruel. El aire de AM Del Plata y la dirección de la emisora, la señal televisiva 360 TV y la productora OnTV ocupan gran parte de la rutina del multifacético productor, que no obstante disfruta cada momento del día. Cuatro años después de su renuncia a Telefe, donde se desempeñaba como director artístico, Villarruel recibe a 3Días en el edificio de Del Plata en Palermo para analizar el presente y el futuro de la Argentina.
n ¿Cómo evaluás la década kirchnerista?
-Este Gobierno es lo más parecido a lo que pensé toda mi vida que se podía hacer al gobernar un país. Representa bastante el pensamiento que tuve desde mis años de estudiante de Sociología hasta hoy. No soy peronista, y si hubiera ganado el Frepaso en su momento seguramente me hubiera representado, pero la gente eligió a Menem. Hay muchas cosas que no me gustan para nada, pero lo que tuvo de bueno es la concepción de la política como herramienta de cambio social. Ha logrado mover un statu-quo que venía hace mucho tiempo establecido. Nadie interpelaba a la Justicia, a los poderes económicos o al campo.
n ¿Qué cosas no te gustan?
– La soberbia de ciertos funcionarios que ya no están, el verticalismo, la adulación por la adulación misma. Siento que la mejor forma de acompañar un proyecto es con una actitud crítica. En el Gobierno hay cierta mirada superadora de las cosas que no me gusta. Creo que debería ser más horizontal.
n ¿Cómo ves el escenario para la sucesión del Gobierno?
-Creo que las PASO son un gran avance, porque los ciudadanos pueden elegir quiénes serán sus candidatos en cada ámbito político. Se abre un lindo panorama. No creo que haya una propuesta superadora de lo que se consiguió en estos años, ni dentro ni fuera del espacio oficialista. Será algo distinto. La gente va a estar con el que rescate las cosas interesantes que se han logrado y tenga la visión de entender al mundo pensando en la sociedad y en los que fueron excluidos por casi 200 años de historia.
n ¿Qué figura ves como candidato dentro del espacio oficial?
– Siento que Daniel Scioli se merece una oportunidad para ser presidente. Aun con la lealtad que tuvo siempre ha sido muy vapuleado dentro de su partido por varios que ahora están pidiéndole espacio. No hay alguien que me represente en todo el espectro, pero si continúa este proyecto creo que lo merece Daniel. Tuvo una gestión de dos mandatos en la provincia de Buenos Aires con muchos cortocircuitos internos y fue vicepresidente. Intuitivamente también lo veo como el mejor posicionado.
n ¿Qué te parece la gestión del PRO en la ciudad?
– Tiene una visión gerencial que, a mí gusto, es cortoplacista. Veo una ciudad con problemas graves de vivienda y donde cada vez es más caro vivir. Los hijos de mis conocidos tienen que irse a vivir a Provincia porque no pueden pagar los alquileres cerca de sus padres. El Metrobus funcionó bien, pero no creo que eso se pueda definir como una política de Estado. Macri tiene escasa formación política e intenta manejar la ciudad como una empresa. No estoy para nada de acuerdo con eso, pero lo respeto porque por lo menos dice lo que piensa.
n ¿Cómo tomaste las peleas entre actores y otras celebridades por sus opiniones políticas?
-Me parece súper saludable tener discusiones con amigos y colegas por cuestiones políticas. Eso antes estaba clausurado, incluso en la democracia. Hoy la pelea parece más virulenta o visceral, porque es una pelea por un tipo de modelo de país. Hoy se discute eso. El que te dice que una persona tiene un hijo para cobrar la Asignación Universal, tiene un modelo de país en la cabeza que es sectario, segregacionista, con una visión totalmente discriminatoria y clasista. Nadie quiere que los planes sean el motor de la economía, pero es el primer paso.
n ¿Qué cosas te ponen contento de la Argentina?
– Tengo mucha fe en la Argentina. Es un país con muchas deudas que tienen que ver con la extrema pobreza que la burocracia frena muchas veces. Pero tiene una capacidad increíble de estar en la lona como en 2001 y resurgir de las cenizas. Somos un país joven, en democracia y con muchos recursos para crecer.
n ¿Qué opinás de la televisión actual?
– Siento que nadie marca tendencia. Hoy hay muy poco espacio para la creatividad y para el riesgo. La tele está manejada ya no tanto por los directores artísticos sino que las decisiones están más colegiadas, con más peso de los directores financieros. Eso atenta contra la creatividad en la pantalla. Se acotan los riesgos a costa de maximizar la rentabilidad para conseguir mayores ganancias. Por eso las programaciones están un poco replicadas y no hay apariciones de contenidos que hagan diferencia. Necesitamos más gente que arriesgue.
n ¿Cuál es tu mirada sobre el nuevo ciclo de Marcelo Tinelli en Showmatch?
-Marcelo brilla mucho más cuando hace humor. Los momentos más divertidos de mi vida fueron cuando hacíamos Videomatch. Era salir a escena todos los días, y la mitad era improvisación con lo que generábamos en el momento. Tenía una impronta de humor que no se hizo en mucho tiempo. A mí me gusta más ese Marcelo que el que se ve ahora. No me engancho. Todos vamos creciendo. Ahora eso de las peleas y demás no me gusta.
n ¿Creés que el programa influye en lo político?
