Su segunda casa. Barrionuevo, en la sede de los gastronómicos, el gremio desde el cual se hizo fuerte en la interna del sindicalismo argentino. Un peronista clásico. DIEGO DIAZ.
-¿Quién es Luis Barrionuevo?
-Un soñador y una persona con muchas utopías. Ver mi gremio cómo lo hemos transformado, con un equipo, no solamente yo, un gremio con 400 mil trabajadores, donde los trabajadores disfrutan de todo lo que a mí me hubiera gustado disfrutar cuando era trabajador. Fui trabajador textil, metalúrgico, de la construcción, de los jaboneros. Y en Catamarca, entre los 11 y los 14 era mozo de mostrador, cadete, un poco de todo … hoy estamos con un gremio de 2.500 empleados profesionales, que maneja 300 millones de pesos mensuales y …
-Espere, espere, ésta es la película suya, ahora qué les dice a quienes hablan del Barrionuevo patotero, prepotente y demás?
-Los que opinan así, si me conocieran yo les diría que opinarían a favor. Yo viví momentos muy difíciles en mi carrera. Como político, como presidente de un club de fútbol como Chacarita y como conductor de un gremio. Le demostré a la sociedad, no sólo a los trabajadores, la capacidad que tenemos nosotros de administrar los recursos con absoluta transparencia.
-Sí, pero no ignora que la sociedad tiene una mirada negativa sobre usted, ¿no?
-Usted sabe cómo es esto … ser sindicalista en un país donde mandan los capitales, que tienen mucha incidencia sobre los multimedios y sus dueños … Y sí, es difícil. Pero yo grito mi verdad y lo que creo que es justo.
-Parece un discurso kirchnerista …
– ¡Noooooo! El kirchnerismo fue de lo peor que nos pasó a los argentinos y al país, uno de los gobiernos que más plata manejó. Gracias al campo, a la soja, dispuso de US$ 650 mil millones en los doce años de gobierno y nos dejaron un país destrozado. De eso se robaron US$ 10 mil millones entre funcionarios, familiares y amigos. Fue el gobierno más destructivo que hubo. Que devuelvan todo, que con esa plata se van a construir muchísimas viviendas para los pobres. Ah, además tenemos US$ 50 mil millones que se han llevado los empresarios, amigos del poder de todas las épocas. Alfonsinistas, menemistas, cafieristas, militares, o sea son los mismos empresarios que han hecho esta fortuna y que gran parte está fuera del país.
-La charla viene fuerte … digo, políticos varios, kirchneristas, empresarios …¿y los sindicalistas no robaron nada?
-Hay sindicalistas que, sin ninguna duda, también lo hicieron … Tenemos Pedraza preso, Zanola preso, el Caballo Suárez preso.
-¿Usted no teme ir preso alguna vez?
-No, no … A mí me auditaron el gremio, la AFIP me allanó no una, seis veces, le gané juicios a la AFIP … El gobierno kirchnerista me quiso meter preso por un partido, un Boca- Chacarita con mucha violencia. Pero no fue contra mí, sino contra Macri, que peleaba la jefatura de Gobierno de la Ciudad.
-Lo saco por un ratito de la política, cuénteme un poco de la infancia en Catamarca.
-Fue la infancia en la casa de un trabajador municipal que era mi viejo, Ramón Agustín Barrionuevo. Mi mamá se llamaba Agustina del Valle. Ella era todo, la tapadera nuestra, de los siete hermanos. Era muy difícil aquello, yo me escapaba a la casa de mi abuela para poder comer. La ayudaba a hacer empanadas y las vendía en canastos en la procesión de la Virgen del Valle.
-¿Alguna vez llegó a sentir hambre?
-¡Seeeee! Sentíamos hambre … Eramos siete, no se olvide. Con mi viejo vendíamos leña, la cargábamos en burros. Me acuerdo que de chico vivíamos en la Casa Parroquial Mi vieja limpiaba la Iglesia y colaborábamos con el cura en la Catedral … yo era ayudante.
