Un equipo que la muestre acompañada. Un grupo de cinco candidatos a quienes transferirle su buena imagen. María Eugenia Vidal comenzó a animar el G5, el grupo de candidatos a los que busca levantar para las elecciones bajo el manto de su figura. Se trata de los principales candidatos de Cambiemos en la Provincia, y Vidal intenta que sean asociados a una consigna o temática electoral.
La idea surgió hace un par de meses, luego de los primeros focus group que realiza el psicólogo español Roberto Zapata para Jaime Duran Barba. Allí la gobernadora aparecía como una dirigente fuerte pero “muy sola”. Y así nació la consigna: rodearla con un equipo que la pueda acompañar y visibilizar. El G5. No por casualidad ayer, en un acto en Tandil, Vidal dijo sentirse “orgullosa” de ellos. “Como en la vida, no podemos solos”, agregó.
El tema de la transferencia de votos se da en un contexto único para una elección. En primer lugar, la gobernadora está intentando trasladar su imagen a candidatos de la Provincia en una elección muy nacionalizada. En segundo lugar, esta transferencia debe darse hacia un “pool” de candidatos, tal como los denomina la propia Vidal, donde cada uno tiene un tema como leitmotiv para que sea asociado por el electorado.
Acaso por ello en el G5 el candidato a senador Esteban Bullrich está vinculado a la educación y al desarrollo de emprendedores; Gladys González, a la pelea contra las mafias y las obras públicas. En el caso de los candidatos a diputados, Graciela Ocaña aparece asociada al trabajo con los adultos mayores, Héctor “Toty” Flores a la lucha contra la pobreza, y Guillermo Montenegro a la seguridad.
En este contexto, en el trabajo cotidiano del equipo de campaña buscan orientar cada intervención o “bajada” de manera segmentada. A diferencia de otras campañas, el G5 está permanentemente monitoreado y no hay agenda libre. El hilo conductor, claro, es Vidal.
La estrategia se hizo visible ayer al mediodía cuando Mauricio Macri junto a Vidal y al G5 participaron de un acto en Tandil (la tierra donde nació el Presidente) con el ya clásico escenario de 360 grados. Antes de llegar al club Independiente, pasaron por Cagnoli, la empresa de salamines, y se llevaron algunos de regalo. En el vip del club Vidal no se tentó ni con los sandwichitos ni con las masas secas. Tampoco probó las frutas
En el acto, Macri cargó contra el kirchnerismo: “Estuvieron gobernando durante años, ahora vienen con soluciones y dejaron el país en ruinas. Basta de mentiras, basta de mañas, basta de mafias”. Vidal pidió a los bonaerenses que “no dejen que les mientan” desde la oposición” y llamó a salir a “convencer” a quienes “todavía dudan” de votar al oficialismo. Cuando se iba, un tandilense le regaló un pesado Cristo de 40 centímetros. Sobre el final, proselitismo puro: el Presidente y la gobernadora se llevaron la camiseta del club.�
La idea surgió hace un par de meses, luego de los primeros focus group que realiza el psicólogo español Roberto Zapata para Jaime Duran Barba. Allí la gobernadora aparecía como una dirigente fuerte pero “muy sola”. Y así nació la consigna: rodearla con un equipo que la pueda acompañar y visibilizar. El G5. No por casualidad ayer, en un acto en Tandil, Vidal dijo sentirse “orgullosa” de ellos. “Como en la vida, no podemos solos”, agregó.
El tema de la transferencia de votos se da en un contexto único para una elección. En primer lugar, la gobernadora está intentando trasladar su imagen a candidatos de la Provincia en una elección muy nacionalizada. En segundo lugar, esta transferencia debe darse hacia un “pool” de candidatos, tal como los denomina la propia Vidal, donde cada uno tiene un tema como leitmotiv para que sea asociado por el electorado.
Acaso por ello en el G5 el candidato a senador Esteban Bullrich está vinculado a la educación y al desarrollo de emprendedores; Gladys González, a la pelea contra las mafias y las obras públicas. En el caso de los candidatos a diputados, Graciela Ocaña aparece asociada al trabajo con los adultos mayores, Héctor “Toty” Flores a la lucha contra la pobreza, y Guillermo Montenegro a la seguridad.
En este contexto, en el trabajo cotidiano del equipo de campaña buscan orientar cada intervención o “bajada” de manera segmentada. A diferencia de otras campañas, el G5 está permanentemente monitoreado y no hay agenda libre. El hilo conductor, claro, es Vidal.
La estrategia se hizo visible ayer al mediodía cuando Mauricio Macri junto a Vidal y al G5 participaron de un acto en Tandil (la tierra donde nació el Presidente) con el ya clásico escenario de 360 grados. Antes de llegar al club Independiente, pasaron por Cagnoli, la empresa de salamines, y se llevaron algunos de regalo. En el vip del club Vidal no se tentó ni con los sandwichitos ni con las masas secas. Tampoco probó las frutas
En el acto, Macri cargó contra el kirchnerismo: “Estuvieron gobernando durante años, ahora vienen con soluciones y dejaron el país en ruinas. Basta de mentiras, basta de mañas, basta de mafias”. Vidal pidió a los bonaerenses que “no dejen que les mientan” desde la oposición” y llamó a salir a “convencer” a quienes “todavía dudan” de votar al oficialismo. Cuando se iba, un tandilense le regaló un pesado Cristo de 40 centímetros. Sobre el final, proselitismo puro: el Presidente y la gobernadora se llevaron la camiseta del club.