Finalmente, parece concretarse la eliminación de la “tablita” de Machinea. El Ejecutivo ya anunció que enviará al Congreso un proyecto a tales fines, y si bien la medida necesita aprobación en ambas Cámaras para concretarse, es difícil que pueda ponerse en duda dicha aprobación, a la luz de que se descuenta que los partidos de la oposición no pondrán demasiado entusiasmo en oponerse a la medida, sobre todo en tanto la misma beneficia a quienes son parte importante de su base electoral: sectores medios y medios altos, residentes en grandes conglomerados urbanos.
Justificaciones económicas de la misma hay muchas. En un momento en que la demanda agregada empieza a mostrar una tendencia fuerte y abrupta a la contracción, liberar estos pesos que forman parte del ahorro público, en beneficio de sectores con alto poder de consumo, es una medida contracíclica indiscutible.
También puede mencionarse el hecho de que los ascensos, aumentos salariales u horas extras de algunos trabajadores afectados por la tablita se materializaran en “negro”, ya que el cambio de categoría suponía, para el empleado “ascendido”, una disminución de su ingreso neto de Ganancias. Desparece la «tablita», desaparece esta consecuencia indeseada.
Y finalmente están las cuestiones referidas a la curva de Laffer. Desde el punto de vista fiscal, el costo de resignar ingresos vía Ganancias sería mitigado por los ingresos extra generados por el “blanqueo” de estos “negros” que mencionábamos en el párrafo anterior, o vía IVA en lo que se destine a consumo de estos pesos extra que recibirán estos empleados.
Una duda es: ¿se materializará en mayor consumo el incremento de ingresos? ¿O subirá la propensión marginal a ahorrar? En cualquier caso, el beneficio macroeconómico podría provenir, de darse lo segundo, de una baja en las tasas de interés.
Entonces, ¿festejamos la decisión?
El problema pasa por asumir la ortodoxia, a la hora de evaluar la lógica de funcionamiento del capitalismo, o “crear” heterodoxia.
Digresión: no hay fórmulas ortodoxas o heterodoxas. Las fórmulas son ortodoxas por definición. La heterodoxia es siempre creativa.
Me cuesta mucho resignarme a lo que parece ser una ley de hierro. En momentos en que la economía se sobrecalienta por presiones de demanda, los ajustes inflacionarios tienden a contraer con fuerza la capacidad de consumo de los salarios más bajos. Restringir la demanda agregada suele ser igual a contraer el consumo de los salarios medios a bajos de manera proporcionalmente mayor.
Cuando la demanda se contrae, inversamente, se suele reasignar ingresos a favor de los sectores con mayor capacidad de consumo. Me imagino que en parte será así, porque no es lo mismo que el incremento del consumo se oriente a la compra de automóviles, que a la compra de garrapiñadas (como leí, insólitamente, en un blog al que no menciono porque respeto mucho).
Pero hay que decirlo: las tensiones, propias del capitalismo, entre eficiencia y equidad se vuelven, por momentos, insoportables. Y más insoportables en tanto menos esfuerzo se hace por pensar la forma de evitar que así sea, asumiéndolo sumisamente, como si fuese una fatalidad.
Hoy salió a defenderse Machinea. Por supuesto, en La Tribuna de Doctrina.
http://www.lanacion.com.ar/nota.asp?nota_id=1080295
Y lo hizo muy bien. Pero la presidenta parece preferir que la elogie Cachanosky a que la critique Machinea.
A ver cuándo se avivan ustedes.
Lean a Olivera, de paso.
Ana: yo en esta coincido con usted. A mí me gustaba la progresividad del impuesto a las Ganancias, y creo que una suba en las alícuotas aplicadas a los ingresos superiores hubiese sido una buena forma de enfriar la demanda agregada cuando apremiaba la inflación (junto con otras medidas).
Ahora, yendo a Machinea. No encuentro la necesidad de hacer refrencia a la «confiscación de ahorros» (cito textualmente), en referencia al fin de las AFJP, para defender la «tablita». Una transferencia del sector público al sector financiero de la cuantía que significó la puesta en funcionamiento de las AFJP no puede ser defendida en nombre del progresismo.
