Gabriela Michetti es una de las dirigentes macristas con mejor imagen positiva pese a haber perdido la interna del por la jefatura de Gobierno porteño. Se muestra confiada y tranquila, aunque tiene pocas pausas al hablar. «No veo la hora de que termine la campaña, estoy cansada», dice la candidata a vicepresidenta de Cambiemos, mientras desayuna un yoghurt descremado en el Hotel Alejandro I. En una entrevista exclusiva con El Tribuno durante su visita a Salta, Michetti minimizó ayer los vetos de Mauricio Macri en la Legislatura porteña y sostuvo que «hace cuatro años que no se genera un empleo privado en la Argentina porque no cierra esto del dólar mentiroso de los nueve pesos y pico». «Tendremos que negociar salarios sobre la inflación que encontramos, pero también sobre la realidad de las cuentas públicas», concluyó.
¿Va a haber una megadevaluación si Mauricio Macri llega a la presidencia?
No, de ninguna manera. Lo que nosotros siempre decimos es que la devaluación real y sustanciosa ya se ha realizado. Esto es así porque desde que el gobierno kirchnerista asumió en 2003 el dólar fue incrementando su precio. Hoy el dólar oficial no se consigue de ninguna manera a nueve pesos y pico como dice el Gobierno, anda siempre rondando los quince pesos. El dólar que ellos sostienen como dólar oficial no es un dólar real y además tiene un problema enorme para los productores y los exportadores, porque es el dólar con el cual se vende al exterior pero no con el que se compran los insumos. Ese desbarajuste que tiene nuestra producción local hace que todas nuestras economías regionales y todos nuestros exportadores estén tan afectados. Tenemos un problema de inversiones locales que no resultan. Hace cuatro años que no se genera un empleo privado en la Argentina porque no cierra esto del dólar mentiroso de los nueve pesos y pico. La gran devaluación está hecha y lo que hay que hacer es ordenar la economía y ponerle verdad a las variables con las que nos vinieron mintiendo. Hoy podemos ir por el medio. En 32 años de democracia tuvimos estatismo exacerbado, del neoliberalismo exacerbado y de un Estado que no existe.
Con una devaluación del 50%, ¿no se verán afectados los precios en los supermercados?
Nosotros haremos absolutamente todo lo que esté a nuestro alcance para que nuestro proyecto político sea un proyecto de cuidado de las personas. De la misma manera que lo hicimos en la Ciudad de Buenos Aires cuando decían que íbamos a privatizar, a achicar, etc y hoy todo el mundo siente que el Estado de la Ciudad los ha protegido, y que hoy tiene una calidad de vida muy superior a la que tenía en 2007. Sobre todo los sectores más bajos, porque no es que los sectores más poderosos de Buenos Aires están diciendo «a mí el Pro me benefició notablemente». Esos sectores se han visto en algunos casos más afectados en términos de tener que poner en la torta de los impuestos de la Ciudad más de lo que ponían en otros gobiernos. Sin embargo, como los beneficios de las obras públicas vuelven, la gente no protesta porque está conforme con lo que hace el Gobierno. Creemos que si uno mira el vecindario se encuentra con países que están creciendo sustentablemente y de manera moderada. Hablo de países que tienen muchos menos recursos que el nuestro. La Argentina tuvo una muy mala conducción política de la economía. Se generó una desconfianza enorme y por eso la economía se achicó tanto que la presión sobre el que sigue pudiendo producir es enorme. Si algunas variables de la economía se mejoran, como por ejemplo con el dólar único, se pueden crear 1.100.000 puestos de trabajo en Argentina. Si vemos que los otros países de América Latina no están teniendo problemas de dólares, ni de inversión, nosotros debemos gozar de ese mismo de economía. La expansión de la economía se va a dar bastante rápido.
Al Pro se le critica que aumentó el endeudamiento en la Ciudad de Buenos Aires, ¿hay que esperar lo mismo para la Nación si ganan las elecciones?
