La foto habla: nos muestra a Cobos, Sanz y Negri junto al juez «independiente» Ricardo Recondo y atrás se lo divisa al fiscal Sáenz, otra figurita de la «Justicia independiente» que por estas horas está diciendo por todas las radios que la marcha de los fiscales no será política… La foto muestra sin desparpajos la entente de la principal fuerza opositora con personalidades del espectro más duro de la militancia antrikirchnerista que opera en el Poder Judicial. Está todo a la vista, para que nadie se llame a engaño.
Lo planteamos ayer y hoy Clarín lo ratifica: el poder está jugando a todo o nada por el armado de una gran confluencia del massismo con el macrismo y la UCR, usando los restos de lo que supo ser el gran partido de Alem e Yrigoyen como articulador. La gran ventaja de Sanz y los suyos es que le ponen locales, personería jurídica y algo de estructura en todo el país a Macri y Massa, que están muy flacos por fuera de sus distritos. Los radicales se conforman con mantener lo que tienen (reelegir las bancas que vencen) y con la posibilidad de disputar alguna gobernación. Saben que no tienen un candidato presidenciable y que cuanto más lejos puedan estar del PEN, mejor la pasarán. Se dice que Mauricio no quiere saber nada de hablar con Sergio: la verdad, todo indica que su agrande se debe a que se sabe por encima de Tajaí en todos los sondeos.
El año que ya ha comenzado nos traerá el gran espectáculo de ver cómo el espectro político opositor se las ingenia para cumplir el mandato de unirse a como dé lugar.
Será un espectáculo para alquilar balcones.