La presidenta Dilma Rousseff, ayer, al hacer el anuncio. Foto: AFP
RIO DE JANEIRO.- Inquieto por la larga y crónica crisis global, el gobierno de Brasil anunció ayer un nuevo paquete de compras gubernamentales por 3300 millones de dólares y una rebaja en las tasas de interés de créditos para la inversión para estimular su cada vez más estancada economía.
«Tomaremos todas las medidas necesarias para proteger la producción y el empleo en nuestro país. Tenemos los recursos para seguir creciendo», dijo la presidenta Dilma Rousseff al presentar el 8° plan desde que asumió, en enero de 2011.
A diferencia de los paquetes anteriores, que apuntaban a fomentar el consumo, ahora buscan impulsar la inversión pública y privada luego de que la economía se expandiera apenas 0,2% en el primer trimestre del año. En 2011 Brasil creció a un 2,7%, un decepcionante resultado después del ritmo del 7,5% de 2010.
Según explicó el ministro de Economía, Guido Mantega, el nuevo plan de Equipamientos para el Programa de Aceleración del Crecimiento (PAC) está basado en la consigna «compre nacional» por la que el Gobierno aumentará en 3300 millones de dólares su presupuesto para máquinas y equipos de fabricación brasileña (totalizará así US$ 4200 millones), aún cuando sean hasta un 25% más caros que sus competidores importados.
Las compras, que se concentrarán en el 2° semestre, incluyen desde muebles para escuelas hasta vehículos lanzadores de misiles. Se adquirirán también unos 8570 ómnibus escolares, 8000 camiones-cisterna destinados a combatir la sequía en el Nordeste, 3591 retroexcavadoras, 1330 motoniveladoras para la producción agrícola, 2125 ambulancias, 1000 camionetas, 500 motos, 166 vagones de tren, 50 perforadoras de pozos de agua y 40 vehículos blindados para el ejército, además de equipos escolares y hospitalarios.
Asimismo, se reducirá del 6 al 5,5% anual la tasa de los créditos corporativos de largo plazo que otorga el Banco Nacional de Desarrollo Económico y Social (Bndes), cuya cartera es incluso mayor a la del Banco Interamericano de Desarrollo (BID). «Son medidas para estimular la economía, impulsar las inversiones y la demanda, y aumentar la confianza del consumidor», destacó Mantega.
Un día antes de que el Banco Central divulgara su nuevo pronóstico sobre el crecimiento de la economía para 2012, el ministro adelantó que será del 2,5%, muy distante del 4,5% previsto a principios del año. Pero los analistas son más pesimistas aún: calculan que se expandirá sólo un 2,2 por ciento.
«Con esas medidas vamos a alejarnos de ese escenario de recesión y desempleo que afecta a varios países», señaló por su parte la presidenta Rousseff, que volvió a criticar las políticas recesivas que toma la Unión Europea para enfrentar la crisis.
«El escenario de crisis en Europa no nos amedrenta. Es importante tener conciencia de él para evitar aventuras fiscales, que es como fingir que no ocurre nada. Tenemos recursos para seguir creciendo pero no podemos jugar al borde del precipicio», advirtió la mandataria..
RIO DE JANEIRO.- Inquieto por la larga y crónica crisis global, el gobierno de Brasil anunció ayer un nuevo paquete de compras gubernamentales por 3300 millones de dólares y una rebaja en las tasas de interés de créditos para la inversión para estimular su cada vez más estancada economía.
«Tomaremos todas las medidas necesarias para proteger la producción y el empleo en nuestro país. Tenemos los recursos para seguir creciendo», dijo la presidenta Dilma Rousseff al presentar el 8° plan desde que asumió, en enero de 2011.
A diferencia de los paquetes anteriores, que apuntaban a fomentar el consumo, ahora buscan impulsar la inversión pública y privada luego de que la economía se expandiera apenas 0,2% en el primer trimestre del año. En 2011 Brasil creció a un 2,7%, un decepcionante resultado después del ritmo del 7,5% de 2010.
Según explicó el ministro de Economía, Guido Mantega, el nuevo plan de Equipamientos para el Programa de Aceleración del Crecimiento (PAC) está basado en la consigna «compre nacional» por la que el Gobierno aumentará en 3300 millones de dólares su presupuesto para máquinas y equipos de fabricación brasileña (totalizará así US$ 4200 millones), aún cuando sean hasta un 25% más caros que sus competidores importados.
Las compras, que se concentrarán en el 2° semestre, incluyen desde muebles para escuelas hasta vehículos lanzadores de misiles. Se adquirirán también unos 8570 ómnibus escolares, 8000 camiones-cisterna destinados a combatir la sequía en el Nordeste, 3591 retroexcavadoras, 1330 motoniveladoras para la producción agrícola, 2125 ambulancias, 1000 camionetas, 500 motos, 166 vagones de tren, 50 perforadoras de pozos de agua y 40 vehículos blindados para el ejército, además de equipos escolares y hospitalarios.
Asimismo, se reducirá del 6 al 5,5% anual la tasa de los créditos corporativos de largo plazo que otorga el Banco Nacional de Desarrollo Económico y Social (Bndes), cuya cartera es incluso mayor a la del Banco Interamericano de Desarrollo (BID). «Son medidas para estimular la economía, impulsar las inversiones y la demanda, y aumentar la confianza del consumidor», destacó Mantega.
Un día antes de que el Banco Central divulgara su nuevo pronóstico sobre el crecimiento de la economía para 2012, el ministro adelantó que será del 2,5%, muy distante del 4,5% previsto a principios del año. Pero los analistas son más pesimistas aún: calculan que se expandirá sólo un 2,2 por ciento.
«Con esas medidas vamos a alejarnos de ese escenario de recesión y desempleo que afecta a varios países», señaló por su parte la presidenta Rousseff, que volvió a criticar las políticas recesivas que toma la Unión Europea para enfrentar la crisis.
«El escenario de crisis en Europa no nos amedrenta. Es importante tener conciencia de él para evitar aventuras fiscales, que es como fingir que no ocurre nada. Tenemos recursos para seguir creciendo pero no podemos jugar al borde del precipicio», advirtió la mandataria..
