Hace unas semanas un dirigente deportivo definió la pelea entre el Gobierno y Clarín, respecto a la televisación del fútbol, como una lucha entre Frankestein y Drácula.
Si bien ese inmaculado Presidente de Club se mostraba horrorizado por la encarnizada lucha que se estaba dando en esos días, no tuvo problema alguno en tomar posición firmando la ruptura del contrato viejo y el inicio del nuevo.
¿Que hizo que este dirigente tome partido por Drácula y no por Frankestein?
Sus propios intereses y el del club que representa.
Ese dirigente deportivo supo que eligiendo a Drácula tanto el club como él mismo recibirían más dinero.
A diferencia de lo sucedido en el fútbol, hoy, muchos de nuestros dirigentes políticos eligen a Frankestein.
Poco importa que el cambio de Ley permita la llegada de nuevos actores y voces que nos enriquezcan culturalmente y generen nuevos negocios.
El interés de buena parte de la oposición está puesto en la fugaz fama que hoy obtienen por los valiosos minutos de aire que generosamente les da «El Grupo» y que le permitirán candidatearse con posibilidades de éxito sacrificando nuestro futuro en pos de su propio presente.
Debo reconocer que históricamente, fui bastante crítico de la dirigencia del fútbol. Principalmente porque los veía actuar sin esa dosis de «corrección política» tan común en los ámbitos progres.
Pero esos ásperos, chicaneros y mal hablados dirigentes nos dieron una lección sobre lo que es defender la camiseta de su propio club.
Ojalá la oposición entienda que más allá de sus propios intereses están los de la «camiseta nacional». El equipo nacional, del cual todos formamos parte, espera aportes a esta Ley y no solo palos en la rueda.
Bueno bueno, paremos un poquito. Acá no hay carmelitas descalzas. La oposición también sabe que con un AUFER (ex Comfer) con mayoría del ejecutivo el gobierno puede dejar el mapa de medios moldeado a su favor para después que se vaya. Como hicieron todos los gobiernos antes de irse, de Peron para acá.
y bue…si alguna vez aplaudieron el pacto rico-kunkel en el conurbano(un ribbentrop-molotov del subdesarrollo digamos)…me parece lo mas logico q ahora se exciten con esta alianza con las mafias dirigenciales futbolisticas…
sean sinceros chicos…en los 90′,cuando aun se creian la «reserva moral» de la republica…se imaginaban q iban a terminar tranzando con rico,grondona,los gordos de ls CGT,los barones del conurbano etc etc etc???…
pero igual TODO PASA…TODO PASA…no???
en fin…
P.D: ahhh por q ante cualquier critica q les hacen por el tema de la nueva ley…como disquitos rallados gritan casi histericos «la ley de videla»…»la ley de videla»…pero de lo q no hablan es de la mano de quien GRONDONA llego a la AFA durante los 70’…y si,no toda la «herencia» procesista es taaaaan mala no???
Leandro, sos un presocratico, tenes todo el pasado por delante. Infantil.