27 de Diciembre de 2014
El caso de la ex concejal bahiense y ex funcionaria que ahora es proveedora del Estado
Connie Rivas Godio fue candidata del PRO a intendenta de Bahia Blanca en 2011 y luego fue concejal hasta 2013. Ahora ganó un contrato de medio millón de pesos en la Ciudad, aunque en su tierra sigue de campaña. Las sospechas.
Vínculos – Rivas Godio es una militante PRO tiempo completo. Su blog registra la clásica foto con Macri, y un protagonismo claro en el distrito de Bahía Blanca.
La estructura nacional del PRO ha costado mucho esfuerzo dicen desde el entorno del jefe de gobierno Mauricio Macri. Lo cuentan con mística. Con la intención de transmitir los secretos de una gesta heroica. Hablan de una cruzada nacida hace diez años en la Capital, que ahora busca posicionarlo como uno de los candidatos, ajenos al peronismo, con mejores chances para disputar la sucesión presidencial de CFK en 2015. El armado, en gran parte, es promovido desde el gobierno porteño. Sus voceros niegan que exista alguna relación económica entre la administración pública del tercer presupuesto más importante del país y el financiamiento de una costosa campaña nacional que, mes tras mes, llega a distintos puntos del país bajo la coordinación del ministro de gobierno Emilio Monzó, el secretario general Marcos Peña y el secretario de Medios y empresario Miguel De Godoy. El capítulo bonaerense incluye a la vicejefa de gobierno María Eugenia Vidal y al intendente de Vicente López, Jorge Macri, ambos precandidatos a encabezar la lista amarilla para gobernador de la provincia.
Pero la experiencia de la arquitecta María Constanza Irene Rivas Godio podría opacar la imagen de transparencia que el macrismo pretende construir alrededor de su armado nacional. La mujer, reconocida como la blonda operadora de Macri que logró sumar al hermano de «Manu» Ginóbili a las listas amarillas, fue candidata del PRO a intendente de Bahía Blanca en 2011 y se desempeñó entre 2009 y 2013 como la titular del monobloque del macrismo en el Concejo Deliberante bahiense. En su entorno cuentan que «la militancia» la llevó a conocer al actual legislador bonaerense por la segunda sección electoral Orlando Yans, su actual pareja y un ex radical articulado dentro del espacio macrista que conduce el presidente de Boca Juniors Daniel «El Tano» Angelici. Ambos tienen al intendente de Vicente López y primo del alcalde porteño, Jorge Macri, como principal articulador de las discretas instancias comunicantes entre massistas y macristas, regada por quienes alguna vez gritaron «alika alikate» junto al empresario Francico De Narváez.
Esa referencia le ha permitido a Rivas Godio, dicen dentro del gobierno porteño, afrontar duras internas por sus funcionariados intermitentes. Su función legislativa terminó el 10 de diciembre de 2013, cuando dejó de percibir un salario mensual de 20 mil pesos, menos de la mitad de lo que perciben sus pares porteños. Sin embargo, la pérdida del salario como concejala no afectará el patrimonio de Rivas Godio, porque desde mediados de octubre pasado se transformó, como ya ha trascendido, en proveedora del estado porteño a través de la Dirección General de Proyectos de Urbanismo, Arquitectura e Infraestructura, que depende del Ministerio de Urbanismo a cargo de otro colega y amigo de Connie: el arquitecto Daniel Chaín. Según el Expediente 9.395.722/14, Rivas Godio fue beneficiada con la Contratación Directa 7915/14, para proveerle al estado porteño, a través de la Dirección que conduce Jorge Sábato, «servicios especializados para la coordinación, la gestión y el seguimiento de la construcción de estacionamientos» por un monto total de 540 mil pesos.
Los antecedentes de Connie entre Bahía y la Ciudad van más allá de su nuevo rol de proveedora del Estado que la contrató dos veces. El último cargo que tuvo fue como gerente operativa de Planificación Institucional, de la Dirección General de Relaciones con Provincias y Municipios, de la Subsecretaría de Asuntos Federales, del Ministerio de Gobierno conducido por Monzó. El 22 de febrero de 2013, el ministro de Modernización Andrés Ibarra le aceptó la renuncia al cargo y Connie volvió a Bahía. Para transformarse en gerente de la cartera de Gobierno, según a explicó a la prensa bahiense, pidió «licencia para ir a realizar un trabajo especifíco a Buenos Aires». «Me iba a demandar mucho tiempo. Sabía que me iba, en principio por seis meses, y después pedí licencia seis meses más. Siempre pensé en irme un año nunca pensé en otra cosa», dijo Connie al portal bahiense sin mencionar que el trabajo específico era un cargo público de la comuna porteña.