-¿Monaguillo?
-Fui monaguillo, esteee …
-Barrionuevo monaguillo parece …
-(Interrumpe) Al margen de eso que piensa, me acuerdo que iba a buscar las hostias y el vino a un colegio de monjas. Ahí hacían las hostias y un vino dulce, el vino de las misas. ¿Se imagina, no? En el camino abría la caja de hostias y me las comía. Era de hambre, o sea que estoy confesado … ja ja ja.
-Lo traigo otra vez al presente. Hábleme un poco sobre Mauricio Macri.
-A Mauricio lo conozco, no sé … deben hacer unos 30 años. Con Franco tenía más relación. A Mauricio, con amigos de la política, radicales y peronistas, lo ayudamos en la campaña para que sea presidente de Boca y después lo ayudamos en la Ciudad. Acá en el sindicato, fundamentalmente mi cuñado Dante, que es el secretario general de Capital, acá se hacían las listas de fiscales.
-¿Lo ayudó en la campaña a Presidente?
-No, para eso no. Dante sí.
-¿Y cómo ve al Gobierno?
-Yo recuerdo lo que le pasó a Menem. La cagó cuando lo metió a Cavallo como ministro de Economía, ahí se fueron los sueños a la mierda. Estatizó la deuda privada en el 82, hizo bolsa toda la industria. Ahí se terminaron todos mis sueños con Menem. Desaparecieron fábricas y se potencializó la importación. Macri se tendrá que despertar, porque si no … Las protestas y los reclamos, todo lo que pasa en estos días, tienen mucho que ver para que el gobierno despierte …
-¿Este gobierno va a despertar? ¿O sólo lo ve como una transición necesaria?
-Yo lo veo como una transición. Creo que el Presidente apuesta a la economía, por eso puso un montón de CEOs en el Gobierno, que no son patriotas ni mucho menos. Aranguren ganaba 500 lucas por mes en Shell ¿y va a venir a ganar 100 mil, a hacer patria? No creo en esa vocación de patriota. Sturzenegger será un buen técnico, pero es de la escuela de Cavallo. Por eso digo que Macri se tendrá que avivar, porque lo que hoy estamos viviendo, lo que tenemos, es la política de Cavallo. Sin ninguna duda. Los capitales no vienen porque sí, y el capital que viene, viene a hacerse cargo del agua, de la luz, del gas, o sea, todo lo que es negocio. Yo quiero ver los capitales que vienen a invertir en industrias, a generar fuentes de trabajo.
-¿No le da algo de crédito a Macri?
-No a Macri, a la gobernabilidad. Cuando se hizo la unidad de la CGT, dije que la tarea más difícil que íbamos a tener nosotros, era sostener a este gobierno, porque era un gobierno débil. Tenemos argumentos de sobra para parar 24, 36, 48 horas, pero no. Nosotros cuidamos la gobernabilidad. Somos los que más aportamos hoy a la gobernabilidad con el sacrificio de los trabajadores: devaluación, inflación, recesión, desempleo.
-¿Usted dice que los únicos que pierden son los trabajadores?
-No hay duda, y también las pymes. Los banqueros y los grandes empresarios son los que se están haciendo el gran festival. Esos no pierden nunca. Por eso, digo: Macri tarda mucho en poner en funcionamiento la obra pública, en hacer viviendas. Cuando se construyen viviendas se les da trabajo a por lo menos 36 ramas de gremios que tienen que ver con la vivienda. Eso es reactivar.
-¿Qué país vislumbra el año que viene?
-Lo que yo veo son dos fotos. Una es la de Massa ganando la Provincia. Y la otra, un peronismo reciclado, sin el kirchnerismo, con algunos intendentes y gobernadores.
-¿Massa gana si Cristina es candidata?
-Cristina no va a ser candidata, Cristina va a estar desfilando por Comodoro Py.
-¿La ve presa?
