por MARÍA IGLESIA
El ministro de Hacienda, Alfonso Prat-Gay, con el secretario de Finanzas, Luis Caputo
La Argentina volvió a emitir deuda, esta vez en Europa, un mercado en el que no había colocado bonos durante 15 años. Luego de los rumores que habían corrido en los últimos días, el Ministerio de Hacienda confirmó ayer que fueron 2500 millones de euros los que se emitieron en dos títulos a 5 y 10 años de plazo.
Con la colocación de ayer, en el año los títulos soberanos en moneda extranjera emitidos según ley de Nueva York alcanzan los u$s 22.050 millones, entre los u$s 16.500 millones iniciales (que se usó parte para pagar a los holdouts), los u$s 2750 para la recompra del Cupón PBI y los 2500 millones de euros de ayer, que equivalen a u$s 2800 millones. Si a este total se agregan las emisiones concretadas por las provincias y las corporativos, alcanzan los u$s 32.719 millones.
«Habiendo completado la semana pasada la primera serie de reuniones con inversores europeos en 15 años, la Argentina confirmó la recomposición de una de sus relaciones financieras más antiguas a través de la colocación de dos bonos denominados en euros en el mercado europeo», afirma el comunicado de Hacienda difundido ayer.
La demanda de estos títulos fue mayor que la esperada. De hecho, desde la cartera a cargo de Alfonso Prat-Gay dijeron que fue tres veces mayor a la finalmente adjudicada. Se recibieron solicitudes por 7600 millones de euros y se terminó adjudicando 2500 millones de euros, por los dos bonos. El rumor anterior a la colocación era que el Gobierno iba a intentar conseguir 500 millones de euros.
La elevada demanda permitió al Gobierno colocar dos títulos a tasas bajas para la Argentina: por el bono con vencimiento en 2022 se emitieron u$s 1250 millones de euros con una tasa que cortó en 3,875%; y, para el de 10 años (a 2027) se colocaron otros 1250 millones, a un 5%.
«Fue una tasa muy atractiva para la Argentina en un mundo que está desesperado en conseguir un rendimiento positivo», sostuvo Sebastián Maril, de Research for Traders. En ese sentido, agregó que se ubicó en un nivel «extremadamente inferior a lo que estimaban los inversores».
Desde Hacienda aseguran que las «compañías argentinas contarán, a partir de ahora, con una tasa de referencia clara y transparente para los financiamientos que puedan obtener en el mercado de euros para sus proyectos de infraestructura y desarrollo». La anterior colocación de deuda en el mercado europeo fue en 2001.
Eric Ritondale, economista de la consultora Econviews, calificó de exitosa la colocación de ayer y agregó que pone en evidencia dos aspectos. Por un lado, que «el precio del riesgo en el mundo es bajísimo, de cualquier tipo de activos». Además agregó que con estos fondos prácticamente se completa el programa financiero de este año.
De hecho, desde el Gobierno aseguraron que la colocación de estos dos bonos en euros, sumada a la última licitación en pesos del 29 de septiembre, de $ 50.000 millones para el Bono a 5 años (octubre 2021) y $ 11.572 millones para el Bono a 2 años (octubre de 2018), «suman los recursos necesarios para afrontar el pago de la deuda preexistente durante el último trimestre del año (un monto de u$s 7300 millones que incluye vencimientos de capital e intereses de organismos multilaterales y bilaterales y bonos en poder del sector privado y el banco central)».
A principios de julio, cuando el presidente Mauricio Macri estuvo en Berlín, afirmó que si con el blanqueo lograban que ingresen u$s 30.000 millones, el país se retiraba del mercado del crédito. Sin embargo, las tasas bajas (que se sabe no van a continuar en estos niveles tan bajos en los próximos meses, según afirmó semanas atrás la presidente de la Fed, Janet Yellen) y la magra captación de fondos en los bonos vía el sinceramiento fiscal, llevó al Gobierno a salir con una nueva emisión. Desde el mercado no descartan que sea la última de 2016, pese a que ya se cubrieron las necesidades para este año.
Se sabe que, para lo que resta del año tres provincias tienen planeado emitir deuda (Santa Fe, Entre Ríos y Tierra del Fuego) por alrededor de u$s 1000 millones, sumado a colocaciones de empresas (como Banco Hipotecario, que lo hace hoy, y a Central Puerto, Aeropuertos Argentina 2000 y Genneia), por u$s 1650 millones en total. Maril sostuvo que la colocación de ayer «ayuda a traer al país una base de clientes que antiguamente no tenía, que invierte en euros; muchas carteras en Europa no tienen rendimientos altos y la de Argentina es una inversión relativamente segura».
Desde Hacienda aseguraron que «el apoyo que ha recibido el Gobierno, manifestado por los primeros mandatarios europeos, se ve reflejado en el interés por participar en esta transacción de inversores de diversos orígenes, incluyendo Alemania, Austria, Bélgica, Dinamarca, España, Finlandia, Francia, Holanda, Irlanda, Italia, Noruega, Portugal, Reino Unido, Suecia y Suiza, entre otros».
Y agregaron que si bien durante las reuniones de la semana pasada se visitaron 135 inversores, la transacción conocida ayer contó con una participación total de 267 inversores que expresaron interés por un total de 7600 millones de euros de demanda.
