27 de Agosto de 2014
Empleó a la ex secretaria de estado de Bill Clinton
Lo admitió el The New York Post. La polifuncionaria norteamericana está secundada en su buffet por funcionarios de la fila republicana.
En contra de la Argentina – Madelaine Albright, ex polifuncionaria de Estados Unidos, ahora se dedica al lobby.
El fondo buitre NML, encabezado por su titular Paul Singer, endureció su posición de lobby contra Argentina y contrató a una ex funcionaria estadounidense para presionar internamente al país en su favor.
Según publicó ayer el diario estadounidense The New York Post, Singer habría incluido en su equipo de operaciones contra Argentina a la firma Albright Stonebridge Group, encabezada por la ex secretaria de Estado de Bill Clinton, Madeleine Albrigth, primera mujer en su puesto en la historia de ese país.
Albright, nacida en la vieja Checoslovaquia y quien tuvo fuertes intervenciones en el conflicto de la ex Yugoslavia, tiene en su empresa a otros funcionarios de administraciones americanas anteriores.
Entre ellos el ex secretario de Comercio de George Bush y CEO de la alimenticia Kellog Carlos Gutiérrez; y el ex encargado de Seguridad de la misma administración, Samuel Berger. De hecho, según confirma el Post de Nueva York, Gutiérrez estuvo en la Argentina para estrechar lazos en el país y hacer base para movidas de lobby político.
Además, según su sitio de Internet, muchos de los directivos que acompañan a Albright Stonebridge cumplieron alguna vez funciones en distintos sectores de la administración pública tales como la Casa Blanca, el Departamento de Estado, el del Tesoro, el Parlamento, el Banco Mundial y distintas embajadas.
La empresa en la actualidad tiene sede en Washington, pero se globalizó con oficinas en más de 100 países y ciudades, entre ellos en Beijing, Shangai, San Pablo, Nueva Delhi, Madrid, Berlín, Sidney, Tailandia y Moscú.
En paralelo, la mujer tiene participación directa en el sector privado: por un lado, es jefa de la empresa Herbalife. Asimismo, Albright, actual lobista a favor de los fondos buitre, es socia en un emprendimiento privado en África del magnate húngaro George Soros.
Justamente, este empresario que tiene bonos de la Argentina se ha posicionado en las últimas horas contra los buitres. Presentó una demanda en Londres contra el Bank of New York Mellon, para que la entidad permita que los bonistas reestructurados puedan cobrar los depósitos que hizo Argentina en ese banco, y que permanece trabado por un fallo del juez neoyorquino Thomas Griesa.
La nota del Post menciona el proyecto de ley con el que el gobierno busca remplazar como agente de pago («trustee») al Banco de Nueva York (BoNY) por Nación Fideicomisos y abrir un nuevo canje para que los bonistas con títulos de deuda reestructurados en 2005 y 2010 de ley Nueva York por otros similares de diferente jurisdicción, como una forma de sortear el bloqueo a los pagos de esos títulos que impuso el juez Griesa.
Y recuerda que el lunes, el mismo el jefe de Gabinete Jorge Capitanich había cuestionado las campañas políticas de los fondos buitre y los había vinculado a dirigentes opositores.
Si bien en los Estados Unidos el lobby es legal, en Argentina no está formalizado el tráfico de influencias.
Sin embargo, hasta el momento los holdouts venían trabajando sin tapujos por medio de la American Task Force Argentina (ATFA), un organismo que fue el ariete buitre en la presión a nivel local. Hace poco más de un mes, Nancy Soderberg y Robert Shapiro, copresidentes de ATFA, visitaron Buenos Aires y armaron un almuerzo con periodistas de medios concentrados.
Un día después, aparecieron sendas solicitadas de los holdouts criticando la posición argentina. Mantuvieron además reuniones con referentes de la oposición, cuyos nombres no trascendieron.
El artículo de The New York post no especifica si ya la empresa de Albright desembarcó con cuadros de lobby en el país. Nacida en Praga, en 1937, bajo el nombre de Marie Jana Korbelová, Albright llegó a Estados Unidos en la década del 50. Antes de ocupar el cargo de secretaria de Estado, actuó como Embajadora en la Naciones Unidas.
La por entonces funcionaria fue la actora central del gobierno de Clinton en el marco de la Guerra de Kosovo, dado que apoyó la intervención militar y los bombardeos, con la excusa de posicionar a Estados Unidos como la reserva moral de un conflicto ajeno a los intereses de esa nación.
Cuando la incluyeron en el Hall de la Fama de las Mujeres del mundo por haber sido la primera en ser secretaria de Estado, hubo manifestaciones en su contra y contra las sanciones de Estados Unidos y la ONU contra Irak.
La acusaron en forma directa de trabajar en post de la guerra en la zona: «Madeleine Albright debería ser llevada ante el Tribunal Internacional por crímenes de guerra en lugar de recibir honores de ninguna clase.» «
Lobbistas «levantan» nota de La Nación
La American Task Force Argentina, la entidad que se dedica a hacer presión a favor de los fondos buitre, destacó ayer un artículo del diario La Nación de Argentina pero «olvido» informar la desmentida del jefe de Gabinete, Jorge Capitanich. En la nota publicada el 25 de agosto último, se deja a entrever que la pelea con los buitres podría perjudicar el convenio con China que incluye un préstamo por U$S 4000 para la Argentina «Según La Nación –reza la ATFA– el acuerdo hace una referencia directa a que si no hay un arreglo con los holdouts «no se concederán los préstamos para los proyectos» que acordaron China y la Argentina. La ATFA, sin embargo, nada dice de la desmentida del gobierno a tal información.
