MONTEVIDEO.- La puja interna por decisiones de política impositiva y una batalla por posiciones de poder y por la orientación ideológica del gobierno uruguayo derivaron en una crisis en la administración de José Mujica, con un nuevo choque con su vicepresidente, Danilo Astori.
«Necesitábamos decirnos unas cuantas cosas», dijo el presidente uruguayo luego de una reunión de gabinete que no dio luz de salida. Allí, Mujica, a punto de comenzar su anteúltimo año de gestión, reconoció que su gobierno sufre un «desgaste» y que existen diferencias entre los integrantes del oficialista Frente Amplio (FA).
A través de entrevistas en televisión, Astori, un referente histórico de la izquierda, advirtió a Mujica y a su entorno que si se menoscaba la tarea del ministro de Economía, Fernando Lorenzo, se podría caer en «problemas serios».
La caída judicial de un impuesto al campo -que Mujica y sus economistas impusieron pese a la resistencia de Astori y de algunos ministros- fue el disparador de la nueva crisis política. Sin consultar al Ministerio de Economía, el presidente comenzó a diseñar un impuesto alternativo a los propietarios de grandes extensiones de tierra, lo que generó malestar en la cartera que maneja la política impositiva.
La Suprema Corte de Justicia declaró inconstitucional el impuesto a la concentración de inmuebles rurales (ICIR) y eso complicó a Mujica, que ya comprometió gastos con la recaudación de ese tributo. Ahora deberá devolver el dinero cobrado a productores rurales. Astori y Lorenzo le habían alertado que el impuesto no se ajustaba a la Constitución, pero Mujica presionó para que lo apoyaran en la iniciativa.
Ahora, las repercusiones políticas de ese fallo judicial agravaron la tensión entre seguidores del mandatario y del vicepresidente.
Astori expresó malestar porque asesores de Mujica impulsan cambios impositivos -con un enfoque más de izquierda- sin que el ministro del área esté enterado. «Si todos los días escuchamos versiones de que quien no es el ministro está diseñando un nuevo impuesto y el ministro no está enterado, vamos a tener problemas serios», declaró.
La corriente interna del FA que lidera Astori decidió transmitir a Mujica que sus ministros, que ocupan la cartera de Economía y Finanzas, de Transporte y Obras Públicas, y de Turismo y Deporte, están dispuestos a dejar sus cargos si no se respetan los acuerdos políticos logrados durante la campaña electoral.
Eso alude a que Mujica confió en que Astori y su equipo se encargarían de la política económica.
En tanto, el jefe de Estado transmitió cansancio con los planteos de la corriente de Astori: expresó que no aceptan trabajar en equipo y dejar espacio para propuestas de los economistas de su entorno, y señaló que si quieren irse del gobierno, que lo hagan. Pero eso fue en el momento de mayor tensión interna, que luego comenzó a distenderse.
Mujica convocó a un Consejo de Ministros para que «cada uno pudiera decir en la cara» lo que creyera conveniente. La reunión fue muy dura, según contaron a LA NACION participantes del encuentro. «Pepe [Mujica] se fue muy amargado, pero todos salimos mal, tristes, preocupados, angustiados», confió un ministro.
Anoche seguían las reuniones por separado de las principales corrientes del FA para evaluar los pasos por seguir. En el entorno de Astori sostenían que esperaban una respuesta al planteo trasladado al presidente de que si no se respeta su rol en el gobierno podrían dejan los cargos. En el entorno de Mujica aguardaban una respuesta de los ministros del grupo astorista.
El ex presidente Tabaré Vázquez había advertido públicamente que la izquierda no podía quedar prisionera de una pelea mediática.
«Tenemos que lograr que los compañeros vuelvan a funcionar como un equipo y ése es el empeño que tiene el Poder Ejecutivo», dijo Mujica, al aclarar que la discusión «está en un cuarto intermedio».
Además, el presidente admitió «la necesidad de emparchar el alma» y de «quererse un poco más entre los compañeros».
Las diferencias dentro del Frente Amplio, expuestas
«Tenemos que volver a funcionar como equipo»
JOSÉ MUJICA
Presidente de Uruguay
Edad: 77 años
Partido: Movimiento
Participación Popular
El Frente Amplio, que lo llevó al poder en 2009, está integrado por una decena de partidos, desde socialdemócratas hasta izquierdistas
Con sus ministros afines impulsó un impuesto a las grandes extensiones rurales
DANILO ASTORI
Vicepresidente de Uruguay
Edad: 72 años
Partido: Asamblea
Uruguay
Tres ministros responden a su línea ideológica: el de Economía y Finanzas; el de Transporte y Obras Públicas, y el de Turismo y Deporte
Lorenzo, ministro de Economía, se opuso al impuesto rural de Mujica .