El ministro de Hacienda, Alfonso Prat-Gay, con el secretario de Finanzas, Luis Caputo
La Argentina volvió a emitir deuda, esta vez en Europa, un mercado en el que no había colocado bonos durante 15 años. Luego de los rumores que habían corrido en los últimos días, el Ministerio de Hacienda confirmó ayer que fueron 2500 millones de euros los que se emitieron en dos títulos a 5 y 10 años de plazo.
Con la colocación de ayer, en el año los títulos soberanos en moneda extranjera emitidos según ley de Nueva York alcanzan los u$s 22.050 millones, entre los u$s 16.500 millones iniciales (que se usó parte para pagar a los holdouts), los u$s 2750 para la recompra del Cupón PBI y los 2500 millones de euros de ayer, que equivalen a u$s 2800 millones. Si a este total se agregan las emisiones concretadas por las provincias y las corporativos, alcanzan los u$s 32.719 millones.
«Habiendo completado la semana pasada la primera serie de reuniones con inversores europeos en 15 años, la Argentina confirmó la recomposición de una de sus relaciones financieras más antiguas a través de la colocación de dos bonos denominados en euros en el mercado europeo», afirma el comunicado de Hacienda difundido ayer.
La demanda de estos títulos fue mayor que la esperada. De hecho, desde la cartera a cargo de Alfonso Prat-Gay dijeron que fue tres veces mayor a la finalmente adjudicada. Se recibieron solicitudes por 7600 millones de euros y se terminó adjudicando 2500 millones de euros, por los dos bonos. El rumor anterior a la colocación era que el Gobierno iba a intentar conseguir 500 millones de euros.
La elevada demanda permitió al Gobierno colocar dos títulos a tasas bajas para la Argentina: por el bono con vencimiento en 2022 se emitieron u$s 1250 millones de euros con una tasa que cortó en 3,875%; y, para el de 10 años (a 2027) se colocaron otros 1250 millones, a un 5%.
«Fue una tasa muy atractiva para la Argentina en un mundo que está desesperado en conseguir un rendimiento positivo», sostuvo Sebastián Maril, de Research for Traders. En ese sentido, agregó que se ubicó en un nivel «extremadamente inferior a lo que estimaban los inversores».
Desde Hacienda aseguran que las «compañías argentinas contarán, a partir de ahora, con una tasa de referencia clara y transparente para los financiamientos que puedan obtener en el mercado de euros para sus proyectos de infraestructura y desarrollo». La anterior colocación de deuda en el mercado europeo fue en 2001.
Eric Ritondale, economista de la consultora Econviews, calificó de exitosa la colocación de ayer y agregó que pone en evidencia dos aspectos. Por un lado, que «el precio del riesgo en el mundo es bajísimo, de cualquier tipo de activos». Además agregó que con estos fondos prácticamente se completa el programa financiero de este año.
De hecho, desde el Gobierno aseguraron que la colocación de estos dos bonos en euros, sumada a la última licitación en pesos del 29 de septiembre, de $ 50.000 millones para el Bono a 5 años (octubre 2021) y $ 11.572 millones para el Bono a 2 años (octubre de 2018), «suman los recursos necesarios para afrontar el pago de la deuda preexistente durante el último trimestre del año (un monto de u$s 7300 millones que incluye vencimientos de capital e intereses de organismos multilaterales y bilaterales y bonos en poder del sector privado y el banco central)».
A principios de julio, cuando el presidente Mauricio Macri estuvo en Berlín, afirmó que si con el blanqueo lograban que ingresen u$s 30.000 millones, el país se retiraba del mercado del crédito. Sin embargo, las tasas bajas (que se sabe no van a continuar en estos niveles tan bajos en los próximos meses, según afirmó semanas atrás la presidente de la Fed, Janet Yellen) y la magra captación de fondos en los bonos vía el sinceramiento fiscal, llevó al Gobierno a salir con una nueva emisión. Desde el mercado no descartan que sea la última de 2016, pese a que ya se cubrieron las necesidades para este año.
Se sabe que, para lo que resta del año tres provincias tienen planeado emitir deuda (Santa Fe, Entre Ríos y Tierra del Fuego) por alrededor de u$s 1000 millones, sumado a colocaciones de empresas (como Banco Hipotecario, que lo hace hoy, y a Central Puerto, Aeropuertos Argentina 2000 y Genneia), por u$s 1650 millones en total. Maril sostuvo que la colocación de ayer «ayuda a traer al país una base de clientes que antiguamente no tenía, que invierte en euros; muchas carteras en Europa no tienen rendimientos altos y la de Argentina es una inversión relativamente segura».
Desde Hacienda aseguraron que «el apoyo que ha recibido el Gobierno, manifestado por los primeros mandatarios europeos, se ve reflejado en el interés por participar en esta transacción de inversores de diversos orígenes, incluyendo Alemania, Austria, Bélgica, Dinamarca, España, Finlandia, Francia, Holanda, Irlanda, Italia, Noruega, Portugal, Reino Unido, Suecia y Suiza, entre otros».
Y agregaron que si bien durante las reuniones de la semana pasada se visitaron 135 inversores, la transacción conocida ayer contó con una participación total de 267 inversores que expresaron interés por un total de 7600 millones de euros de demanda.