No fue la única renuncia a la gestión PRO que la arquitecta Rivas Godio presentó al jefe de gobierno porteño. La primera fue aceptada por el propio Macri el 9 de diciembre de 2009, cuando Rivas Godio dejó el cargo de consejera del Consejo del Plan Urbano Ambiental, del Ministerio de Desarrollo Urbano, dependiente de Chaín. Lo hizo un día antes de asumir como concejala en Bahía Blanca.
La discreta trazabilidad de funcionariados y contratos entre Bahía y Buenos Aires fue descubierta por Facundo Difilippo, legislador mandato cumplido del Partido Social de la Ciudad. «Para mí es lisa y llanamente una transferencia de recursos estatales del estado porteño para la campaña del PRO en la Provincia de Buenos Aires y por eso la vicejefa de gobierno Maria Eugenia Vidal, como referente de la campaña bonaerense, debería dar explicaciones sobre esta situación», acusó. Respecto al contrato de 540 mil pesos opinó que el objeto de la contratación directa es «para hacer un trabajo que podria hacerse con recursos propios del ministerio de Desarrollo Urbano, una prueba que derriba cualquier justificación de contratar a una arquitecta que fue concejal del PRO hasta hace poco tiempo. Queda claro que la intención de esa operación consiste en financiar la campaña del PRO en la provincia con recursos publicos», denunció. «
Silencio de radio en el gobierno PRO
A pesar de las consultas de este diario sobre la adjudicación de los 540 mil pesos a favor de «Connie», los ministerios de Desarrollo Urbano, a cargo de Daniel Chaín, y de gobierno, en manos de Emilio Monzó no quisieron responder las preguntas de Tiempo.
El caso de la ex concejal bahiense y ex funcionaria que ahora es proveedora del Estado
Connie Rivas Godio fue candidata del PRO a intendenta de Bahia Blanca en 2011 y luego fue concejal hasta 2013. Ahora ganó un contrato de medio millón de pesos en la Ciudad, aunque en su tierra sigue de campaña. Las sospechas.
Vínculos – Rivas Godio es una militante PRO tiempo completo. Su blog registra la clásica foto con Macri, y un protagonismo claro en el distrito de Bahía Blanca.
La estructura nacional del PRO ha costado mucho esfuerzo dicen desde el entorno del jefe de gobierno Mauricio Macri. Lo cuentan con mística. Con la intención de transmitir los secretos de una gesta heroica. Hablan de una cruzada nacida hace diez años en la Capital, que ahora busca posicionarlo como uno de los candidatos, ajenos al peronismo, con mejores chances para disputar la sucesión presidencial de CFK en 2015. El armado, en gran parte, es promovido desde el gobierno porteño. Sus voceros niegan que exista alguna relación económica entre la administración pública del tercer presupuesto más importante del país y el financiamiento de una costosa campaña nacional que, mes tras mes, llega a distintos puntos del país bajo la coordinación del ministro de gobierno Emilio Monzó, el secretario general Marcos Peña y el secretario de Medios y empresario Miguel De Godoy. El capítulo bonaerense incluye a la vicejefa de gobierno María Eugenia Vidal y al intendente de Vicente López, Jorge Macri, ambos precandidatos a encabezar la lista amarilla para gobernador de la provincia.
Pero la experiencia de la arquitecta María Constanza Irene Rivas Godio podría opacar la imagen de transparencia que el macrismo pretende construir alrededor de su armado nacional. La mujer, reconocida como la blonda operadora de Macri que logró sumar al hermano de «Manu» Ginóbili a las listas amarillas, fue candidata del PRO a intendente de Bahía Blanca en 2011 y se desempeñó entre 2009 y 2013 como la titular del monobloque del macrismo en el Concejo Deliberante bahiense. En su entorno cuentan que «la militancia» la llevó a conocer al actual legislador bonaerense por la segunda sección electoral Orlando Yans, su actual pareja y un ex radical articulado dentro del espacio macrista que conduce el presidente de Boca Juniors Daniel «El Tano» Angelici. Ambos tienen al intendente de Vicente López y primo del alcalde porteño, Jorge Macri, como principal articulador de las discretas instancias comunicantes entre massistas y macristas, regada por quienes alguna vez gritaron «alika alikate» junto al empresario Francico De Narváez.
