Elecciones 2011 / Derivaciones de los comicios santafecinos
Martes 26 de julio de 2011 | Publicado en edición impresa
Del Sel, ayer por la mañana en Santa Fe, en un desayuno con amigos luego de una larga noche de festejos. Foto LA NACION / Amancio Alem
Jesica Bossi
Enviada especial
ROSARIO.- Se acostó cerca de las cinco de la madrugada, después de tirar fuegos artificiales con amigos en su casa. Casi no durmió y su celular no deja de sonar: tiene 290 mensajes de texto sin leer y 380 llamadas perdidas. Miguel Del Sel, la flamante estrella electoral, asegura que seguirá haciendo política, que oficiará de «controlador» de la gestión socialista y se sumaría a la campaña presidencial de Eduardo Duhalde.
-¿Cómo sigue su carrera política?
-Voy a hacer fuerte a Unión Pro Federal en Santa Fe y trabajar para Mauricio 2015.
-En concreto, ¿cómo lo haría? ¿Le interesa tener un cargo, una banca legislativa?
-No, no. Ya aclaré que me voy a ganar la vida con mi trabajo, con el tambo y las producciones artísticas. Voy a seguir caminando la provincia porque hay que armar grupos, no tenemos una presencia en todas las localidades, sólo en cincuenta y pico. Hace falta crecer.
-Hizo una muy buena elección a gobernador, pero Pro estuvo más flojo en las listas legislativas y municipales.
-Sí, no te olvides que yo soy el popular, eso es una ventaja. Quizá me faltó acompañar más a mis candidatos, no tuve mucho tiempo, fueron cuatro meses.
-¿Va a acompañar a Macri en la Capital antes del ballottage?
-Sí, mañana vamos a un programa de TV y el domingo espero festejar otro triunfo con él. Me dijo: «No perdamos la cábala».
-¿Quiere una revancha por la gobernación de Santa Fe?
-Sí, voy a intentar. Y también voy a tener voz para seguir quejándome. Voy a ser un controlador del gobierno de [Antonio] Bonfatti.
-¿No le preocupa que este resultado sea volátil y su figura se diluya tan rápido como creció?
-No. Eso es el destino, es Dios, es la vida. Voy a tratar de que esto se mantenga y de que crezca Pro. Mi persona importa poco. Si puedo colaborar, bienvenido, y si la vida me saca de esta carrera, va a ser por algo. No me preocupa si ahora soy noticia y mañana no.
-Dijo que iba a votar a Duhalde para las elecciones presidenciales. ¿Se va a sumar activamente en su campaña?
-Voy a ver si puedo. No tengo ningún problema, aparte soy muy amigo de Mario Das Neves. Ellos nos dieron una mano bárbara. La gente de Uatre [sindicato de los trabajadores rurales], de Gastronómicos, de Plásticos nos dio apoyo y fiscalización. Estoy en deuda, no tengo problemas en devolverle esta gauchada. La gente está cansada de estos gobiernos autoritarios, con tanta corrupción y lo está demostrando en las urnas. Por eso, el 80% de los santafecinos le dijo no al kirchnerismo.
-¿Quién llamó para felicitarlo?
-«El Chino» [Volpato], el Dady [Brieva], «el Turco» Naim. Matías Santojanni se vino desde Buenos Aires y llegó a las cuatro de la mañana. Se comunicaron Montoya [Santiago], Daniel Scioli, Duhalde y su señora; Das Neves; mi tía René, de Villegas, nombrala, por favor [se ríe]. Tuve un cruce en una radio con Binner y le dije que no tengo ningún problema en colaborar, si hay que hacer cosas de beneficio, visitar algún hospital. No es tiempo de egoísmos.
-¿Habló con Reutemann?
-Espero encontrarme esta semana.
-¿Jugó siempre para usted?
-No lo puedo atestiguar, pero creo que lo que dijo fue fenomenal: un centro de Mouche a Palermo.
-Se habla del «fenómeno» Del Sel. ¿Existe tal cosa?
-[Se ríe] No, mamita, no. ¿Sabés lo que sorprende en el país? La normalidad. Hace años que vengo diciendo que lo normal es lo anormal.
-¿Qué quiere decir?
-Mi normalidad es hablar de frente, decir lo que pienso, ser la voz de mucha gente que tiene miedo de hacerlo. Yo me animé, conté qué vi en la provincia y hablé como ciudadano, no como político.
-Bonfatti dijo que usted juntó un «voto castigo» contra el Gobierno. ¿Coincide?
-Fue más amplio, pero los políticos nunca terminan de reconocer que la gente vota a otros. Tendrían que ser más sinceros. Vi que el voto de Perotti [Omar], del «Lole» y de Obeid [Jorge] se venía con nosotros y también el de los radicales desencantados porque Binner no aceptó ir con Alfonsín.
-¿Cuánto incidió en su elección el triunfo de Macri en la Capital?
-Creo que ayudó, pero no tanto. Cuando Mauricio se bajó de las presidenciales, dijeron que había quedado huérfano; pero nos hicimos fuerte con Salomón [Osvaldo] como una dupla que defendió al campo y a Santa Fe. Lo de Mauricio sumó, pero ésta es otra provincia, otras personas.