-No es que la vea, es que tiene que estar presa. A ver … ¿no tuvo nada que ver con esa imagen contando plata en Puerto Madero? ¿Con los millones de López, tirándolos así nomás, en bolsones, tampoco? ¿Y la caja fuerte de Florencia con 5 palos verdes, como si nada? Entonces, no hace falta más. La mamá también ahora imputada, pobre vieja, pobres hijos. “La doctora” es la viuda más rica de Latinoamérica. La conozco bien del Senado … Una imbancable, nos verdugueaba … mala. Mala, soberbia e hipócrita.
-¿Y cómo ve a Cambiemos para 2017?
-Macri convive hoy con “la república”, que es dinamita pura. “La república” la llamo a la doctora Carrió. Esa lo va a dinamitar a Macri, va a hacer explotar todo ahí adentro.
-¿Por qué cree eso?
-Por su personalidad. Ha dinamitado todo lo que construyó hasta ahora. Cambiemos tiene un problema. El PRO es un partido muy cerrado, hermético. Y el Presidente necesita ganar las elecciones que vienen, tener más senadores y más diputados.
-¿Si Carrió es “la república” y Cristina es “la doctora”, qué es María Eugenia?
-Es una militante de la san puta … Ya en la Ciudad había hecho un trabajo bárbaro. Y la mandaron a la provincia de Buenos Aires, una tarea imposible. Me la encontraba en varios actos, en distintos lugares, bajaba de un avión, subía a un helicóptero, a un coche, una camioneta, se rompía el alma. La tarea más jodida que tiene es el tema de la Policía, de la inseguridad. A nivel nacional, el Gobierno tiene dos problemas en los dos estados más grandes para ganar el año que viene. La Provincia con Massa y la Capital con Lousteau. Al embajador lo adoptan urgente o murieron.
-¿Entonces no ve a Macri por 8 años?
-Depende de la gestión, depende de si se lo castiga y cómo en las urnas el año que viene. La vez pasada comiendo un churrasco con Duhalde … Duhalde es un … le digo, hoy es un fiel custodio de, si quiere, del Presidente. La teoría de Duhalde es que Macri debe ganar sí o sí la elección para imponer respeto.
-¿Qué hizo el Presidente por los gremios?
-Yo admito que Macri tuvo un gesto que no lo tuvo ningún presidente, reconoció 30 mil millones de pesos a las obras sociales. Y pagó, ya repartió 2.700 millones y el resto está en bonos. Plata para el área salud. Le digo, me saco el sombrero.
-La última, ¿cumplió aquella exhortación tan polémica de …?
(Interrumpe) -¿Hace cuánto fue? ¿Más de 20 años? ‘Tenemos que dejar de robar por dos años en este país’, eso dije. Y siempre me involucré con eso. Yo manejaba US$ 30 millones de las obras sociales al mes, busque usted un dirigente sindical, amigo o enemigo mío, que diga si Barrionuevo en algún momento le pidió una coima. Y saqué cagando a unos cuantos operadores de Menem que venían a pedirme plata. Hoy me dicen en la calle ‘qué razón tenías’. Y en el gobierno kirchnerista dije que tenían dejar de robar no dos años sino 30 segundos. Con lo que se robaron, con 30 segundos nos salvábamos.