Nosotros creemos que el endeudamiento en un país es algo sano. Cuando vos le haces pagar a una generación presente lo que van a disfrutar las generaciones futuras vos estás haciendo algo muy injusto. Está prohibido hacer eso, es una cosa mal hecha. Cuando hay liquidez en el mundo y las tasas son tan bajas, si todos los países se están endeudando es evidente que somos nosotros los que van en contra de la corriente. Si vos tenés tasas irrisorias del tres por ciento tenés que aprovechar porque lo que te conviene muchas veces es lo que pasa en la economía de tu casa. Muchas veces te conviene, si las tasas son muy bajas, pedir un préstamo y no gastarte la plata que tenés ahorrada. Te vas capitalizando y no dilapidas lo que tenés. Los países no pueden hacerle pagar a la generación que está viviendo hoy el subte que van a disfrutar las próximas generaciones de porteños.
¿No cree que el hecho de no decir quien será el ministro de Economía si ganan puede contribuir a generar fantasmas en lo económico?
Lo que pasa es que nosotros no queremos poner el acento en el ministro de Economía porque estamos convencidos de que el tema no es el proyecto económico sino el proyecto político. Los problemas que tenemos hoy en la economía parten de la política. Hoy tenemos un mal proyecto económico porque tenemos un mal proyecto político. Nos hemos confundido pensando que es la economía la que manda. Argentina necesita dar señales claras de un salto cualitativo desde el punto de vista de la cultura institucional. Si logramos que el presidente que asuma, que puede ser Mauricio, dé las señales correctas el proyecto político va a ayudar que la economía sea floreciente.
Ustedes hablan de diálogo, pero Macri vetó muchas leyes en la Legislatutra. De ser presidente, ¿le hará muchos vetos al Congreso nacional?
Si vos contás proporcionalmente los vetos que hizo Macri a leyes de la Legislatura con la cantidad de leyes que la oposición sacó en la Legislatura porteña y lo comparás con las leyes impulsadas por la oposición que salieron en el Congreso nacional no lo vas a poder creer. La Legislatura porteña sacó estos años unas 2.500 leyes, y de esas más de la mitad son de la oposición. En el Congreso nacional, en estos años de kirchnerismo prácticamente no hay leyes de la oposición. No se si hay alguna.
El 82 por ciento móvil, pero fue vetado por Cristina…
Exactamente. Se habla de los vetos, pero no hay ninguna proporción entre lo que salió de la Legislatura y del Congreso nacional. Macri es una persona absolutamente republicana y respetuosas de la oposición. Pedidos de informes de la oposición salieron muchos en la Legislatura, pero no en el Congreso nacional.
El Pro constantemente remarcó que la inflación estaba elevadísima, incluso en el 40% el año pasado. ¿Qué harán si llegan pedidos de aumento salarial parecidos a eso?
Hemos sido siempre muy veraces en nuestras cifras. Cuarenta por ciento ha sido en algún momento, pero no ahora. Vamos a decir la verdad y negociaremos sobre la base de esa verdad y sobre la base de las realidades que encontremos. Si la gente nos vota, vamos a llegar a un Estado que ni siquiera sabemos en qué estado está. La mentira del Gobierno ha sido tan grande en materia de datos que uno no sabe cómo vamos a encontrar el Banco Central, la AFIP, etc. Hasta que podamos expandir un poquito la economía, que creemos que lo vamos a hacer lo más rápido posible pero que llevará un poquito de tiempo para poder ordenarse, tendremos que negociar sobre la inflación que encontramos pero también sobre la realidad de las cuentas públicas.
Macri planteó que la Policía Federal que está en la Ciudad de Buenos Aires en un año pase a formar parte de la Metropolitana. ¿No estarían los salteños financiando a los policías porteños?
Es una parte, la parte de la Superintendencia Metropolitana que debe encargarse de la Ciudad de Buenos Aires como tienen las policías del interior. Esa parte fue creada para la Ciudad de Buenos Aires porque era la capital del país. Ahora que la Ciudad es autónoma no la tienen que financiar las provincias del interior, porque se estaría cometiendo una injusticia.
La Presidenta la criticó públicamente por su cambio de postura en relación al matrimonio igualitario, ¿se sintió ofendida al escucharla?
No, en absoluto ofendida. Lo que me llama la atención es la postura porque la infalibilidad de las personas es algo complicado de defender. Si en el siglo XXI tenemos algo que defender para poder lograr confianza de los ciudadanos en la política es la falibilidad, que somos personas como cualquier otra y que tenemos un trabajo distinto al del médico, el enfermero, el barrendero o cualquier otro. Cada uno elige su empleo, y nosotros elegimos ser servidores públicos pero somos ciudadanos comunes y corrientes y eso lo tenemos que defender a muerte. Parece que siempre hay que ponerse como en una cumbre de sabiduría. No existe eso. Me llama la atención que la Presidenta no entienda que alguien se puede equivocar o revisar su postura.
¿Va a haber una megadevaluación si Mauricio Macri llega a la presidencia?
No, de ninguna manera. Lo que nosotros siempre decimos es que la devaluación real y sustanciosa ya se ha realizado. Esto es así porque desde que el gobierno kirchnerista asumió en 2003 el dólar fue incrementando su precio. Hoy el dólar oficial no se consigue de ninguna manera a nueve pesos y pico como dice el Gobierno, anda siempre rondando los quince pesos. El dólar que ellos sostienen como dólar oficial no es un dólar real y además tiene un problema enorme para los productores y los exportadores, porque es el dólar con el cual se vende al exterior pero no con el que se compran los insumos. Ese desbarajuste que tiene nuestra producción local hace que todas nuestras economías regionales y todos nuestros exportadores estén tan afectados. Tenemos un problema de inversiones locales que no resultan. Hace cuatro años que no se genera un empleo privado en la Argentina porque no cierra esto del dólar mentiroso de los nueve pesos y pico. La gran devaluación está hecha y lo que hay que hacer es ordenar la economía y ponerle verdad a las variables con las que nos vinieron mintiendo. Hoy podemos ir por el medio. En 32 años de democracia tuvimos estatismo exacerbado, del neoliberalismo exacerbado y de un Estado que no existe.
Con una devaluación del 50%, ¿no se verán afectados los precios en los supermercados?
Nosotros haremos absolutamente todo lo que esté a nuestro alcance para que nuestro proyecto político sea un proyecto de cuidado de las personas. De la misma manera que lo hicimos en la Ciudad de Buenos Aires cuando decían que íbamos a privatizar, a achicar, etc y hoy todo el mundo siente que el Estado de la Ciudad los ha protegido, y que hoy tiene una calidad de vida muy superior a la que tenía en 2007. Sobre todo los sectores más bajos, porque no es que los sectores más poderosos de Buenos Aires están diciendo «a mí el Pro me benefició notablemente». Esos sectores se han visto en algunos casos más afectados en términos de tener que poner en la torta de los impuestos de la Ciudad más de lo que ponían en otros gobiernos. Sin embargo, como los beneficios de las obras públicas vuelven, la gente no protesta porque está conforme con lo que hace el Gobierno. Creemos que si uno mira el vecindario se encuentra con países que están creciendo sustentablemente y de manera moderada. Hablo de países que tienen muchos menos recursos que el nuestro. La Argentina tuvo una muy mala conducción política de la economía. Se generó una desconfianza enorme y por eso la economía se achicó tanto que la presión sobre el que sigue pudiendo producir es enorme. Si algunas variables de la economía se mejoran, como por ejemplo con el dólar único, se pueden crear 1.100.000 puestos de trabajo en Argentina. Si vemos que los otros países de América Latina no están teniendo problemas de dólares, ni de inversión, nosotros debemos gozar de ese mismo de economía. La expansión de la economía se va a dar bastante rápido.
Al Pro se le critica que aumentó el endeudamiento en la Ciudad de Buenos Aires, ¿hay que esperar lo mismo para la Nación si ganan las elecciones?
Nosotros creemos que el endeudamiento en un país es algo sano. Cuando vos le haces pagar a una generación presente lo que van a disfrutar las generaciones futuras vos estás haciendo algo muy injusto. Está prohibido hacer eso, es una cosa mal hecha. Cuando hay liquidez en el mundo y las tasas son tan bajas, si todos los países se están endeudando es evidente que somos nosotros los que van en contra de la corriente. Si vos tenés tasas irrisorias del tres por ciento tenés que aprovechar porque lo que te conviene muchas veces es lo que pasa en la economía de tu casa. Muchas veces te conviene, si las tasas son muy bajas, pedir un préstamo y no gastarte la plata que tenés ahorrada. Te vas capitalizando y no dilapidas lo que tenés. Los países no pueden hacerle pagar a la generación que está viviendo hoy el subte que van a disfrutar las próximas generaciones de porteños.