Martes 26 de julio de 2011 | Publicado en edición impresa
Del Sel, ayer por la mañana en Santa Fe, en un desayuno con amigos luego de una larga noche de festejos. Foto LA NACION / Amancio Alem
Jesica Bossi
Enviada especial
ROSARIO.- Se acostó cerca de las cinco de la madrugada, después de tirar fuegos artificiales con amigos en su casa. Casi no durmió y su celular no deja de sonar: tiene 290 mensajes de texto sin leer y 380 llamadas perdidas. Miguel Del Sel, la flamante estrella electoral, asegura que seguirá haciendo política, que oficiará de «controlador» de la gestión socialista y se sumaría a la campaña presidencial de Eduardo Duhalde.
-¿Cómo sigue su carrera política?
-Voy a hacer fuerte a Unión Pro Federal en Santa Fe y trabajar para Mauricio 2015.
-En concreto, ¿cómo lo haría? ¿Le interesa tener un cargo, una banca legislativa?
-No, no. Ya aclaré que me voy a ganar la vida con mi trabajo, con el tambo y las producciones artísticas. Voy a seguir caminando la provincia porque hay que armar grupos, no tenemos una presencia en todas las localidades, sólo en cincuenta y pico. Hace falta crecer.
-Hizo una muy buena elección a gobernador, pero Pro estuvo más flojo en las listas legislativas y municipales.
-Sí, no te olvides que yo soy el popular, eso es una ventaja. Quizá me faltó acompañar más a mis candidatos, no tuve mucho tiempo, fueron cuatro meses.
-¿Va a acompañar a Macri en la Capital antes del ballottage?
-Sí, mañana vamos a un programa de TV y el domingo espero festejar otro triunfo con él. Me dijo: «No perdamos la cábala».
-¿Quiere una revancha por la gobernación de Santa Fe?
-Sí, voy a intentar. Y también voy a tener voz para seguir quejándome. Voy a ser un controlador del gobierno de [Antonio] Bonfatti.
-¿No le preocupa que este resultado sea volátil y su figura se diluya tan rápido como creció?
-No. Eso es el destino, es Dios, es la vida. Voy a tratar de que esto se mantenga y de que crezca Pro. Mi persona importa poco. Si puedo colaborar, bienvenido, y si la vida me saca de esta carrera, va a ser por algo. No me preocupa si ahora soy noticia y mañana no.
-Dijo que iba a votar a Duhalde para las elecciones presidenciales. ¿Se va a sumar activamente en su campaña?
-Voy a ver si puedo. No tengo ningún problema, aparte soy muy amigo de Mario Das Neves. Ellos nos dieron una mano bárbara. La gente de Uatre [sindicato de los trabajadores rurales], de Gastronómicos, de Plásticos nos dio apoyo y fiscalización. Estoy en deuda, no tengo problemas en devolverle esta gauchada. La gente está cansada de estos gobiernos autoritarios, con tanta corrupción y lo está demostrando en las urnas. Por eso, el 80% de los santafecinos le dijo no al kirchnerismo.
-¿Quién llamó para felicitarlo?
-«El Chino» [Volpato], el Dady [Brieva], «el Turco» Naim. Matías Santojanni se vino desde Buenos Aires y llegó a las cuatro de la mañana. Se comunicaron Montoya [Santiago], Daniel Scioli, Duhalde y su señora; Das Neves; mi tía René, de Villegas, nombrala, por favor [se ríe]. Tuve un cruce en una radio con Binner y le dije que no tengo ningún problema en colaborar, si hay que hacer cosas de beneficio, visitar algún hospital. No es tiempo de egoísmos.
-¿Habló con Reutemann?
-Espero encontrarme esta semana.
-¿Jugó siempre para usted?
-No lo puedo atestiguar, pero creo que lo que dijo fue fenomenal: un centro de Mouche a Palermo.
-Se habla del «fenómeno» Del Sel. ¿Existe tal cosa?
-[Se ríe] No, mamita, no. ¿Sabés lo que sorprende en el país? La normalidad. Hace años que vengo diciendo que lo normal es lo anormal.
-¿Qué quiere decir?
-Mi normalidad es hablar de frente, decir lo que pienso, ser la voz de mucha gente que tiene miedo de hacerlo. Yo me animé, conté qué vi en la provincia y hablé como ciudadano, no como político.
-Bonfatti dijo que usted juntó un «voto castigo» contra el Gobierno. ¿Coincide?
-Fue más amplio, pero los políticos nunca terminan de reconocer que la gente vota a otros. Tendrían que ser más sinceros. Vi que el voto de Perotti [Omar], del «Lole» y de Obeid [Jorge] se venía con nosotros y también el de los radicales desencantados porque Binner no aceptó ir con Alfonsín.
-¿Cuánto incidió en su elección el triunfo de Macri en la Capital?
-Creo que ayudó, pero no tanto. Cuando Mauricio se bajó de las presidenciales, dijeron que había quedado huérfano; pero nos hicimos fuerte con Salomón [Osvaldo] como una dupla que defendió al campo y a Santa Fe. Lo de Mauricio sumó, pero ésta es otra provincia, otras personas.