Peronista de la primera hora, con sello polémico
Tiene mucho de la estampa del sindicalista clásico, pero apuesta a la elegancia y a otra estética. Al borde de los 75, se adivina con sólo escucharlo, que a Luis Barrionuevo le gusta que lo identifiquen como el pater familias de un clan numeroso, más incluso que aquel originario de la infancia pobre en Catamarca. Allá vendió leña a lomo de burro y empanadas hechas por su abuela, además de cuidar cabritos en un barrio en lo alto de la montaña y de garrotear nogales para hacerse de nueces y ofrecerlas por unos centavos. Cualquier rebusque sería para darle pelea al hambre en un hogar donde la comida no sobraba. Ya era un buscavidas en la batalla de la supervivencia. Hoy, cuando les recuerda a sus nietos aquellos días lo despachan rápido: “Dale, abuelo …” Sabe de su pasado turbulento y no se amilana si tiene que hablar sobre eso. El escándalo lo envolvió con la quema de urnas en Catamarca. El explica y cambia de frente rápido: “Rendí cuentas siempre, a todos, me investigaron y no me encontraron nada”. Siendo hincha de Independiente, fue presidente de Chacarita una década y se jacta de haber domado a la barrabrava del club. Tres veces se le pregunta cómo lo hizo y tres veces da la misma respuesta, sin detalles: “A mi manera”. Y baja el telón. Su peronismo viene desde la infancia y tiene registrado su primer impacto emocional con la visita de Eva Perón a Catamarca. “Me marcó ese día, para siempre. Fue algo impresionante. Evita llegó en ese tren con el que recorría el país junto al General. Paseó por la ciudad en un coche descapotado hasta llegar al Hospital que se inauguraba”. Le brillan los ojos con el recuerdo: “Era como una virgen, la imagen de Eva … luminosa. ¿Y sabe qué era ella, además? Era las primeras zapatillas, era la primera ropa digna”.
“Luisito” jugaba al fútbol en los torneos infantiles de entonces: “Nos daban todo el equipo, zapatillas, medias deportivas blancas, pantalón, camiseta, qué sé yo. Y además guardapolvos y útiles para la escuela. Recuerdo que con mi hermano hacíamos la cola en el Correo y nos daban la sidra y el pan dulce para Navidad”. Hoy, su vida es el sindicato, el peronismo y la familia. Parece haber aprendido de los errores del gremialismo pasado y dice que cuida el sistema. Un rencor no lo abandona. Tiene nombre y apellido: Cristina Kirchner. La quiere presa.
ITINERARIO
Luis Barrionuevo nació el 15 de marzo de 1942 en Villa Cuba, barrio de la capital de la provincia de Catamarca. Es el jefe de la Unión de Trabajadores del Turismo, Hoteleros y Gastronómicos (Uthgra) y peronista “desde que la vi a Evita en Catamarca cuando era un chico”. Fue diputado y senador en el Congreso de la Nación, en ambas ocasiones por el Partido Justicialista. Está casado en segundas nupcias con Graciela Camaño, actual diputada del Frente Renovador. Tiene cuatro hijos (Alejandro y Sandra, de su primer matrimonio; Melina y José Luis “Junior” del segundo), ocho nietos y un bisnieto.
Al toque
Un proyecto: Lo tengo desde la militancia, un proyecto de país para dejarles a hijos y nietos.
Un desafío: Tener ese país, un país como uno lo pueda soñar, donde se pueda vivir en paz y con trabajo, ¿no?
Un líder de hoy: Hoy no. Por lo menos yo no tengo líder. Mi único líder fue sin dudas Perón. Y en el movimiento obrero, José Ignacio Rucci.
Un prócer: San Martín y Sarmiento.
Un sueño: Y… lo estoy viviendo, lo vivo con mi familia, con 4 hijos, 8 nietos y un bisnieto … así que lo vivo bien.
Un recuerdo: Haber conocido a Evita, creo que yo tenía 8 años, en Catamarca, cuando fue a inaugurar el Hospital de Niños.
Sociedad a la que admira: La de Uruguay, por el país y por la gente. Me encanta cómo viven la democracia. Hay un respeto impresionante por el otro.
Persona que admira: Y, mi mujer (Graciela Camaño, actual diputada nacional por el Frente Renovador) Una comida: Dos, pastas y asado.
Una bebida: Un buen vino tinto.
¿Un placer?: Venir todos los días al gremio y compartir con los trabajadores, con los empleados, con mis compañero
Un libro: “La razón de mi vida”, de Eva Perón.
