(Desde Costa Rica) Los presidentes son tipos distintivos, sobresalen, nadie lo puede negar. Son reinas de la belleza pero de la política, el maquillaje, el rejuvenecimiento capilar y las cirugías los delatan. Su legado queda por los años de los años. Alguna que otra vez sus nombres aparecen en calles, estatuas y edificios de gobierno si han sabido manejar bien las cosas para el pueblo o si han realizado bien los deberes, según el “poder real” lo defina. En un gran número tienen sonrisas amplias al estilo el Guasón, y muchas veces propuestas, que como el villano, son irreales. También prometen el cambio o la continuidad, siempre dependiendo cuál sea el que quiera seguir en el Gobierno.
Elecciones en Costa Rica
Y en Costa Rica, los candidatos, hombres destinados a vivir por un lapso corto de sus vidas con incertidumbre de lo que vendrá para ellos, son y no son similares a esta caracterización. Buscan, al igual, que en muchas partes del Mundo parecer apolíticos. Aunque en los tres debates y el detector de mentira esto ya esto se ha develado.
Aquí no se los conoce por el partido e historia que representan sino sólo por su nombre. Ellos son:
Laura, Otton, Otto y Don Luis. Nunca serán: Laura Chinchilla del Partido de Liberación Nacional(PLC), fuerza histórica del país que gobierna de la mano de Oscar Arias desde hace cuatro años, Otton Solís del Partido Acción Ciudadana (PAC), quién se separo de la agrupación del Ejecutivo cuando, según él, se liberalizó, Otto Guevara del Movimiento Libertario, dirigente- empresario que se postula por segunda vez a la presidencia y cuenta con cuantiosos fondos para costear su campaña, y Luis Fishman del Partido Unidad Social Cristina(PUSC), ex vicepresidente de una de las fuerzas que integró antes el bipartidismo tradicional costarricense y hace ocho años asumió el poder de la mano de Abel Pacheco .
La primera, Chinchilla, representa la continuidad, la posibilidad de proseguir sin variaciones del tratado de libre de comercio con Estados Unidos y posiblemente firmar otro con China. El segundo, Solís, va en contra de esto último, propone profundizar lo social sobre el resto de las cosas, defender lo que queda de la economía liberalizada a través del control de cambios. El tercero, Guevara, plantea liberalizar todo, dejar atrás la estipulación de un sueldo mínimo, aplicar mano dura a los delincuentes y hacer una gestión con una transparencia del cien por cien.
El cuarto, Fishman, dice viviendas para todos los pobres, ayuda a los agricultores y que paguen impuestos lo que más tienen pero formó parte siempre de un partido que fue en contra de muchas de estas iniciativas.
Ellos, como muchos quieren gobernar, un país sin ejército militar, donde la población vota a un candidato a presidente pero a un dirigente de otra fuerza como su contrapeso en el Parlamento, en el que existe una sala Constitucional , especie de Senado, que define que leyes son válidas y cuáles no, en el que se discute cómo se va a explotar la minería , en el que empieza a florecer una creciente discusión sobre la baja de la edad de imputabilidad y al que China últimamente ,por algo, ha puesto en su mira.
para ver video del primer debate aquí