El titular de Acindar, Arturo Acevedo, anticipó que en enero se observó un amesetamiento en el crecimiento que venía mostrando la siderurgia. El empresario atribuyó la menor performance de la actividad a las condiciones internas, ya que la producción se destina básicamente al mercado nacional (la construcción). «Nos han sugerido que notifiquemos y controlemos las remesas de divisas (a la casa matriz), cosa que estamos haciendo», reconoció el ejecutivo.
Respecto a cómo interpretan en el exterior las últimas medidas adoptadas por el gobierno local (nuevos requisitos para importar, trabas para el envío de remesas de divisas a casas matrices, etc.), Acevedo reconoció que «generan un grado de incertidumbre en los países controlantes de la compañía que afecta al desarrollo del negocio». En este sentido, anticipó que este año, Acindar tiene en carpeta pocas inversiones previstas.
En relación a las paritarias del sector siderúrgico, previstas para marzo, Acevedo consideró que la negociación podría ser complicada ya que «al estar dolarizados los salarios, porque el dólar está estable, cualquier aumento por encima del 5% en dólares es altísimo para el exterior «, y admitió que estiman que la pauta salarial «va a ser una cifra importante aunque todavía no tenemos un número acordado». A continuación los puntos más salientes del reportaje concedido a ámbito.com:
Periodista: ¿Cómo está viendo la situación económica argentina? Algunos pronósticos indican que el país podría crecer en el orden del 3 al 4%.
Arturo Acevedo: En el negocio siderúrgico estamos viendo con cierto grado de preocupación un amesetamiento en el crecimiento. En nuestros presupuestos teníamos previsto un crecimiento de 4% pero el mes de enero ya indica una tendencia a amesetarse. No sé si es coincidencia por el primer mes del año, pero se está dando eso.
P.: En comparación con enero de 2011, ¿este comportamiento podría ser coyuntural o cree que marca una tendencia?
A.A.: Nos tiene algo confundidos. Enero de 2011 fue de crecimiento; este enero es atípico, entonces no sabemos si es una cuestión coyuntural o es una tendencia.
P.: ¿Se debe en parte por alguna situación del exterior o a situaciones internas?
A.A.: Diría que las condiciones internas son de gran importancia, nosotros vamos básicamente al mercado nacional. Con las exportaciones estamos afectados por efecto externo, pero la exportación en nuestro volumen de ventas es menor.
P.: ¿A qué situaciones internas se refiere?
A.A.: Nuestros productos van a la construcción, que es mercado interno.
P.: ¿Cómo están afectando las nuevas disposiciones para importar?
A.A.: Nosotros importamos grandes volúmenes de insumos, casi el 40% de lo que consumimos es importado, nuestro principal insumo es el mineral de hierro, que es totalmente importado. Estamos cumpliendo con la normativa oficial que pide la Afip y además la normativa para informar a la Secretaría de Comercio. Hasta ahora los procesos están en funcionamiento, no tenemos mayores inconvenientes. Sí nos genera un cierto grado de incertidumbre, por lo tanto, hemos aumentado preventivamente los niveles de stocks de nuestras plantas para contrarrestar cualquier problema.
P.:. ¿Han recibido alguna notificación en este sentido o sugerencia para que no hagan envíos de utilidades al exterior?
A.A.: Sí, nos han sugerido que notifiquemos y controlemos las remesas de divisas, cosa que estamos haciendo en conjunción con el Banco Central, y hasta ahora no hemos tenido mayores inconvenientes.
P.: Entonces las casas matrices lo han aceptado.
A.A.: Sí, exactamente.
P.: ¿Esto afecta los pedidos de inversión que puedan solicitar a la casa matriz para, por ejemplo, ampliar la planta?
A.A.: Por supuesto. Todo este tipo de condicionamientos, de permisos, generan un grado de incertidumbre en los países controlantes de la compañía, que llevan a un grado de incertidumbre. Eso afecta, obviamente, al desarrollo del negocio.
P.: ¿Tienen inversiones previstas para este año?
A.A.: Pocas, las mínimas para mantener los equipos a nivel tecnológico, pero no tenemos previsto ningún tipo de ampliación ni plantas nuevas.
P.: Vienen las discusiones paritarias y muchos gremios están pensando en aumentos de más de 20%. ¿Cómo ve ese tema?
A.A.: Va a ser complicado. No olvidemos que los salarios hoy en día están dolarizados, porque el dólar está estable, entonces aumentos por encima del 5% en dólares es una cifra para el mundo externo altísima, afecta fuertemente nuestras exportaciones y nos vuelve menos competitivos para el mercado externo. En lo que respecta al mercado interno, con la inflación sabemos todos el efecto que tiene. Estamos creyendo que va a ser una cifra importante. Todavía no tenemos un número acordado y vamos a empezar a negociarla en marzo. En realidad, las conversaciones con el gremio son continuas, pero oficialmente es en marzo las negociaciones.
P. ¿Cuál es el promedio salarial en su sector?
A.A: Un operario promedio en Acindar está ganando en el orden de los 10.000 pesos por mes.
P.: ¿A nivel internacional cómo se ubican los operarios de Acindar?
A.A.: Por ejemplo gana más que nuestro operario en Brasil, es decir, no somos competitivos con los precios de Brasil. Si se compara con Europa, la situación se revierte, es decir, el operario europeo gana bastante más. Pero no comparamos solamente salarios, sino que (hay que tomar en cuenta) salarios y cantidad de gente. Cuando se piensa en el salario nuestro por la cantidad de gente, estamos perdiendo competitividad en cualquier mercado del mundo.
