El segundo trimestre, en materia económica, proverá una buena y una mala noticia. La mayoría de los economistas, coinciden, en que llegarán dólares de la cosecha y de inversiones de portafolio que ayudarán a descomprimir el mercado cambiario. La mala, es que la actividad seguirá sin repuntar.
Según el Estudio Broda, en un informe que presentó a sus clientes esta semana, la economía seguirá cayendo en el trimestre que recién comienza. «En un contexto de fuerte caída de la masa salarial real, la economía seguirá contrayéndose pese al empuje de la buena cosecha sojera». Y Marina Dal Poggetto, directora del Estudio Bein, dice que «Se vienen los peores meses». Para Broda, en el tercer trimestre «hay chance de que la economía toque ‘piso'». Para el Estudio Bein también.
¿Por qué la actividad seguiría cayendo pese a la llegada de los dólares de la soja? Los economistas aducen tres motivos.
En primer lugar, el aporte del campo a las cuentas de la macroeconomía sería menor al del año pasado. Según un cálculo del IERAL-Fundación Mediterránea publicado ayer, «las exportaciones de granos y derivados se estiman en US$ 25.300 millones, un 2% menos que en 2015, con una pérdida potencial de divisas del orden de los US$500 millones». Si bien se espera una muy buena producción agrícola, similar al record del ciclo previo, no acompañarán los precios internacionales.
En segundo lugar, el poder adquisitivo en los próximos meses seguirá ‘dañado’. Dal Poggetto razona que «desde octubre la inflación acumulada fue 25% pero los salarios no han sido ajustados en promedio».
Por último, y en tercer lugar, el impacto de la inversión luce demorado. Para Broda, recién en el cuarto trimestre «se espera que se reanime la inversión y comience a reactivarse la economía a lo que se suma que impacte el aumento previsto en la siembra de la campaña agrícola 2017».
Según Broda la economía caerá 1,5% este año y para el Estudio Bein 2,3%. La inflación la ven en 35,8% y 36%, respectivamente.
Dal Poggetto no cree que las tasas altas de interés sean recesivas como piensa la mayoría de los economistas. «Con el dólar quieto la inflación se morigera y eso favorece el poder adquisitivo. Además, todavía funciona el Ahora 12 y eso favorece el crédito». Cree que la moderación de la inflación mejorará los salarios.
Según el Estudio Broda, en un informe que presentó a sus clientes esta semana, la economía seguirá cayendo en el trimestre que recién comienza. «En un contexto de fuerte caída de la masa salarial real, la economía seguirá contrayéndose pese al empuje de la buena cosecha sojera». Y Marina Dal Poggetto, directora del Estudio Bein, dice que «Se vienen los peores meses». Para Broda, en el tercer trimestre «hay chance de que la economía toque ‘piso'». Para el Estudio Bein también.
¿Por qué la actividad seguiría cayendo pese a la llegada de los dólares de la soja? Los economistas aducen tres motivos.
En primer lugar, el aporte del campo a las cuentas de la macroeconomía sería menor al del año pasado. Según un cálculo del IERAL-Fundación Mediterránea publicado ayer, «las exportaciones de granos y derivados se estiman en US$ 25.300 millones, un 2% menos que en 2015, con una pérdida potencial de divisas del orden de los US$500 millones». Si bien se espera una muy buena producción agrícola, similar al record del ciclo previo, no acompañarán los precios internacionales.
En segundo lugar, el poder adquisitivo en los próximos meses seguirá ‘dañado’. Dal Poggetto razona que «desde octubre la inflación acumulada fue 25% pero los salarios no han sido ajustados en promedio».
Por último, y en tercer lugar, el impacto de la inversión luce demorado. Para Broda, recién en el cuarto trimestre «se espera que se reanime la inversión y comience a reactivarse la economía a lo que se suma que impacte el aumento previsto en la siembra de la campaña agrícola 2017».
Según Broda la economía caerá 1,5% este año y para el Estudio Bein 2,3%. La inflación la ven en 35,8% y 36%, respectivamente.
Dal Poggetto no cree que las tasas altas de interés sean recesivas como piensa la mayoría de los economistas. «Con el dólar quieto la inflación se morigera y eso favorece el poder adquisitivo. Además, todavía funciona el Ahora 12 y eso favorece el crédito». Cree que la moderación de la inflación mejorará los salarios.