Una película: No soy de ir mucho al cine. Me gustaba mucho Armando Bo, por lo que significó para la época.
Una serie: La Familia Ingalls.
-¿Quién es Luis Barrionuevo?
-Un soñador y una persona con muchas utopías. Ver mi gremio cómo lo hemos transformado, con un equipo, no solamente yo, un gremio con 400 mil trabajadores, donde los trabajadores disfrutan de todo lo que a mí me hubiera gustado disfrutar cuando era trabajador. Fui trabajador textil, metalúrgico, de la construcción, de los jaboneros. Y en Catamarca, entre los 11 y los 14 era mozo de mostrador, cadete, un poco de todo … hoy estamos con un gremio de 2.500 empleados profesionales, que maneja 300 millones de pesos mensuales y …
-Espere, espere, ésta es la película suya, ahora qué les dice a quienes hablan del Barrionuevo patotero, prepotente y demás?
-Los que opinan así, si me conocieran yo les diría que opinarían a favor. Yo viví momentos muy difíciles en mi carrera. Como político, como presidente de un club de fútbol como Chacarita y como conductor de un gremio. Le demostré a la sociedad, no sólo a los trabajadores, la capacidad que tenemos nosotros de administrar los recursos con absoluta transparencia.
-Sí, pero no ignora que la sociedad tiene una mirada negativa sobre usted, ¿no?
-Usted sabe cómo es esto … ser sindicalista en un país donde mandan los capitales, que tienen mucha incidencia sobre los multimedios y sus dueños … Y sí, es difícil. Pero yo grito mi verdad y lo que creo que es justo.
-Parece un discurso kirchnerista …
– ¡Noooooo! El kirchnerismo fue de lo peor que nos pasó a los argentinos y al país, uno de los gobiernos que más plata manejó. Gracias al campo, a la soja, dispuso de US$ 650 mil millones en los doce años de gobierno y nos dejaron un país destrozado. De eso se robaron US$ 10 mil millones entre funcionarios, familiares y amigos. Fue el gobierno más destructivo que hubo. Que devuelvan todo, que con esa plata se van a construir muchísimas viviendas para los pobres. Ah, además tenemos US$ 50 mil millones que se han llevado los empresarios, amigos del poder de todas las épocas. Alfonsinistas, menemistas, cafieristas, militares, o sea son los mismos empresarios que han hecho esta fortuna y que gran parte está fuera del país.
-La charla viene fuerte … digo, políticos varios, kirchneristas, empresarios …¿y los sindicalistas no robaron nada?
-Hay sindicalistas que, sin ninguna duda, también lo hicieron … Tenemos Pedraza preso, Zanola preso, el Caballo Suárez preso.
-¿Usted no teme ir preso alguna vez?
-No, no … A mí me auditaron el gremio, la AFIP me allanó no una, seis veces, le gané juicios a la AFIP … El gobierno kirchnerista me quiso meter preso por un partido, un Boca- Chacarita con mucha violencia. Pero no fue contra mí, sino contra Macri, que peleaba la jefatura de Gobierno de la Ciudad.
-Lo saco por un ratito de la política, cuénteme un poco de la infancia en Catamarca.
-Fue la infancia en la casa de un trabajador municipal que era mi viejo, Ramón Agustín Barrionuevo. Mi mamá se llamaba Agustina del Valle. Ella era todo, la tapadera nuestra, de los siete hermanos. Era muy difícil aquello, yo me escapaba a la casa de mi abuela para poder comer. La ayudaba a hacer empanadas y las vendía en canastos en la procesión de la Virgen del Valle.
-¿Alguna vez llegó a sentir hambre?
-¡Seeeee! Sentíamos hambre … Eramos siete, no se olvide. Con mi viejo vendíamos leña, la cargábamos en burros. Me acuerdo que de chico vivíamos en la Casa Parroquial Mi vieja limpiaba la Iglesia y colaborábamos con el cura en la Catedral … yo era ayudante.
-¿Monaguillo?
