Con el cambio de reglas, Slim empieza a replegar su emporio telefónico en México

El multimillonario mexicano Carlos Slim. Reuters
CIUDAD DE MÉXICO—Más de dos décadas después de comprar el monopolio estatal de teléfonos de México y convertirlo en un gigante regional, el magnate Carlos Slim hace planes para reducirlo en respuesta a nuevas leyes del país que buscan disminuir su control del sector de telefonía móvil y fija.
Su empresa, América Móvil, con operaciones en América Latina, Europa y Estados Unidos, dijo el martes que venderá activos en México para reducir su participación de mercado a menos de 50% y evitar con ello regulaciones por una posición dominante del mercado.
En marzo, el Instituto Federal de Telecomunicaciones de México (IFT) declaró a América Móvil dominante en líneas celulares y fijas, y le impuso medidas que le obligan a compartir su red y eliminar cargos de llamadas de larga distancia así como cobros a competidores por completar llamadas en su red.
La decisión de vender activos llega luego de que el Congreso ultimó detalles de una nueva ley de telecomunicaciones que dictará la implementación de una reforma constitucional aprobada el año pasado que busca elevar la competencia en el mercado de las telecomunicaciones, del que América Móvil controla alrededor de 70%.
La empresa dijo que vendería sus activos a un nuevo operador independiente con experiencia en telecomunicaciones y sus torres celulares a otro operador. No dio más detalles ni un cronograma de su plan, que debe ser aprobado por los reguladores. El plan está condicionado a que la división celular, Telcel, y de línea fija, Telmex, dejen de ser consideradas dominantes, y que se le permita a la empresa ingresar al mercado de la televisión. Funcionarios del gobierno dijeron que podría pasar un año antes de que levanten el estatus de dominante de América Móvil.
«Estamos viviendo una nueva etapa histórica en el sector de telecomunicaciones de México que empezó con la reforma constitucional del año pasado», dijo el ex presidente del IFT, Mony de Swaan. «Estamos viendo el comienzo del fin de una época de dominio casi absoluto de Slim».
Banorte describió la decisión como una medida agresiva de supervivencia que podría eliminar el impacto negativo de las regulaciones. El banco local prevé que América Móvil destine los fondos que recaude en las ventas a fortalecer sus incipientes operaciones en Europa y, en menor medida, en América Latina.
La compañía busca expandirse particularmente en Europa, donde procura la compra de una participación mayoritaria de Telekom Austria. También tiene una participación minoritaria en la holandesa Royal KPN y ha expandido su presencia en EE.UU. al comprar operadores de redes virtuales móviles.
El miércoles, las acciones de América Móvil subieron en México 9,35% a 14,73 pesos mexicanos.
Arturo Elías, vocero de Slim, dijo que la compañía aún no ha decidido qué va a vender ni ha encontrado un comprador, aunque seguramente sería una empresa extranjera con fuerte capacidad.
«La idea es que sea un comprador fuerte, un competidor que pueda invertir las cantidades que se necesitan en la industria», dijo.
La empresa ha dicho reiteradamente que las dificultades que enfrentan sus rivales en México se deben a su falta de inversión. Sus principales competidores incluyen a la española Telefónica S.A. y Grupo Iusacell por el lado celular, un puñado de pequeñas empresas de líneas fijas y operadores de televisión por cable que también ofrecen servicios de teléfono e Internet.
«Las inversiones de América Móvil en México y en Latinoamérica han sido muy importantes en la expansión de su red de telecomunicaciones y de sus servicios, así como para tener la tecnología más avanzada. Estas inversiones han permitido grandes aumentos continuos en la productividad que han sido transferidos a nuestros clientes», dijo la empresa en su sitio web.
Los rivales han dicho por años que el dominio de Slim les ha impedido competir con éxito. Slim, de 74 años, es uno de los hombres más ricos del mundo. Hizo su fortuna tras adquirir Teléfonos de México en una privatización en 1990. Su imperio también incluye activos en minería, construcción, banca y el sector minorista.
América Móvil es el mayor operador móvil de América Latina, con 272 millones de suscriptores celulares y casi 70 millones de abonados a servicios de línea fija, banda ancha y televisión. México representó cerca de 35% de las ventas de US$60.000 millones que registró el año pasado. Con 73,3 millones de suscriptores en México, el país es su principal mercado, seguido por Brasil, con 68,7 millones.
Eduardo Sánchez, vocero de la presidencia, dijo que «con la reforma de telecomunicaciones se resuelven limitaciones que han obstaculizado el desarrollo de los sectores de telecomunicaciones y radiodifusión».
Sánchez citó un informe de 2012 de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos que decía que México sufría de servicios de telecomunicaciones caros y de baja calidad, y una falta de cobertura. Según la OCDE, la inversión per cápita en el sector en 2012 fue US$42, frente a US$111 en Chile y US$298 en Suiza.
Un alto funcionario que pidió anonimato dijo que Deutsche Telekom, Huawei China Mobile y AT&T habían expresado interés en ingresar al mercado mexicano. Los dos primeros no tuvieron comentarios inmediatos y la empresa china no pudo ser contactada.
Para varios analistas, el gigante estadounidense AT&T Inc., un inversionista de larga data en América Móvil, podría ser un candidato para los activos de la mexicana. AT&T acordó vender hace poco su 8,3% en América Móvil como parte de su acuerdo para comprar DirecTV. AT&T no quiso comentar.
América Móvil tendría que reducir el tamaño de su negocio mexicano en 20% para deshacerse de su estatus dominante, dijo Credit Suisse el miércoles.
Elías dijo que la firma necesita reducir su participación en los mercados celular y de línea fija a menos de 50% si quiere ingresar en el mercado de televisión, donde competiría con Grupo Televisa. Telmex tiene prohibido ofrecer servicio de TV en México, aunque sí lo hace en el resto de América Latina.
Telmex dijo que planea fortalecer el acuerdo de cobro y marketing que tiene con el proveedor de TV satelital Dish México, pero que abandonará una opción de adquirir 51% de Dish. El acuerdo fue criticado por Televisa y TV Azteca, que afirman que el pacto viola la prohibición de Telmex de ofrecer televisión. Telmex y Dish lo niegan.
Televisa, por su parte, enfrenta regulaciones por controlar casi 70% de la televisión de señal abierta y más de la mitad de los suscriptores de TV por cable y satélite. Además, posee 50% de Iusacell.
—Tom Gryta y Laurence Iliff contribuyeron a este artículo.

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