Esa referencia le ha permitido a Rivas Godio, dicen dentro del gobierno porteño, afrontar duras internas por sus funcionariados intermitentes. Su función legislativa terminó el 10 de diciembre de 2013, cuando dejó de percibir un salario mensual de 20 mil pesos, menos de la mitad de lo que perciben sus pares porteños. Sin embargo, la pérdida del salario como concejala no afectará el patrimonio de Rivas Godio, porque desde mediados de octubre pasado se transformó, como ya ha trascendido, en proveedora del estado porteño a través de la Dirección General de Proyectos de Urbanismo, Arquitectura e Infraestructura, que depende del Ministerio de Urbanismo a cargo de otro colega y amigo de Connie: el arquitecto Daniel Chaín. Según el Expediente 9.395.722/14, Rivas Godio fue beneficiada con la Contratación Directa 7915/14, para proveerle al estado porteño, a través de la Dirección que conduce Jorge Sábato, «servicios especializados para la coordinación, la gestión y el seguimiento de la construcción de estacionamientos» por un monto total de 540 mil pesos.
Los antecedentes de Connie entre Bahía y la Ciudad van más allá de su nuevo rol de proveedora del Estado que la contrató dos veces. El último cargo que tuvo fue como gerente operativa de Planificación Institucional, de la Dirección General de Relaciones con Provincias y Municipios, de la Subsecretaría de Asuntos Federales, del Ministerio de Gobierno conducido por Monzó. El 22 de febrero de 2013, el ministro de Modernización Andrés Ibarra le aceptó la renuncia al cargo y Connie volvió a Bahía. Para transformarse en gerente de la cartera de Gobierno, según a explicó a la prensa bahiense, pidió «licencia para ir a realizar un trabajo especifíco a Buenos Aires». «Me iba a demandar mucho tiempo. Sabía que me iba, en principio por seis meses, y después pedí licencia seis meses más. Siempre pensé en irme un año nunca pensé en otra cosa», dijo Connie al portal bahiense sin mencionar que el trabajo específico era un cargo público de la comuna porteña.
No fue la única renuncia a la gestión PRO que la arquitecta Rivas Godio presentó al jefe de gobierno porteño. La primera fue aceptada por el propio Macri el 9 de diciembre de 2009, cuando Rivas Godio dejó el cargo de consejera del Consejo del Plan Urbano Ambiental, del Ministerio de Desarrollo Urbano, dependiente de Chaín. Lo hizo un día antes de asumir como concejala en Bahía Blanca.
La discreta trazabilidad de funcionariados y contratos entre Bahía y Buenos Aires fue descubierta por Facundo Difilippo, legislador mandato cumplido del Partido Social de la Ciudad. «Para mí es lisa y llanamente una transferencia de recursos estatales del estado porteño para la campaña del PRO en la Provincia de Buenos Aires y por eso la vicejefa de gobierno Maria Eugenia Vidal, como referente de la campaña bonaerense, debería dar explicaciones sobre esta situación», acusó. Respecto al contrato de 540 mil pesos opinó que el objeto de la contratación directa es «para hacer un trabajo que podria hacerse con recursos propios del ministerio de Desarrollo Urbano, una prueba que derriba cualquier justificación de contratar a una arquitecta que fue concejal del PRO hasta hace poco tiempo. Queda claro que la intención de esa operación consiste en financiar la campaña del PRO en la provincia con recursos publicos», denunció. «
Silencio de radio en el gobierno PRO
A pesar de las consultas de este diario sobre la adjudicación de los 540 mil pesos a favor de «Connie», los ministerios de Desarrollo Urbano, a cargo de Daniel Chaín, y de gobierno, en manos de Emilio Monzó no quisieron responder las preguntas de Tiempo.