-Fui monaguillo, esteee …
-Barrionuevo monaguillo parece …
-(Interrumpe) Al margen de eso que piensa, me acuerdo que iba a buscar las hostias y el vino a un colegio de monjas. Ahí hacían las hostias y un vino dulce, el vino de las misas. ¿Se imagina, no? En el camino abría la caja de hostias y me las comía. Era de hambre, o sea que estoy confesado … ja ja ja.
-Lo traigo otra vez al presente. Hábleme un poco sobre Mauricio Macri.
-A Mauricio lo conozco, no sé … deben hacer unos 30 años. Con Franco tenía más relación. A Mauricio, con amigos de la política, radicales y peronistas, lo ayudamos en la campaña para que sea presidente de Boca y después lo ayudamos en la Ciudad. Acá en el sindicato, fundamentalmente mi cuñado Dante, que es el secretario general de Capital, acá se hacían las listas de fiscales.
-¿Lo ayudó en la campaña a Presidente?
-No, para eso no. Dante sí.
-¿Y cómo ve al Gobierno?
-Yo recuerdo lo que le pasó a Menem. La cagó cuando lo metió a Cavallo como ministro de Economía, ahí se fueron los sueños a la mierda. Estatizó la deuda privada en el 82, hizo bolsa toda la industria. Ahí se terminaron todos mis sueños con Menem. Desaparecieron fábricas y se potencializó la importación. Macri se tendrá que despertar, porque si no … Las protestas y los reclamos, todo lo que pasa en estos días, tienen mucho que ver para que el gobierno despierte …
-¿Este gobierno va a despertar? ¿O sólo lo ve como una transición necesaria?
-Yo lo veo como una transición. Creo que el Presidente apuesta a la economía, por eso puso un montón de CEOs en el Gobierno, que no son patriotas ni mucho menos. Aranguren ganaba 500 lucas por mes en Shell ¿y va a venir a ganar 100 mil, a hacer patria? No creo en esa vocación de patriota. Sturzenegger será un buen técnico, pero es de la escuela de Cavallo. Por eso digo que Macri se tendrá que avivar, porque lo que hoy estamos viviendo, lo que tenemos, es la política de Cavallo. Sin ninguna duda. Los capitales no vienen porque sí, y el capital que viene, viene a hacerse cargo del agua, de la luz, del gas, o sea, todo lo que es negocio. Yo quiero ver los capitales que vienen a invertir en industrias, a generar fuentes de trabajo.
-¿No le da algo de crédito a Macri?
-No a Macri, a la gobernabilidad. Cuando se hizo la unidad de la CGT, dije que la tarea más difícil que íbamos a tener nosotros, era sostener a este gobierno, porque era un gobierno débil. Tenemos argumentos de sobra para parar 24, 36, 48 horas, pero no. Nosotros cuidamos la gobernabilidad. Somos los que más aportamos hoy a la gobernabilidad con el sacrificio de los trabajadores: devaluación, inflación, recesión, desempleo.
-¿Usted dice que los únicos que pierden son los trabajadores?
-No hay duda, y también las pymes. Los banqueros y los grandes empresarios son los que se están haciendo el gran festival. Esos no pierden nunca. Por eso, digo: Macri tarda mucho en poner en funcionamiento la obra pública, en hacer viviendas. Cuando se construyen viviendas se les da trabajo a por lo menos 36 ramas de gremios que tienen que ver con la vivienda. Eso es reactivar.
-¿Qué país vislumbra el año que viene?
-Lo que yo veo son dos fotos. Una es la de Massa ganando la Provincia. Y la otra, un peronismo reciclado, sin el kirchnerismo, con algunos intendentes y gobernadores.
-¿Massa gana si Cristina es candidata?
-Cristina no va a ser candidata, Cristina va a estar desfilando por Comodoro Py.
-¿La ve presa?
