El Hijo de Alfonsín-González Fraga

Desaparición del antikirchnerismo furioso y recuperación de los mecanismos de armado territorial como dato clave de construcción política. Esos dos son los elementos preponderantes de cualquier discusión de candidaturas de acá a octubre, a nuestro entender.

La elección de Javier González Fraga como candidato a vicepresidente de la fórmula que encabezará El Hijo de Alfonsín (nótese que no digo “la fórmula de la UCR”, ni tampoco que el candidato a presidente haya elegido a su candidato a vice: me enseñan los teóricos críticos del Derecho que muchas veces no diciendo algunas cosas, se dicen otras) es groseramente tributaria de la antítesis de lo que, para nosotros, son las claves de los armados.

No Verbistky, sino Ignacio Fidanza, de la Política On Line (a ver quién lo puede acusar a ese sitio de oficialista, ahora) dijo que lo que era rentable en aquél entonces (sumar agua y aceite si fuese necesario porque ante Cristina y Néstor, que rankeaban bajo, era la receta) hoy ya no corre. Salvo, claro, que se crea en los delirios de Grondona-Aguinis y demás “cráneos”, aquello del “Frente Patriótico” para salvar una república que no está en peligro para enfrentar a la armada de la generala nazifascista, con lo que vienen machacando hace rato, con escasa suerte (suponemos que por lo ostensiblemente ridículo y mentiroso de la hipótesis).

Todos y cada uno de los gestos que viene teniendo El Hijo de Alfonsín están basados en entender a la actual como si se tratara del escenario post 2009. En ese entonces, sí era racional atribuirle alto peso a sumas automáticas/mecánicas de votos a “cualquier cosa que se le oponga a los KK”, y construir, entonces, en base a esa premisa.

El Hijo de Alfonsín insiste en despreciar aquello que hizo posible la reconsideración de la UCR como actor importante en el escenario político de nuevo, esto es, el despliegue territorial del partido centenario (intendencias, comités, y demás). Ya con De Narváez, que tiene, en la provincia, gente que quiere llegar a cargos en los espacios más “bajos” (intendencias, concejos deliberantes, legislaturas provinciales, pocos pero tiene, los suficientes como para competirle a radicales, que ya los hay instalados, que Alfonsín los necesita para que le “trabajen” la postulación, y a los que ninguna gracia les hará, creemos, verse corridos dentro de lo que deberían ser sus lugares por… extrapartidarios. ¡Ay! ¿No suena a suma de los pelones? Esto por un lado.

Y por el otro, resulta, por lo menos, risueño, que se pretenda explicar que la candidatura de González Fraga es un gesto a alguien que no sea un grupo mínimo, reducido. No es, por caso, un gesto a la clase media, allí –y juego dinero por esto- el economista debe ostentar un nivel de conocimiento de alrededor de insignificante –por ser suaves-. Es, sí, importante su predicamento a nivel mediático, coincidente con los intereses que ciertas empresas comunicacionales sostienen en el debate político actual, pero eso es, hoy día, un valor menor.

“Después de meses de insistir en una propuesta con perfil claramente progresista, es decir, la fórmula compartida con el gobernador santafesino, Alfonsín se decidió por un candidato a vice con perfil técnico”, dice Clarín. Curioso, el antónimo de progresismo no es conservador, según parece, sino “técnico”. No es menor esta frase en punto a pensar qué se esconde detrás de la opción por JGF, y en el mismo orden de ideas que el final del párrafo anterior. ¿Un anticipo de lo que podría venirse (y de lo que se quiere con) en caso de triunfar la alianza de centroderecha cabezada por el radicalismo?

Vale decir, no se trata de reproches morales/éticos, que acá no caben, a la opción por JGF. Se trata, muy por el contrario, de evaluar una estrategia de armado político.

Las señales del tablero van, en su totalidad, en sentido contrario a la opción tomada por la UCR. Ni siquiera los delfines chubutenses de Das Neves piensan acompañar la aventura a su padrino político a una aventura de neto corte anti con Duhalde y en detrimento de los espacios tradicionales del PJ chubutense, fuertemente condicionados, allí, por la línea del FPV, mayoritaria en la legislatura local y en varias intendencias importantes de la provincia.

Por el lado de los abandonados por el ¿líder? del ex intento de Frente Progresista –PS y en menor medida GEN-, también pinta que optarán por lo que a nivel bajada de línea patronal luce como una estrategia contracultural: generar una opción, ya sea con el lanzamiento de la candidatura del conservador santafesino gobernador de la provincia a presidente, o bien generando una opción de crecimiento local y legislativo de corte progresista no K de anclaje urbano pero con base en el relativamente extendido despliegue territorial del socialismo.

La estrategia catch all, que como bien dijo Mario Wainfeld, días pasados, en P12, es bastante ineludible para todos dadas las peculiaridades del sistema institucional, político y electoral argentino, requiere, sin embargo, de una condición ineludible: liderazgo indiscutible al interior del propio espacio. Y garantías de que la presencia de la conducción sea la base necesaria de sustentación de la amalgama.