No es que no estamos avivados, sino que también le prestamos atención a que, en referencia al tema de la «tablita», la oposición también coincide con Cachanovsky (igual que la Presidenta, lamentablemente para mí). O Macri, Morales, Carrió, Rodríguez Saa, Felipe Solá salieron a criticar la medida? No. Se hacen los tontos.
Y, encima, en muchos otros temas, como el caso de las AFJP, los susodichos, Machinea y Cachanovsky también coinciden, en contra, esta vez, de la opinión de la Presidenta.
Es más, si me apura, creo que hasta Solanas tiene miedo de defender la «tablita».
Un saludo. Y le repito, por si le cuesta creerlo: en esta oportunidad coincido con usted.
Mariano: Decis «Una duda es: ¿se materializará en mayor consumo el incremento de ingresos? ¿O subirá la propensión marginal a ahorrar? En cualquier caso, el beneficio macroeconómico podría provenir, de darse lo segundo, de una baja en las tasas de interés.»
Ni una ni otra. Dolar.Ni bajan las tasas ni se activa la economia local (a lo mejor Garbarino se vende unos cuantos plasmas), la clase media alta va al dolar.
Y recomiendo con Ezequiel la nota de Machinea, con la que coincido.
Salu2
Lito: si con esos ingresos extra la clase media va al dólar, inevitablemente el dólar subirá. La devaluación del peso redundará, entonces, en una baja de la tasa de interés real en el mediano plazo.
Saludos.
yo no se si el plan es bueno o malo o si va a funcionar pero mi me parece mal que se diga que no se baja el IVA porque «los neoliberales quieren desfinanciar al estado» y se baje los impuestos de gente que gana mas de 5.000
para cuando aumento de planes jefas y jefes y baja del IVA en alimentos basicos?
De que progresividad hablan si alguien que cobraba de SALARIO, 10001 pesos terminaba ganando menos que el que cobraba 9999 pesos. La progresividad tiene que ver con lo progresivo, quien gana mas paga, no quien llega a un monto paga x y quien llega a otro monto paga y.
Les voy a dar un caso parecido antes del descuento de jubilados mi padre ganaba 535 pesos, con el descuento cobrar 475. Mientras el que cobraba 499 siguio cobrando lo mismo. Una aberracion juridica.
Pepe, el aumento de los planes, ojalá que pronto. Lo otro tiene que venir a través de un acuerdo de precios a cambio de deducciones impositivas, porque si no, los supermercadistas no van a bajar el precio: se van a comer la diferencia. Y esa es una cuestión más difícil. Pero sospecho que el próximo paquete, lo digan o lo nieguen, incluye planes, jubilaciones, asignaciones familiares, etc. Y espero que algo más, porque la coyuntura es bastante fea.
Sin Dioses: lo que señalás son distorsiones generadas por la forma de calcular la base imponible para volver progresivo el impuesto.
También es cierto que el que cobra 7000 calcula el impuesto sobre una base imponible de la cual puede descontar proporciones menores que el que cobra 4000. Y que el que cobra 10000 descuenta menos todavía.
Sin la tablita los que cobran 4000, 7000 y 10000 descontarán de la base imponible lo mismo, lo cual hace que los que más ganan paguen menos de lo que están pagando ahora, mientras que los que menos ganan pagan lo mismo, en el mejor de los casos. Ni hablemos de los millones de asalariados que no pagan ganancias y que, de esta medida, no sacan nada.
Vuelvo a la idea que intenté plantear en el post: cuando hay que enfriar la demanda los ajustes repercuten más sobre los salarios más bajos. Cuando hay que estimularla, se lo hace incrementando el ingreso de los que mejores ingresos tienen.
Hay que pensarlo, realmente hay que pensarlo.
Un abrazo.
ezequiel creo que el napia puede controlar si se da esa situacion.
mas con la oposicion a favor.
El principio de incrementar la alicuota del impuesto a las ganancias en la medida en que el ingreso aumento es tan progresista como el liberar a los que reciben ingresos muy reducidos, del pago de este impuesto.
El tema creo que gira alrededor de cual es la base a partir de la cual la tablita comienza a funcionar y ese serà el debate que quedará pendiente.