-No es que la vea, es que tiene que estar presa. A ver … ¿no tuvo nada que ver con esa imagen contando plata en Puerto Madero? ¿Con los millones de López, tirándolos así nomás, en bolsones, tampoco? ¿Y la caja fuerte de Florencia con 5 palos verdes, como si nada? Entonces, no hace falta más. La mamá también ahora imputada, pobre vieja, pobres hijos. “La doctora” es la viuda más rica de Latinoamérica. La conozco bien del Senado … Una imbancable, nos verdugueaba … mala. Mala, soberbia e hipócrita.
-¿Y cómo ve a Cambiemos para 2017?
-Macri convive hoy con “la república”, que es dinamita pura. “La república” la llamo a la doctora Carrió. Esa lo va a dinamitar a Macri, va a hacer explotar todo ahí adentro.
-¿Por qué cree eso?
-Por su personalidad. Ha dinamitado todo lo que construyó hasta ahora. Cambiemos tiene un problema. El PRO es un partido muy cerrado, hermético. Y el Presidente necesita ganar las elecciones que vienen, tener más senadores y más diputados.
-¿Si Carrió es “la república” y Cristina es “la doctora”, qué es María Eugenia?
-Es una militante de la san puta … Ya en la Ciudad había hecho un trabajo bárbaro. Y la mandaron a la provincia de Buenos Aires, una tarea imposible. Me la encontraba en varios actos, en distintos lugares, bajaba de un avión, subía a un helicóptero, a un coche, una camioneta, se rompía el alma. La tarea más jodida que tiene es el tema de la Policía, de la inseguridad. A nivel nacional, el Gobierno tiene dos problemas en los dos estados más grandes para ganar el año que viene. La Provincia con Massa y la Capital con Lousteau. Al embajador lo adoptan urgente o murieron.
-¿Entonces no ve a Macri por 8 años?
-Depende de la gestión, depende de si se lo castiga y cómo en las urnas el año que viene. La vez pasada comiendo un churrasco con Duhalde … Duhalde es un … le digo, hoy es un fiel custodio de, si quiere, del Presidente. La teoría de Duhalde es que Macri debe ganar sí o sí la elección para imponer respeto.
-¿Qué hizo el Presidente por los gremios?
-Yo admito que Macri tuvo un gesto que no lo tuvo ningún presidente, reconoció 30 mil millones de pesos a las obras sociales. Y pagó, ya repartió 2.700 millones y el resto está en bonos. Plata para el área salud. Le digo, me saco el sombrero.
-La última, ¿cumplió aquella exhortación tan polémica de …?
(Interrumpe) -¿Hace cuánto fue? ¿Más de 20 años? ‘Tenemos que dejar de robar por dos años en este país’, eso dije. Y siempre me involucré con eso. Yo manejaba US$ 30 millones de las obras sociales al mes, busque usted un dirigente sindical, amigo o enemigo mío, que diga si Barrionuevo en algún momento le pidió una coima. Y saqué cagando a unos cuantos operadores de Menem que venían a pedirme plata. Hoy me dicen en la calle ‘qué razón tenías’. Y en el gobierno kirchnerista dije que tenían dejar de robar no dos años sino 30 segundos. Con lo que se robaron, con 30 segundos nos salvábamos.
