Acerca de Patricio

Patricio es profesor universitario de sociología. Trabaja sobre desigualdad y movimientos sociales. Se crió en un conventillo de la calle Olavarría, pero toda su vida ha sido hincha de River.

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11 comentarios en «El amargo triunfo de Tinelli»

  1. nota aburrida pero bastante peligrosa, agregaria. Ese concepto facilista de que la decadencia de la educacion, como de otros valores humanos, es por exceso de circo mas que por falta de pan, metaforicamente hablando, uno lo escucha en feligreses de iglesias opuestas, tanto donde comulga un Feinman con en la del otro. Y por supuesto, no podia faltar la mencion del chivo expiatorio del momento y un injusto olvido de la responsabilidad de la cumbia villera en el etado deplorable de las cosas.

  2. Ahora, lo más triste de todo esto es que la maestra boluda que afirma haber sido derrotada por Tinelli no es un invento del periodista: existe y está dando clases…

  3. Antes yo creía que el pueblo era peronista.
    Luego, que era peronista y maradoniano.
    Ahora creo que es peronista, maradoniano y tinellista.
    Y a lo mejor eso es bueno para un país tropical lleno de abundancias de la tierra (que interesan) y también pleno de carencias culturales (que no interesan)
    ¡Feliz año nuevo!

    1. cuanta gente ve a Tinelli por noche? 3 millones? 5 millones?

      somos 40.

      dificilmente la crisis educativa argentina se deba a Tinelli.

  4. el tema de Tinelli se toca con variadas raices de nuestra psicologia social.Refleja y estimula la comodidad,el sexismo,la fisicocultura que se da en una atmosfera antiintelectual,en la que los medios,los dueños del dinero,los estimuladores de la estupidez desde los politicos hasta los papas abandonicos tienen que ver.Avance la prostitucion y siga el baile…

  5. Más grave que Tinelli, que por lo menos todo el mundo inclusive él mismo sabe de qué se trata su producto y no pretende ir más allá de eso, son las ideologías que pretenden ganar terreno «de manera seria» en éste país. Venimos de 10 años de cultura menemista y ahora nos fajan todo el día desde el Estado con una suerte de neoevangelismo moral para el que hay que estar bien preparado para que no te afecte, y todo esto luego de años de dictadura y de educación patriarcal. Tinelli en éste contexto entra como por un tubo a las 10 y media de la noche luego de una jornada de laburo. Y digo más, éste Bailando por un sueño lo encuentro mucho mejor que aquel programa que hacía Tinelli con las joditas de las cámaras ocultas en la que todo era reírse del más débil entre muchos.

    Saludos

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