Pasa con Cristina en el FPV.

Pasa hasta en alguna medida con Binner en lo que intentarán con Pino, el sindicalista testimonial De Gennaro, Juez y Stolbizer.

¿Pasa con El Hijo de Alfonsín, al que se le han retobado Cobos, Aguad, Gil Lavedra y Sanz, cada uno a su momento, al interior de la mismísima UCR al punto que ni los radicales santafesinos están dispuestos a cumplir la amenaza de romper con el PS a nivel local? Estás haciendo todo mal, nene. Mejor para nosotros. Para todos.

Acerca de Pablo D

Abogado laboralista. Apasionado por la historia y la economía, en especial, desde luego, la de la República Argentina.

Ver todas las entradas de Pablo D →

24 comentarios en «El Hijo de Alfonsín-González Fraga»

  1. Si bien la elección de González Fraga me parece pobre en términos electorales, sincerar la direccionalidad del radicalismo es bueno. Sería deseable, aunque lleve su buen tiempo, que le comunicaran eso al electorado, porque ponerlo a GF a decir frases vacías poco creíbles es seguir intentando parecer algo que ya no son.
    No hubieran sido progresistas tampoco con Binner. Se colocan el mote «progresista», celebran que los medios los denominen así pero proponen bajar las retenciones.

    1. Seguramente. Pero para concretar eso que ahora en términos discursivos bien apuntás vos que sinceran, primero van a tener que ganar: digo, mejor hubiese sido presentarlo como futuro ministro de Economía y de vice ponían a alguien que arrastre y le garantice a Alfonsín algún nivel de autoridad, que no la tiene, al interior de su propio gallinero.

  2. El comentario de abajo lo puse en otro post, pero no salió (?):

    Mi (libre) interpretación del Alfonsito es que es el equivalente tonto de M*n*m.

    En efecto, este último sujeto comenzó a “dar señales a los mercados” designando al zorro como jefe del gallinero DESPUÉS de ganar las elecciones. Para ganar, los votos. Para gobernar, la guita. Elemental Watson.

    Su imitador tonto por de pronto empieza al revés: Cuando lo que ahora necesita son votos, apuesta a “los mercados”. Carece hasta de esa elemental “viveza criolla”, de la que ha sido dotado hasta el más humilde chimpancé. Para llegar a gorila le falta un trecho, y un mínimo de caramelos en el frasco.

    1. Yo que pensaba que el oximorón era «progesista K», lo que no venimos a enterar. Claro, porque tener de tu lado a Insfrán, Rico, Scioli, Gioja, Grondona y hasta parece que Menem es muy progresista… Dejen de bastardear las palabras, por favor.

      1. Bueno, las contradicciones de 5to. orden te sirven sólo para chicanear, no mucho más. Que Drácula me apoye no me convierte a mí en Draculiano, sino a Drácula en Realista.

        Con el agravante de que estás poco (o mal) informado para pretender chicanear: Luego de golpear infructuosamente la puerta K, Rico ha decidido sumarse al «Progresismo Duhaldista»(1).

        ¿El periodismo independiente de TN no te avisó? Qué pena, che, mirá el papelón que te hace pasar… Cuando termines el Toddy seguimos charlando.

        (1) http://www.ambito.com/noticia.asp?id=585776

      2. Eduardo, me rebatís un caso. Y hay un error en tu planteo. Los Insfràn, Gioja, Alperovich y demás son parte inescindible de la estructura de poder K. Es falaz decir que apoyan a pesar de las buenas intenciones del gobierno. En todo caso el gobierno se sostiene en gente como esta.

      3. Bueno, descartados Rico y M*n*m, debo decir que no tengo algún currículum medianamente sólido sobre Alperovich como para opinar. Por beneficio de la duda, ponele que sea «chico malo», igual que Insfrán, al que deploro.

        No así a Gioja, que como gobernador de una provincia constituida en un 97% de piedra y cascote, mucha elección no tenía para gobernar.

        Si me venís a vender el boleto clorifílico de Pinolandia, vai frito. Que ponga un vivero y deje de dar vergüenza ajena.

      4. Y para hacerte una «Actualización Política y Doctrinaria», aquí te dejo una bonita página «progresista»(1) de PSurf. Que alguien me diga cómo se vuelve de ahí.

        Se te colgó el sistema, viejo. Vas a terminar votando al «Progresismo Macrista», como pidió el octogenario cineasta en caso de ballotage. O al «Progresismo Denarvaista». Resetealo. Reseteate.

        (1) http://infosur.info/?p=7692

      5. Ninguno de todos esos que Hernán menciona fueron un obstáculo para que se concretara ninguna de las grandes realizaciones de la agenda más progresista de este gobierno, que los demás autotitulados progre jamás acompañaron sino sólo de boquilla.

  3. Me imagino que si Alfonsin elegía a otro compañero de fórmula Pablo lo votaba.
    No? entonces cuál es el problema? Son señales que no van dirigidas al votante K ya definido.

