La incidencia directa de los aumentos de las tarifas de los servicios públicos en la canasta de consumo básica de una familia (matrimonio y dos hijos menores) de la Ciudad de Buenos Aires es de $ 818. Equivale a un incremento del 6% en el costo de esa canasta valuada a febrero en $ 13.520.
En esa canasta básica no se considera el alquiler, se supone que la familia tiene la cobertura médica del hospital público o la obra social, los chicos van a escuela pública y no cuenta con automóvil. Es lo que se llama una canasta elemental o básica.
Según la Dirección porteña, gas, luz, agua y transporte suman $ 493 en el gasto total. Se trata de una cifra muy baja porque el promedio de la canasta toma en cuenta tanto familias que utilizan muy poco el transporte público o pagan la tarifa social como hogares con bajo consumo de electricidad y gas. Por ejemplo, el gasto en transporte público es de apenas $ 237 mensuales o casi $ 8 por día, cuando un viaje de ida en colectivo es de $ 3 o $ 4,50 en subte.
Si se aplican los aumentos proyectados a esa canasta, la factura de $ 493 se elevaría a $ 1.312 mensuales, un aumento del 265%.
Ese sería sólo el efecto directo de estos aumentos. Si se agregan los efectos indirectos, por el traslado a los precios de los incrementos de esos servicios en talleres y comercios, y el incremento del resto de los precios hacia fin de abril el valor de la canasta podría superar los $ 14.500.
La misma medición arrojó que desde fin de octubre esa canasta subió de $ 11.960 a $ 13.520: un incremento en 4 meses del 13% o $ 1.560. En ese aumento se destacaron los gastos en alimentos que aumentaron un 15,5%. La medición punta a punta- febrero 2015 a febrero 2016- fue del 32,2%
En el caso de una canasta básica de un matrimonio de adultos mayores el aumento es de $ 615. Por tratarse de un matrimonio inactivo, los gastos en servicios publicos son menores, en especial en el transporte público. Aun asi, la incidencia sobre la canasta total es mayor del 9% porque a febrero su valor total era de $ 6.815.
Ayer, el Ministro de Hacienda, Alfonso Prat-Gay estimó que en marzo el indice de precios habría tenido una suba del 3,5%. Eso llevaría la inflación interanual porteña a más del 35%. A su vez, distintas consultoras privadas estimaron para abril una inflación del 5%, teniendo en cuenta que el aumento del transporte público arranca el viernes 8 ( incide solo tres semanas en todo el mes) aún se desconoce cuando comenzará a regir los restantes aumentos ( gas, nuevo cuadro tarifario de luz y agua) y hubo incrementos importantes en los servicios privados y en las cuotas de los colegios privados. Se calcula que el transporte público podría incidir en casi 2 puntos en el indice de precios mensual.
De aquí se desprende que el impacto de estos aumentos sobre el Indice de Precios como sobre la canasta básica se verificará en parte en abril y se completará en mayo, volviendo a incrementar la inflación interanual.
Si bien estos aumentos tienen mayor impacto en la región metropolitana, el interior también tendrá incrementos porcentualmente menores. Asi pasó con la luz; en la Ciudad de Buenos Aires, en febrero la incidencia fue del 253% y en el interior del orden del 100%.
En esa canasta básica no se considera el alquiler, se supone que la familia tiene la cobertura médica del hospital público o la obra social, los chicos van a escuela pública y no cuenta con automóvil. Es lo que se llama una canasta elemental o básica.
Según la Dirección porteña, gas, luz, agua y transporte suman $ 493 en el gasto total. Se trata de una cifra muy baja porque el promedio de la canasta toma en cuenta tanto familias que utilizan muy poco el transporte público o pagan la tarifa social como hogares con bajo consumo de electricidad y gas. Por ejemplo, el gasto en transporte público es de apenas $ 237 mensuales o casi $ 8 por día, cuando un viaje de ida en colectivo es de $ 3 o $ 4,50 en subte.
Si se aplican los aumentos proyectados a esa canasta, la factura de $ 493 se elevaría a $ 1.312 mensuales, un aumento del 265%.
Ese sería sólo el efecto directo de estos aumentos. Si se agregan los efectos indirectos, por el traslado a los precios de los incrementos de esos servicios en talleres y comercios, y el incremento del resto de los precios hacia fin de abril el valor de la canasta podría superar los $ 14.500.
La misma medición arrojó que desde fin de octubre esa canasta subió de $ 11.960 a $ 13.520: un incremento en 4 meses del 13% o $ 1.560. En ese aumento se destacaron los gastos en alimentos que aumentaron un 15,5%. La medición punta a punta- febrero 2015 a febrero 2016- fue del 32,2%
En el caso de una canasta básica de un matrimonio de adultos mayores el aumento es de $ 615. Por tratarse de un matrimonio inactivo, los gastos en servicios publicos son menores, en especial en el transporte público. Aun asi, la incidencia sobre la canasta total es mayor del 9% porque a febrero su valor total era de $ 6.815.
Ayer, el Ministro de Hacienda, Alfonso Prat-Gay estimó que en marzo el indice de precios habría tenido una suba del 3,5%. Eso llevaría la inflación interanual porteña a más del 35%. A su vez, distintas consultoras privadas estimaron para abril una inflación del 5%, teniendo en cuenta que el aumento del transporte público arranca el viernes 8 ( incide solo tres semanas en todo el mes) aún se desconoce cuando comenzará a regir los restantes aumentos ( gas, nuevo cuadro tarifario de luz y agua) y hubo incrementos importantes en los servicios privados y en las cuotas de los colegios privados. Se calcula que el transporte público podría incidir en casi 2 puntos en el indice de precios mensual.
De aquí se desprende que el impacto de estos aumentos sobre el Indice de Precios como sobre la canasta básica se verificará en parte en abril y se completará en mayo, volviendo a incrementar la inflación interanual.
Si bien estos aumentos tienen mayor impacto en la región metropolitana, el interior también tendrá incrementos porcentualmente menores. Asi pasó con la luz; en la Ciudad de Buenos Aires, en febrero la incidencia fue del 253% y en el interior del orden del 100%.