¿No cree que el hecho de no decir quien será el ministro de Economía si ganan puede contribuir a generar fantasmas en lo económico?
Lo que pasa es que nosotros no queremos poner el acento en el ministro de Economía porque estamos convencidos de que el tema no es el proyecto económico sino el proyecto político. Los problemas que tenemos hoy en la economía parten de la política. Hoy tenemos un mal proyecto económico porque tenemos un mal proyecto político. Nos hemos confundido pensando que es la economía la que manda. Argentina necesita dar señales claras de un salto cualitativo desde el punto de vista de la cultura institucional. Si logramos que el presidente que asuma, que puede ser Mauricio, dé las señales correctas el proyecto político va a ayudar que la economía sea floreciente.
Ustedes hablan de diálogo, pero Macri vetó muchas leyes en la Legislatutra. De ser presidente, ¿le hará muchos vetos al Congreso nacional?
Si vos contás proporcionalmente los vetos que hizo Macri a leyes de la Legislatura con la cantidad de leyes que la oposición sacó en la Legislatura porteña y lo comparás con las leyes impulsadas por la oposición que salieron en el Congreso nacional no lo vas a poder creer. La Legislatura porteña sacó estos años unas 2.500 leyes, y de esas más de la mitad son de la oposición. En el Congreso nacional, en estos años de kirchnerismo prácticamente no hay leyes de la oposición. No se si hay alguna.
El 82 por ciento móvil, pero fue vetado por Cristina…
Exactamente. Se habla de los vetos, pero no hay ninguna proporción entre lo que salió de la Legislatura y del Congreso nacional. Macri es una persona absolutamente republicana y respetuosas de la oposición. Pedidos de informes de la oposición salieron muchos en la Legislatura, pero no en el Congreso nacional.
El Pro constantemente remarcó que la inflación estaba elevadísima, incluso en el 40% el año pasado. ¿Qué harán si llegan pedidos de aumento salarial parecidos a eso?
Hemos sido siempre muy veraces en nuestras cifras. Cuarenta por ciento ha sido en algún momento, pero no ahora. Vamos a decir la verdad y negociaremos sobre la base de esa verdad y sobre la base de las realidades que encontremos. Si la gente nos vota, vamos a llegar a un Estado que ni siquiera sabemos en qué estado está. La mentira del Gobierno ha sido tan grande en materia de datos que uno no sabe cómo vamos a encontrar el Banco Central, la AFIP, etc. Hasta que podamos expandir un poquito la economía, que creemos que lo vamos a hacer lo más rápido posible pero que llevará un poquito de tiempo para poder ordenarse, tendremos que negociar sobre la inflación que encontramos pero también sobre la realidad de las cuentas públicas.
Macri planteó que la Policía Federal que está en la Ciudad de Buenos Aires en un año pase a formar parte de la Metropolitana. ¿No estarían los salteños financiando a los policías porteños?
Es una parte, la parte de la Superintendencia Metropolitana que debe encargarse de la Ciudad de Buenos Aires como tienen las policías del interior. Esa parte fue creada para la Ciudad de Buenos Aires porque era la capital del país. Ahora que la Ciudad es autónoma no la tienen que financiar las provincias del interior, porque se estaría cometiendo una injusticia.
La Presidenta la criticó públicamente por su cambio de postura en relación al matrimonio igualitario, ¿se sintió ofendida al escucharla?
No, en absoluto ofendida. Lo que me llama la atención es la postura porque la infalibilidad de las personas es algo complicado de defender. Si en el siglo XXI tenemos algo que defender para poder lograr confianza de los ciudadanos en la política es la falibilidad, que somos personas como cualquier otra y que tenemos un trabajo distinto al del médico, el enfermero, el barrendero o cualquier otro. Cada uno elige su empleo, y nosotros elegimos ser servidores públicos pero somos ciudadanos comunes y corrientes y eso lo tenemos que defender a muerte. Parece que siempre hay que ponerse como en una cumbre de sabiduría. No existe eso. Me llama la atención que la Presidenta no entienda que alguien se puede equivocar o revisar su postura.
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