Entrevista de Liliana Franco
Respecto a cómo interpretan en el exterior las últimas medidas adoptadas por el gobierno local (nuevos requisitos para importar, trabas para el envío de remesas de divisas a casas matrices, etc.), Acevedo reconoció que «generan un grado de incertidumbre en los países controlantes de la compañía que afecta al desarrollo del negocio». En este sentido, anticipó que este año, Acindar tiene en carpeta pocas inversiones previstas.
En relación a las paritarias del sector siderúrgico, previstas para marzo, Acevedo consideró que la negociación podría ser complicada ya que «al estar dolarizados los salarios, porque el dólar está estable, cualquier aumento por encima del 5% en dólares es altísimo para el exterior «, y admitió que estiman que la pauta salarial «va a ser una cifra importante aunque todavía no tenemos un número acordado». A continuación los puntos más salientes del reportaje concedido a ámbito.com:
Periodista: ¿Cómo está viendo la situación económica argentina? Algunos pronósticos indican que el país podría crecer en el orden del 3 al 4%.
Arturo Acevedo: En el negocio siderúrgico estamos viendo con cierto grado de preocupación un amesetamiento en el crecimiento. En nuestros presupuestos teníamos previsto un crecimiento de 4% pero el mes de enero ya indica una tendencia a amesetarse. No sé si es coincidencia por el primer mes del año, pero se está dando eso.
P.: En comparación con enero de 2011, ¿este comportamiento podría ser coyuntural o cree que marca una tendencia?
A.A.: Nos tiene algo confundidos. Enero de 2011 fue de crecimiento; este enero es atípico, entonces no sabemos si es una cuestión coyuntural o es una tendencia.
P.: ¿Se debe en parte por alguna situación del exterior o a situaciones internas?
A.A.: Diría que las condiciones internas son de gran importancia, nosotros vamos básicamente al mercado nacional. Con las exportaciones estamos afectados por efecto externo, pero la exportación en nuestro volumen de ventas es menor.
P.: ¿A qué situaciones internas se refiere?
A.A.: Nuestros productos van a la construcción, que es mercado interno.
P.: ¿Cómo están afectando las nuevas disposiciones para importar?
A.A.: Nosotros importamos grandes volúmenes de insumos, casi el 40% de lo que consumimos es importado, nuestro principal insumo es el mineral de hierro, que es totalmente importado. Estamos cumpliendo con la normativa oficial que pide la Afip y además la normativa para informar a la Secretaría de Comercio. Hasta ahora los procesos están en funcionamiento, no tenemos mayores inconvenientes. Sí nos genera un cierto grado de incertidumbre, por lo tanto, hemos aumentado preventivamente los niveles de stocks de nuestras plantas para contrarrestar cualquier problema.
P.:. ¿Han recibido alguna notificación en este sentido o sugerencia para que no hagan envíos de utilidades al exterior?
A.A.: Sí, nos han sugerido que notifiquemos y controlemos las remesas de divisas, cosa que estamos haciendo en conjunción con el Banco Central, y hasta ahora no hemos tenido mayores inconvenientes.
P.: Entonces las casas matrices lo han aceptado.
A.A.: Sí, exactamente.
P.: ¿Esto afecta los pedidos de inversión que puedan solicitar a la casa matriz para, por ejemplo, ampliar la planta?
A.A.: Por supuesto. Todo este tipo de condicionamientos, de permisos, generan un grado de incertidumbre en los países controlantes de la compañía, que llevan a un grado de incertidumbre. Eso afecta, obviamente, al desarrollo del negocio.
P.: ¿Tienen inversiones previstas para este año?
A.A.: Pocas, las mínimas para mantener los equipos a nivel tecnológico, pero no tenemos previsto ningún tipo de ampliación ni plantas nuevas.
P.: Vienen las discusiones paritarias y muchos gremios están pensando en aumentos de más de 20%. ¿Cómo ve ese tema?
A.A.: Va a ser complicado. No olvidemos que los salarios hoy en día están dolarizados, porque el dólar está estable, entonces aumentos por encima del 5% en dólares es una cifra para el mundo externo altísima, afecta fuertemente nuestras exportaciones y nos vuelve menos competitivos para el mercado externo. En lo que respecta al mercado interno, con la inflación sabemos todos el efecto que tiene. Estamos creyendo que va a ser una cifra importante. Todavía no tenemos un número acordado y vamos a empezar a negociarla en marzo. En realidad, las conversaciones con el gremio son continuas, pero oficialmente es en marzo las negociaciones.
P. ¿Cuál es el promedio salarial en su sector?
A.A: Un operario promedio en Acindar está ganando en el orden de los 10.000 pesos por mes.
P.: ¿A nivel internacional cómo se ubican los operarios de Acindar?
A.A.: Por ejemplo gana más que nuestro operario en Brasil, es decir, no somos competitivos con los precios de Brasil. Si se compara con Europa, la situación se revierte, es decir, el operario europeo gana bastante más. Pero no comparamos solamente salarios, sino que (hay que tomar en cuenta) salarios y cantidad de gente. Cuando se piensa en el salario nuestro por la cantidad de gente, estamos perdiendo competitividad en cualquier mercado del mundo.
Entrevista de Liliana Franco