Intendentes del grupo Esmeralda se sumaron al debate sobre el Impuesto a las Ganancias, y abandonaron así el perfil dialoguista que habían mantenido con el Gobierno hasta ahora.
El intendente de Lomas de Zamora, Martín Insaurralde definió al Gobierno como el de «la mentira y el ajuste» y consideró que la baja del impuesto a las Ganancias “es fundamental para que los trabajadores tengan capacidad de consumo”.
A través de su cuenta de Twitter , Insaurralde manifestó que «a un año de asumir, la única capacidad que mostró el Gobierno fue la de mentir», y agregó: «Batieron récords de promesas incumplidas».
En torno a Ganancias, sostuvo que «la eliminación del Impuesto a las Ganancias fue uno de los caballitos de batalla durante la campaña. Mostraron mucho talento para organizar una campaña electoral entusiasmando a la gente con un cambio para mejor y fue para peor».
Y remató: «La baja del impuesto a las Ganancias es fundamental para que los trabajadores tengan capacidad de consumo. El coro de CEOs del Gobierno ahora dice ‘no se puede’. Ahí también mienten: no quieren. Este es el gobierno de la mentira y el ajuste».
Insaurralde también realizó declaraciones sobre la realidad del Conurbano, al manifestar que “es tremendo el impacto negativo del modelo económico implementado. Miles de personas consumen mucho menos que antes».
En tanto, según publica La Política Online, jefes comunales manifestaron por lo bajo el hartazgo con el Gobierno ante una economía que “no arranca”.
Los intendentes señalan que el 2016 fue un año muy negativo en sus distritos, principalmente debido a que la obra pública estuvo paralizada, al aumento de la pobreza y el desempleo, índices que impactan negativamente en el poder adquisitivo.
Desde el entorno de otro intendente explicaron que se cansaron de una gestión que no logró darles soluciones a sus problemas.
El origen del malestar de los intendentes surge luego de la postura que tomó el Poder Ejecutivo tras la media sanción de diputados al proyecto sobre Ganancias consensuado por la oposición. La respuesta, consideran, fue lanzar, de cara a la campaña electoral de 2017, una campaña con discurso antiperonista.
Considerando que la reacción de Macri fue “amateur”, los intendentes del grupo Esmeralda están convencidos de que el Gobierno actuó impulsivamente al tildar a Massa como “poco confiable”, y que esta reacción no los ayudará a sostener el mismo nivel de gobernabilidad en el 2017.
El intendente de Lomas de Zamora, Martín Insaurralde definió al Gobierno como el de «la mentira y el ajuste» y consideró que la baja del impuesto a las Ganancias “es fundamental para que los trabajadores tengan capacidad de consumo”.
A través de su cuenta de Twitter , Insaurralde manifestó que «a un año de asumir, la única capacidad que mostró el Gobierno fue la de mentir», y agregó: «Batieron récords de promesas incumplidas».
En torno a Ganancias, sostuvo que «la eliminación del Impuesto a las Ganancias fue uno de los caballitos de batalla durante la campaña. Mostraron mucho talento para organizar una campaña electoral entusiasmando a la gente con un cambio para mejor y fue para peor».
Y remató: «La baja del impuesto a las Ganancias es fundamental para que los trabajadores tengan capacidad de consumo. El coro de CEOs del Gobierno ahora dice ‘no se puede’. Ahí también mienten: no quieren. Este es el gobierno de la mentira y el ajuste».
Insaurralde también realizó declaraciones sobre la realidad del Conurbano, al manifestar que “es tremendo el impacto negativo del modelo económico implementado. Miles de personas consumen mucho menos que antes».
En tanto, según publica La Política Online, jefes comunales manifestaron por lo bajo el hartazgo con el Gobierno ante una economía que “no arranca”.
Los intendentes señalan que el 2016 fue un año muy negativo en sus distritos, principalmente debido a que la obra pública estuvo paralizada, al aumento de la pobreza y el desempleo, índices que impactan negativamente en el poder adquisitivo.
Desde el entorno de otro intendente explicaron que se cansaron de una gestión que no logró darles soluciones a sus problemas.
El origen del malestar de los intendentes surge luego de la postura que tomó el Poder Ejecutivo tras la media sanción de diputados al proyecto sobre Ganancias consensuado por la oposición. La respuesta, consideran, fue lanzar, de cara a la campaña electoral de 2017, una campaña con discurso antiperonista.
Considerando que la reacción de Macri fue “amateur”, los intendentes del grupo Esmeralda están convencidos de que el Gobierno actuó impulsivamente al tildar a Massa como “poco confiable”, y que esta reacción no los ayudará a sostener el mismo nivel de gobernabilidad en el 2017.