    1. Problema, ninguno, y lo dije: «Vale decir, no se trata de reproches morales/éticos, que acá no caben, a la opción por JGF. Se trata, muy por el contrario, de evaluar una estrategia de armado político.».

      Son señales que van dirigidas a nadie, al empresariado quizás, y gracias. La totalidad de las personas con las que hablé de esto, que no son del seguimiento puntilloso que podemos tener nosotros de la política, me contestaron, unánimemente, cuando les comenté esto: ¿quién? ¿Y ese quién es? O cosas por el estilo. A JGF lo desconoce, me atrevo a apostar, alrededor del 90% de la población. Pero me puedo equivocar, por qué no.

  4. Pablo: González Fraga es muy conocido (fue empleado de ellos, consultor, etc.) por un círculo de gente que Alfonsín valora mucho porque le pueden ofrecer un insumo fundamental para hacer campaña: guita.

    Esa es la idea. El plan A era Lavagna. El plan B fue González Fraga.

    Fijate que la «bajada» masiva de candidatos presidenciales responde a eso. Hay crisis económica en el primer mundo. Desde sus fundaciones ya no llega la que llegaba antes. Menos cuando los candidatos no garantizan ni siquiera una derrota decorosa (por ahora). Carrió y Alfonsín ya hicieron sus road shows y no se trajeron nada.
    Acordate de carrió diciendo que no les hagan un vacío…desde Alemania!!!!!!

    La decisión viene por ese lado fundamentalmente. Como cuestión lateral, es posible que ayude a convencer a Duhalde de bajarse, a macri de no presentar fórmula propia sino apoyar una ajena. Es decir, limpiar la escena de candidatos opositores para polarizar.

    Es un cambio de concepción. Acuerdos superestructurales, para ver si desde ahí se puede torcer la cosa hacia abajo.

    Un abrazo

    1. Si polarizan, papita pal loro. En vez de terminar 60/40 en la segunda vuelta (donde NO se eligen legisladores), terminamos 60/40 en la primera. Con un congreso así constituido, designamos a Cris Monarca del Universo forever.

      Délen, polaricen nomás… :)

    2. Pero, Mariano: ¿puede ser que la UCR esté tan necesitada de plata para la campaña? Entonces están peor de lo que yo creía.

      Abrazo.

  5. Pablo,
    yo no creo que los radicales le hayan pifiado tanto en esta.
    Por el contrario, creo que es la mejor idea que se les cayo en estos ultimos quinquenios.
    Yo en su lugar hubiese hecho lo mismo.
    Por fin parecen decididos a acabarla con la fantasia socialdemocrata que los habita desde la primavera alfonsinista

    Correr por izquierda (o centro izquierda) a este peronismo es casi un suicidio.
    El radicalismo tiene que volver a sus fuentes y perder el complejo de lo que son.

    Van a perder electores. Entre ellos muchos pendeviejos de franja, aun nostaligicos de la primavera alfonsinista … pero van a ganar muchos otros.
    El radicalismo esta llamado a conducir a gran parte de los conservadurismos inculcandole buenos modales institucionales.

    Si la UCR tuviera 2 neuronas el PRO deberia desaparecer del mapa

    Ojala se les de .. les deseo suerte aunque no tanta como para que ganen las elecciones.

    La UCR esta en vias de asumirse como el partido del establishment y de aquellas clases medias con vocacion a la diferenciacion social

    Si el futuro nos regala los 20 proximos años a una UCR corriendo desacomplejada por derecha; creo que tendremos un sistema politico como la gente.

    1. El tema es que me parece que eso juega en el plano nacional. Y desestima el factor territorial «pequeño» (intendencias, concejos delirantes, etc.) que al verse amenazados por propuestas encima extrañas a las orgánicas se la cobren promoviendo corte de boleta. Eso pasa mucho y en varios lados: Bruera, en La Plata, se lo hizo a Néstor en 2009.

      Abrazo.

  6. En el 2009 en mi ciudad (Loberia) union-pro hizo pie con un dirigente peronista, al ser la formula pro-campo logro el puesto de consejal en una eleccion en la que la UCR saco amplia ventaja (aqui gobierna el kirchnerismo), efectivamente como bien supone Pablo D. a esta gente que se fue conformando con De Narvaez a la cabeza no les hace ninguna gracia la decision personal del colorado, podran juntarse «Ricardo y Francisco» pero en los pueblos eso no sucede y los pequeños grupos coloradistas estan apuntando a la boleta de Duhalde-Das Nevez, por eso desde aca se ve con claridad como De Narvaez no le va a sumar, ni cerca, lo que la UCR espera.

    1. Y ante la bajísima, escasísima medición de Alfonsín me juego a que los radicales juegan a corte de boleta para CFK.

      Abrazo.

      1. ¿Debe suponerse entonces que a nivel provincial el «pueblo radical» le va a hacer a De Narváez lo que le hicieron en 1999 a Graciela Fernández Meijide, esto es, cortar boleta y dejar (entonces) que Ruckhauf se llevara la gobernación?
        Edie

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *