Ya vimos y escuchamos al senador socialista Ruben Giustiniani calificando de papelón que el poder legislativo postergara el tratamiento de la declaración de emergencia sanitaria a nivel nacional. Ahora bien, en algunos medios también se puede leer esto:
«no se qué valor tiene declarar la emergencia porque estamos haciendo lo necesario frente al problema..si la emergencia significa libertad para comprar insumos, la tenemos; si la emergencia significa llevar al lugar más enfermeros y médicos, ya lo hicimos; si la emergencia significa agua potable, ya lo hicimos; si la emergencia significa fumigar, ya lo hicimos. Creo que esto hay que tratarlo en función de la responsabilidad con la salud pública que tenemos.”
Quién lo dijo? El senador Pichetto?
La declaración de una emergencia NACIONAl por el dengue tiene el efecto de permitir la coordinación entre los organismos federales y todos los organismos provinciales de políticas conjuntas. Además, al menos en algún momento del proyecto, se establecía un Fondo nacional para financiar esas políticas coordinadas. La emergencia PROVINCIAL tendría solamente el propósito de coordinar actividades locales y eventualmente afectar financiamiento local. En la medida en que en Santa Fé esa coordinación estuviera ocurriendo y la plata estuviera disponible (cosa que Binner sugiere ya ocurre, cosa que ignoro), efectivamente no tendría sentido esa declaración de emergencia PROVINCIAL. Pero nadie está diciendo que los motivos para la declaración de emergencia NACIONAL se encuentren igualmente satisfechos. Por lo tanto, no existe ninguna inconsistencia entre los dichos de Giustiniani y los de Binner.