A través de un comunicado y en diálogo con este diario, directivos de Cicop, la entidad que nuclea a los profesionales de los hospitales de la Provincia, indicaron que la falta de insumos incluye numerosos medicamentos y reconoce dos orígenes: las trabas a las importaciones que viene aplicando el gobierno nacional, y los atrasos en los pagos a los proveedores por los problemas financieros del gobierno provincial.Entre los elementos faltantes en los hospitales públicos bonaerenses, figuran algunos tan básicos como jeringas, agujas, algodón, llaves de tres vías (para la colocación de sueros), guantes de látex, termómetros y microgoteros.
Pero, como señaló Liliana García, titular de Cicop, faltan también medicamentos oncológicos, entre ellos la droga más común para el tratamiento del cáncer de mama; algunos antibióticos; los remedios más comunes para la presión y la gastritis y para enfermedades crónicas como la diabetes y enfermedades mentales, así como algunas drogas para el tratamiento del sida.
Pero faltan también otros elementos esenciales para el diagnóstico y el tratamiento de los pacientes. Como reactivos para los laboratorios, insumos para la reparación de los electrobisturíes, que debió ser “espaciada”, soluciones de contraste, elementos para las impresiones de ecógrafos, tomógrafos y otros aparatos, y repuestos para la aparatología.
“En algunos hospitales faltan algunos elementos y en otros, otros, pero todos los centros de la Provincia tienen dificultades y problemas serios para funcionar por la carencia de insumos”, señaló García.
La profesional destacó que “muchos elementos que se utilizan para diagnóstico o tratamiento tienen algún insumo importado. Y en otros casos, hay fabricación nacional pero no alcanza para cubrir la demanda. De la llave de tres vías, por ejemplo, hay una sola fábrica que no cubre los requerimientos de todo el país, y los insumos que se importan se pasan meses y meses en la Aduana sin que puedan ser retirados”.
La directiva de la Cicop subrayó que “hace meses que se viene dando esta situación y, por supuesto, a medida que va pasando el tiempo, las dificultades se agravan”.
En cuanto a la influencia de la falta de fondos de la Provincia, las fuentes consultadas indicaron que “al no pagarles en tiempo, los proveedores van cortando los suministros, además de ir encareciendo notablemente los insumos ya que, si finalmente les pagan con bonos, aumentan los precios para cubrirse de la depreciación que significa ese medio de pago”.
En este contexto, la Cicop junto a la Federación Sindical de Profesionales de la Salud de todo el país (Fesprosa), emitió ayer un duro documento en respuesta a la presidenta Cristina Kirchner, quien el lunes, en un mensaje por cadena nacional, rechazó denuncias por falta de insumos médicos y medicamentos y afirmó que las restricciones a las importaciones “tienen mucho de mito urbano”.
“Cuál es la verdad?” se preguntaron las entidades mencionadas ante esos dichos. Y respondieron: “que los insumos faltan. Que no hay jeringas y agujas, que falta algodón, que no hay llaves de tres vías, que hay escasez de insumos para la alta complejidad cardiológica, que faltan guantes de látex. Que en Santa Cruz se suspendieron estudios radiológicos programados, que los directores de los 77 hospitales bonaerenses recibieron la orden de cerrar la atención programada y reservar los insumos para la urgencia, que faltan insumos odontológicos y anestesia. El hecho de que parte de esta situación se deba a las restricciones presupuestarias del sistema público no la exime de responsabilidad, más bien la agrava. Puede ser que en el hospital privado donde se atiende la familia Kirchner tengan de todo. Que Moreno y los chicos de La Cámpora le armen la cama de Yrigoyen, donde no falta nada. Por algo Máximo no quiso internarse en el hospital de Río Gallegos. Las mentiras, aún por cadena nacional y en boca de la Presidenta, siguen siendo mentiras”.