El presidente de la Cámara del Comercio Automotor (CCA), Alberto Príncipe, se mostró expectante ante el proyecto de ley que el gobierno enviará al Congreso con el objetivo de promover al sector autopartista. «Es algo que estábamos esperando hace mucho tiempo», dijo y agregó: «Todo lo que sea crecimiento industrial en el país nos parece fantástico».
En declaraciones a radio Nacional Rock, el titular de la CCA explicó que el conflicto entre el gobierno y las terminales nacionales dependía de la cantidad de autopartes que se utilizan para la producción de los vehículos. «Realmente lo que sé es que las terminales nacionales deberían estar produciendo con 60 o 70% de productos nacionales y hoy no creo que lleguen al 30%», denunció.
«Había un compromiso de las terminales de cumplir un porcentaje más elevado del que se estaba produciendo y que se estuviesen realizando con autopartes importadas hizo que salieron más divisas», sostuvo el titular de la Cámara que representa a las concesionarias registradas de autos usados de todo el país.
Príncipe apuntó que la falta de crecimiento en el sector autopartista generó que en los últimos años las automotrices giraran cientos de millones de dólares al exterior para poder importar insumos.
Por otra parte, el empresario recordó que el 2013 fue un año récord de venta de autos cero kilómetro y usados: «Fue uno de los mejores usados después de un lustro histórico en cuanto a crecimiento», dijo.
Pero advirtió que a principios de 2014 «cambiaron las reglas de juego» por los nuevos impuestos (por una ley del Congreso impulsada por el kirchnerismo) a los autos de lujo, que finalmente se traslado a coches de gama media por la devaluación de casi el 24 por ciento en enero.
«Ahora cambiaron las reglas de juego con impuestos con los que el Gobierno buscó a afectar a los de alta gama pero terminó afectando a los de media gama. Al cambiar el valor del dólar oficial han ingresado vehículos que no tendrían que haber ingresado al pago del tributo», explicó Príncipe.
Y agregó: «El cóctel ha sido letal, hemos ido a unos precios (altos) en esos segmentos en los que el tributo no tenía que estar», por lo que «se ha paralizado el mercado».