Acorralado por el presente deportivo y económico del club, Independiente aceptó la propuesta de Hugo Moyano. Abonará todo lo que se le debe al plantel, se hará cargo del resto de los salarios hasta que finalice el torneo y prometió un premio de 600 mil dólares en caso de ascender. A cambio, el presidente Javier Cantero adelantará las elecciones de diciembre para junio y le permitirá a la gente del camionero formar parte del departamento de fútbol.
Confirmado entonces el poder adquisitivo alto de los trabajadores argentinos.