Financiarse o no financiarse, ésa parece ser la cuestión para los empresarios locales. El 2012 arranca con un interrogante que probablemente se reinvente en algunas semanas. Porque si bien las tasas han perdido algunos puntos, de todas formas han conservado niveles que bien podrían pasar por elevados. Sin embargo, en la prospectiva, los especialistas advierten que esas mismas tasas de interés podrían seguir cayendo hasta 200 puntos básicos, algo que volvería más tentadores las líneas de los bancos en pesos para las empresas.
Los números hablan por sí solos. Según el último informe monetario del Banco Central, en la penúltima semana de diciembre último dato oficial disponible, las tasas de interés activas de corto plazo volvieron a descender. El promedio semanal de la tasa de interés cobrada por adelantos en cuenta corriente a empresas, con acuerdo previo, de 1 a 7 días y por más de $10 millones bajó 1,6 puntos porcentuales y se situó en 21,6%. Este dato contrasta con los niveles de tasa registrados para noviembre. Según el mismo informe del BCRA dado a conocer en esa oportunidad, el promedio mensual de las tasas aplicadas a las distintas líneas instrumentadas mediante documentos se ubicó en 25%. En el caso de los documentos descontados, la tasa se ubicó en torno al 26,1%, mientras que para los documentos a sola firma había alcanzado 20,5%. Para los adelantos en cuenta corriente, estos se habían ubicado en 25,6% impulsada principalmente por la tasa de interés por adelantos en cuenta corriente a empresas por más de $10 millones y hasta 7 días, la cual se ubicó en 23,2%. Las tasas van a seguir bajando porque los depósitos seguramente tenderán a aumentar, tal como lo han hecho en las últimas semanas, señaló un importante banquero de la city. Noviembre fue el primer mes donde los préstamos al sector privado se ubicaron en niveles similares al aumento de los depósitos, algo que no había pasado en los meses anteriores, agregaron.
El dato de mercado confirma lo antes expuesto: en septiembre los créditos al sector privado habían trepado en promedio unos $ 10.500 millones mientras que los depósitos sólo lo habían hecho por $ 600 millones. En octubre, los créditos habían registrado un aumento de $ 7.500 millones mientras que los depósitos se habían incrementado en un nivel de $ 1.500 millones. Finalmente en noviembre, créditos y depósitos treparon niveles cercanos a los $ 5.500 millones.
Presión a banqueros
La secuencia habla por sí sola. A mediados de noviembre, la autoridad monetaria había vuelto a pedirle a las entidades que bajen el costo del crédito, sobre todo el dirigido a las empresas. Del otro lado, la tasa Badlar se había erigido cómodamente por encima del 20% y para los banqueros los préstamos debían tener un costo más alto. Si bien desde entonces a hoy algunas líneas mostraron una fuerte resistencia, de todas formas esa baja terminó concretándose. En este sentido, ayudaron y mucho el retorno de los depósitos. Las inyecciones de liquidez del BCRA fueron claves para que el nivel de tasas comience a transitar un reacomodamiento, señalaron en la city al tiempo que pronosticaron descensos en torno a los 200 puntos básicos con una tasa Badlar en 16%. En esta línea, para 2012, el BCRA estipuló en 26% la emisión de dinero, medido por el M2.
Los números hablan por sí solos. Según el último informe monetario del Banco Central, en la penúltima semana de diciembre último dato oficial disponible, las tasas de interés activas de corto plazo volvieron a descender. El promedio semanal de la tasa de interés cobrada por adelantos en cuenta corriente a empresas, con acuerdo previo, de 1 a 7 días y por más de $10 millones bajó 1,6 puntos porcentuales y se situó en 21,6%. Este dato contrasta con los niveles de tasa registrados para noviembre. Según el mismo informe del BCRA dado a conocer en esa oportunidad, el promedio mensual de las tasas aplicadas a las distintas líneas instrumentadas mediante documentos se ubicó en 25%. En el caso de los documentos descontados, la tasa se ubicó en torno al 26,1%, mientras que para los documentos a sola firma había alcanzado 20,5%. Para los adelantos en cuenta corriente, estos se habían ubicado en 25,6% impulsada principalmente por la tasa de interés por adelantos en cuenta corriente a empresas por más de $10 millones y hasta 7 días, la cual se ubicó en 23,2%. Las tasas van a seguir bajando porque los depósitos seguramente tenderán a aumentar, tal como lo han hecho en las últimas semanas, señaló un importante banquero de la city. Noviembre fue el primer mes donde los préstamos al sector privado se ubicaron en niveles similares al aumento de los depósitos, algo que no había pasado en los meses anteriores, agregaron.
El dato de mercado confirma lo antes expuesto: en septiembre los créditos al sector privado habían trepado en promedio unos $ 10.500 millones mientras que los depósitos sólo lo habían hecho por $ 600 millones. En octubre, los créditos habían registrado un aumento de $ 7.500 millones mientras que los depósitos se habían incrementado en un nivel de $ 1.500 millones. Finalmente en noviembre, créditos y depósitos treparon niveles cercanos a los $ 5.500 millones.
Presión a banqueros
La secuencia habla por sí sola. A mediados de noviembre, la autoridad monetaria había vuelto a pedirle a las entidades que bajen el costo del crédito, sobre todo el dirigido a las empresas. Del otro lado, la tasa Badlar se había erigido cómodamente por encima del 20% y para los banqueros los préstamos debían tener un costo más alto. Si bien desde entonces a hoy algunas líneas mostraron una fuerte resistencia, de todas formas esa baja terminó concretándose. En este sentido, ayudaron y mucho el retorno de los depósitos. Las inyecciones de liquidez del BCRA fueron claves para que el nivel de tasas comience a transitar un reacomodamiento, señalaron en la city al tiempo que pronosticaron descensos en torno a los 200 puntos básicos con una tasa Badlar en 16%. En esta línea, para 2012, el BCRA estipuló en 26% la emisión de dinero, medido por el M2.