-No. Depende siempre de cómo esté la política en el momento. En 2009, se venía de una pelea muy fuerte por el tema de la resolución 125 y el Gobierno salió desgastado. En ese contexto, algunos políticos lo aprovecharon a nivel imagen, porque eso acompañó un tono y un imaginario social. Pero no creo que ayude en las urnas. Pensar eso, es pensar una sociedad medio idiota y no creo que lo seamos. n 3D
Estoy en un momento muy feliz de mi vida», asegura Claudio Villarruel. El aire de AM Del Plata y la dirección de la emisora, la señal televisiva 360 TV y la productora OnTV ocupan gran parte de la rutina del multifacético productor, que no obstante disfruta cada momento del día. Cuatro años después de su renuncia a Telefe, donde se desempeñaba como director artístico, Villarruel recibe a 3Días en el edificio de Del Plata en Palermo para analizar el presente y el futuro de la Argentina.
n ¿Cómo evaluás la década kirchnerista?
-Este Gobierno es lo más parecido a lo que pensé toda mi vida que se podía hacer al gobernar un país. Representa bastante el pensamiento que tuve desde mis años de estudiante de Sociología hasta hoy. No soy peronista, y si hubiera ganado el Frepaso en su momento seguramente me hubiera representado, pero la gente eligió a Menem. Hay muchas cosas que no me gustan para nada, pero lo que tuvo de bueno es la concepción de la política como herramienta de cambio social. Ha logrado mover un statu-quo que venía hace mucho tiempo establecido. Nadie interpelaba a la Justicia, a los poderes económicos o al campo.
n ¿Qué cosas no te gustan?
– La soberbia de ciertos funcionarios que ya no están, el verticalismo, la adulación por la adulación misma. Siento que la mejor forma de acompañar un proyecto es con una actitud crítica. En el Gobierno hay cierta mirada superadora de las cosas que no me gusta. Creo que debería ser más horizontal.
n ¿Cómo ves el escenario para la sucesión del Gobierno?
-Creo que las PASO son un gran avance, porque los ciudadanos pueden elegir quiénes serán sus candidatos en cada ámbito político. Se abre un lindo panorama. No creo que haya una propuesta superadora de lo que se consiguió en estos años, ni dentro ni fuera del espacio oficialista. Será algo distinto. La gente va a estar con el que rescate las cosas interesantes que se han logrado y tenga la visión de entender al mundo pensando en la sociedad y en los que fueron excluidos por casi 200 años de historia.
n ¿Qué figura ves como candidato dentro del espacio oficial?
– Siento que Daniel Scioli se merece una oportunidad para ser presidente. Aun con la lealtad que tuvo siempre ha sido muy vapuleado dentro de su partido por varios que ahora están pidiéndole espacio. No hay alguien que me represente en todo el espectro, pero si continúa este proyecto creo que lo merece Daniel. Tuvo una gestión de dos mandatos en la provincia de Buenos Aires con muchos cortocircuitos internos y fue vicepresidente. Intuitivamente también lo veo como el mejor posicionado.
n ¿Qué te parece la gestión del PRO en la ciudad?
– Tiene una visión gerencial que, a mí gusto, es cortoplacista. Veo una ciudad con problemas graves de vivienda y donde cada vez es más caro vivir. Los hijos de mis conocidos tienen que irse a vivir a Provincia porque no pueden pagar los alquileres cerca de sus padres. El Metrobus funcionó bien, pero no creo que eso se pueda definir como una política de Estado. Macri tiene escasa formación política e intenta manejar la ciudad como una empresa. No estoy para nada de acuerdo con eso, pero lo respeto porque por lo menos dice lo que piensa.
n ¿Cómo tomaste las peleas entre actores y otras celebridades por sus opiniones políticas?
-Me parece súper saludable tener discusiones con amigos y colegas por cuestiones políticas. Eso antes estaba clausurado, incluso en la democracia. Hoy la pelea parece más virulenta o visceral, porque es una pelea por un tipo de modelo de país. Hoy se discute eso. El que te dice que una persona tiene un hijo para cobrar la Asignación Universal, tiene un modelo de país en la cabeza que es sectario, segregacionista, con una visión totalmente discriminatoria y clasista. Nadie quiere que los planes sean el motor de la economía, pero es el primer paso.
n ¿Qué cosas te ponen contento de la Argentina?
– Tengo mucha fe en la Argentina. Es un país con muchas deudas que tienen que ver con la extrema pobreza que la burocracia frena muchas veces. Pero tiene una capacidad increíble de estar en la lona como en 2001 y resurgir de las cenizas. Somos un país joven, en democracia y con muchos recursos para crecer.
n ¿Qué opinás de la televisión actual?
– Siento que nadie marca tendencia. Hoy hay muy poco espacio para la creatividad y para el riesgo. La tele está manejada ya no tanto por los directores artísticos sino que las decisiones están más colegiadas, con más peso de los directores financieros. Eso atenta contra la creatividad en la pantalla. Se acotan los riesgos a costa de maximizar la rentabilidad para conseguir mayores ganancias. Por eso las programaciones están un poco replicadas y no hay apariciones de contenidos que hagan diferencia. Necesitamos más gente que arriesgue.
n ¿Cuál es tu mirada sobre el nuevo ciclo de Marcelo Tinelli en Showmatch?
-Marcelo brilla mucho más cuando hace humor. Los momentos más divertidos de mi vida fueron cuando hacíamos Videomatch. Era salir a escena todos los días, y la mitad era improvisación con lo que generábamos en el momento. Tenía una impronta de humor que no se hizo en mucho tiempo. A mí me gusta más ese Marcelo que el que se ve ahora. No me engancho. Todos vamos creciendo. Ahora eso de las peleas y demás no me gusta.
n ¿Creés que el programa influye en lo político?
-No. Depende siempre de cómo esté la política en el momento. En 2009, se venía de una pelea muy fuerte por el tema de la resolución 125 y el Gobierno salió desgastado. En ese contexto, algunos políticos lo aprovecharon a nivel imagen, porque eso acompañó un tono y un imaginario social. Pero no creo que ayude en las urnas. Pensar eso, es pensar una sociedad medio idiota y no creo que lo seamos. n 3D
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