Por Horacio Verbitsky
En marzo de 1958, Arturo Jauretche explicó en la revista Qué “Cómo se fabrica un personaje”. Se refiere a “una llamada ‘campaña de educación democrática’, cuyo objeto es ir fabricando con tiempo un nuevo personaje, un mozo que fue candidato a la presidencia de la República y que desde luego tuvo prensa favorable. El personaje que están fabricando es un doctorcito Fayt, que un día, con el título nuevecito, el sombrero aludo de esos de ribete, y tres guantes, los dos para ponerse y el de llevar en la mano, se apareció en FORJA y se afilió. Pidió enseguida la tribuna y se la dimos tres veces. A la tercera lo llamé y le dije: ‘Vea, joven, usted no entiende lo que es FORJA, porque usted es un liberal crudo y su puesto está en el Partido Socialista’. Acerté, porque actualmente actúa en el mismo y habla, habla, habla, ¡la pucha si habla!, y tiene prensa a bocha como que La Nación y La Prensa le dedican todas las semanas su buen cuarto de columna. Están fabricando un comodín, como hay tantos”.
En marzo de 1958, Arturo Jauretche explicó en la revista Qué “Cómo se fabrica un personaje”. Se refiere a “una llamada ‘campaña de educación democrática’, cuyo objeto es ir fabricando con tiempo un nuevo personaje, un mozo que fue candidato a la presidencia de la República y que desde luego tuvo prensa favorable. El personaje que están fabricando es un doctorcito Fayt, que un día, con el título nuevecito, el sombrero aludo de esos de ribete, y tres guantes, los dos para ponerse y el de llevar en la mano, se apareció en FORJA y se afilió. Pidió enseguida la tribuna y se la dimos tres veces. A la tercera lo llamé y le dije: ‘Vea, joven, usted no entiende lo que es FORJA, porque usted es un liberal crudo y su puesto está en el Partido Socialista’. Acerté, porque actualmente actúa en el mismo y habla, habla, habla, ¡la pucha si habla!, y tiene prensa a bocha como que La Nación y La Prensa le dedican todas las semanas su buen cuarto de columna. Están fabricando un comodín, como hay tantos”.