Rosana Negrini lidera una de las mayores empresas de maquinaria agrícola del país. Agrometal inició sus actividades en 1950 y hoy se especializa en la producción de sembradoras de alta tecnología. Controla el 20% del mercado nacional,es primera en ventas, y según su último balance, facturó más de $ 275 millones en 2011. Radicada en el corazón de la industria de maquinaria agrícola, específicamente en Monte Maíz, Córdoba, exporta a Paraguay, Uruguay y Bolivia.
La empresa pasó más de un cimbronazo en sus 60 años de historia en el país, pero los últimos fueron de crecimiento. Aún así, una merma posible en la demanda y un crecimiento de los costos hacen vislumbrar a la empresaria un 2012 sin crecimiento.
¿Cómo evalúa los controles a las importaciones que implementó el Gobierno?
En el caso de las sembradoras, el 95% de las que se venden en la Argentina son fabricadas en el país. Eso es porque cada tierra tiene su costumbre y su forma de trabajar. Por eso es difícil importar, así como también es difícil exportar. Distinto sucede con cosechadores y tractores. Las ventas se incrementaron el año pasado justamente porque las licencias no automáticas impidieron que ingresaran, de Brasil fundamentalmente. Esto, inclusive, incentivó a que las multinacionales estén comenzando con proyectos para producir en la Argentina cosechadoras y tractores. Ojalá se pongan en funcionamiento.
¿Entonces ve positiva la radicación de multinacionales?
Sí, siempre y cuando en realidad fabriquen y no ensamblen solamente. Tienen que tener un 55% de componentes nacionales. Ojalá se cumpla y ojalá el Estado verifique que la producción sea realmente argentina, porque de lo contrario, sería una competencia desleal.
¿El aumento del costo laboral va a restar competitividad a la maquinaria argentina?
En nuestro presupuesto tenemos proyectado un 25% de incremento. Pero esperamos que se pueda cumplir con lo que pide el Gobierno, de un tope del 18%. No porque no esté la necesidad sino porque la demanda no va a ser igual a la del año pasado. Entonces no sé si vamos a poder soportar un incremento de sueldos similar a la de 2011, que fue de más del 26%.
¿La sequía impactó en el campo, o como dice el Gobierno, no fue para tanto?
Creo que las situaciones son variadas. En nuestra zona hay campos que van a tener una cosecha muy buena y otros están destruidos. Nosotros estamos en la zona núcleo y hemos tenido dos meses de sequía muy fuerte. El maíz y la soja de primera perdieron mucho. No sé cuál va a ser la disminución del rinde, pero vamos a tener productores que tuvieron cero rendimiento.
¿Ustedes van a vender menos por eso?
No vamos a vender más, seguro. En este momento, hay incertidumbre. En marzo comienzan las consultas porque la siembra empieza en junio y ya vemos que este año el ánimo es totalmente diferente al del año pasado. Y como hubo recambio de maquinaria en los últimos años, el productor puede esperar para comprar. Donde también va a haber un ajuste es en el caso del contratista, que cosecha muchas hectáreas por todo el país y es un gran cliente para nosotros.
Reintegro
Previo a la implementación de las licencias no automáticas, que se iniciaron para el sector de la maquinaria antes que para el resto de la economía, otra medida apuntaba a la competitividad de estas empresas. Fue hace una década, cuando el Estado implementó un bono de reintegro del 14% del costo de la maquinaria cuando cayeron los aranceles de importación.
Las empresas nacionales descontaban esa alícuota al precio de venta. Ahora, con la vuelta de los aranceles a la zona extra Mercosur se dará fin a esos reintegros, y el fondo de $ 2.700 millones para la promoción y el desarrollo de los bienes de capital que prevé el Gobierno no convence a los empresarios.
A esto se suma el paso de 10,5% al 21% del IVA para la venta. En este sentido, Negrini espera que haya un plan de aterrizaje, como dicen que va a haber, porque entre el IVA y el bono vamos a tener un aumento de más del 25% de un día para el otro.
La empresa pasó más de un cimbronazo en sus 60 años de historia en el país, pero los últimos fueron de crecimiento. Aún así, una merma posible en la demanda y un crecimiento de los costos hacen vislumbrar a la empresaria un 2012 sin crecimiento.
¿Cómo evalúa los controles a las importaciones que implementó el Gobierno?
En el caso de las sembradoras, el 95% de las que se venden en la Argentina son fabricadas en el país. Eso es porque cada tierra tiene su costumbre y su forma de trabajar. Por eso es difícil importar, así como también es difícil exportar. Distinto sucede con cosechadores y tractores. Las ventas se incrementaron el año pasado justamente porque las licencias no automáticas impidieron que ingresaran, de Brasil fundamentalmente. Esto, inclusive, incentivó a que las multinacionales estén comenzando con proyectos para producir en la Argentina cosechadoras y tractores. Ojalá se pongan en funcionamiento.
¿Entonces ve positiva la radicación de multinacionales?
Sí, siempre y cuando en realidad fabriquen y no ensamblen solamente. Tienen que tener un 55% de componentes nacionales. Ojalá se cumpla y ojalá el Estado verifique que la producción sea realmente argentina, porque de lo contrario, sería una competencia desleal.
¿El aumento del costo laboral va a restar competitividad a la maquinaria argentina?
En nuestro presupuesto tenemos proyectado un 25% de incremento. Pero esperamos que se pueda cumplir con lo que pide el Gobierno, de un tope del 18%. No porque no esté la necesidad sino porque la demanda no va a ser igual a la del año pasado. Entonces no sé si vamos a poder soportar un incremento de sueldos similar a la de 2011, que fue de más del 26%.
¿La sequía impactó en el campo, o como dice el Gobierno, no fue para tanto?
Creo que las situaciones son variadas. En nuestra zona hay campos que van a tener una cosecha muy buena y otros están destruidos. Nosotros estamos en la zona núcleo y hemos tenido dos meses de sequía muy fuerte. El maíz y la soja de primera perdieron mucho. No sé cuál va a ser la disminución del rinde, pero vamos a tener productores que tuvieron cero rendimiento.
¿Ustedes van a vender menos por eso?
No vamos a vender más, seguro. En este momento, hay incertidumbre. En marzo comienzan las consultas porque la siembra empieza en junio y ya vemos que este año el ánimo es totalmente diferente al del año pasado. Y como hubo recambio de maquinaria en los últimos años, el productor puede esperar para comprar. Donde también va a haber un ajuste es en el caso del contratista, que cosecha muchas hectáreas por todo el país y es un gran cliente para nosotros.
Reintegro
Previo a la implementación de las licencias no automáticas, que se iniciaron para el sector de la maquinaria antes que para el resto de la economía, otra medida apuntaba a la competitividad de estas empresas. Fue hace una década, cuando el Estado implementó un bono de reintegro del 14% del costo de la maquinaria cuando cayeron los aranceles de importación.
Las empresas nacionales descontaban esa alícuota al precio de venta. Ahora, con la vuelta de los aranceles a la zona extra Mercosur se dará fin a esos reintegros, y el fondo de $ 2.700 millones para la promoción y el desarrollo de los bienes de capital que prevé el Gobierno no convence a los empresarios.
A esto se suma el paso de 10,5% al 21% del IVA para la venta. En este sentido, Negrini espera que haya un plan de aterrizaje, como dicen que va a haber, porque entre el IVA y el bono vamos a tener un aumento de más del 25% de un día para el otro.
