El 4º Poder en Red

Carlos del Castillo
Periodista integrante de la Comunidad del Máster en Comunicación, Cultura y Ciudadanía Digitales
Cuando Edward Snowden y Glenn Greenwald se asociaron para hacer sonar lo que ya se conoce como “el despertador de la red”, nos despertaron de un sueño. O mejor dicho, acabaron con nuestra infancia en la red. Supimos que Internet está teledirigido por el Gobierno estadounidense, que domina su infraestructura y las empresas que le dan forma. Descubrimos que la red va camino de convertirse en un instrumento para violar sistemáticamente derechos fundamentales como la privacidad, la libertad de expresión o la presunción de inocencia.
Pero Snowden reveló algo todavía más peligroso a largo plazo: el intento de acabar con la neutralidad de la red. El proceso lleva años en marcha y está a punto de pasar la barrera de no-retorno. La neutralidad establecía que en el ciberespacio ninguna información tiene prioridad sobre otra. Aseguraba que cualquier persona, sin importar el equipo que utilizase ni la compañía que le diese servicio, podía crear y acceder a cualquier tipo de contenido en línea, en igualdad de condiciones. En suma, impedía la privatización corporativa y acaparación estatal de Internet, protegiéndolo como un bien común descentralizado. Ahora está tocado de muerte.
Las revelaciones provocaron la rebeldía de las redes, organizadas en guerrillas online, para defender un instrumento que ha trascendido en la sociedad hasta llegar a convertirse en una proyección de la misma, sus gobiernos y líderes políticos. Entre ellos, brilló con fuerza la reacción de Brasil y de su presidenta, Dilma Rousseff. Se reveló contra el imperialismo digital en su discurso ante la Asamblea General de la ONU el pasado mes de septiembre. Allí denunció el espionaje de la NSA, Barack Obama y los EEUU. Propuso comenzar un proceso que asegurase los derechos civiles en una Internet neutral.
El primer gran logro de Rousseff fue la aprobación por el parlamento brasileño del Marco Civil de Internet a finales de marzo. En el texto, redactado en colaboración con la sociedad civil (donde destacó la aportación de activistas y de organizaciones de software libre), Brasil se compromete a proteger la neutralidad de la red. Garantiza su función social, concibiéndola como un espacio colaborativo donde ejercer la ciudadanía, accesible a todos, seguro y plural. Entre otras muchas cosas, el Marco Civil también blinda el derecho a la privacidad de las comunicaciones digitales y la libertad de expresión.
Pese al aplauso general que consiguió el Marco Civil, Rousseff sabe que Brasil es solo un nodo más de la red mundial. Sin un consenso global, las regulaciones nacionales serán ineficaces. Por ello propuso una cumbre internacional, NET mundial, para discutir una nueva gobernanza para Internet, que descentralice el poder sobre la red que acapara Estados Unidos. En un movimiento geoestratégico como miembro de los Brics, Brasil busca a su vez cuestionar el papel de EEUU como única superpotencia mundial y reclutar más países para el grupo de los no-alineados, avanzando en la distribución multipolar del poder global.
NET Mundial se celebró en Sao Paulo el 23 y 24 de abril. Rousseff consiguió reunir a 800 mandatarios de 85 países y representantes de todas las grandes empresas digitales, esperando que el flamante Marco Civil marcara la tendencia para la redacción de una Carta Magna de Internet a nivel internacional. Sin embargo, EEUU y el lobby de las teleoperadoras internacionales, deseosas de reafirmar su control sobre un negocio multimillonario, tenían otros planes.
El 23 de abril, el New York Times publicó que la Federal Communications Commission (FCC), el regulador de las comunicaciones estadounidense, planea ceder a la presión y permitir que las teleoperadoras y proveedores de Internet ofrezcan líneas de conexión privilegiada de mayor coste. A efectos prácticos, esto significa que las empresas que puedan asumir esos costes extra ofrecerán a sus usuarios una navegación “Premium”. El resto tendrá que conformarse con un servicio “Basic”. ¿Consecuencias? Centralización salvaje de la red, por la tendencia de los usuarios a utilizar los servicios de navegación más eficaces. Pero esto no es todo: la decisión abre la puerta a que los proveedores de Internet, con línea directa con los gobiernos, puedan dificultar el acceso a una página web, información, servicio, etc. que les resulte incómodo.
Así las cosas, el bloque formado por EEUU pugna por mantener su control sobre la red. La Unión Europea no quiere contrariar a su aliado estadounidense en este tema. El lobby de las teleoperadoras y gobiernos como China o Cuba, son partidarios de la regulación de los contenidos. Todos juntos hicieron imposible el acuerdo. El documento final de la cumbre NET omitió mencionar la neutralidad de la red, criticar a la NSA y condenar el espionaje masivo.
Las organizaciones de defensa de Internet conocían de antemano el contenido del texto, gracias a una filtración de Wikileaks. Y, sobre todo, sabían que la cumbre, que se vendió como un encuentro entre todos los actores sociales con la voluntad de desarrollar una gobernanza de Internet justa, era una farsa.
El espacio de diálogo con la sociedad civil, abierto a las redes y la experiencia de los activistas digitales, no existió. Pero la arquitectura de Internet es contraria a la exclusión y a la democracia a puerta cerrada, y los activistas no tuvieron más que espolear la red para que esta se defendiera a sí misma. Se lanzó la campaña #OurNetMundial, se clonó la página oficial del evento y se abrió un verdadero espacio de discusión, ArenaNetMundial, en el que participaron actores como Tim Berners-Lee, considerado el “padre de la web“, Julian Assange o el sociólogo español Manuel Castells.
Hay voces que alaban el documento auspiciado por NET Mundial, poniéndolo en perspectiva como un pequeño paso que hubiera sido impensable hace no mucho. No obstante, para muchos no caben los grises en la defensa de la neutralidad de la red. O la defiendes, o la atacas. Para ellos, los excluidos del diálogo de NET Mundial, ya no caben los discursos políticos con buenas intenciones. El modelo de desarrollo del Marco Civil es el ejemplo y las redes han tomado el testigo con #OurNetMundial para extenderlo a nivel planetario.
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Abriendo código:
– Texto del Marco Civil da Internet
– Documento aprobado al fin de la cumbre NET Mundial
– Declaración de la Public Knowledge sobre la neutralidad de la red tras la filtración sobre las intenciones de la FCC
– Free Press: Stop the FCC from Breaking the Internet
– Crónica del evento NET Mundial
– Entrevista con Jeremmy Zimmermann, uno de los principales activistas por la defensa de la neutralidad de la red

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