«Necesitábamos decirnos unas cuantas cosas», dijo el presidente uruguayo luego de una reunión de gabinete que no dio luz de salida. Allí, Mujica, a punto de comenzar su anteúltimo año de gestión, reconoció que su gobierno sufre un «desgaste» y que existen diferencias entre los integrantes del oficialista Frente Amplio (FA).
A través de entrevistas en televisión, Astori, un referente histórico de la izquierda, advirtió a Mujica y a su entorno que si se menoscaba la tarea del ministro de Economía, Fernando Lorenzo, se podría caer en «problemas serios».
La caída judicial de un impuesto al campo -que Mujica y sus economistas impusieron pese a la resistencia de Astori y de algunos ministros- fue el disparador de la nueva crisis política. Sin consultar al Ministerio de Economía, el presidente comenzó a diseñar un impuesto alternativo a los propietarios de grandes extensiones de tierra, lo que generó malestar en la cartera que maneja la política impositiva.
La Suprema Corte de Justicia declaró inconstitucional el impuesto a la concentración de inmuebles rurales (ICIR) y eso complicó a Mujica, que ya comprometió gastos con la recaudación de ese tributo. Ahora deberá devolver el dinero cobrado a productores rurales. Astori y Lorenzo le habían alertado que el impuesto no se ajustaba a la Constitución, pero Mujica presionó para que lo apoyaran en la iniciativa.
Ahora, las repercusiones políticas de ese fallo judicial agravaron la tensión entre seguidores del mandatario y del vicepresidente.
Astori expresó malestar porque asesores de Mujica impulsan cambios impositivos -con un enfoque más de izquierda- sin que el ministro del área esté enterado. «Si todos los días escuchamos versiones de que quien no es el ministro está diseñando un nuevo impuesto y el ministro no está enterado, vamos a tener problemas serios», declaró.
La corriente interna del FA que lidera Astori decidió transmitir a Mujica que sus ministros, que ocupan la cartera de Economía y Finanzas, de Transporte y Obras Públicas, y de Turismo y Deporte, están dispuestos a dejar sus cargos si no se respetan los acuerdos políticos logrados durante la campaña electoral.
Eso alude a que Mujica confió en que Astori y su equipo se encargarían de la política económica.
En tanto, el jefe de Estado transmitió cansancio con los planteos de la corriente de Astori: expresó que no aceptan trabajar en equipo y dejar espacio para propuestas de los economistas de su entorno, y señaló que si quieren irse del gobierno, que lo hagan. Pero eso fue en el momento de mayor tensión interna, que luego comenzó a distenderse.
Mujica convocó a un Consejo de Ministros para que «cada uno pudiera decir en la cara» lo que creyera conveniente. La reunión fue muy dura, según contaron a LA NACION participantes del encuentro. «Pepe [Mujica] se fue muy amargado, pero todos salimos mal, tristes, preocupados, angustiados», confió un ministro.
Anoche seguían las reuniones por separado de las principales corrientes del FA para evaluar los pasos por seguir. En el entorno de Astori sostenían que esperaban una respuesta al planteo trasladado al presidente de que si no se respeta su rol en el gobierno podrían dejan los cargos. En el entorno de Mujica aguardaban una respuesta de los ministros del grupo astorista.
El ex presidente Tabaré Vázquez había advertido públicamente que la izquierda no podía quedar prisionera de una pelea mediática.
«Tenemos que lograr que los compañeros vuelvan a funcionar como un equipo y ése es el empeño que tiene el Poder Ejecutivo», dijo Mujica, al aclarar que la discusión «está en un cuarto intermedio».
Además, el presidente admitió «la necesidad de emparchar el alma» y de «quererse un poco más entre los compañeros».
Las diferencias dentro del Frente Amplio, expuestas
«Tenemos que volver a funcionar como equipo»
JOSÉ MUJICA
Presidente de Uruguay
Edad: 77 años
Partido: Movimiento
Participación Popular
El Frente Amplio, que lo llevó al poder en 2009, está integrado por una decena de partidos, desde socialdemócratas hasta izquierdistas
Con sus ministros afines impulsó un impuesto a las grandes extensiones rurales
DANILO ASTORI
Vicepresidente de Uruguay
Edad: 72 años
Partido: Asamblea
Uruguay
Tres ministros responden a su línea ideológica: el de Economía y Finanzas; el de Transporte y Obras Públicas, y el de Turismo y Deporte
Lorenzo, ministro de Economía, se opuso al impuesto rural de Mujica .