Peronista de la primera hora, con sello polémico
Tiene mucho de la estampa del sindicalista clásico, pero apuesta a la elegancia y a otra estética. Al borde de los 75, se adivina con sólo escucharlo, que a Luis Barrionuevo le gusta que lo identifiquen como el pater familias de un clan numeroso, más incluso que aquel originario de la infancia pobre en Catamarca. Allá vendió leña a lomo de burro y empanadas hechas por su abuela, además de cuidar cabritos en un barrio en lo alto de la montaña y de garrotear nogales para hacerse de nueces y ofrecerlas por unos centavos. Cualquier rebusque sería para darle pelea al hambre en un hogar donde la comida no sobraba. Ya era un buscavidas en la batalla de la supervivencia. Hoy, cuando les recuerda a sus nietos aquellos días lo despachan rápido: “Dale, abuelo …” Sabe de su pasado turbulento y no se amilana si tiene que hablar sobre eso. El escándalo lo envolvió con la quema de urnas en Catamarca. El explica y cambia de frente rápido: “Rendí cuentas siempre, a todos, me investigaron y no me encontraron nada”. Siendo hincha de Independiente, fue presidente de Chacarita una década y se jacta de haber domado a la barrabrava del club. Tres veces se le pregunta cómo lo hizo y tres veces da la misma respuesta, sin detalles: “A mi manera”. Y baja el telón. Su peronismo viene desde la infancia y tiene registrado su primer impacto emocional con la visita de Eva Perón a Catamarca. “Me marcó ese día, para siempre. Fue algo impresionante. Evita llegó en ese tren con el que recorría el país junto al General. Paseó por la ciudad en un coche descapotado hasta llegar al Hospital que se inauguraba”. Le brillan los ojos con el recuerdo: “Era como una virgen, la imagen de Eva … luminosa. ¿Y sabe qué era ella, además? Era las primeras zapatillas, era la primera ropa digna”.
“Luisito” jugaba al fútbol en los torneos infantiles de entonces: “Nos daban todo el equipo, zapatillas, medias deportivas blancas, pantalón, camiseta, qué sé yo. Y además guardapolvos y útiles para la escuela. Recuerdo que con mi hermano hacíamos la cola en el Correo y nos daban la sidra y el pan dulce para Navidad”. Hoy, su vida es el sindicato, el peronismo y la familia. Parece haber aprendido de los errores del gremialismo pasado y dice que cuida el sistema. Un rencor no lo abandona. Tiene nombre y apellido: Cristina Kirchner. La quiere presa.
ITINERARIO
Luis Barrionuevo nació el 15 de marzo de 1942 en Villa Cuba, barrio de la capital de la provincia de Catamarca. Es el jefe de la Unión de Trabajadores del Turismo, Hoteleros y Gastronómicos (Uthgra) y peronista “desde que la vi a Evita en Catamarca cuando era un chico”. Fue diputado y senador en el Congreso de la Nación, en ambas ocasiones por el Partido Justicialista. Está casado en segundas nupcias con Graciela Camaño, actual diputada del Frente Renovador. Tiene cuatro hijos (Alejandro y Sandra, de su primer matrimonio; Melina y José Luis “Junior” del segundo), ocho nietos y un bisnieto.
Al toque
Un proyecto: Lo tengo desde la militancia, un proyecto de país para dejarles a hijos y nietos.
Un desafío: Tener ese país, un país como uno lo pueda soñar, donde se pueda vivir en paz y con trabajo, ¿no?
Un líder de hoy: Hoy no. Por lo menos yo no tengo líder. Mi único líder fue sin dudas Perón. Y en el movimiento obrero, José Ignacio Rucci.
Un prócer: San Martín y Sarmiento.
Un sueño: Y… lo estoy viviendo, lo vivo con mi familia, con 4 hijos, 8 nietos y un bisnieto … así que lo vivo bien.
Un recuerdo: Haber conocido a Evita, creo que yo tenía 8 años, en Catamarca, cuando fue a inaugurar el Hospital de Niños.
Sociedad a la que admira: La de Uruguay, por el país y por la gente. Me encanta cómo viven la democracia. Hay un respeto impresionante por el otro.
Persona que admira: Y, mi mujer (Graciela Camaño, actual diputada nacional por el Frente Renovador) Una comida: Dos, pastas y asado.
Una bebida: Un buen vino tinto.
¿Un placer?: Venir todos los días al gremio y compartir con los trabajadores, con los empleados, con mis compañero
Un libro: “La razón de mi vida”, de Eva Perón.
Una película: No soy de ir mucho al cine. Me gustaba mucho Armando Bo, por lo que significó para la época.
Una serie: La Familia Ingalls.