Empleó a la ex secretaria de estado de Bill Clinton
Lo admitió el The New York Post. La polifuncionaria norteamericana está secundada en su buffet por funcionarios de la fila republicana.
En contra de la Argentina – Madelaine Albright, ex polifuncionaria de Estados Unidos, ahora se dedica al lobby.
El fondo buitre NML, encabezado por su titular Paul Singer, endureció su posición de lobby contra Argentina y contrató a una ex funcionaria estadounidense para presionar internamente al país en su favor.
Según publicó ayer el diario estadounidense The New York Post, Singer habría incluido en su equipo de operaciones contra Argentina a la firma Albright Stonebridge Group, encabezada por la ex secretaria de Estado de Bill Clinton, Madeleine Albrigth, primera mujer en su puesto en la historia de ese país.
Albright, nacida en la vieja Checoslovaquia y quien tuvo fuertes intervenciones en el conflicto de la ex Yugoslavia, tiene en su empresa a otros funcionarios de administraciones americanas anteriores.
Entre ellos el ex secretario de Comercio de George Bush y CEO de la alimenticia Kellog Carlos Gutiérrez; y el ex encargado de Seguridad de la misma administración, Samuel Berger. De hecho, según confirma el Post de Nueva York, Gutiérrez estuvo en la Argentina para estrechar lazos en el país y hacer base para movidas de lobby político.
Además, según su sitio de Internet, muchos de los directivos que acompañan a Albright Stonebridge cumplieron alguna vez funciones en distintos sectores de la administración pública tales como la Casa Blanca, el Departamento de Estado, el del Tesoro, el Parlamento, el Banco Mundial y distintas embajadas.
La empresa en la actualidad tiene sede en Washington, pero se globalizó con oficinas en más de 100 países y ciudades, entre ellos en Beijing, Shangai, San Pablo, Nueva Delhi, Madrid, Berlín, Sidney, Tailandia y Moscú.
En paralelo, la mujer tiene participación directa en el sector privado: por un lado, es jefa de la empresa Herbalife. Asimismo, Albright, actual lobista a favor de los fondos buitre, es socia en un emprendimiento privado en África del magnate húngaro George Soros.
Justamente, este empresario que tiene bonos de la Argentina se ha posicionado en las últimas horas contra los buitres. Presentó una demanda en Londres contra el Bank of New York Mellon, para que la entidad permita que los bonistas reestructurados puedan cobrar los depósitos que hizo Argentina en ese banco, y que permanece trabado por un fallo del juez neoyorquino Thomas Griesa.
La nota del Post menciona el proyecto de ley con el que el gobierno busca remplazar como agente de pago («trustee») al Banco de Nueva York (BoNY) por Nación Fideicomisos y abrir un nuevo canje para que los bonistas con títulos de deuda reestructurados en 2005 y 2010 de ley Nueva York por otros similares de diferente jurisdicción, como una forma de sortear el bloqueo a los pagos de esos títulos que impuso el juez Griesa.
Y recuerda que el lunes, el mismo el jefe de Gabinete Jorge Capitanich había cuestionado las campañas políticas de los fondos buitre y los había vinculado a dirigentes opositores.
Si bien en los Estados Unidos el lobby es legal, en Argentina no está formalizado el tráfico de influencias.
Sin embargo, hasta el momento los holdouts venían trabajando sin tapujos por medio de la American Task Force Argentina (ATFA), un organismo que fue el ariete buitre en la presión a nivel local. Hace poco más de un mes, Nancy Soderberg y Robert Shapiro, copresidentes de ATFA, visitaron Buenos Aires y armaron un almuerzo con periodistas de medios concentrados.
Un día después, aparecieron sendas solicitadas de los holdouts criticando la posición argentina. Mantuvieron además reuniones con referentes de la oposición, cuyos nombres no trascendieron.
El artículo de The New York post no especifica si ya la empresa de Albright desembarcó con cuadros de lobby en el país. Nacida en Praga, en 1937, bajo el nombre de Marie Jana Korbelová, Albright llegó a Estados Unidos en la década del 50. Antes de ocupar el cargo de secretaria de Estado, actuó como Embajadora en la Naciones Unidas.
La por entonces funcionaria fue la actora central del gobierno de Clinton en el marco de la Guerra de Kosovo, dado que apoyó la intervención militar y los bombardeos, con la excusa de posicionar a Estados Unidos como la reserva moral de un conflicto ajeno a los intereses de esa nación.
Cuando la incluyeron en el Hall de la Fama de las Mujeres del mundo por haber sido la primera en ser secretaria de Estado, hubo manifestaciones en su contra y contra las sanciones de Estados Unidos y la ONU contra Irak.
La acusaron en forma directa de trabajar en post de la guerra en la zona: «Madeleine Albright debería ser llevada ante el Tribunal Internacional por crímenes de guerra en lugar de recibir honores de ninguna clase.» «
Lobbistas «levantan» nota de La Nación
La American Task Force Argentina, la entidad que se dedica a hacer presión a favor de los fondos buitre, destacó ayer un artículo del diario La Nación de Argentina pero «olvido» informar la desmentida del jefe de Gabinete, Jorge Capitanich. En la nota publicada el 25 de agosto último, se deja a entrever que la pelea con los buitres podría perjudicar el convenio con China que incluye un préstamo por U$S 4000 para la Argentina «Según La Nación –reza la ATFA– el acuerdo hace una referencia directa a que si no hay un arreglo con los holdouts «no se concederán los préstamos para los proyectos» que acordaron China y la Argentina. La ATFA, sin embargo, nada dice de la desmentida del gobierno a tal información.